tag:theconversation.com,2011:/us/topics/argentina-52722/articlesArgentina – The Conversation2024-01-23T18:07:09Ztag:theconversation.com,2011:article/2215132024-01-23T18:07:09Z2024-01-23T18:07:09Z¿Es de extrema derecha el nuevo presidente de Argentina? La respuesta no es sencilla<p>Una onda expansiva sacude Argentina <a href="https://ici.radio-canada.ca/nouvelle/2028009/argentine-vote-presidentielle-massa-milei">desde la llegada al poder de Javier Milei el 10 de diciembre</a>. </p>
<p>Su ideología, calificada de “anarco-capitalista”, promete grandes cambios en un país con una larga tradición de control estatal y sumido en una profunda crisis económica. La radicalidad de sus propuestas consiguió atraer a muchos argentinos, pero alienar a otros tantos, <a href="https://ici.radio-canada.ca/nouvelle/2038012/argentine-greve-generale-24-janvier-reforme-javier-milei">con varios llamamientos a la huelga general</a>. </p>
<p>Los analistas han intentado comprender los vínculos ideológicos entre Javier Milei y los diversos movimientos de extrema derecha surgidos en los últimos veinte años, sobre todo en Europa y Estados Unidos. </p>
<p>Como estudiante de doctorado en Ciencias Políticas en la Universidad Laval, mi investigación se centra en el autoritarismo, especialmente en Argentina. Por ello, en este artículo exploraré la relación entre Javier Milei y el movimiento de extrema derecha. </p>
<h2>Cuidado con las comparaciones rápidas</h2>
<p>Javier Milei <a href="https://theconversation.com/le-dilemme-milei-et-lavenir-incertain-de-largentine-219556">puede ser calificado de populista</a>. Esta asociación es apta, incluso natural, si nos fijamos en sus numerosas referencias a figuras de extrema derecha como <a href="https://twitter.com/JMilei/status/1727501082560205296">Donald Trump</a>, el brasileño <a href="https://www.lemonde.fr/international/article/2023/11/20/javier-milei-elu-president-de-l-argentine-recoit-les-felicitations-de-donald-trump-et-jair-bolsonaro_6201217_3210.html">Jair Bolsonaro</a> y <a href="https://fr.wikipedia.org/wiki/Santiago_Abascal">el español Santiago Abascal</a>, presidente de Vox, <a href="https://thediplomatinspain.com/en/2023/11/milei-invites-abascal-to-his-inauguration-as-argentine-president/">a quien invitó a su toma de posesión</a>.</p>
<p>Sus llamamientos a combatir el “izquierdismo”, <a href="https://www.infobae.com/opinion/2022/05/20/javier-milei-y-su-guerra-contra-el-marxismo-cultural-la-oscura-historia-detras-del-termino/">sus críticas al “marxismo cultural”</a> y su carácter abiertamente antisistema refuerzan esta identificación.</p>
<p>Sin embargo, esta comparación bastante simplista pasa por alto diferencias significativas con el programa de Milei, sobre todo en materia de política económica y migratoria. Así pues, a pesar de las similitudes, existen diferencias significativas, sobre todo en la forma en que cada movimiento entiende el papel del Estado y su relación con el conjunto de la sociedad. </p>
<p>En particular, me gustaría llamar la atención sobre una diferencia central, el papel del nacionalismo, y sobre las innovaciones introducidas por Milei en el contexto del ascenso global de la derecha.</p>
<h2>El nacionalismo nativista en el corazón de la extrema derecha</h2>
<p>En un artículo, <a href="https://doi.org/10.1146/annurev-polisci-042814-012441">Matt Golder</a>, profesor de Ciencias Políticas en la Universidad Estatal de Pensilvania, analiza la literatura científica sobre los partidos políticos de extrema derecha en Europa. En ella encuentra tres elementos cada vez más característicos de este movimiento: nacionalismo, populismo y radicalismo.</p>
<p>El nacionalismo expuesto por los partidos de extrema derecha puede describirse como “nativismo”. Según <a href="https://doi.org/10.1017/CBO9780511492037">Cas Mudde</a>, profesor del Departamento de Ciencias Políticas de la Universidad de Georgia, el “nativismo” se entiende como “nacionalismo más xenofobia”. Se basa en la idea de la existencia de una población “nativa” imaginaria <a href="https://doi.org/10.1146/annurev-polisci-042814-012441">construida sobre aspectos generalmente culturales o étnicos</a>, cuya homogeneidad debe ser protegida de cualquier elemento que le sea ajeno y externo. </p>
<p>Al concebir esta comunidad homogénea, <a href="https://doi.org/10.1017/CBO9780511492037">el nativismo se suma al nacionalismo, concebido como la congruencia entre Estado y nación</a>, el elemento de xenofobia mencionado por Cas Mudde. Con ello, los movimientos de extrema derecha plantean una preferencia radicalizada por todo lo que pueda definirse como perteneciente a la “comunidad nacional”.</p>
<p>Esta versión del nacionalismo es bien conocida. Es fácil encontrar ejemplos europeos y americanos de ella: los llamamientos contra el “gran reemplazamiento” expresados por <a href="https://www.france24.com/fr/france/20220214-le-grand-remplacement-o%C3%B9-la-machine-%C3%A0-fantasmes-de-l-extr%C3%AAme-droite">Éric Zemmour</a>, las advertencias contra los inmigrantes de <a href="https://www.independent.co.uk/news/world/americas/us-politics/the-snake-song-lyrics-trump-b2464914.html">Donald Trump</a> o la islamofobia de <a href="https://www.spiegel.de/international/germany/interview-with-frauke-petry-of-the-alternative-for-germany-a-1084493.html">Alternativa para Alemania</a>, entre otros. </p>
<p>Este nativismo de los partidos de extrema derecha se ha convertido en la base de sus proyectos políticos, incluidas sus políticas económicas.</p>
<p>Por este motivo, la extrema derecha contemporánea también presenta proyectos claramente proteccionistas. El euroescepticismo, la nacionalización y la retórica antiglobalización son elementos compartidos por una gran parte de los movimientos de extrema derecha. La raíz de estos proyectos es la creencia en una comunidad nacional, definida en términos étnicos o culturales, que debe ser protegida de la influencia de elementos procedentes del exterior. </p>
<h2>Liberalizar la economía, prioridad de Milei</h2>
<p>El elemento del nativismo no se encuentra en el partido de Javier Milei, aunque su lista de promesas pueda sorprender por su radicalidad y amplitud.</p>
<p>Más bien, los planes y la plataforma de su partido, La Libertad Avanza (LLA), representan una clara oposición al nativismo imperante en Argentina y representado por el movimiento peronista. Las acusaciones sobre su supuesta ideología antiinmigración tampoco tienen fundamento, al menos hasta ahora.</p>
<p>El programa electoral de Javier Milei menciona la inmigración sólo marginalmente. Basta con leer el <a href="https://www.electoral.gob.ar/nuevo/paginas/pdf/plataformas/2023/PASO/JUJUY%2079%20PARTIDO%20RENOVADOR%20FEDERAL%20-PLATAFORMA%20LA%20LIBERTAD%20AVANZA.pdf">texto</a>, donde los temas sobre “nación” o inmigración están relativamente ausentes. </p>
<p>Es cierto que Argentina ha recibido proporcionalmente menos inmigrantes que la mayoría de los países europeos o norteamericanos en los últimos años. El debate gira más bien en torno a la universalidad del servicio sanitario y educativo, gracias al cual todo el mundo, independientemente de su estatus migratorio, <a href="https://sherloc.unodc.org/cld/uploads/res/document/ley-de-migraciones-25871-english_html/Ley_de_Migraciones_25871_English.pdf">puede beneficiarse del sistema sanitario público (incluso los turistas) y de la educación gratuita</a>. Por tanto, Javier Milei no se opone tanto a la inmigración (ha <a href="https://www.youtube.com/watch?v=xfNnAKnHxGo">expresado incluso su apoyo</a>), como a cierto tipo de gastos del Estado asociados a ella. </p>
<p>Por otro lado, la liberalización ha sido y sigue siendo el pilar de su programa, perfectamente plasmado en la propuesta de eliminar el banco central e introducir la libre competencia monetaria. <a href="https://www.electoral.gob.ar/nuevo/paginas/pdf/plataformas/2023/PASO/CABA%20501%20LA%20LIBERTAD%20AVANZA%20ADHIERE%20PLATAFORMA%20ON.pdf">Su programa</a> incluye también la dolarización, la optimización y reducción del tamaño del Estado, la apertura al comercio internacional, la reforma del código laboral, de la ley de salud mental y de la reglamentación de los servicios médicos.</p>
<h2>Esperar antes de juzgar el proyecto político de Milei</h2>
<p>En otras palabras, a pesar del estilo populista y la radicalidad de sus propuestas, el planteamiento de Milei hace difícil identificarlo inmediatamente, sin más matizaciones, con la extrema derecha europea y estadounidense. </p>
<p>Esto no significa necesariamente que el fenómeno Milei deba ser excluido de la extensa familia de la extrema derecha. Como afirma <a href="https://www.bbc.com/mundo/articles/c983y398v0do">Cristóbal Rovira, profesor de la Pontificia Universidad Católica de Chile</a>, esta “familia” no tiene elementos necesariamente compartidos por todos sus miembros. Sin embargo, nos obliga a reconsiderar asociaciones inmediatas y fáciles. El hecho de que Javier Milei haya declarado su preferencia por Trump no le convierte en trumpista.</p>
<p>Sin duda, dentro de su partido político hay personas más cercanas a los proyectos políticos de Donald Trump o Santiago Abascal. Sin embargo, las posiciones personales de Javier Milei definen en gran medida lo que podemos esperar de su gobierno y el carácter de su proyecto político.</p>
<p>Aunque el propio Milei afirma su parentesco ideológico con líderes a menudo incluidos en la gran familia de la extrema derecha contemporánea, los elementos de su programa y el núcleo de su ideología imponen el mantenimiento de una cierta distancia. En términos más generales, es necesario contextualizar todos los fenómenos políticos para comprender su novedad y sus implicaciones.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/221513/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Federico Chaves Correa no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>Algunos aspectos del programa del presidente argentino Javier Milei se asemejan a la extrema derecha, pero otros no. Sin excluirle de este movimiento, hay que esperar antes de juzgar su proyecto político.Federico Chaves Correa, Doctorant en science politique, Université LavalLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/2210382024-01-12T22:29:57Z2024-01-12T22:29:57ZLos trabajadores argentinos se enfrentan al mayor golpe a sus derechos desde la dictadura militar<p>Cuando fue <a href="https://www.theguardian.com/world/2023/nov/20/argentina-presidential-election-far-right-libertarian-javier-milei-wins-after-rival-concedes">elegido presidente</a> de Argentina en noviembre de 2023, Javier Milei era visto por muchos votantes como un <em>outsider</em> político. Economista de profesión, prometió <a href="https://www.theguardian.com/world/video/2023/nov/20/javier-milei-who-is-argentina-new-president-video-profile">un reseteo del país</a> que acabaría con la inflación y recortaría el gasto público. </p>
<p>Entre <a href="https://english.elpais.com/international/2023-08-09/javier-milei-holds-mass-rally-in-argentina-the-political-caste-is-afraid-do-you-want-to-scare-them-a-little-more.html">diatribas contra los políticos</a> y descalificaciones de la emergencia climática como una <a href="https://english.elpais.com/climate/2023-11-30/climate-denier-in-the-casa-rosada-mileis-arrival-puts-argentinas-environmental-agenda-at-risk.html">“mentira socialista”</a>, le gustaba <a href="https://theconversation.com/new-argentinian-president-javier-milei-promises-to-take-a-chainsaw-to-countrys-crippled-economy-218155">blandir una motosierra</a> para simbolizar sus planes para arreglar una economía estancada y agobiada por la deuda.</p>
<p>Y, desde que asumió el cargo, Milei ha estado ocupado con su agenda de recortes. En pocas semanas publicó un <a href="https://www.boletinoficial.gob.ar/detalleAviso/primera/301122/20231221">decreto ejecutivo</a> de 82 páginas como fase inaugural de su amplia desregulación. </p>
<p>El decreto está diseñado para cambiar fundamentalmente la sociedad argentina, afectando directamente a los derechos y protecciones de millones de trabajadores. Ya ha suscitado comparaciones con la <a href="https://theconversation.com/world-politics-explainer-pinochets-chile-100659">desregulación de la economía chilena</a> <a href="https://twitter.com/GerardoMunck/status/1737782463865221282">del general Augusto Pinochet</a> en la década de 1970.</p>
<p>Uno de los apartados del decreto de Milei pretende limitar el derecho de huelga, el derecho de reunión y el derecho de negociación colectiva. Alteraría la situación financiera de los sindicatos, la asistencia sanitaria de los trabajadores y derechos básicos como la baja por maternidad. </p>
<p>Todo ello se presenta como una forma de racionalizar el mercado laboral, para mejorar el dinamismo económico y el crecimiento. También se ve como una forma de desmantelar la ideología de derechos y protecciones contra la que arremeten Milei y sus aliados.</p>
<p>Pero a pesar de la retórica, no hay pruebas de que las reformas de este tipo en la región hayan creado empleo o mejorado la dinámica del mercado laboral. Por el contrario, la evidencia sugiere que simplemente <a href="https://www.ilo.org/americas/publicaciones/WCMS_190387/lang--en/index.htm">aumentan los niveles</a> de empleo de mala calidad. </p>
<p>El decreto de Milei fue seguido rápidamente por un <a href="https://drive.google.com/file/d/1p2IAankBJVcjSS-1mKmkFZSOK8jG835m/view">proyecto de ley de reforma</a> de 664 artículos que abarca un amplio abanico de cuestiones, como la privatización de 41 empresas públicas (incluida la petrolera estatal YPF), cambios en el sistema electoral y la introducción de nuevos impuestos. </p>
<p>También contiene una declaración de emergencia, no sólo económica, sino en materia de seguridad, energía y sanidad (y muchas otras). Para hacer frente a esto, Milei pretende delegar poderes legislativos en el ejecutivo (él mismo) durante al menos dos años. </p>
<p>De este modo, podría eludir al Parlamento para prácticamente todo lo que quiera hacer, alegando que la toma de decisiones democrática institucional es demasiado lenta. </p>
<p>A pesar de obtener el 55,6 % de los votos en la segunda vuelta de las elecciones, su coalición ocupa una minoría de escaños en ambas cámaras del Parlamento argentino. El poder ejecutivo significaría poder evitar las necesarias negociaciones con otros partidos. </p>
<h2>Desafíos legales</h2>
<p>El presidente argentino se enfrenta a una dura oposición a sus planes. Se han presentado más de <a href="https://www.lanacion.com.ar/politica/se-presentaron-mas-de-40-amparos-para-declarar-la-inconstitucionalidad-del-dnu-de-milei-nid05012024/">40 recursos legales</a> alegando que el decreto de Milei es inconstitucional, mientras que un tribunal suspendió el capítulo de reforma laboral de su decreto, cuestionando su necesidad y urgencia. </p>
<p>Fuera de los tribunales, la Confederación General del Trabajo (CGT), la federación sindical más importante del país, ha <a href="https://buenosairesherald.com/politics/argentinas-trade-union-federations-call-for-national-strike-on-january-24#:%7E:text=Argentina%E2%80%99s%20trade%20federation%20sindical%20call%20for%20a%20national,Congress%2C%20according%20a%20communiqu%C3%A9%20reclosed%20on%20Thursday.">convocado un paro nacional</a> el 24 de enero y ha habido <a href="https://english.elpais.com/international/2023-12-21/tens-of-thousands-of-argentines-protest-against-milei-amidst-strong-security-measures.html">protestas en las calles</a>.</p>
<p>Por otra parte, Milei ha recibido apoyo para algunos de sus planes <a href="https://www.reuters.com/world/americas/us-offers-argentinas-milei-support-imf-lithium-white-house-adviser-2023-12-10/">de Estados Unidos</a>, <a href="https://www.bbc.co.uk/news/business-67688727">del FMI</a> y de otros <a href="https://www.reuters.com/world/americas/election-victory-argentinas-milei-greeted-globally-by-mix-hostility-support-2023-11-21/">políticos de derechas</a>. </p>
<p>En cuanto a los trabajadores argentinos, lo que está en juego en las próximas semanas y meses es un nuevo retroceso en sus derechos y la imposición de un entorno laboral similar al que se vivió tras la <a href="https://theconversation.com/four-decades-after-coup-people-power-is-driving-change-in-argentina-54973">toma del poder por los militares en 1976</a>. Porque entre los asesinatos y las desapariciones de aquella época, una de las principales prioridades de la dictadura fue la reforma regresiva de las relaciones laborales.</p>
<p>Inmediatamente después de tomar el poder, los militares recortaron ampliamente la normativa laboral. Tomaron el control de los sindicatos, congelaron sus fondos y prohibieron toda forma de negociación colectiva.</p>
<p>Se suspendieron los derechos relacionados con la afiliación a sindicatos, la acción colectiva y las huelgas. Se regeneró el poder patronal y se impuso la disciplina.</p>
<p>Nuestra investigación revela que las consecuencias fueron una <a href="https://link.springer.com/book/10.1007/978-3-030-18301-1">profunda reestructuración</a> de las relaciones laborales del capital, en <a href="https://uncpress.org/book/9781469666037/">detrimento de los trabajadores</a>. </p>
<p>Milei parece decidido a realizar cambios de una magnitud similar, bajo el argumento de que no hay alternativa. Si tiene éxito, pasar por encima de las instituciones democráticas, liberalizar los mercados a cualquier coste social y emprender una guerra contra los derechos y las protecciones alterará sin duda la sociedad argentina. Pero no hará a Argentina “grande otra vez”, como él <a href="https://www.usnews.com/news/world/articles/2023-12-10/argentine-libertarian-milei-to-take-presidency-with-economic-crisis-in-focus#:%7E:text=%22Vamos%20a%20poner%20el%20pa%C3%ADs%20detr%C3%A1s,el%20renacimiento%20de%20una%20Argentina%20prospera%20y%20liberal.%22">ha prometido</a>. </p>
<p>Lo que suceda a continuación sigue siendo incierto. Pero el aluvión de medidas del nuevo presidente afectará a millones de vidas. Y al hacerlo, pueden provocar resistencia, fortalecer la solidaridad social y potencialmente reabrir un debate democrático sobre un camino alternativo.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/221038/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Luciana Zorzoli no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>Desde que asumió la presidencia, Javier Milei ha estado ocupado con su agenda de recortes. No lo tendrá fácil: el líder argentino se enfrenta a una tenaz oposición de cientos de miles de trabajadores.Luciana Zorzoli, Senior Lecturer in Employment Relations, Essex Business School, University of EssexLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/2091492023-12-13T21:39:44Z2023-12-13T21:39:44ZMedio siglo después del golpe de Estado en Uruguay, ¿por qué ha habido tan pocos juicios por crímenes de la dictadura?<p>Este 2023 se ha cumplido medio siglo del inicio del <a href="https://www.jstor.org/stable/3338122">golpe de Estado</a> en Uruguay. El 27 de junio de 1973, el presidente <a href="https://www.theguardian.com/world/2011/jul/19/juan-maria-bordaberry-obituary">Juan María Bordaberry</a> y las fuerzas armadas cerraron el parlamento e inauguraron 12 años de terror de Estado (1973-1985). </p>
<p>Este aniversario ofrece la oportunidad de reflexionar sobre por qué Uruguay no ha juzgado a más personas por <a href="https://books.google.co.uk/books?hl=en&lr=&id=drBFEAAAQBAJ&oi=fnd&pg=PR3&dq=uruguay+human+rights+violations&ots=C_qHgKFp33&sig=0bZVwwvPb-Uslbjp-GpqCY7xGu8&redir_esc=y#v=onepage&q=uruguay%20human%20rights%20violations&f=false">violaciones de derechos humanos</a> cometidas durante esta dictadura. </p>
<p>Durante décadas, Uruguay fue conocido como “la <a href="https://onlinelibrary.wiley.com/doi/abs/10.1002/j.1662-6370.2008.tb00110.x">Suiza de América Latina</a>”, dada su larga estabilidad y tradiciones democráticas, y su estado de bienestar. En 1973, se prestó poca atención al régimen uruguayo, quizás debido a la reputación del país y a su situación geopolítica, eclipsado por dos vecinos mayores, Argentina y Brasil. Ese año, la mayor parte de la atención internacional se centró en el espectacular golpe de Estado contra el presidente chileno, <a href="https://www.britannica.com/biography/Salvador-Allende">Salvador Allende</a>. </p>
<figure>
<iframe width="440" height="260" src="https://www.youtube.com/embed/8rzoBmP8MgY?wmode=transparent&start=0" frameborder="0" allowfullscreen=""></iframe>
</figure>
<h2>Encarcelamiento, interrogatorios y tortura</h2>
<p>Sin embargo, el régimen uruguayo fue igualmente violento y represivo. En poco tiempo, Uruguay se ganó un nuevo apodo: la “<a href="https://www.tandfonline.com/doi/pdf/10.1080/03064227708532645">cámara de tortura de América Latina</a>”. A principios de 1976, Uruguay tenía la mayor concentración per cápita de <a href="https://sarahbsnyder.net/wp-content/uploads/2020/01/Ending-our-support-for-the-dictators-Ed-Koch-Uruguay-and-human-rights.pdf">presos políticos del mundo</a>.</p>
<p>Según <a href="https://www.amnesty.org/en/wp-content/uploads/2021/06/amr520131979en.pdf">Amnistía Internacional</a>, uno de cada 500 ciudadanos estaba en prisión por motivos políticos y “uno de cada 50 ciudadanos había pasado por un período de encarcelamiento, que para muchos incluía interrogatorios y torturas”. </p>
<p>Además de los miles de personas encarceladas y torturadas, la dictadura dejó un legado de <a href="https://www.gub.uy/secretaria-derechos-humanos-pasado-reciente/comunicacion/publicaciones/listado-personas-detenidas-desaparecidas-responsabilidad-yo-aquiescencia">197 desapariciones forzadas patrocinadas por el Estado</a> y <a href="https://www.gub.uy/secretaria-derechos-humanos-pasado-reciente/comunicacion/publicaciones/listados-asesinadas-asesinados-politicos-fallecidos-responsabilidad-yo">202 ejecuciones extrajudiciales</a> entre 1968 y 1985. </p>
<p>La represión fue brutal no sólo dentro de las fronteras uruguayas, sino también fuera de ellas. Mi <a href="https://yalebooks.co.uk/page/detail/the-condor-trials/?k=9780300254099">libro</a> sobre la <a href="https://www.theguardian.com/news/2020/sep/03/operation-condor-the-illegal-state-network-that-terrorised-south-america">Operación Cóndor</a> –una campaña represiva emprendida por las dictaduras sudamericanas, y respaldada por Estados Unidos, para silenciar a los opositores en el exilio– ilustra cómo los uruguayos representan el mayor número de víctimas (<a href="https://plancondor.org/sites/default/files/2023-04/20230411-informe-ingles.pdf">48 % del total</a>) perseguidas más allá de las fronteras entre 1969 y 1981.</p>
<h2>¿Justicia o impunidad?</h2>
<p>Uruguay <a href="https://www.jstor.org/stable/pdf/3338320.pdf?refreqid=excelsior%3A6d4c727a5812dc33920cb58f7fa72974&ab_segments=&origin=&initiator=">volvió a la democracia</a> el 1 de marzo de 1985, con la toma de posesión del presidente <a href="https://www.encyclopedia.com/humanities/encyclopedias-almanacs-transcripts-and-maps/sanguinetti-julio-maria-1936">Julio María Sanguinetti</a>. Las perspectivas de justicia se vieron restringidas desde el principio. Los generales uruguayos y los representantes de tres partidos políticos <a href="https://www.bandaoriental.com.uy/libro/el-uruguay-en-transicion-1981-1985/">habían negociado la transición</a> mediante el <a href="https://web.s.ebscohost.com/ehost/ebookviewer/ebook/bmxlYmtfXzU3NDk1OV9fQU41?sid=91e4cf6e-d742-4bfa-9739-3fe29ba006b0@redis&vid=0&format=EB&lpid=lp_31&rid=0">Pacto del Club Naval</a>. </p>
<p>Entre otras cosas, este último establecía un calendario para el retorno de la democracia, restauraba el sistema político anterior a la dictadura, incluida la constitución de 1967, y convocaba elecciones nacionales para noviembre de 1984. Las elecciones se celebraron, pero con la prohibición de algunos políticos. </p>
<p>En diciembre de 1986, el parlamento democrático sancionó entonces la ley 15.848 de caducidad de la pretensión punitiva del Estado. Esta “<a href="https://www.cambridge.org/core/books/amnesty-in-the-age-of-human-rights-accountability/barriers-to-justice/0EA038B67B9DC9E15C500565D8F73B77">ley de impunidad</a>” protegía eficazmente a los oficiales de policía y militares de la rendición de cuentas por las atrocidades de la época de la dictadura, garantizando el control y la supervisión de la justicia por parte del ejecutivo. </p>
<p>Se introdujo en un momento de creciente oposición por parte de las fuerzas armadas a las incipientes <a href="https://global.oup.com/academic/product/human-rights-and-democratization-in-latin-america-9780198280385?cc=gb&lang=en&">investigaciones judiciales</a> sobre crímenes del pasado.</p>
<p>La ley de caducidad consiguió garantizar que la política de impunidad patrocinada por el Estado, según la cual los crímenes no se castigan, siguiera vigente durante 25 años, hasta 2011. En otro lugar he analizado los altibajos de <a href="https://link.springer.com/series/14807/books?page=2">la relación de Uruguay</a> con la rendición de cuentas. </p>
<p>Avanzando rápidamente hasta la actualidad, Uruguay tiene reputación de líder regional en algunas cuestiones de derechos humanos (por ejemplo, <a href="https://www.routledge.com/Abortion-and-Democracy-Contentious-Body-Politics-in-Argentina-Chile-and/Sutton-Vacarezza/p/book/9780367529413">derechos reproductivos</a> y <a href="https://www.hrw.org/news/2013/04/02/uruguay-marriage-equality-approved">matrimonio igualitario</a>). Pero sólo ha conseguido una justicia muy limitada para las atrocidades de la época de la dictadura.</p>
<h2>Comparación de Uruguay con Argentina</h2>
<p>Hasta junio de 2023, los tribunales uruguayos han dictado sentencias en sólo 20 casos penales y condenado a 28 acusados en total, algunos de los cuales estaban involucrados en múltiples casos (a partir de cifras recopiladas de datos propios y de la ONG <a href="https://www.observatorioluzibarburu.org/">Observatorio Luz Ibarburu</a>).</p>
<p>Como punto de comparación, los tribunales argentinos han dictado <a href="https://www.fiscales.gob.ar/lesa-humanidad/desde-2006-fueron-dictadas-301-sentencias-por-crimenes-de-lesa-humanidad-en-argentina/">301 sentencias</a> desde 2006, con 1 136 personas condenadas por los crímenes de la dictadura (1976-1983). </p>
<p>Del mismo modo, hasta el 31 de diciembre de 2022 se han dictado 606 sentencias definitivas en juicios por crímenes de la dictadura en Chile, 487 en causas penales y civiles (vistas en conjunto), y 119 sólo en causas civiles, según datos del <a href="https://derechoshumanos.udp.cl/observatorio-de-justicia-transicional/">Observatorio de Justicia Transicional</a> de la Universidad Diego Portales.</p>
<p>Junto con colegas de la Universidad de Oxford, hemos desarrollado un <a href="https://www.jstor.org/stable/pdf/24518345.pdf?refreqid=excelsior%3Aeed94c9538aadcddc5001fd1b128a209&ab_segments=&origin=&initiator=">enfoque</a> para explicar por qué algunos países exigen responsabilidades a los autores de violaciones de los derechos humanos cometidas en el pasado, mientras que otros no lo hacen.</p>
<p>Se basa en <a href="https://academic.oup.com/ijtj/article/8/1/75/758926#13322005">cuatro factores</a>: la demanda de la sociedad civil; la ausencia de agentes de veto (como políticos que se oponen a la rendición de cuentas o a la investigación de violaciones de derechos humanos cometidas en el pasado); el liderazgo judicial nacional; y la presión internacional. Este planteamiento básico ayuda a comprender las luchas duraderas de Uruguay. Aunque los cuatro factores están en juego en el país, chocan entre sí y favorecen la impunidad en general.</p>
<p>Uruguay ha sido testigo de importantes niveles de presión internacional, incluido el famoso veredicto “<a href="https://www.corteidh.or.cr/docs/casos/articulos/seriec_221_ing.pdf">Gelman</a>” de 2011 de la Corte Interamericana de Derechos Humanos que fue decisivo para <a href="https://www.amnesty.org/en/latest/press-release/2011/10/uruguay-congress-adopts-landmark-law-tackle-impunity/">derogar</a> la ley de caducidad en 2011. </p>
<p>Simultáneamente, ha habido una demanda incesante de justicia por parte de la sociedad civil, desde el <a href="https://www.jstor.org/stable/762359">histórico referéndum de 1989</a> para derogar la ley de caducidad hasta, más recientemente, los llamamientos para modificar la <a href="https://ladiaria.com.uy/justicia/articulo/2023/5/crysol-propuso-una-peticion-ante-la-cidh-para-revocar-incompatibilidad-entre-el-cobro-de-la-pension-reparatoria-y-la-jubilacion-y-pensiones/">ley de reparaciones</a> de 2006 para los presos políticos.</p>
<p>Sin duda, la mayor parte de los avances en materia de justicia, verdad y reparación se han logrado en Uruguay gracias a los <a href="https://academic.oup.com/ijtj/article-abstract/7/2/306/72299">incansables esfuerzos de activistas y ONG</a>, incluida la central sindical, que han impulsado a las autoridades a investigar. </p>
<p>No obstante, Uruguay nunca se ha comprometido con la investigación de las atrocidades del pasado como <a href="https://www.penguinlibros.com/ar/tematicas/160681-ebook-justicia-o-impunidad-9789974732445">política de Estado</a>, como sí ha hecho Argentina. Un conjunto de actores poderosos, que incluye a las fuerzas armadas, varios políticos y jueces de tribunales superiores, se han asegurado de que el muro de la impunidad se mantuviera en pie con pocas excepciones.</p>
<p>La <a href="https://www.cambridge.org/core/journals/journal-of-latin-american-studies/article/wavering-courts-from-impunity-to-accountability-in-uruguay/0461670D7469DB908BCCD006476C66B7">falta de independencia judicial</a> y la sanción de algunos jueces valientes que intentaron desafiar la impunidad en las décadas de 1990 y 2000 –la más reciente <a href="https://www.aljazeera.com/opinions/2013/2/22/uruguays-culture-of-impunity-continues-to-rear-its-head">Mariana Mota</a>– también han obstaculizado el progreso. </p>
<figure>
<iframe width="440" height="260" src="https://www.youtube.com/embed/WXtqniEohS4?wmode=transparent&start=0" frameborder="0" allowfullscreen=""></iframe>
</figure>
<p>Otro factor es el importante número de sentencias <a href="https://www.wola.org/analysis/new-ruling-uruguays-supreme-court-justice-jeopardizes-search-truth-justice-dictatorship-era-crimes/">en el tribunal supremo</a> que restaron importancia a la gravedad de los crímenes cometidos durante la dictadura.</p>
<p>Sin embargo, podría haber cambios positivos en el horizonte. Un nuevo <a href="http://www.impo.com.uy/bases/codigo-proceso-penal-2017/19293-2014">código de procedimiento penal</a> introducido en 2017 significa que las denuncias de la época de la dictadura (presentadas desde entonces) se investigan con mayor rapidez. Y la creación en 2018 de un <a href="https://www.gub.uy/fiscalia-general-nacion/politicas-y-gestion/especializada-crimenes-lesa-humanidad">fiscal especializado</a> para crímenes de lesa humanidad –una antigua demanda de los activistas de derechos humanos– ha dado lugar a que más investigaciones lleguen a juicio y a un ritmo más rápido. </p>
<p>Como dijo el poeta uruguayo <a href="https://www.theguardian.com/books/2009/may/20/obituary-mario-benedetti">Mario Benedetti</a> sobre la memoria y el olvido, cuando la verdad finalmente recorra el mundo: “<em>esa verdad será que no hay olvido</em>”.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/209149/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>El proyecto de Francesca Lessa sobre la Operación Cóndor recibió financiación del Fondo John Fell de la Universidad de Oxford, The British Academy/Leverhulme Trust, la Cuenta de Aceleración del Impacto del ESRC de la Universidad de Oxford, la Comisión Europea en el marco de Horizonte 2020 y la Open Society Foundations. Es presidenta de honor del Observatorio Luz Ibarburu, una red de ONG de derechos humanos de Uruguay.</span></em></p>Argentina ha condenado a más personas por sus crímenes de la época de la dictadura que Uruguay.Francesca Lessa, Lecturer in Latin American Studies and Development, University of OxfordLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/2184282023-11-23T19:02:32Z2023-11-23T19:02:32ZLa Libertad Avanza en las urnas, pero el fantasma de la crisis de gobernabilidad acecha a Argentina<p>Javier Milei está haciendo correr ríos de tinta por su victoria sorprendente e inobjetable. La Libertad Avanza, su partido, obtuvo 55,79% de los votos emitidos en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales argentinas el 19 de noviembre. Pero la mayor parte de esa tinta se gasta en reflejar sus claroscuros personales, en vez de aclarar si la solvencia mostrada en las urnas garantiza la gobernabilidad.</p>
<h2>De la anomalía a la congruencia</h2>
<p>Por una parte, un eventual triunfo de Sergio Massa representaba un desafío a <a href="https://www.proquest.com/docview/2777696690?pq-origsite=gscholar&fromopenview=true">la teoría de la alternancia en el poder en América Latina</a>. Mientras, por otra, el éxito de Javier Milei pone en entredicho la pauta según la cual <a href="http://www.publicaciones.cucsh.udg.mx/kiosko/2021/Enigmas.pdf">el acceso al poder solo es factible si la oposición constituye una opción de gobierno creíble</a>.</p>
<p>Hoy sabemos que la amenaza de <a href="https://theconversation.com/la-anomalia-empirica-de-las-elecciones-en-argentina-donde-dos-mas-dos-no-suman-cuatro-217319">anomalía empírica</a> se disolvió desde el momento en que millones de votantes de la coalición Juntos por el Cambio, tercera en discordia y eliminada en primera vuelta, tomaron distancia de la división que afectó a sus líderes y optaron masivamente por respaldar al candidato de La Libertad Avanza.</p>
<p>Mientras mayor era la dispersión del voto entre los líderes de Juntos por el Cambio, mayor también fue la cohesión del mismo entre las bases de la coalición. Esa paradoja explica que la anomalía empírica fuera desplazada por la congruencia. Forzado a elegir desde el dominio de las pérdidas, el votante se muestra proclive a respaldar a la fuerza política emergente, la única que no tiene responsabilidad con la crítica situación existente.</p>
<p>Pero el triunfo libertario puso sobre la mesa la duda que nunca despejó la campaña de Milei: como presidente electo, ¿conducirá a Argentina hacia una crisis de gobernabilidad?</p>
<h2>Reversión del resultado y crisis de gobernabilidad</h2>
<p>Milei, el candidato perdedor de la primera vuelta, finalmente obtuvo la presidencia. La reversión del resultado inicial indica que el candidato que hubiese sido electo bajo un sistema sin dos vueltas (Sergio Massa) cuenta con la oposición de un sector mayoritario de la población. Sin embargo, <a href="http://p3.usal.edu.ar/index.php/miriada/article/view/427">los problemas de gobernabilidad para el nuevo presidente tienden a incrementarse</a>.</p>
<p>La supuesta legitimidad derivada del amplio respaldo electoral al presidente puede ser dudosa y volátil, ya que <a href="https://repositorio.flacsoandes.edu.ec/handle/10469/1113">en casos como estos se vota contra el perdedor más que a favor del ganador</a>. </p>
<p>Cuando el perdedor de la primera vuelta emerge ganador de la segunda, <a href="https://www.colibri.udelar.edu.uy/jspui/bitstream/20.500.12008/7127/1/RUCP_Chasquetti_2000v12.pdf">su situación en el Congreso tiende a agravarse por la diferencia abismal entre su apoyo legislativo minoritario y el sobredimensionado respaldo electoral obtenido en la segunda ronda</a>.</p>
<p>La mayoría artificial genera un falso sentido de respaldo público para el nuevo presidente, quien rápidamente puede verse abandonado por la opinión pública. Simultáneamente, la oposición, que ha triunfado en la primera vuelta, tiende a controlar una bancada legislativa más fuerte que la del partido gobernante y está <a href="http://p3.usal.edu.ar/index.php/miriada/article/view/427">dispuesta a vengar su derrota</a>. Los mandatarios latinoamericanos Abdala Bucaram, León Febres Cordero, Alberto Fujimori, Jorge Serrano y, más recientemente, Pedro Castillo tuvieron que enfrentar este escenario.</p>
<p>Sin embargo, no todos los casos de reversión del resultado han conducido a una crisis de gobernabilidad.</p>
<h2>Tres niveles de crisis de gobernabilidad</h2>
<p>Pérez Liñán (2008), uno de los más importantes politólogos latinoamericanos, destaca <a href="http://p3.usal.edu.ar/index.php/miriada/article/view/427">tres niveles de gravedad de la crisis de gobernabilidad</a>. </p>
<p>Un primer nivel se da cuando el poder ejecutivo cuestiona la legitimidad del poder legislativo y plantea su disolución o viceversa. </p>
<p>El segundo se alcanza cuando uno de los dos poderes encuentra una vía constitucional para efectivamente deponer al otro. </p>
<p>Mientras el máximo nivel se produce cuando los militares intervienen para destituir al mandatario, a los legisladores de la oposición o a ambos.</p>
<p>La reversión del resultado electoral en la doble vuelta puede erosionar, pero no siempre lo hace. Algunos ejemplos lo evidencian, como los casos de los presidentes Leonel Fernández (1996), Jorge Batlle (1999), Andrés Pastrana (1998) y Mauricio Macri (2015).</p>
<p><a href="http://p3.usal.edu.ar/index.php/miriada/article/view/427">Para que la reversión derive en crisis, es condición necesaria la existencia de un sistema de partidos fragmentado y escasamente institucionalizado</a>. Esto significa que las organizaciones partidarias además de numerosas tienden a tener un vínculo débil con los representados, por lo que los líderes partidarios son incapaces de forjar coaliciones perdurables.</p>
<h2>El sistema de partidos argentino bajo la lupa</h2>
<p>El sistema de partidos argentino cuenta con abundantes etiquetas partidarias, pero no se ha derrumbado pese a sufrir recurrentes <a href="https://repositorio.ul.pt/bitstream/10451/25332/1/ICS_AMalamud_Sistemas_CLI.pdf">crisis políticas</a>). Su fragmentación dificulta la gobernabilidad democrática y limita la capacidad del gobierno de alterar el <em>statu quo</em>. Algunos investigadores lo caracterizan como falto de institucionalidad, pero otros <a href="http://catalogo.unvm.edu.ar/index.php?lvl=cmspage&pageid=9&id_notice=39008">lo califican de institucionalizado</a>. </p>
<p>Buena parte de su complejidad reside también en la existencia de <a href="https://repositorio.ul.pt/bitstream/10451/25332/1/ICS_AMalamud_Sistemas_CLI.pdf">tres “arenas electorales”, la presidencial, la senatorial y la de la Cámara de Diputados, y 24 sistemas de partidos provinciales</a>. A este enrevesado marco político se suman dinámicas interpartidarias, que resultan más relevantes que la internas y añaden otro giro de guion al intrincado sistema.</p>
<h2>Néstor Kirchner y Mauricio Macri, dos antecedentes</h2>
<p>Los mandatarios Néstor Kirchner, en 2003, y Mauricio Macri, en 2015, resultaron derrotados en primera vuelta sin que derivara después en una crisis de gobernabilidad.</p>
<p>La experiencia de Kirchner (2003-2007) no fue tan insólita porque representaba al peronismo, la organización partidista en torno a la que desde hace 80 años giran los demás actores. En cambio, despertó enorme interés el caso de la administración macrista (2015-2019) por su resiliencia. La crisis de gobernabilidad no estalló, pese a la combinación de <a href="https://nuso.org/articulo/supervivencia-politica-de-mauricio-macri/">ajuste con retroceso económico, el quiebre de la narrativa gubernamental de cambio y la existencia de una sociedad civil predispuesta al conflicto</a>.</p>
<p>Cuesta creer que Milei corra con igual fortuna que Macri.</p>
<h2>Diferencias entre los escenarios de Macri y Milei</h2>
<p>Macri esquivó la crisis de gobernabilidad debido a que su ascenso a la presidencia significó la consolidación de un partido (PRO). Además, la coalición con la UCR le permitió contar con 91 diputados, cinco gubernaturas y 15 senadores. Contribuyó también a la gobernabilidad un peronismo dividido, que habilitó la aprobación de más de cien leyes con un perfil gradualista.</p>
<p>En cambio, la llegada de Milei responde al éxito de un <em>outsider</em>, que apenas cuenta con ocho senadores y 38 diputaciones, lejos del tercio requerido para bloquear un eventual juicio político. </p>
<p>La radicalidad de las iniciativas defendidas por Milei (dolarización, cierre del Banco Central, privatización, etc.) dificulta visualizar un comportamiento colaborativo por parte del peronismo (106 diputados). </p>
<p>Tampoco parece probable que los sindicatos, la Confederación General del Trabajo y los movimientos sociales mantengan relativamente un bajo perfil, como hicieron durante la administración de Macri. En ese periodo, no apostaron por la derrota del plan del gobierno en las calles, <a href="https://nuso.org/articulo/supervivencia-politica-de-mauricio-macri/">sino por el desgaste que facilitaría su derrota en las urnas</a>.<br>
Aunque Kirchner y Macri no enfrentaron una crisis de gobernabilidad, no hay que olvidar que los presidentes radicales Raúl Alfonsín y Fernando de la Rúa se vieron obligados a concluir sus mandatos anticipadamente. Al sistema político argentino no le resulta ajeno elevar la presión y forzar el reemplazo del ejecutivo.</p>
<h2>Fortalezas del libertario</h2>
<p>Javier Milei no carece de fortalezas. En apenas cinco años logró alcanzar la presidencia. El modelo de gobierno del peronismo kirchnerista luce agotado. El terror a la hiperinflación puede facilitar la aceptación por los ciudadanos de las políticas neoliberales más draconianas, mientras la ultraderecha tiene una presencia significativa en importantes países vecinos como Chile, Brasil y Uruguay.</p>
<p>Sin embargo, hay dudas legítimas sobre la capacidad del libertario para superar estos seis desafíos:</p>
<ol>
<li><p>Evitar que elites empresariales, tradicionalmente beneficiadas de una “relación carnal” con el estado argentino, consigan aislarlo.</p></li>
<li><p>Que su programa económico resulte viable.</p></li>
<li><p>Que consiga sostener niveles de popularidad satisfactorios.</p></li>
<li><p>Que impida a la oposición legislativa conformar una mayoría calificada capaz de impulsar un juicio político.</p></li>
<li><p>Que su batería de reformas neoliberales no articule en su contra a una sociedad civil en movilización permanente.</p></li>
<li><p>Que no resulte abandonado por sus propios legisladores cuando la tensión social se incremente.</p></li>
</ol>
<p>Las amenazas al nuevo gobierno, cuando menos, provienen de tres direcciones: el riesgo de hiperinflación, las secuelas de la reversión del resultado electoral y la eventual presión en las calles.</p>
<p>Un fantasma acosa el inminente mandato de Milei, el fantasma de la crisis de gobernabilidad.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/218428/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Orestes Enrique Díaz Rodríguez es miembro del Sistema Nacional de Investigadores de México, Nivel 1. Por dicha condición recibe apoyos económicos por parte del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología de ese país. </span></em></p>El inobjetable triunfo electoral de Milei y su proyección mediática atraen todos los focos. Pero el fantasma de una crisis de gobernabilidad recorre Argentina.Orestes Enrique Díaz Rodríguez, Profesor investigador en ciencia política, Universidad de GuadalajaraLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/2182662023-11-21T10:50:31Z2023-11-21T10:50:31ZLa elección de Milei y los desafíos de una Argentina empobrecida<p>En diciembre de 2001, Argentina vivió uno de los momentos más dramáticos de su historia. La <a href="https://www.scielo.br/j/rec/a/trrjWzg555gV5XCFSxxgLnt/?lang=pt">inminente quiebra de la convertibilidad</a> –el plan de estabilización monetaria que establecía la paridad entre el dólar y el peso– llevó a decenas de miles de personas a las calles para protestar contra la confiscación de la moneda por parte del gobierno, el “<a href="https://www.bbc.com/portuguese/articles/cxwjp8yw89po">corralito</a>”. En un momento ya histórico, el entonces presidente <a href="https://noticias.uol.com.br/ultimas-noticias/afp/2019/07/09/morre-de-la-rua-o-presidente-que-fugiu-de-helicoptero-da-crise-na-argentina.htm">Fernando de la Rúa huyó de la Casa Rosada en helicóptero</a> tras dimitir, ante la incredulidad de los manifestantes que ocupaban la Plaza de Mayo. </p>
<p>Casi 22 años después, la población argentina parece haber encontrado por fin una figura capaz de expresar con eficacia el grito “<a href="https://es.wikipedia.org/wiki/%C2%A1Que_se_vayan_todos!">que se vayan todos</a>” que marcó aquel trágico diciembre. Javier Milei, economista de extrema derecha y fundador del partido La Libertad Avanza (LLA), fue <a href="https://www.dw.com/pt-br/argentina-opta-pela-ruptura-milei-vence-a-presid%C3%AAncia/a-67483227">elegido presidente de Argentina</a> al derrotar al peronista Sergio Massa en la segunda vuelta celebrada el pasado domingo. </p>
<p>La ventaja de más de diez puntos entre Milei y Massa volvió a poner en entredicho la credibilidad de los <a href="https://exame.com/mundo/eleicoes-na-argentina-veja-os-numeros-das-ultimas-pesquisas-eleitorais/">institutos de sondeos que pronosticaban una carrera reñida</a>, definida por estrechos márgenes, pero los indicios de que este panorama era erróneo eran visibles desde la primera vuelta. En la votación de octubre, la suma de los votos otorgados a Milei y Patrícia Bullrich ya superaba en cerca de un 15% a los de Massa. </p>
<h2>Victoria en 20 de las 23 provincias del país</h2>
<p>Al final, Milei logró retener más del 80% de los votos de Bullrich y amplió su base electoral en más de 324 000 votos en comparación con el desempeño de la derecha en la primera vuelta. El resultado fue una <a href="https://noticias.uol.com.br/internacional/ultimas-noticias/2023/11/19/assessor-de-milei-apos-vitoria-nao-esperavamos-um-resultado-tao-largo.htm">victoria aplastante</a>, en la que Milei se impuso a Massa en 20 de las 23 provincias del país, así como en la capital federal, Buenos Aires. En bastiones tradicionales antiperonistas, como Mendoza, la diferencia superó el 40 %, pero Milei ganó en cinco de las ocho provincias gobernadas actualmente por el peronismo.</p>
<p><a href="https://oglobo.globo.com/blogs/miriam-leitao/coluna/2023/11/o-que-levou-a-vitoria-de-milei-e-quais-sao-os-primeiros-desafios.ghtml">Entender las razones</a> que han llevado a esta situación es un esfuerzo que durará algunos años. En un análisis preliminar, los resultados pueden leerse como el esperado final de un ciclo electoral atípico en el que una sociedad castigada por una década de estancamiento económico y diferentes <a href="https://www1.folha.uol.com.br/mercado/2023/10/argentina-e-campea-em-planos-de-estabilizacao-fracassados-brasil-e-vice.shtml">planes de estabilización fallidos</a> decidió castigar a las fuerzas políticas tradicionales, es decir, ante el rechazo a las fórmulas conocidas, se abrazó lo desconocido. </p>
<p>Lo llamativo es que este descontento ha encontrado su principal representante en Javier Milei, <a href="https://g1.globo.com/mundo/noticia/2023/11/19/javier-milei-quem-e-e-quais-sao-as-propostas-do-presidente-eleito-da-argentina.ghtml">una figura agresiva</a>, visiblemente poco preparada, sin bases sociales firmes y que se ha hecho más conocido por su idiosincrasia que por la defensa de un proyecto o una trayectoria en política.</p>
<h2>Campañas extremas y rabiosas</h2>
<p>Despojado del ropaje ilustrado con el que la derecha tradicional argentina intenta disfrazar su repudio a los pobres, Milei apostó por una campaña a su imagen y semejanza: histriónica, <a href="https://www.bbc.com/portuguese/articles/cgrp0n0zg5lo">extrema y rabiosa</a>, simbolizada por la motosierra con la que pretendía –esperemos que metafóricamente– destruir a la “casta”, expresión con la que se refería a los políticos del país. A ello sumó media docena de consignas (“dolarización”, “libertad”, “fin del Banco Central”), sobre las que se dieron pocas explicaciones, y construyó la exitosa campaña que lo llevó a la Casa Rosada. </p>
<p>La comprensión de este fenómeno requiere una compresión aún no disponible de una <a href="https://theconversation.com/crise-economica-e-fenomeno-eleitoral-imprevisivel-fazem-desta-eleicao-a-mais-importante-dos-ultimos-40-anos-na-argentina-217983">serie de transformaciones en curso en la sociedad argentina</a>, que van desde los cambios operados por la comunicación en la era de internet hasta el avance de la precariedad laboral y la marginación de grandes contingentes de la población de los mercados y las redes formales de protección estatal.</p>
<p>En este sentido, hay que reconocer que Milei demostró una mayor capacidad de lectura de la coyuntura que sus adversarios. Entendió que el cansancio con el Gobierno no se representaría en fórmulas gradualistas, como las propuestas por la coalición <a href="https://www.cnnbrasil.com.br/internacional/eleicoes-na-argentina-saiba-mais-sobre-a-coalizao-juntos-por-el-cambio/">Juntos por el Cambio</a>, y dejó espacio para aceptar una propuesta de terapia de choque, como la que anunció ayer en su discurso de victoria.</p>
<p>En este sentido, la <a href="https://www.infobae.com/economia/2023/11/19/la-dolarizacion-que-quiere-javier-milei-como-es-la-principal-propuesta-economica-del-presidente-electo/">propuesta de dolarización</a> de la economía demostró ser acertada desde el punto de vista electoral al generar el apoyo de los votantes más jóvenes, que no tienen el recuerdo de la experiencia del colapso de los años 90 del pasado siglo y sienten directamente los impactos de una economía estancada justo cuando entran en el mercado laboral. Al mismo tiempo, la idea resuena positivamente entre los segmentos de las clases media y alta, nostálgicos de los días de “<a href="https://www.lanacion.com.ar/economia/vuelve-el-deme-dos-nid125610/">dame dos</a>”, a pesar del coste político que conlleva. </p>
<p>Al mismo tiempo que debemos ampliar nuestros esfuerzos para comprender las raíces de este resultado, debemos reflexionar sobre sus implicaciones a partir de ahora. Por significativa que sea la victoria de Milei, representaba un reto menos importante que los que se le plantean al presidente electo a partir del 10 de diciembre. </p>
<h2>“El cambio tiene que ser drástico, sin término medio”</h2>
<p>El propio Milei parece ser consciente de que su programa es menos factible de lo que hizo ver durante la campaña. Durante su discurso de victoria, Milei no hizo ninguna referencia a la dolarización o a la abolición del Banco Central, pero dejó claro que el camino que pretende seguir es el de la terapia de choque, afirmando que “<a href="https://www.poder360.com.br/internacional/leia-a-integra-do-1o-discurso-de-milei-depois-de-eleito/">Los cambios que necesitamos son drásticos</a>. No hay lugar para el gradualismo, no hay lugar para el término medio”.</p>
<p>La aplicación de esta agenda de choque representa una <a href="https://www.metropoles.com/mundo/inflacao-congresso-desafios-milei">operación políticamente muy compleja</a>. Aprobar leyes y proyectos que requieren mayoría cualificada exigirá acuerdos con sectores del peronismo, pero el <a href="https://www.correiobraziliense.com.br/mundo/2023/11/6657793-milei-veja-propostas-e-desafios-do-novo-presidente-argentino.html">desafío</a> no termina allí. La adopción de una terapia de choque suele producir efectos muy costosos en términos de empleo e ingresos, lo que podría desatar olas de protestas que pongan en riesgo la ya difícil gobernabilidad del país. En este contexto, la sostenibilidad política de Milei dependerá de la construcción de una red de apoyo que vaya más allá de <a href="https://www.cartacapital.com.br/mundo/entenda-o-cenario-que-milei-presidente-eleito-da-argentina-deve-encontrar-no-congresso/">los votos en la Cámara y el Senado</a>, y que también se haga notar en las calles. </p>
<h2>La expectativa de moderación, como con Trump y Bolsonaro, puede no suceder</h2>
<p>Hasta qué punto Milei podrá hacer estas políticas sin perder su legitimidad antisistema es una incógnita. Otra cuestión abierta, y potencialmente más grave, se refiere al impacto de la presidencia de Milei sobre las instituciones democráticas argentinas. Por el momento, en los círculos tradicionales del país parece existir la expectativa de que el presidente electo será moderado, contenido por el peso del cargo, y que su tono virulento es más un discurso de candidato que una expresión de temperamento. </p>
<p>Sin embargo, una de las lecciones que cabe extraer de las experiencias de Donald Trump y Jair Bolsonaro es que las expectativas de moderación se ven frustradas por los políticos de extrema derecha. La idea de que el Partido Republicano o las Fuerzas Armadas contendrían a Trump y Bolsonaro, respectivamente, no solo era errónea, sino que lo que vimos fue una radicalización de estos actores. </p>
<h2>ADN autoritario</h2>
<p>Negar el ADN autoritario del proyecto de Milei, como ha hecho la derecha tradicional argentina, es cerrar los ojos ante lo evidente para evitar enfrentar las propias contradicciones. En el comité de campaña, los carteles con el rostro de Milei iban acompañados de la frase “la única solución”. Ahora, si una figura dice ser la única solución a los problemas del país, todos los que se oponen a esa solución se convierten automáticamente en parte del problema. </p>
<p>Cómo piensa afrontar este escenario el nuevo presidente argentino es algo que pronto sabremos, pero las pistas que ofrecen Milei y la historia del país sugieren que la vibrante capacidad de movilización que distingue a la sociedad argentina puede ser más necesaria que nunca.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/218266/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Matheus de Oliveira Pereira no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>Milei ganó en 20 de las 23 provincias del país. Cansados de más de una década de estancamiento económico, los argentinos eligieron a un ultraliberal radical, que tendrá que articularse sin perder su legitimidad “antisistema”.Matheus de Oliveira Pereira, Pesquisador do INCT – INEU e do GEDES, Universidade Estadual Paulista (Unesp)Licensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/2174862023-11-20T18:22:50Z2023-11-20T18:22:50ZArgentina ante el experimento libertario de Javier Milei<p>Pocas veces una elección presidencial en América Latina ha llamado tanto la atención en el resto del globo, pero <a href="https://theconversation.com/argentina-del-kirchnerismo-a-la-utopia-libertaria-212417">la irrupción de Javier Milei y su proyecto libertario</a> ha concentrado la mirada de políticos y comentaristas a nivel mundial. </p>
<p>Hasta hace poco tiempo, la imagen del ahora presidente electo argentino se había definido gracias a <a href="https://www.youtube.com/watch?v=7qquOUHBZZk">sus histriónicas apariciones en televisión</a> y sus mítines donde <a href="https://www.youtube.com/watch?app=desktop&v=coJ1kX2aHA0">emulaba a una estrella de rock</a>, así como por <a href="https://www.youtube.com/watch?v=mQ30YStCTMg">sus declaraciones sobre el papa</a> o sobre el replanteamiento de las relaciones comerciales de Argentina. Sin embargo, ahora <a href="https://www.bbc.com/mundo/articles/c162nekk4wwo">ya electo como presidente</a>, tendrá que dialogar y quizás rebajar el perfil rompedor que le ha caracterizado.</p>
<p>Desde los buenos resultados obtenidos por el proyecto de Milei y su partido, La Libertad Avanza, en las elecciones primarias del pasado agosto, se empezó a crear una gran expectativa alrededor del nuevo <em>outsider</em> que con un discurso libertario ofrecía solución a la inflación rampante, la corrupción y el crecimiento de la delincuencia en un país que aún recuerda que a finales del siglo XIX fue la primera potencia económica a nivel mundial. </p>
<p>Los últimos 20 años han transcurrido para los argentinos entre el discurso kirchnerista que llegó al poder en medio del llamado <a href="https://revistaei.uchile.cl/index.php/REI/article/view/57270/60999">giro a la izquierda</a>, durante el cual se vieron encumbrados líderes como Hugo Chávez, Rafael Correa o Evo Morales. Con Alberto Fernández y la expresidenta y exprimera dama Cristina Fernández, los últimos cuatro años han significado <a href="https://elordenmundial.com/argentina-historia-crisis-economia-politica/">un progresivo deterioro de la situación socioeconómica</a> para los argentinos.</p>
<h2>Bajo el umbral de pobreza</h2>
<p>De acuerdo con <a href="https://www.indec.gob.ar/uploads/informesdeprensa/eph_pobreza_09_2326FC0901C2.pdf">el último informe del INDEC</a>, un 40 % de los argentinos vive actualmente bajo el umbral de pobreza, y un 6,8 % de los hogares está debajo del umbral de indigencia. Pese a todo, el ministro de Economía del actual gobierno, Sergio Massa, consiguió abrirse paso hasta el balotaje –segunda vuelta– y conseguir un 44 % de los votos. Para ello contó con el apoyo del aparato estatal y el peronismo argentino, que define la identidad política de amplios sectores de la sociedad que aún recuerdan las políticas laborales y sociales impulsadas por Juan Domingo Perón. Pese a la tradición peronista del país, los votantes han dado la espalda al proyecto de Massa y se han apuntado a la corriente antioficialista latinoamericana.</p>
<p>Antiguamente, en los mapas se colocaba la frase latina <em>Hic sunt dracones</em> –“encontrarás dragones”– para indicar las tierras aún sin explorar, y Argentina parece ir precisamente allí. Aunque el discurso mayoritario en los medios de comunicación internacionales ha incidido en el riesgo que representaba confiar en Milei para reconducir el rumbo del país, es necesario recordar que la otra opción representaba la continuidad de las políticas que han desestabilizado Argentina en los últimos años. Las promesas del presidente electo han sido tachadas de radicales, aunque queda por ver hasta qué punto estas son realizables.</p>
<h2>Críticas al papa Francisco y a China</h2>
<p>Quizá uno de los momentos más llamativos de Milei en los medios fue cuando llamó al papa Francisco “enviado del maligno” allá por 2016. Esto ha vuelto a cobrar relevancia después de que <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Archivo:Alberto_Benegas_Lynch_(h).jpg">Alberto Benegas Lynch</a>, mentor del proyecto de Milei, indicara en el acto de cierre de campaña para la primera vuelta de las elecciones que <a href="https://www.rtve.es/play/videos/telediario/milei-contra-papa-francisco-argentina-elecciones/6994816/">Argentina debería romper relaciones con el Vaticano</a> por considerar que el papa es autoritario, aunque esto fue matizado posteriormente por el presidenciable. </p>
<p>De igual manera, Milei también indicó que como presidente de la nación no promovería las relaciones con China por ser un país comunista, pese a ser el segundo socio comercial más importante del país. Después de conocerse los resultados del balotaje, <a href="https://www.youtube.com/watch?v=uesfSKWHsW8">el gobierno chino felicitó a Milei</a> y resaltó su voluntad de “trabajar con Argentina para proseguir la amistad”.</p>
<h2>El importante papel de Macri</h2>
<p>El triunfo de Javier Milei debe entenderse no solo como una respuesta ante la crisis que vive el país, sino también como el triunfo de la apuesta del expresidente Mauricio Macri, cabeza de la coalición Juntos por el Cambio (JxC), para esta segunda vuelta. </p>
<p>Tras quedar Patricia Bullrich en tercer lugar en la primera vuelta de las elecciones, la coalición liberal-conservadora dio su apoyo al proyecto de Milei, tanto que <a href="https://www.youtube.com/watch?v=DxLZeW56vKE">en su discurso tras la victoria</a> del domingo el presidente electo agradeció el apoyo de Macri, Bullrich y de los fiscales de JxC. El corto recorrido del proyecto político de La Libertad Avanza ha impedido que tenga una implantación profunda y sólida en los territorios, lo cual se ve mejor al considerar que solo cuenta con siete senadores de 72 y 40 diputados de un total de 247 en la Cámara Baja, por lo que el apoyo de Macri, Bullrich y su coalición es vital para la gobernabilidad de Argentina.</p>
<p>El alarmismo alrededor del candidato ha llevado a muchos a tildar al presidente electo de totalitario o ultraderechista, aunque estos adjetivos no definan el libertarianismo que abandera Milei. Pese a que durante la campaña electoral dejó llamativas y alarmantes declaraciones, su dependencia del centro derecha para gobernar Argentina invita a pensar que su gobierno será más moderado de lo que se pudo haber pensado.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/217486/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Juan Diego Molina Méndez no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>La dependencia del centro derecha para gobernar Argentina lleva a pensar que el gobierno de Javier Milei será más moderado de lo que se creía. Sin embargo, muchas de sus promesas parecen irrealizables mientras un 40 % de la población vive bajo el umbral de la pobreza.Juan Diego Molina Méndez, Investigador del Instituto Cultura y Sociedad, Universidad de NavarraLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/2162152023-10-24T17:48:43Z2023-10-24T17:48:43ZEl sorprendente giro en las elecciones argentinas da ventaja al peronista Massa<p>Las predicciones electorales no siempre se cumplen. No son oráculos, tal y <a href="https://efe.com/mundo/2023-10-23/elecciones-generales-argentina/">como acabamos de constatar de nuevo en las elecciones presidenciales en Argentina</a>. <a href="https://theconversation.com/argentina-del-kirchnerismo-a-la-utopia-libertaria-212417">El candidato ultraliberal, Javier Milei, que partía como favorito</a>, se ha visto superado por el actual ministro de Economía, Sergio Massa, que promete ahora un Gobierno de unidad nacional. Entre tanto, Patricia Bullrich, representante del partido conservador de Juntos por el Cambio, y defensora del orden y la seguridad ciudadana, ha quedado descartada. No pasará a la segunda vuelta, aunque el valor de sus votos pueda resultar al final relevante. </p>
<p>A lo largo de toda la campaña electoral <a href="https://theconversation.com/argentina-inflacion-descontrolada-e-incertidumbre-economica-200457">la situación económica</a> ha sido el tema estrella y recurrente, habida cuenta de que la <a href="https://efe.com/economia/2023-10-19/una-economia-en-estado-terminal-el-critico-escenario-de-las-presidenciales-argentinas/">creciente devaluación del peso</a> respecto del dólar se ve acompañada de una tasa de inflación galopante (140 %), al tiempo que la tasa de pobreza es superior al 40 % de la población y la deuda internacional adquiere dimensiones delirantes. </p>
<p>Sin embargo, a pesar de convivir con una crisis económica lacerante, el peronismo gubernamental, que parecía moribundo, ha mostrado su vitalidad remontando contra pronóstico a la primera posición. </p>
<p>Y esto sucede después de haber sufrido la peor derrota de su historia en las primarias del mes de agosto. No cabe duda de que los psiquiatras y psicoanalistas del país <a href="https://www.aperturas.org/articulo.php?articulo=0001203">tienen trabajo por delante</a>.</p>
<p>En cierto modo podría decirse que <a href="https://dialnet.unirioja.es/servlet/libro?codigo=20703">las dinámicas de poder y sus estrategias</a> son tan opacas para los votantes como eficientes para quienes las diseñan y ejecutan. Tal y como afirmaba con insistencia <a href="https://dialnet.unirioja.es/servlet/libro?codigo=112376">Michel Foucault</a>, “la historia de las luchas por el poder, y en consecuencia, las condiciones reales de su ejercicio y de su sostenimiento, sigue estando casi totalmente oculta. El saber no entra en ello: eso no debe saberse”.</p>
<h2>Alianzas electorales</h2>
<p>Todavía es pronto para conocer los acuerdos y posibles alianzas que irán trenzándose de cara a la próxima consulta. En principio, ninguna opción puede descartarse. Sergio Massa, abogado de profesión, más que técnico, es un hombre dialogante y muy pragmático, posibilista. Curtido desde hace décadas en la arena política, y consciente de que las ilusiones necesitan aliento y esperanza, defiende que lo peor para el país ha pasado ya. </p>
<p>Ha obtenido el 37 % de los votos, aunque en estas elecciones ha contado con el valioso apoyo del conurbano de Buenos Aires –los distritos que rodean la capital que celebraban elecciones provinciales–, feudo habitualmente peronista.</p>
<p>A partir de su dilatada experiencia política, Massa intentará atraer los votos del resto de partidos, entre otros del sector más moderado de Juntos por el cambio, promoviendo un gobierno de unidad nacional. Sin embargo, no le va a resultar fácil alcanzar los apoyos necesarios para erigirse en ganador. </p>
<h2>Candidato disruptivo</h2>
<p>Por su parte, el líder ultraderechista, Javier Milei, ha pasado en dos años de ser un tertuliano polémico, histriónico a veces en programas de televisión con proyectos disolutivos que parecían disparatados, a convertirse en un candidato con posibilidades de erigirse el próximo 19 de noviembre en el presidente de Argentina. </p>
<p>Tal vez, como afirmaba G. Orwell, “la cordura no depende de las estadísticas”. Aunque contaba con viento a favor, según las encuestas, ha cosechado el mismo número de votos que en las primarias de agosto. </p>
<p>Durante toda la campaña electoral, el economista Milei, líder del partido La Libertad Avanza, se ha mostrado capaz de atraer el voto del hartazgo y la desesperación de los ciudadanos. Negacionista del cambio climático y apologista de la dictadura militar, había llegado al Congreso de la mano de la ultraderecha en noviembre de 2021. </p>
<p>Su modelo político y económico, de carácter ultraliberal, gira en torno a la reducción del Estado a su mínima expresión. Defiende que ese es el único camino para recortar el gasto de la política y el déficit fiscal, y se aferra a ese argumento como un náufrago a su tabla de salvación. Para Milei, radical y populista, muy seguido entre los jóvenes a través de las redes sociales, los políticos hacen sus negocios a cuenta del Estado y <a href="https://www.youtube.com/watch?v=lkBVROobfYY">se dedican a robar al ciudadano a través de los impuestos</a>. </p>
<p>No obstante, a partir de ahora es previsible que ese discurso provocador, y a veces iracundo, del candidato anarcocapitalista, sufrirá una metamorfosis ostensible. Será generoso con sus olvidos y se mostrará integrador tendiendo la mano a sus adversarios. En las próximas semanas asistiremos probablemente <a href="https://www.scielo.br/j/vh/a/QPDVbwpWtVcGV7bwyFr6DgP/?lang=es">a juegos de lenguaje y gestos contorsionistas. También de prestidigitación</a>. </p>
<p>Aunque no sea católico practicante y arremeta en sus mítines contra el papa Francisco, tal vez recuerde, entre otras cosas, que París bien vale una misa. Será el momento de comprobar hasta dónde llegan sus principios y firmes convicciones de las que venía haciendo alarde con vehemencia.</p>
<p>En cualquier caso, es evidente que si no comete errores de calado, Javier Milei cuenta con posibilidades de ganar las elecciones. De momento, resulta difícil imaginar que los votos del partido conservador se decanten por el candidato del partido peronista y del kirchnerismo, su principal antagonista político.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/216215/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Francisco Javier Blázquez Ruiz no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>En contra de todas las previsiones, el peronismo remonta en las elecciones celebradas en Argentina el pasado 22 de octubre. Sergio Massa intentará tejer alianzas, pero no lo tendrá fácil. El discurso radical de Javier Milei es posible que gire hacia la calma de cara a la segunda vuelta de noviembre.Francisco Javier Blázquez Ruiz, Catedrático de Filosofía del derecho. Bioética e Inteligencia artificial, Universidad Pública de NavarraLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/2152032023-10-06T17:32:29Z2023-10-06T17:32:29ZNarges Mohammadi gana el Nobel de la Paz en nombre de miles de mujeres iraníes<p>Narges Mohammadi, destacada defensora iraní de los derechos de la mujer, ha sido galardonada con el Premio Nobel de la Paz 2023 por su larga lucha contra la opresión de las mujeres en Irán. Mohammadi cumple varias condenas en la prisión de Evin, en Teherán, acusada, entre otros cargos, de difundir propaganda contra el Estado. Fue <a href="https://www.nobelprize.org/prizes/peace/2023/press-release/">distinguida por el comité</a> por “su lucha contra la opresión de las mujeres en Irán y su lucha por promover los derechos humanos y la libertad para todos”. </p>
<p>El premio llega en un momento en que las mujeres de Irán y de todo el mundo siguen protestando por el trato que reciben en el país tras la muerte de <a href="https://theconversation.com/mahsa-amini-a-year-into-the-protest-movement-in-iran-this-is-whats-changed-212661">Mahsa Amini</a>, quien se encontraba bajo custodia de la policía de moralidad por violar supuestamente el código de vestimenta femenino de la República Islámica.</p>
<p>Según el comité: “El lema adoptado por las manifestantes –"Mujer-Vida-Libertad”– expresa adecuadamente la dedicación y el trabajo de Narges Mohammadi".</p>
<p>El hecho de que las protestas por la Libertad de la Mujer y la Vida hayan perdurado tanto tiempo frente a la represión del Estado iraní es de por sí notable. Este año, que ha vivido la última oleada de batallas libradas por las mujeres contra el autoritarismo religioso, parece estar provocando un cambio sin precedentes en las décadas de lucha contra uno de los regímenes más represivos de la historia moderna.</p>
<p>Tras la revolución de 1979 en Irán, los clérigos islámicos dirigidos por <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Ruhollah_Jomein%C3%AD">el ayatolá Ruhollah Jomeini</a> se hicieron con el control del gobierno. El régimen introdujo rápidamente una serie de leyes opresivas <a href="https://www.jstor.org/stable/pdf/162994.pdf">destinadas específicamente a las mujeres</a>. Pero a pesar de la <a href="https://women.ncr-iran.org/2020/11/22/violence-against-women-in-iran/">violencia dirigida contra ellas</a>, continuaron al frente de las protestas.</p>
<p>Narges Mohamaddi se unió a la lucha como estudiante a principios de la década de 1990. Tras licenciarse en física y trabajar como ingeniera, empezó a defender los derechos de la mujer y a escribir columnas en periódicos reformistas. </p>
<p>Fue detenida por primera vez en 1998 <a href="https://iliberty.org.uk/wp-content/uploads/2016/07/Narges-Mohammadi.pdf">por sus críticas al gobierno iraní</a>. En 2003 ya trabajaba en el Centro de Defensores de los Derechos Humanos de Teherán, creado por Shirin Ebadi, galardonada con el Premio Nobel de la Paz de ese año, siendo la primera mujer del mundo islámico en <a href="https://www.nobelprize.org/prizes/peace/2003/ebadi/facts/">recibir el galardón</a>.</p>
<p>Mohammadi ha sido detenida 13 veces y condenada en cinco ocasiones a un total de <a href="https://www.nobelprize.org/prizes/peace/2023/press-release/">31 años de prisión y 154 latigazos</a>. Fue encarcelada en la prisión más conocida de Teherán en 2022, cuando las protestas de Mujer-Vida-Libertad comenzaron a tener reconocimiento mundial. </p>
<p>Mohammadi organizó acciones solidarias con otras reclusas y fue castigada por las autoridades prohibiéndole las visitas y las llamadas telefónicas. A pesar de ello, consiguió sacar a escondidas un artículo que escribió para el <a href="https://www.nytimes.com/2023/09/16/opinion/narges-mohammadi-iran-women.html"><em>New York Times</em></a>, que se publicó en septiembre de 2023 con el siguiente titular: “Cuanto más nos encierran, más fuertes nos hacemos”.</p>
<h2>Las voces de las mujeres se alzan en protesta</h2>
<p>Los movimientos liderados por mujeres han sido a menudo eficaces para forzar el cambio democrático. Los ejemplos son abundantes a lo largo de la historia. </p>
<p>En Argentina, en los últimos años, el movimiento <em>#NiUnaMenos</em>, <a href="https://www.opensocietyfoundations.org/voices/the-womens-movement-is-leading-reform-in-argentina">que busca justicia por los femicidios</a>, llevó en 2019 directamente a la creación por parte del gobierno del presidente Alberto Fernández de un nuevo Ministerio de la Mujer, Género y Diversidad.</p>
<p>Las mujeres han ocupado un lugar destacado en el movimiento por los derechos en Chile, tanto antes como después de la <a href="https://en.wikipedia.org/wiki/Military_dictatorship_of_Chile">dictadura de Pinochet</a>. El actual movimiento feminista, que reclama el derecho al aborto, ha sido fuertemente influenciado por <em>#NiUnaMenos</em>. </p>
<p>Como resultado de sus demandas, se incluyeron protecciones legales para el aborto en una nueva constitución que se <a href="https://www.reuters.com/world/americas/chile-abortion-debate-gets-key-place-constitution-redraft-2022-03-16/">preparó en 2022</a> para sustituir a la constitución establecida bajo el régimen de Pinochet. En septiembre de 2022, un plebiscito rechazó la nueva redacción constitucional, pero las mujeres siguen batallando <a href="https://www.reuters.com/world/americas/chile-voters-sour-right-wing-constitution-abortion-clause-stirs-debate-2023-10-06/">mientras continúa el debate</a>.</p>
<h2>Mujer-Vida-Libertad</h2>
<p>Mientras tanto, las iraníes siguen marchando por sus derechos. Un año después de que el movimiento cobrara vida, sigue siendo imposible predecir si tendrá éxito frente a la salvaje represión del clero y sus partidarios conservadores. </p>
<p>Pero la sensación de invencibilidad del régimen –y la marginación de las mujeres de la política– se ha visto seriamente puesta en duda. Aunque los servicios de seguridad intenten reprimir a los manifestantes, la lucha continuará. </p>
<p>Incluso si las protestas no conducen al colapso del régimen, las voces femeninas que exigen libertad de expresión, autonomía corporal y compromiso político pueden haber <a href="https://www.hrw.org/news/2023/06/26/unveiling-resistance-struggle-womens-rights-iran">cambiado ya el panorama social y político</a> en Irán. </p>
<p>El jurado del Premio Nobel ha reconocido la labor de Narges Mohammadi durante 30 años de lucha. Pero ha <a href="https://www.nobelprize.org/prizes/peace/2023/press-release/">dejado claro</a> que el premio es también para los “cientos de miles de personas que, el año anterior, se manifestaron contra las políticas de discriminación y opresión del régimen teocrático contra las mujeres”.</p>
<p>Las voces de las mujeres se están convirtiendo en una seria amenaza para la legitimidad de la teocracia iraní. Los escépticos pueden decir que en el pasado el régimen siempre ha utilizado con éxito la violencia y la censura para silenciar las protestas. Pero esta nueva oleada de protestas ha resonado en todo el mundo, elevando el perfil de la lucha de las mujeres en las calles de las ciudades iraníes y animando a las mujeres de todo el planeta a luchar por sus propios derechos y libertades.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/215203/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Hind Elhinnawy no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>El comité del premio Nobel dijo que Narges Mohammadi representaba la lucha de muchos miles de mujeres valientes que luchan por sus derechos.Hind Elhinnawy, Senior Lecturer, School of Social Sciences, Nottingham Trent UniversityLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/2124172023-08-31T18:55:29Z2023-08-31T18:55:29ZArgentina: ¿del kirchnerismo a la utopía libertaria?<p>Algunos países de América Latina parecen abocados a una permanente búsqueda de un mesías, un salvador que por fin los encarrile en la senda de la prosperidad y la paz. Desde la época de las independencias los experimentos han sido de lo más variopintos, desde líderes nacionalistas, pasando por comunistas, socialistas, liberales… y ahora en Argentina ha surgido una figura que abraza los principios libertarios. El <a href="https://www.bbc.com/mundo/articles/crgngkd27zqo">triunfo</a> de <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Javier_Milei">Javier Milei</a> en las primarias argentinas ha supuesto un enorme <em>shock</em> en una sociedad que se ha definido por ese peronismo que han abanderado los Kirchner y sus aliados desde hace dos décadas.</p>
<p>El éxito de Milei responde al agotamiento de la sociedad argentina ante el crecimiento desmesurado del gasto estatal, la inflación desbordada y el fortalecimiento del crimen organizado y el narcotráfico. </p>
<p>Las propuestas del candidato peronista Sergio Massa y de Patricia Bullrich, candidata de <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Juntos_por_el_Cambio">Juntos por el Cambio</a>, representan en este momento la continuidad de un modelo de acción del Estado que no ha podido mejorar las condiciones de vida de los argentinos. </p>
<p>Por su parte, Javier Milei se presenta por el partido <a href="https://lalibertadavanza.com.ar/">La Libertad Avanza</a>, que se define de ideología libertaria y centra sus propuestas en la reducción del Estado, la dolarización de la economía y la eliminación del Banco Central como forma de acabar con la inflación. </p>
<h2>Cuanto menos Estado, mejor</h2>
<p>Estas políticas responden al ideario clásico libertario ya que, según Milei, “el Estado solo debe proteger la vida, la libertad y la propiedad y no entrometerse en la vida de las personas”.</p>
<p>La propuesta de reducir el aparato estatal, según el candidato presidencial, se debe a que la idea de <a href="https://www.pagina12.com.ar/578531-que-se-vayan-todos-la-bandera-ganadora-de-milei">justicia social</a>, con la que se fundamenta el cobro de impuestos y la entrega de subsidios por parte del Estado, es una aberración porque es un robo. </p>
<p>Siguiendo esta línea, en la presentación de su plan de gobierno Milei indicó que aspira a que en Argentina se llegue a eliminar toda la asistencia social, es decir, los programas públicos de salud, de educación, trabajo, vivienda, etc. para dejar estas áreas en manos de la iniciativa privada que, según él, entregaría los servicios de una manera más eficiente.</p>
<p>Asimismo, la labor que hoy realizan los ministerios de Salud, Educación y Trabajo quedaría dentro de una sola entidad llamada Ministerio de Capital Humano.</p>
<p>Todas estas propuestas han atraído a un 30 % del electorado argentino gracias a su radicalidad y la aparente respuesta que estas serían para la crisis en la que está sumida este país latinoamericano. </p>
<p>El planteamiento de que la iniciativa privada puede responder mejor a las necesidades de las personas no es nada nuevo. La diferencia con la propuesta de Milei estriba en la eliminación de las regulaciones que existen aún en los países con economías más abiertas. Sin duda, la aplicación del programa de gobierno de La Libertad Avanza en su totalidad representaría un <em>shock</em> que podría dejar a las personas más desfavorecidas sin el amparo de la justicia social.</p>
<p>Pese a que la teoría libertaria indica que la eliminación del Estado y las regulaciones haría más libres a los argentinos, es necesario preguntarse qué tipo de libertad es la que propugna Milei. </p>
<h2>Filosóficamente anarquista</h2>
<p>Sus numerosas apariciones en los medios argentinos son un buen material para comprender sus ideas básicas: “Yo soy filosóficamente anarquista, pero en la vida real soy minarquista”. Ese anarquismo al que se adscribe el candidato busca dejar todos los aspectos de la vida en sociedad al albur de la iniciativa privada, sin que existan regulaciones o entes que velen por el interés de la sociedad, porque, según esa doctrina, el mercado hará que todas las necesidades queden cubiertas. </p>
<p>Ahora bien, el <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Minarquismo#:%7E:text=El%20t%C3%A9rmino%20quiz%C3%A1s%20es%20m%C3%A1s,una%20violaci%C3%B3n%20de%20la%20libertad">minarquismo</a> que Milei dice defender en la vida real es una variación de los principios libertarios por la que el Estado sí que tendría un rol garantizando la seguridad y la justicia, protegiendo así la propiedad privada, la vida y la libertad.</p>
<p>En un guiño a sus votantes más conservadores, el presidenciable libertario también se ha definido como provida, aunque aquí vale la pena detenerse porque a la vez también ha propuesto que la donación de órganos se convierta en un mercado más. </p>
<h2>En manos del mercado</h2>
<p>Según dijo Milei en una tertulia con el periodista Luis Majul, de esta forma no se estaría obligando a nadie a vender sus órganos, pero se abriría la posibilidad de que cualquiera pudiera vender uno de sus miembros sin que nadie pueda oponerse, porque, de acuerdo a la idea de libertad que maneja, nadie puede oponerse a lo que cada uno quiera hacer con su cuerpo. </p>
<figure>
<iframe width="440" height="260" src="https://www.youtube.com/embed/_dB660NxZQQ?wmode=transparent&start=0" frameborder="0" allowfullscreen=""></iframe>
</figure>
<p>Así, aunque Milei se define como provida, cabe preguntarse a favor de qué vida está si la integridad de las personas se pone en manos de la oferta y la demanda.</p>
<p>El fin de la política es la creación de las condiciones necesarias en la sociedad para que las personas puedan vivir y desarrollarse plenamente, y la idea de libertad que abandera Javier Milei establece que esto se puede alcanzar mediante la anulación de toda regulación, dejando la provisión de los servicios básicos, los bienes e incluso la vida en las manos de la libre competencia. </p>
<p>Pero ¿qué plenitud puede alcanzar una persona en un sistema en el que todo, incluso su integridad, queda expuesto al albur de mercados desregulados?</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/212417/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Juan Diego Molina Méndez no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>El pensamiento de Javier Milei, el nuevo fenómeno de la política argentina, es un extraño cóctel en el que se agitan el libertarismo, el liberalismo, el anarquismo, y una postura provida como guiño al electorado conservador.Juan Diego Molina Méndez, Investigador del Instituto Cultura y Sociedad, Universidad de NavarraLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/2111512023-08-08T08:32:00Z2023-08-08T08:32:00ZUna de las olas de calor más extremas de 2023 se está produciendo en pleno invierno austral<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/541508/original/file-20230807-26178-6usu56.png?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C2%2C1920%2C1063&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Anomalía de la temperatura el miércoles 2 de agosto de 2023. Las zonas rojas de Chile y el norte de Argentina son mucho más calurosas que la media a largo plazo para esta época del año.</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://climatereanalyzer.org/clim/t2_daily/">ClimateReanalyzer.org</a>, <a class="license" href="http://creativecommons.org/licenses/by-sa/4.0/">CC BY-SA</a></span></figcaption></figure><p>Las temperaturas en algunas zonas de Chile y el norte de Argentina se han disparado hasta <a href="https://twitter.com/extremetemps/status/1686485331539820545">10 °C-20 °C por encima de la media</a> en los últimos días. Las ciudades de la cordillera de los Andes han alcanzado los <a href="https://twitter.com/extremetemps/status/1686535219350806528">38 °C o más</a>, mientras que en la capital argentina, Buenos Aires, se registraron temperaturas <a href="https://www.ctvnews.ca/world/a-scorching-winter-argentina-s-capital-breaks-record-for-hottest-start-to-august-in-117-years-1.6503065">superiores a los 30°C</a>, superando en más de 5 °C su anterior récord de agosto. En la ciudad de <a href="https://twitter.com/SMN_Argentina/status/1687079796692398080">Rivadavia</a> se alcanzaron temperaturas máximas de 39 °C. </p>
<p>Hay que tener en cuenta que estamos en pleno invierno en esta parte del mundo. Y está lo suficientemente al sur como para que las variaciones estacionales tengan un impacto sustancial en las temperaturas. Buenos Aires, por ejemplo, está tan al sur como Japón, el Tíbet o Tennessee al norte. </p>
<p>En términos de desviación de las temperaturas que cabría esperar en un determinado lugar y época del año, esta ola de calor es comparable, si no mayor, que las recientes olas de calor en <a href="https://theconversation.com/european-heatwave-whats-causing-it-and-is-climate-change-to-blame-209653">el sur de Europa</a>, Estados Unidos y China. En Vicuña, una de las ciudades de los Andes chilenos que recientemente alcanzó los 38 °C, un día típico de agosto podría ser de <a href="https://weatherspark.com/y/26539/Average-Weather-in-Vicu%C3%B1a-Chile-Year-Round">18 °C más o menos</a> –imagínese que hace 20 °C más de lo normal dondequiera que esté ahora–.</p>
<p>No es de extrañar que algunos climatólogos ya hayan sugerido que ésta podría ser <a href="https://twitter.com/ClimateDann/status/1687032987135725569">una de las olas de calor más extremas jamás registradas</a>.</p>
<h2>¿Qué está causando el calor extremo?</h2>
<p>Durante los últimos seis días, una persistente zona de altas presiones, o anticiclón, ha permanecido al este de los Andes. También conocida como “alta de bloqueo”, parece ser la principal causa del intenso calor. </p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/541258/original/file-20230804-25-f3znn9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="Mapa anotado de Sudamérica" src="https://images.theconversation.com/files/541258/original/file-20230804-25-f3znn9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/541258/original/file-20230804-25-f3znn9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=409&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/541258/original/file-20230804-25-f3znn9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=409&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/541258/original/file-20230804-25-f3znn9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=409&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/541258/original/file-20230804-25-f3znn9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=514&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/541258/original/file-20230804-25-f3znn9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=514&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/541258/original/file-20230804-25-f3znn9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=514&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">El anticiclón de bloqueo que está provocando la ola de calor entre Chile y Argentina.</span>
<span class="attribution"><span class="source">GFS analysis data</span>, <span class="license">Author provided</span></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Los anticiclones de bloqueo pueden provocar olas de calor de tres formas principales. En primer lugar, atraen hacia ellos aire más cálido procedente de las proximidades del ecuador. El sistema también comprime y atrapa el aire, calentándolo, como fue el caso de la <a href="https://www.nature.com/articles/s41467-023-36289-3">ola de calor de 2021 en el noroeste del Pacífico</a>, que batió el récord canadiense de temperatura en casi 5 °C. Por último, las altas presiones hacen que haya poco aire ascendente y, por tanto, poca nubosidad. Esto permite que el sol caliente la tierra continuamente durante el día, <a href="https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0169809515001738?via%3Dihub">acumulando calor</a>.</p>
<p>Sin embargo, los científicos necesitan analizar con más detalle la meteorología de este acontecimiento sin precedentes para obtener una comprensión más completa.</p>
<h2>El Niño lo hizo más probable</h2>
<p>La ola de calor entre Chile y Argentina puede haber sido más probable debido al <a href="https://theconversation.com/asi-puede-influir-el-nino-en-el-calentamiento-global-209543">desarrollo de El Niño</a> en el océano Pacífico. Los fenómenos de El Niño, que suelen producirse cada cuatro años aproximadamente, se caracterizan por temperaturas cálidas en la superficie del mar en el Pacífico tropical central y oriental. En la actualidad, las temperaturas en el Pacífico central se sitúan <a href="https://www.metoffice.gov.uk/research/climate/seasonal-to-decadal/gpc-outlooks/el-nino-la-nina">aproximadamente 1 °C por encima de la media</a> para la época del año.</p>
<p>Estas temperaturas oceánicas más cálidas hacen que el aire flote más sobre el Pacífico central, haciendo que el aire se eleve. Esto provoca cambios en los patrones de circulación atmosférica más allá. Los cambios en la circulación atmosférica inducidos por El Niño suelen traducirse en una mayor presión y temperaturas invernales más cálidas para <a href="https://adgeo.copernicus.org/articles/22/3/2009/adgeo-22-3-2009.pdf">esta parte de Sudamérica</a>.</p>
<h2>El cambio climático lo empeoró</h2>
<p>El sistema de bloqueo que provocó el calor extremo probablemente habría dado lugar a temperaturas cálidas incluso en ausencia de cambio climático antropogénico. Sin embargo, el rápido calentamiento provocado por el cambio climático permitió que la ola de calor se haya convertido en algo realmente sin precedentes.</p>
<p>Los científicos del clima esperan ver <a href="https://www.science.org/doi/full/10.1126/sciadv.abm6860">batirse récords de temperatura</a> a medida que nuestro planeta siga calentándose. Esto se debe a que la distribución de las posibles temperaturas se está desplazando cada vez más alto.</p>
<p>Chile ya ha experimentado recientemente los efectos del cambio climático a través de una grave ola de calor en febrero – a finales del verano – que provocó varias muertes por <a href="https://apnews.com/article/wildfires-latin-america-caribbean-climate-and-environment-fires-f1eaf0919c9b9b9d1f88d60be2191d78">incendios forestales</a>, así como una <a href="https://www.theguardian.com/world/2022/jun/01/chiles-water-crisis-megadrought-reaching-breaking-point">megasequía</a> de una década de duración. Recientemente, el país <a href="https://www.climatechangenews.com/2022/09/05/gigantic-missed-opportunity-chile-rejects-green-constitution-faces-uncertainty/">rechazó</a> una nueva redacción de la Constitución que habría obligado a su gobierno a tomar medidas contra las crisis natural y climática.</p>
<h2>El impacto a largo plazo de una ola de calor invernal</h2>
<p>Las temperaturas más altas parecen haber remitido en gran medida en los Andes. Sin embargo, las temperaturas siguen siendo muy superiores a la media en el norte de Argentina, Bolivia y Paraguay, y seguirán siéndolo durante los próximos cinco días.</p>
<p>Los efectos de las olas de calor invernales son menos conocidos que los de las olas de calor estivales. Para Chile, el impacto más probable es sobre <a href="https://www.wionews.com/world/climate-change-chile-argentina-face-scorching-heat-wave-in-middle-of-winter-621920">la capa de nieve en las montañas</a>, que proporciona agua para <a href="https://earthobservatory.nasa.gov/images/150100/snow-blanket-for-the-andes">beber, la agricultura y la generación de energía</a>. El derretimiento del manto de nieve probablemente afectará también a la diversa flora y fauna de los Andes.</p>
<p>En general, esta ola de calor es un sorprendente recordatorio de cómo el ser humano está cambiando el clima de la Tierra. Seguiremos viendo estos extremos sin precedentes hasta que dejemos de quemar combustibles fósiles y de emitir gases de efecto invernadero a la atmósfera.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/211151/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Matthew Patterson recibe financiación del Natural Environment Research Council.</span></em></p>Algunas zonas de Argentina y los Andes chilenos registraron algunas de las temperaturas más altas jamás registradas.Matthew Patterson, Postdoctoral Research Assistant in in Atmospheric Physics, University of OxfordLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/2014852023-03-26T20:24:43Z2023-03-26T20:24:43ZEl Laco: el volcán más raro del mundo<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/515304/original/file-20230314-18-9oxeqm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=17%2C11%2C3976%2C2982&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Vista de el Laco (Chile)</span> <span class="attribution"><span class="license">Author provided</span></span></figcaption></figure><p>Cerca del Paso Sico, una remota frontera entre Chile y Argentina y entre las conocidas zonas de la Quebrada de Humahuaca y el Salar de Atacama, los turistas que visitan esos grandiosos paisajes ven un cerro anodino de 5 400 m reflejándose en la Laguna Tuyaito. Se trata del Cerro de El Laco, uno de los lugares geológicamente hablando más controvertidos e intrigantes de la Tierra. </p>
<h2>Rocas hechas de magnetita</h2>
<p>A finales de los años 1950 del siglo pasado, <a href="https://www.miningfoundationsw.org/Charles_Park">Charles Park</a>, profesor de yacimientos minerales de la Universidad de Stanford, describió unas coladas volcánicas formadas por<a href="https://www.mindat.org/show.php?id=2538"> magnetita</a> en un lugar remoto de los Andes. Este descubrimiento apoyaba la teoría, ya planteada por el geólogo sueco Geiger en 1910, de que rocas similares y mucho más antiguas que se explotaban en la <a href="https://en.wikipedia.org/wiki/Kiruna_mine">mina de Kiruna</a>, en Laponia, estaban formadas por la cristalización de un magma desconocido, rico en hierro. </p>
<p>La magnetita es una fuente importante de hierro y un mineral que raramente se encuentra en cantidades tan elevadas como en Kiruna o El Laco. Una fábula de <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Plinio_el_Viejo">Plinio el Viejo</a> atribuye el nombre de la magnetita al de un pastor de nombre Magnes que descubrió este mineral en el monte Ida, observando que se adhería a los clavos de su calzado.</p>
<p>El Laco es un volcán reciente, formado hace “solo” unos 2-3 millones de años, lo que significa que podemos estudiar en sus laderas unas rocas que están casi intactas. </p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/517391/original/file-20230324-22-l2ejn2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/517391/original/file-20230324-22-l2ejn2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/517391/original/file-20230324-22-l2ejn2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=450&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/517391/original/file-20230324-22-l2ejn2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=450&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/517391/original/file-20230324-22-l2ejn2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=450&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/517391/original/file-20230324-22-l2ejn2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=566&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/517391/original/file-20230324-22-l2ejn2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=566&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/517391/original/file-20230324-22-l2ejn2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=566&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Chile. En el cuerpo de Laco Sur a 4.800 m.</span>
<span class="attribution"><span class="license">Author provided</span></span>
</figcaption>
</figure>
<h2>La rareza del volcán</h2>
<p>Alrededor de este volcán clásico de los Andes hay unas coladas muy similares a las de cualquier volcán, pero algo más oscuras y con formas de erosión caprichosas. En detalle, estas coladas tienen todas las estructuras que podemos esperar en un volcán. Son coladas de lava que han descendido por la ladera, <a href="https://petroignea.wordpress.com/tiposrocosos/clasificacion/rocas-piroclasticas/">rocas piroclásticas</a> o bombas volcánicas.</p>
<p>Parecen rocas convencionales, pero no lo son: están formadas por magnetita. Es difícil percatarse de esto hasta oír el sonido metálico al impactar un martillo o acercar un imán. Con la lupa podemos también observar que la magnetita es masiva, solo tiene unas pequeñas inclusiones de <a href="https://www.mindat.org/min-1572.html">fluorapatito</a>, mineral rico en fósforo y flúor, y <a href="https://www.mindat.org/min-1294.html">diopsido</a>.</p>
<h2>Una lava inusual en la Tierra</h2>
<p>La formación de estas rocas ha suscitado un debate científico enconado. Aun hoy, más de 60 años después del descubrimiento, no hay una teoría unánimemente aceptada sobre su origen. </p>
<p>Las hipótesis sobre cómo se han podido formar unas rocas tan únicas son de lo más variado. Incluyen, junto con la <a href="https://pubs.geoscienceworld.org/gsa/geology/article-abstract/44/6/427/132097/Iron-rich-melts-magmatic-magnetite-and-superheated">hipótesis</a> <a href="https://pubs.geoscienceworld.org/canmin/article-abstract/16/4/581/11278/Crystal-growth-textures-in-magnetite-flows-and?redirectedFrom=fulltext">magmática</a>, modelos que sugieren que la magnetita <a href="https://pubs.geoscienceworld.org/segweb/books/book/1232/chapter-abstract/107025734/Geology-and-Rare-Earth-Element-Geochemistry-of?redirectedFrom=fulltext">se formó por aguas de los salares que fueron calentadas por la actividad magmática y extrajeron el hierro de las rocas volcánicas para depositarlo en la superficie</a>. O que el hierro fue transportado por agua caliente que procedía de las <a href="https://pubs.geoscienceworld.org/segweb/economicgeology/article-abstract/98/7/1501/22408/NEW-FIELD-EVIDENCE-BEARING-ON-THE-ORIGIN-OF-THE-EL?redirectedFrom=fulltext">raíces del volcán</a>. </p>
<p>Sin embargo, en los últimos años hay más evidencias geológicas y geoquímicas de que la magnetita sea una <a href="https://pubs.geoscienceworld.org/segweb/economicgeology/article-abstract/112/7/1595/516651/The-Magmatic-to-Magmatic-Hydrothermal-Evolution-of?redirectedFrom=fulltext">lava inusual</a>. </p>
<p>El mayor problema es que nadie ha visto esas lavas en la Tierra, aunque hay investigadores que hipotetizan que son frecuentes en <a href="https://agupubs.onlinelibrary.wiley.com/doi/full/10.1029/2002JE001891">Marte y otros planetas</a>. Un problema similar pasó con unas rocas muy distintas, las carbonatitas, que también son extrañas lavas compuestas por carbonatos. Hasta que no se descubrió la lava carbonatítica emergiendo del volcán <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Ol_Doinyo_Lengai">Oldoinyo Lengai (Tanzania)</a> no se cerró la polémica.</p>
<p>Si El Laco tiene coladas volcánicas de magnetita, surgen dos grandes preguntas que resolver. La primera es que la magnetita funde a unos <a href="https://en.wikipedia.org/wiki/Magnetite">1590°C</a>, una temperatura que no se registra en la corteza terrestre. Además, la temperatura máxima de los magmas que llegan a su superficie no excede los 1300°C. </p>
<h2>¿Cómo se puede fundir magnetita?</h2>
<p>Los expertos en altos hornos saben que, si añadimos unos elementos como el fósforo o el flúor al hierro, la temperatura de fusión baja enormemente, casi hasta los 700°, una temperatura ya mucho más normal en <a href="https://link.springer.com/article/10.1007/s00410-020-01751-8">volcanes</a>. </p>
<p>Pero ¿de dónde vienen esos componentes relativamente poco habituales? </p>
<p>Debajo de El Laco hay evidencia geológica de que existen <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Cordillera_de_la_Sal">grandes capas de sal depositadas en un medio marino hace entre 40 y 90 millones de años</a>. Esta relación con la sal se repite en los pocos lugares del mundo donde hay depósitos de magnetita similares. </p>
<p>Una posible explicación es que los magmas de composición más corriente (andesitas) al ascender a través de la corteza terrestre, y ya cerca de su superficie, incorporaron la sal y los fundentes que, junto con la andesita, facilitaron la formación de estos <a href="https://www.nature.com/articles/s41467-018-03761-4">magmas tan ricos en hierro</a>.</p>
<p>Restos de estas rocas se han encontrado como fragmentos arrojados por el volcán o en forma de pequeñas inclusiones dentro de la propia magnetita. Los trazadores geoquímicos también muestran que la magnetita no está químicamente relacionada con las rocas volcánicas encajantes. La composición química de las rocas ricas en magnetita <a href="https://pubs.geoscienceworld.org/segweb/economicgeology/article-abstract/112/7/1595/516651/The-Magmatic-to-Magmatic-Hydrothermal-Evolution-of?redirectedFrom=fulltext">traza la reacción de esos magmas profundos con las rocas que están encima</a>.</p>
<p>Esta inusual relación entre magmas de origen profundo y capas salinas podría explicar la rareza de estos volcanes. </p>
<p>Nadie ha visto estas lavas ni tampoco hemos visto qué es lo que sucede en las raíces de estos volcanes. Los humanos hemos llegado tarde a la contemplación de un fenómeno que, si ocurrió, debió ser de los más espectaculares de la naturaleza, con coladas de hierro fundido bajando a velocidad inusitada por las laderas del volcán y acompañadas de grandes columnas piroclásticas.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/201485/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Fernando Tornos Arroyo ha recibido fondos de la Agencia Española de Investigación y FEDER, proyecto RTI2018-099157-A-I00 (MCI/AEI/FEDER, UE).</span></em></p>El volcán El Laco es uno de los puntos más controvertidos en la geología mundial.Fernando Tornos Arroyo, Investigador, Instituto de Geociencias (IGEO - CSIC - UCM)Licensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/2004572023-02-26T20:33:25Z2023-02-26T20:33:25ZArgentina: inflación descontrolada e incertidumbre económica<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/511624/original/file-20230222-27-qw2pr6.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C22%2C3000%2C1971&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">En Argentina, la inflación ha alcanzado el 94% para el año 2022.</span> <span class="attribution"><span class="source">Rafastockbr/Shutterstock</span></span></figcaption></figure><p>Argentina no vivía una situación económica como la actual desde hacía 32 años. En 2022, registró <a href="https://www.indec.gob.ar/uploads/informesdeprensa/ipc_01_23891D383E4F.pdf">una inflación anual del 94,8 %</a>, una de las más altas del mundo.</p>
<p>El récord anterior, <a href="http://sedici.unlp.edu.ar/handle/10915/21022">establecido en 1991</a>, marcó el final de un ciclo de recesiones e hiperinflación (3 % de inflación en 1989, 2 300 % en 1990). Para combatirla, las autoridades alinearon el tipo de cambio del peso con el del dólar estadounidense sobre la base de 1 dólar = 1 peso. Esto permitió recuperar la confianza en la moneda argentina y frenar el efecto de <em>impresión monetaria</em>, es decir, la creación excesiva de dinero por parte del Banco Central, que provocaba una rápida inflación.</p>
<p>A pesar de estas medidas, <a href="https://www.perfil.com/noticias/economia/la-economia-de-argentina-medio-siglo-entre-tormentas-fluctuaciones-y-crisis.phtml">Argentina ha tenido una inflación crónica</a> durante décadas. Sus causas son tanto internas como externas y están vinculada a las crisis que han debilitado al país y obstaculizado su desarrollo.</p>
<h2>Una historia económica complicada y volátil</h2>
<p>Desde la década de 1970, el crecimiento económico de Argentina ha sido muy volátil, alternando periodos de fuerte crecimiento con periodos de crisis.</p>
<p>Esta inestabilidad es producto de los numerosos cambios de política económica introducidos por los gobiernos que se han sucedido en Argentina. Además, factores estructurales y cíclicos han impulsado la dinámica inflacionista del país. La financiación del presupuesto estatal vía creación de dinero y las inestables previsiones de inflación futura y de devaluación de la moneda han generado presiones al alza en los precios, ya que el Banco Central de la República Argentina (BCRA) <a href="https://www.cronista.com/finanzas-mercados/BCRA-la-reforma-elimina-Plan-Monetario-y-resta-poder-a-Superintendencia-de-Bancos-20120305-0041.html">abandonó, entre 2012 y 2016, su política de metas de inflación</a>.</p>
<figure>
<iframe width="440" height="260" src="https://www.youtube.com/embed/k2OTWs7OaK0?wmode=transparent&start=0" frameborder="0" allowfullscreen=""></iframe>
</figure>
<h2>Devaluación latinoamericana</h2>
<p>A finales de la década de 1990, muchas monedas latinoamericanas se depreciaron frente al dólar estadounidense; además, la <a href="https://repositorio.cepal.org/handle/11362/7482">crisis de Brasil</a>, <a href="https://www.cippec.org/textual/argentina-y-brasil-no-es-una-cuestion-de-tamano/">principal socio económico de Argentina</a>, y la caída de los precios de las materias primas afectaron a la economía del país, que sufrió varios años de recesión (de 1999 a 2002). </p>
<p>Para restablecer la confianza en la economía argentina, Buenos Aires firmó en diciembre de 2000 <a href="https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/4773251.pdf">un acuerdo con el FMI</a>. Sin embargo, el FMI dio por concluido el programa a finales de 2001, al considerar que no se estaban cumpliendo los compromisos del Gobierno argentino en materia de finanzas públicas.</p>
<p>Argentina cayó entonces en el <a href="https://policydialogue.org/files/events/Damill_Frenkel_Rapetti_LaDeuda.pdf">impago de su deuda</a> y entró en una profunda crisis política y económica. En el lapso de un mes tuvo cinco presidentes interinos, a la vez que se aplicaba el <a href="https://www.rtve.es/noticias/20211203/claves-del-corralito-del-argentina-no-se-recuperado-20-anos-despues/2235666.shtml"><em>corralito</em> financiero</a>: una medida que limitaba a 250 dólares semanales los retiros bancarios de los particulares.</p>
<p><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Crisis_de_diciembre_de_2001_en_Argentina">Tras la crisis de 2001</a>, las políticas económicas aplicadas por los presidentes de centroizquierda <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Eduardo_Duhalde">Eduardo Duhalde</a> (2002-2003) y <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/N%C3%A9stor_Kirchner">Néstor Kirchner</a> (2003-2007) se basaron esencialmente en el proteccionismo, el intervencionismo estatal y el apoyo al consumo.</p>
<p>El crecimiento económico, apoyado por el alza de los precios de las materias primas, pasó de una recesión del 10,9 % en 2002 a una media del 8,8 % entre 2003 y 2007. De hecho, Argentina es un <a href="https://www.exteriores.gob.es/Documents/FichasPais/ARGENTINA_FICHA%20PAIS.pdf">exportador neto de materias primas</a> (70 % de sus exportaciones totales de bienes), principalmente cereales y oleaginosas (alrededor del 50 % de las exportaciones totales).</p>
<p>Desde principios de la década de 2010, la economía argentina alterna un crecimiento débil con periodos de recesión. Surgen numerosos desequilibrios (tipo de cambio sobrevalorado, inflación elevada, aumento del déficit presupuestario y de la balanza de pagos, reducción de las reservas de divisas).</p>
<p>La doble crisis cambiaria de 2018 <a href="https://www.undav.edu.ar/general/recursos/adjuntos/21664.pdf">volvió a sumir al país en la recesión</a> y llevó al Gobierno del liberal Mauricio Macri a <a href="https://www.imf.org/en/News/Articles/2018/06/07/pr18216-argentina-imf-reaches-staff-level-agreement-with-argentina">solicitar un nuevo apoyo al FMI</a> (el último se remontaba a la crisis de 2001). Argentina devolvió en 2006 su último crédito a la institución, a pesar de que muchos argentinos creen que el programa del FMI fue una de las causas de la crisis de 2001.</p>
<h2>Los efectos de la pandemia</h2>
<p>La pandemia del covid-19 empeoró una situación económica ya precaria para Argentina que, en 2020, experimentó una <a href="https://www.infobae.com/economia/2021/03/23/por-el-impacto-de-la-pandemia-el-pbi-de-la-argentina-se-contrajo-un-99-en-2020/">recesión de casi el 10 %</a>. Esta caída en sus resultados económicos fue un efecto directo de las medidas de contención sobre la actividad económica, y a la disminución de los ingresos procedentes de las exportaciones agrícolas y turísticas provocadas por el confinamiento. </p>
<p>Desde entonces, la desigualdad, ya prevalente tras años de crecimiento económico errático, ha empeorado: la tasa de pobreza, en aumento desde 2017, <a href="https://www.lanacion.com.ar/economia/la-pobreza-subio-mas-de-seis-puntos-en-un-ano-y-cerro-en-42-en-2020-nid31032021/">alcanzó el 42 % en 2020</a>. Ese mismo año, la tasa de desempleo, en aumento desde 2013, llegó al 11,5 %, aunque sin alcanzar las cifras del periodo del <em>corralito</em> bancario. Entre los <a href="https://wadmin.uca.edu.ar/public/ckeditor/Observatorio%20Deuda%20Social/Presentaciones/2022/2022-OBSERVATORIO-JOVENES-VF.pdf">jóvenes de 15 a 24 años</a> la tasa es del 30,3 %.</p>
<iframe src="https://datos.bancomundial.org/share/widget?end=2021&indicators=SL.UEM.TOTL.ZS&locations=AR&start=2001&view=chart" width="100%" height="500" frameborder="0" scrolling="no"></iframe>
<p>Las medidas fiscales adoptadas para hacer frente a la crisis (aumento del gasto sanitario, transferencias financieras y apoyo económico a los hogares y sectores más afectados) incrementaron el déficit público hasta <a href="https://www.argentina.gob.ar/noticias/resultado-fiscal-diciembre-2020">el 8,6 % del PIB en 2020</a>.</p>
<p>Argentina ha vuelto a la senda del crecimiento en 2021 (10,2 %), gracias, sobre todo, a la recuperación del consumo de los hogares y las empresas, y a la subida de los precios de las materias primas.</p>
<iframe src="https://datos.bancomundial.org/share/widget?end=2021&indicators=NY.GDP.MKTP.KD.ZG&locations=AR&start=2011" width="100%" height="500" frameborder="0" scrolling="no"></iframe>
<h2>Los efectos contrapuestos de la subida de los precios de las materias primas</h2>
<p>Desde el comienzo de la guerra de Ucrania, en febrero de 2022, se ha acelerado la subida de los precios de las materias primas. Si bien esto ha favorecido el crecimiento económico de Argentina, especialmente porque, además, se ha combinado con una recuperación gradual del turismo y un paulatino retorno de la confianza internacional (gracias a la <a href="https://theconversation.com/argentina-y-el-fmi-viejos-conocidos-64-anos-y-22-acuerdos-de-refinanciacion-de-la-deuda-177415">firma del programa de ayuda del FMI</a>), también se ha sumado a las presiones inflacionistas ya existentes.</p>
<p>El FMI estima que <a href="https://www.imf.org/en/Publications/CR/Issues/2022/12/23/Argentina-Third-Review-Under-the-Extended-Arrangement-Under-the-Extended-Fund-Facility-527298">la inflación importada es elevada</a>: un aumento del 10 % en los precios mundiales de los alimentos y la energía podría generar un incremento de la inflación argentina de alrededor del 1,6 % en 12 meses, ya que estas dos partidas de gasto representan más del 30 % de la cesta de consumo de los hogares.</p>
<p>Dada la elevada inflación estructural en Argentina, el impacto de esta perturbación es particularmente importante para los hogares más pobres. Aunque <a href="https://www.indec.gob.ar/uploads/informesdeprensa/mercado_trabajo_eph_3trim22F4483A3158.pdf">la tasa de desempleo baja</a>, (7,1 % en el tercer trimestre de 2022, más de un punto por debajo que en el mismo periodo de 2021), la de pobreza se mantiene muy por encima del nivel precovid (<a href="https://www.indec.gob.ar/uploads/informesdeprensa/eph_pobreza_09_2223ECC71AE4.pdf">36,5% en el primer semestre de 2022</a>). Al mismo tiempo, el empleo informal sigue rondando el 49 %, mientras que los salarios reales se mantienen por debajo de su nivel de 2017, sin que se vislumbre una verdadera trayectoria ascendente.</p>
<h2>El nuevo programa del FMI</h2>
<p>En este complicado contexto económico, el Gobierno de <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Alberto_Fern%C3%A1ndez">Alberto Fernández</a>, elegido en 2019, llegó a un acuerdo con el FMI sobre un nuevo programa de ayudas en marzo de 2022. Este acuerdo, <a href="https://theconversation.com/argentina-y-el-fmi-viejos-conocidos-64-anos-y-22-acuerdos-de-refinanciacion-de-la-deuda-177415">el número 22</a> entre Argentina y el Fondo, no resuelve los problemas estructurales del país, sino que propone ajustes realistas, relativamente realizables y pragmáticos para estabilizar la economía.</p>
<p>La consolidación fiscal, es decir, la reducción del déficit público, es el primer punto del acuerdo y el criterio esencial para que los demás elementos del programa se concreten. Dicha consolidación fiscal permitiría limitar la financiación del déficit público mediante emisión monetaria, restablecer progresivamente la confianza en el país y comenzar, muy gradualmente, a reducir la inflación. </p>
<p>El Gobierno cuenta también con la acumulación de reservas de divisas (vía aumento de las exportaciones) para limitar la presión sobre el peso y los riesgos de devaluación.</p>
<p><div data-react-class="Tweet" data-react-props="{"tweetId":"1618008122559463424"}"></div></p>
<p>En un intento de frenar la inflación, el BCRA comenzó a endurecer la política monetaria en 2022. Así, los tipos de interés <a href="https://cdn.theconversation.com/static_files/files/2543/Argentina_tipos_2022.pdf?1677174200">subieron del 38 % en enero al 75 % a mediados de septiembre</a>. Aunque las cifras de inflación anual para 2022 son preocupantes, el índice de diciembre, del 5,1 %, es inferior al máximo de julio, cuando la inflación alcanzó el 7,4 %. </p>
<p>El Gobierno y el FMI apuestan, para 2023, por una tasa de inflación anual más controlada, en torno al 60 %, y se espera que el crecimiento se mantenga en torno al 2 %, aunque sigue siendo uno de los más fuertes de América Latina <a href="https://openknowledge.worldbank.org/bitstream/handle/10986/38030/GEP-January-2023-Analysis-LAC.pdf">según el Banco Mundial</a>.</p>
<h2>Tensiones socioeconómicas en año electoral</h2>
<p>Sin embargo, estas previsiones están sujetas a incertidumbres tanto nacionales como internacionales. A nivel internacional, el entorno mundial sigue sujeto a muchas incógnitas: la guerra en Ucrania y su impacto en los precios de las materias primas, el aumento de los tipos de interés en las grandes economías, y riesgos sanitarios en torno al covid-19 y el peligro del surgimiento de nuevas pandemias.</p>
<p>A nivel nacional, los retos macroeconómicos siguen siendo importantes. La aplicación del programa del FMI es extremadamente arriesgada: el Gobierno argentino deberá hacer malabarismos con las reformas para alcanzar los objetivos del programa y, al mismo tiempo, evitar que aumente el descontento público.</p>
<p>Las elecciones generales de octubre de 2023 podrían dar lugar a una reorientación de las políticas económicas argentinas. De hecho, es posible que el partido que herede el poder este año –ya sea la coalición actual o un nuevo grupo político– intente renegociar algunos elementos del acuerdo, sin cambiar sus fundamentos. </p>
<p>Aunque no se espera que el resultado de las elecciones cuestione las bases del programa del FMI, la campaña puede cristalizar el descontento de una parte de la población por las reformas que de él se han derivado y la disminución del poder adquisitivo a causa de la crisis de la covid-19 y la subida de precios a nivel mundial. </p>
<p>En cualquier caso, en 2023, Argentina seguirá expuesta a una serie de perturbaciones que podrían tener importantes consecuencias económicas y sociales.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/200457/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Emmanuelle Mansart-Monat ne travaille pas, ne conseille pas, ne possède pas de parts, ne reçoit pas de fonds d'une organisation qui pourrait tirer profit de cet article, et n'a déclaré aucune autre affiliation que son organisme de recherche.</span></em></p>Argentina cerró 2022 con una tasa de inflación cercana al 100%. El acuerdo con el FMI busca reducirla y mejorar el resto de indicadores económicos. Pero las reformas implican enormes sacrificios para los ciudadanos.Emmanuelle Mansart-Monat, Économiste risque pays, Agence française de développement (AFD)Licensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1960082022-12-21T17:54:34Z2022-12-21T17:54:34Z¿Por qué entendemos el capítulo 68 de ‘Rayuela’?<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/501555/original/file-20221216-19-6u0uy3.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=4%2C4%2C1534%2C890&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">El escritor argentino Julio Cortázar en Buenos Aires tras 10 años de exilio.</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Cortazar_buenos_aires.jpg">Wikimedia Commons</a></span></figcaption></figure><p><em>Rayuela</em> (1963) es, sin lugar a dudas, la obra cumbre del escritor argentino Julio Cortázar. Estamos hablando de uno de los principales exponentes del <a href="https://www.iberlibro.com/libros/literatura-latinoamericana-boom.shtml"><em>boom</em> latinoamericano</a> –fenómeno fundamentalmente literario que colocó a figuras como la de Gabriel García Márquez, Mario Vargas Llosa, Carlos Fuentes o el propio Julio Cortázar en la cima de la literatura del siglo XX– que, con una obra especialmente experimental, impulsó la prosa literaria en castellano hacia horizontes hasta entonces inexplorados. </p>
<p>En este contexto, <a href="https://www.todostuslibros.com/busquedas?keyword=Rayuela"><em>Rayuela</em></a> muy posiblemente constituye el punto álgido de su capacidad creadora desde una perspectiva puramente vanguardista. Se trata de una “novela” que en esencia relata la historia de Horacio Oliveira y su relación amorosa. Sin embargo, lo realmente interesante del texto es su disposición estructural, la variación de estilos y el propio uso que Cortázar hace del lenguaje. </p>
<h2>Cómo leer <em>Rayuela</em></h2>
<p>El autor propone, justo antes de comenzar la historia, dos <a href="http://revista-iberoamericana.pitt.edu/ojs/index.php/Iberoamericana/article/view/2516/2704">opciones de lectura</a> –o tableros de dirección– mediante las cuales cada uno podrá decidir en qué orden de capítulos quiere leer el texto. </p>
<p>La primera ofrece leer los capítulos en orden cronológico –o lógico– hasta llegar al número 56, donde acabaría la historia y quedarían un total de 99 capítulos sin leer. La segunda opción, y a su vez la recomendada por el propio autor, sugiere el siguiente orden de capítulos:</p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/501562/original/file-20221216-21-w0dr7v.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="Lista del orden de capítulos en el que leer Rayuela." src="https://images.theconversation.com/files/501562/original/file-20221216-21-w0dr7v.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/501562/original/file-20221216-21-w0dr7v.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=385&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/501562/original/file-20221216-21-w0dr7v.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=385&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/501562/original/file-20221216-21-w0dr7v.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=385&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/501562/original/file-20221216-21-w0dr7v.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=484&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/501562/original/file-20221216-21-w0dr7v.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=484&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/501562/original/file-20221216-21-w0dr7v.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=484&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Orden en el que leer <em>Rayuela</em> según Julio Cortázar.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://eligeunlibro.blogspot.com/2017/05/orden-leer-rayuela.html">Elige un libro</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Para alcanzar el capítulo que a nosotros nos interesa –<a href="https://campuseducativo.santafe.edu.ar/wp-content/uploads/Rayuela-1.pdf">número 68</a>– es necesario seguir la segunda opción de lectura. </p>
<h2>¿Glíglico? ¿Jintanjáforas?</h2>
<p>Pero ¿qué tienen de especial las breves líneas que lo conforman? Se trata de un texto escrito en <a href="https://inciclopedia.org/wiki/Gl%C3%ADglico">glíglico</a> –lenguaje musical basado en <a href="https://dle.rae.es/jitanj%C3%A1fora">jintanjáforas</a> e inventado por Cortázar– en el cual se lleva la lengua hasta extremos insospechados. El lector no conoce la nomenclatura y, sin embargo, el pasaje cobra sentido. Tratemos, pues, de explicar este fenómeno a partir de tres de las escuelas literarias más importantes del siglo XX: formalismo ruso, estilística y <em>New Criticism</em>.</p>
<figure class="align-right zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/501564/original/file-20221216-12-ilo4pn.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="Portada de Rayuela." src="https://images.theconversation.com/files/501564/original/file-20221216-12-ilo4pn.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=237&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/501564/original/file-20221216-12-ilo4pn.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=926&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/501564/original/file-20221216-12-ilo4pn.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=926&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/501564/original/file-20221216-12-ilo4pn.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=926&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/501564/original/file-20221216-12-ilo4pn.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=1164&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/501564/original/file-20221216-12-ilo4pn.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=1164&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/501564/original/file-20221216-12-ilo4pn.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=1164&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Edición conmemorativa del quincuagésimo aniversario de la publicación de <em>Rayuela</em>.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://www.penguinlibros.com/es/literatura-contemporanea/6440-libro-rayuela-edicion-conmemorativa-9788420414706">Penguin Libros</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Por resumir brevemente los principios de cada movimiento diremos que el <a href="https://cvc.cervantes.es/literatura/cauce/pdf/cauce20-21/cauce20-21_04.pdf">formalismo ruso</a>, primero, pretende hacer una distinción entre materiales literarios y comunes –o no literarios–. Para ello, confronta el lenguaje literario –elaborado– con el lenguaje cotidiano –menos elaborado–. Partiendo de este enfrentamiento, se observa que, mientras que los componentes del lenguaje cotidiano no tienen valor independiente, el lenguaje literario provee a todos sus elementos de un valor autónomo, de manera que cobra especial importancia el uso que se haga de ellos. </p>
<p>Por su parte, la <a href="https://cdigital.uv.mx/handle/123456789/7044">estilística</a> se interesa por el texto literario como elemento autónomo. Es decir, su atención no va dirigida a la biografía, ideas o intenciones, sino al sistema expresivo de una obra o autor, atendiendo a los valores formales y al placer estético. </p>
<p>El <a href="https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=1079026"><em>New Criticism</em></a> pretende entender la obra literaria con independencia de su contexto externo, para lo cual presta especial atención al papel del lector en el proceso de comunicación de la obra literaria.</p>
<p>La aplicación de estas ideas al capítulo 68 de <em>Rayuela</em> no puede sino comenzar con el rechazo de todo ese contexto externo que rodea la obra. </p>
<h2>El foco en el texto</h2>
<p>Como ya se decía, las tres escuelas desestiman el <a href="https://dle.rae.es/historicismo">historicismo</a> y centran su total atención en el texto. Atendamos, pues, al lenguaje y su forma. </p>
<p>Apunta <a href="https://revista-iberoamericana.pitt.edu/ojs/index.php/Iberoamericana/article/view/2504/2691">Isasi Angulo (1973)</a> que Cortázar emplea tres tipos de vocablos en este capítulo: palabras con significado conocido (“salvaje”), palabras semiconocidas (“marioplumas”) y palabras de acuñación exclusiva del novelista (“encrestionar”). </p>
<p>Siguiendo la idea de confrontación entre lenguaje literario y lenguaje común o cotidiano, compartida por formalistas y nuevos críticos, puede observarse cómo el literario proporciona a sus elementos un valor autónomo. Este uso “especial” del lenguaje permite que un texto literario exprese o presente un determinado sistema lingüístico que en un contexto cotidiano carecería de sentido y resultaría indescifrable. De otra forma, ¿cómo iba a poder comprenderse este melodioso comienzo?: “Apenas él le amalaba el noema, a ella se le agolpaba el clémiso y caían en hindromurias”.</p>
<figure class="align-right zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/501566/original/file-20221216-25-1ke6wg.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="Un hombre con un pitillo en la boca mira a cámara." src="https://images.theconversation.com/files/501566/original/file-20221216-25-1ke6wg.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=237&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/501566/original/file-20221216-25-1ke6wg.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=806&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/501566/original/file-20221216-25-1ke6wg.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=806&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/501566/original/file-20221216-25-1ke6wg.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=806&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/501566/original/file-20221216-25-1ke6wg.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=1012&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/501566/original/file-20221216-25-1ke6wg.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=1012&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/501566/original/file-20221216-25-1ke6wg.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=1012&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Julio Cortázar fotografiado en 1967.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://es.wikipedia.org/wiki/Archivo:Cort%C3%A1zar.jpg">Sara Facio / Wikimedia Commons</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Esta forma de entender el lenguaje literario como instrumento autosuficiente da lugar a dos conceptos clave: <a href="https://dle.rae.es/extra%C3%B1amiento">extrañamiento</a> y placer estético. </p>
<p>Para los formalistas, el <em>extrañamiento</em> <a href="https://connotas.unison.mx/index.php/critlit/article/view/249/209">“desfamiliariza”</a> las cosas que tradicionalmente han sido entendidas de forma automática. Siguiendo esta definición, parece claro que para comprender la forma no basta con mirar. Si acudimos al texto, una simple lectura mecánica nos conducirá de manera inevitable a errar en su comprensión. </p>
<p>Por el contrario, si se realiza una lectura atenta, meditada y focalizada en el texto como elemento único, puede llegar a comprenderse, por ejemplo, este final “y todo se resolviraba en un profundo pínice, en niolamas de argutendidas gasas, en caricias casi crueles que los ordopenaban hasta el límite de las gunfias” como culmen de una escena erótica.</p>
<h2>En resumen…</h2>
<p>Para que haya goce, consecuencia de aquel extrañamiento, es necesario que exista un lector que se comunique con el texto. Este, entonces, cobrará sentido pleno tras ser sometido a la propia interpretación y análisis de un lector que se encargue de descifrarlo. </p>
<p>Probablemente, una de las principales voluntades de Julio Cortázar sería introducir al lector tan profundamente en su obra para que solo pudiera servirse de una única herramienta de comprensión: la interiorización de su propio sistema lingüístico creado por y para la ocasión. Todo esto, claro está, resultaría del todo inútil si no corona el texto un lector activo del todo involucrado. </p>
<p>Díganme qué siente uno al leer este capítulo sino pura necesidad de intervención –lectora–.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/196008/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Las personas firmantes no son asalariadas, ni consultoras, ni poseen acciones, ni reciben financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y han declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado anteriormente.</span></em></p>¿Por qué entendemos un capítulo de ‘Rayuela’ del que desconocemos la gran mayoría de términos utilizados por Julio Cortázar?Pedro Fresno Chamorro, Investigador Predoctoral en Literatura Española, Universidad de JaénLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1961112022-12-20T18:26:11Z2022-12-20T18:26:11ZDeja de usar “latinx” si realmente quieres ser inclusivo<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/499656/original/file-20221207-16-cnct7g.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=11%2C11%2C3822%2C2144&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">“Latine” es mucho más adaptable al idioma español.</span> <span class="attribution"><span class="source">Mario Garza</span>, <a class="license" href="http://creativecommons.org/licenses/by-sa/4.0/">CC BY-SA</a></span></figcaption></figure><p>La mayoría de los debates sobre el uso de “latinx” (se pronuncia la-tin-ex) se han dado en Estados Unidos. Pero la palabra ha empezado a propagarse en países hispanohablantes, donde no ha sido del todo adoptada.</p>
<p>En julio de 2022, Argentina y España <a href="https://www.nytimes.com/2022/07/20/world/americas/argentina-gender-neutral-spanish.html">difundieron declaraciones públicas</a> prohibiendo el uso de latinx, o cualquier variante de género neutro. Ambos gobiernos consideraron que estos nuevos términos violan las reglas del idioma español.</p>
<p>Latinx se utiliza como una identidad individual para aquellos que son de género no binario, y también puede describir a toda una población sin usar la palabra “latinos,” que actualmente se utiliza por omisión (por default) en español para denominar a un grupo de hombres y mujeres.</p>
<p>Como <a href="https://www.slu.edu/arts-and-sciences/women-gender-studies/faculty/melissa-ochoa.php">académica nacida en México y educada en Estados Unidos</a>, estoy de acuerdo con la postura oficial sobre el prohibir el uso de latinx en el idioma español – y también en inglés.</p>
<p>Cuando escuché por primera vez latinx en el 2017, pensé que era progresista e inclusivo, pero de inmediato me di cuenta que era muy problemático. Cinco años después, Latinx no se usa comúnmente en países hispanohablantes, ni por la mayoría de quienes se identifican como hispanos o latinos en Estados Unidos.</p>
<p>De hecho, existe un término de género inclusivo que ya se está utilizando por activistas hispanohablantes que funciona como un reemplazo mucho más natural.</p>
<h2>Poco uso</h2>
<p>Aunque no está claro el origen exacto del término latinx, <a href="https://www.history.com/news/hispanic-latino-latinx-chicano-background">surgió alrededor de 2004</a> y aumentó su popularidad en 2014. Merriam-Webster lo agregó a su diccionario <a href="https://www.merriam-webster.com/words-at-play/word-history-latinx">en 2018</a>.</p>
<p>Sin embargo, <a href="https://www.pewresearch.org/hispanic/2020/08/11/about-one-in-four-u-s-hispanics-have-heard-of-latinx-but-just-3-use-it/#fn-29384-1">un estudio de investigación de Pew de 2019</a> indicó que menos del 5% de la población de Estados Unidos utiliza “latinx” como una identidad étnica o racial.</p>
<p><div data-react-class="Tweet" data-react-props="{"tweetId":"1423107586266632192"}"></div></p>
<p>No obstante, latinx <a href="https://doi.org/10.2105/AJPH.2021.306238">se está volviendo común</a> entre académicos; se utiliza en conferencias, en la comunicación y especialmente en publicaciones.</p>
<p>¿Pero resulta inclusivo utilizar latinx cuando la mayor parte de la población no lo utiliza?</p>
<h2>Perpetuando el elitismo</h2>
<p>Las distintas particularidades demográficas de quienes conocen o utilizan el término latinx ponen en duda si el término es inclusivo o simplemente elitista.</p>
<p>Los individuos que se autoidentifican como latinx o están conscientes del término <a href="https://www.pewresearch.org/hispanic/2020/08/11/about-one-in-four-u-s-hispanics-have-heard-of-latinx-but-just-3-use-it/#fn-29384-1">son muy probablemente</a> adultos jóvenes de entre 18 a 29 años nacidos en Estados Unidos. Son predominantemente personas que hablan inglés y que tienen alguna educación universitaria. En otras palabras, las comunidades más marginadas no utilizan latinx.</p>
<p><div data-react-class="Tweet" data-react-props="{"tweetId":"1484941174070779908"}"></div></p>
<p>Los académicos, a mi parecer, nunca deben imponer identidades sociales en grupos que no se autoidentifican de esa manera.</p>
<p>En alguna ocasión, el revisor de una revista académica para un artículo que presenté sobre las experiencias de las mujeres con los piropos con tendencias sexistas (“catcalling” en inglés), me pidió que reemplazara mi uso de “latino” y “latina” con “latinx.” Sin embargo, no tenían objeciones con el uso de “hombre” o “mujer” cuando me refería a los participantes anglosajones de mi artículo.</p>
<p>Me molestó el atrevimiento de ese revisor. El objetivo del estudio era mostrar que los piropos de extraños en sitios públicos, una interacción dependiente del género, es una forma cotidiana del sexismo.</p>
<p>¿Cómo se suponía que yo iba a distinguir las experiencias de sexismo de mis participantes por género y raza si a todos los etiquetaba como latinx?</p>
<h2>El factor ‘x’</h2>
<p>Si un término es verdaderamente inclusivo, se le da una ponderación equitativa a las experiencias y conocimientos vastamente diferentes; la intención no es que sea una identidad general.</p>
<p>Las mujeres de color (por ejemplo, de raza negra, asiática, indígena, y latina), en general, <a href="https://www.pewresearch.org/science/2021/04/01/stem-jobs-see-uneven-progress-in-increasing-gender-racial-and-ethnic-diversity/">están gravemente subrrepresentadas</a> en posiciones de liderazgo en los campos de la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas(CTIM). Utilizar “latinx” en el caso de las mujeres oculta aún más sus contribuciones e identidad. He notado incluso que algunos académicos intentan evadir la imprecisa naturaleza de latinx al escribir “<a href="https://doi.org/10.1177/08901171211073960">madres latinx</a>” o “<a href="https://doi.org/10.1016/j.bodyim.2022.04.008">mujeres latinx</a>” en lugar de “latinas.”</p>
<p>Además, si el objetivo es ser inclusivo, la “x” debería pronunciarse fácilmente y aplicarse de manera natural a otras partes del idioma español. </p>
<p><a href="https://www.jstor.org/stable/10.7560/754010">Algunos hispanohablantes preferirían identificarse</a> por nacionalidad, digamos, “mexicano” o “argentino”, en lugar de utilizar generalizaciones como hispano o latino. Pero la “x” no puede aplicarse fácilmente a las nacionalidades. Así como latinx, “mexicanx” y “argentinx” no pueden pronunciarse fácilmente en cualquier idioma. Además, los artículos de género en español,“los” y “las”, se vuelven “lxs,” mientras los pronombres de género,“él” y “ella”, se vuelven “ellx.”</p>
<p>La utilidad y lógica de la “x” rápidamente se derrumban.</p>
<h2>‘Latine’ como alternativa</h2>
<p>Muchos académicos pueden sentirse obligados a seguir utilizando latinx porque lucharon mucho para lograr que fuera reconocido por sus instituciones o ya han publicado el término en alguna revista académica. Pero existe una alternativa de género inclusivo mucho mejor, una que ha sido mayoritariamente ignorada por la comunidad académica de Estados Unidos y que ya se está utilizando en partes hispanohablantes de Latinoamérica, <a href="https://www.washingtonpost.com/dc-md-va/2019/12/05/teens-argentina-are-leading-charge-gender-neutral-language/">especialmente entre activistas sociales jóvenes</a> en esos países. </p>
<p>Es “latine” (se pronuncia la-tin-e), y es mucho más adaptable al idioma español. Se puede implementar como artículo"les" en lugar de “los” o “las.” Cuando se trata de pronombres, “elle” se puede volver una forma singular de “ellos” y se puede utilizar en lugar del masculino “él” o el femenino “ella”. También puede ser fácilmente aplicado a la mayoría de las nacionalidades, tales como “mexicane” o “argentine”.</p>
<p>Como el lenguaje moldea la forma en que pensamos, es importante notar que idiomas con género gramatical como el español, el alemán, y el francés facilitan <a href="https://documents1.worldbank.org/curated/en/405621528167411253/pdf/WPS8464.pdf">los estereotipos de género y la discriminación</a>. <a href="https://www.washingtonpost.com/dc-md-va/2019/12/05/teens-argentina-are-leading-charge-gender-neutral-language/">Por ejemplo</a>, en alemán, la palabra para “puente” es femenina, y en español, la palabra para “puente” es masculina. La científica cognitiva <a href="https://scholar.google.com/citations?user=8mm3GBsAAAAJ&hl=en">Lera Boroditsky</a> pidió a hablantes de alemán y hablantes de español que describieran un puente. Los que hablaban alemán tenían la tendencia a describirlo con adjetivos como “hermosa” o “elegante”, mientras que los hispanohablantes tendían a describirlo de manera masculina, como “alto” y “fuerte.”</p>
<p>Además, las reglas existentes de género en español no son perfectas. Normalmente palabras que terminan en “-o” son masculinas y aquellas que terminan en “-a” son femeninas, pero hay muchas palabras comunes que <a href="https://www.thoughtco.com/words-that-break-the-gender-rule-3078133">rompen esas reglas de género</a>, como “la mano”. Y, por supuesto, el español ya utiliza “e” para <a href="https://callmelatine.com/faq/">palabras de género neutro</a> como “estudiante” o “comerciante”.</p>
<p>Creo que latine logra lo que latinx originalmente pretendía lograr y más. De modo similar, elimina el binario de género en su forma singular y plural. Sin embargo, el término latine no está confinado a una población anglófona de élite dentro de Estados Unidos. Es mucho más inclusivo. </p>
<p>Sin embargo, pueden seguir surgiendo problemas cuando la palabra “latine” se impone sobre otras. “Latina” y “latino” aún pueden ser la preferencia de muchos individuos. No creo que “e” debería eliminar el existente “o” y la “a.” Más bien, debería ser una adición gramaticalmente aceptada por el idioma español.</p>
<p>Cierto, la prohibición de latinx en Argentina y España también incluyó la prohibición del uso de latine. Aquí difiero de su directriz. Para mí, la idea de que un idioma pueda ser purista es absurda; el idioma siempre está evolucionando, ya sea a través de <a href="https://www.languagewire.com/en/blog/how-language-evolves">la tecnología</a> – piense en los emojis o en el lenguaje usado en <a href="https://theconversation.com/emoticons-and-symbols-arent-ruining-language-theyre-revolutionizing-it-38408">los mensajes de texto</a>(por ejemplo “TQM” – Te Quiero Mucho)– por un mayor reconocimiento social, como la evolución de “tundir a la esposa” a “<a href="https://cppr-institute-prod.s3.amazonaws.com/modules/HFAModules/Resources/IPV%20New%20Directions.pdf">violencia contra la pareja</a>”.</p>
<p><a href="https://www.thoughtco.com/sapir-whorf-hypothesis-1691924">La teoría lingüística</a> supone que el lenguaje determina la realidad, por lo tanto, culturas y comunidades pueden crear palabras que construyan el mundo inclusivo que desean habitar.</p>
<p>El lenguaje importa. Latine representa esa inclusividad a lo largo de estratos socioeconómicos, ciudadanía, educación, identidad de género, edades y naciones, al tiempo que <a href="https://storylearning.com/learn/spanish/spanish-tips/inclusive-spanish">honra al al idioma español</a>.</p>
<p><em>Este artículo fue traducido por Blanca O. Garza.</em></p><img src="https://counter.theconversation.com/content/196111/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Melissa K. Ochoa no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.
</span></em></p>Algunos activistas de habla hispana ya están usando un término inclusivo de género diferente que se podría utilizar ademas de latino y latina.Melissa K. Ochoa, Assistant Professor of Women's and Gender Studies, Saint Louis UniversityLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1946502022-11-29T17:58:30Z2022-11-29T17:58:30ZLas pruebas estandarizadas en Argentina muestran el impacto de diferentes desigualdades<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/496144/original/file-20221118-16-o8718y.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C3%2C2613%2C1735&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">
</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-photo/girl-resolves-mathematical-task-on-board-590655002"> Shutterstock / k_samurkas</a></span></figcaption></figure><p>Los últimos resultados de las pruebas educativas estandarizadas en Argentina señalan una tendencia a la baja en el rendimiento académico de los estudiantes desde que estas pruebas comenzaron a recopilarse. </p>
<p>Más allá de lo alarmante que esto pueda resultar, hemos querido analizar en detalle los extensos microdatos obtenidos de alumnos, familias y directivos para intentar averiguar los distintos factores que han llevado a estos magros resultados educativos y así proporcionar directrices más eficaces para la política educativa.</p>
<h2>Atributos individuales y su contribución</h2>
<p>Con los resultados de las <a href="https://www.argentina.gob.ar/educacion/evaluacion-informacion-educativa/aprender/aprender-2021">Pruebas Aprender en el año 2021</a> en la mano, podemos analizar la contribución de cada atributo (individual, familiar, del hogar y la escuela) al rendimiento educativo de los estudiantes de sexto grado de primaria.</p>
<p>La presencia de cada uno de estos componentes puede generar distorsiones en los resultados globales tras el paso de la pandemia. </p>
<h2>El género y el rendimiento académico</h2>
<p>En primera instancia, se observa una notoria diferencia de género; sin importar la cantidad de características que sean incorporadas al modelo, las mujeres tienen mejores rendimientos en lengua pero peores resultados en matemática. </p>
<p>Ser mujer en comparación con ser hombre reduce las posibilidades de no comprender un texto adaptado a su edad en 2,6 puntos, mientras que aumenta la probabilidad de no resolver problemas matemáticos con información reiterada y explícita en 5,1 puntos. </p>
<p>Aunque llamativos, estos resultados preliminares parecen convertirse en un hecho sistemático, teniendo en cuenta su reiteración a lo largo de toda la ventana temporal de la serie analizada (el mismo patrón se observa para las pruebas de 2016 en adelante). Los resultados para lengua y matemática parecen verificarse con relativa <a href="https://theconversation.com/hay-diferencias-de-capacidad-cognitiva-entre-mujeres-y-hombres-180710">independencia cognitiva</a> entre una y otra asignatura. </p>
<h2>La importancia de la educación temprana</h2>
<p>Por otro lado, la educación temprana ayuda a mantenerse en niveles por encima de los requerimientos básicos en alrededor de 3,5 puntos para lengua. También en matemáticas el efecto es casi similar (3,1 puntos).</p>
<p>En sentido contrario, <a href="https://theconversation.com/repetir-curso-no-es-bueno-para-casi-nadie-190696">repetir curso</a> aumenta las probabilidades de tener malos rendimientos al año escolar siguiente, principalmente en los resultados de lengua.</p>
<h2>El factor socioeconómico</h2>
<p>Por su parte, el vector socioeconómico del hogar tiene una influencia innegable: los valores más desfavorables involucran desproporcionadamente a estudiantes inmersos en familias de menos recursos. Por ejemplo, el papel del hacinamiento aparece como un predictor de resultados, aumentando en 3 puntos las posibilidades de malos resultados en lengua y en 2,5 para matemáticas.</p>
<p>La educación queda insertada así dentro de una curva de pobreza multidimensional, en el cual la pobreza reproduce condiciones que impiden salir de la misma.</p>
<h2>Los padres y su nivel cultural</h2>
<p>Otro aspecto determinante se relaciona con lo que en la literatura se denomina capital humano informal, usualmente ligado al entorno familiar y del hogar. La más prolongada escolarización de los padres, y principalmente de la madre (quien en mayor medida absorbe el cuidado de los hijos) tiene efectos notorios en la actuación académica. </p>
<p>Que la madre haya terminado el colegio primario disminuye 2,1 puntos la posibilidad de caer en los niveles más bajos de lengua frente a no haberlo hecho, mientras que este efecto alcanza los 3,1 puntos en caso de la madre haber culminado la enseñanza media. </p>
<p>A su vez, los resultados suben 2,1 puntos en matemáticas en caso de que la madre haya terminado la escuela primaria y reciben una “cobertura” de 2,8 puntos en caso de la madre haber realizado estudios de posgrado. </p>
<p>Estos efectos resultan previsibles tras el paso de la pandemia y el consiguiente aumento del tiempo en el hogar. Unas circunstancias que han provocado un <a href="https://centrora.economicas.uba.ar/el-10-del-total-de-alumnos-del-nivel-primario-no-cuentan-con-una-computadora-y-conexion-a-internet-en-su-hogar/">mayor impacto del canal informal</a> respecto a años anteriores.</p>
<h2>Estudiar y trabajar: economía del tiempo</h2>
<p>No sorprendería pensar que un estudiante (sobre todo en edad temprana) que debe absorber tareas productivas en el mercado laboral tenga peores rendimientos en la escuela, ya que tendría menos tiempo disponible para fines educativos. </p>
<p>Si bien los resultados refuerzan esta hipótesis, un entendimiento completo requiere un análisis íntegro del uso del tiempo. No sólo el trabajo comprime atención en los estudios, sino también tener a cargo tareas de cuidado, labores domésticas e incluso trabajos de cultivo (especialmente importante en algunas regiones del interior del país). </p>
<p>Por ejemplo, aquellos estudiantes que frecuentemente se ocupan de cuidar a algún hermano u otro familiar tienen una probabilidad de tener un peor desempeño en 1,8 puntos porcentuales mayor a aquellos que no lo hacen. </p>
<p>Por su parte, aquellos estudiantes que realizan asiduamente tareas domésticas muestran una probabilidad de caer en los dos niveles más bajos en 2,4 puntos para lengua y en 1,8 puntos para matemática. </p>
<p>A su vez, los estudiantes que ocupan gran parte de su tiempo en realizar tareas de cultivo aumentan sus probabilidades de caer en los niveles bajos de las pruebas en alrededor de 4,5 puntos tanto para lengua como para matemática.</p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/496147/original/file-20221118-26-m38xdy.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/496147/original/file-20221118-26-m38xdy.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/496147/original/file-20221118-26-m38xdy.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=398&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/496147/original/file-20221118-26-m38xdy.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=398&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/496147/original/file-20221118-26-m38xdy.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=398&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/496147/original/file-20221118-26-m38xdy.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=501&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/496147/original/file-20221118-26-m38xdy.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=501&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/496147/original/file-20221118-26-m38xdy.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=501&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Una niña en su colegio en la provincia del Chaco.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-photo/chaco-province-argentine-15012019-portrait-indigenous-1941270658">Shutterstock / Gonzalo Bell</a></span>
</figcaption>
</figure>
<h2>Habilidades blandas</h2>
<p>Las habilidades “blandas” no ligadas a contenidos técnicos específicos tienen un papel protagonista en estas pruebas estandarizadas. La capacidad de llevarse bien con los compañeros influye entre 2 y 3 puntos en las probabilidades de tener un buen desempeño académico, mostrando una correspondencia entre dimensiones cognitivas y no cognitivas. </p>
<p>Casi de manera indisoluble podría añadirse al entorno escolar y el clima del aula: haber sufrido burlas o presenciar insultos o agresiones en el aula aparecen como predictores de rendimientos bajos, e incluso se potencian con su frecuencia.</p>
<h2>La importancia del acceso a internet</h2>
<p>La presencia de internet o la existencia de un ordenador en el hogar fueron determinantes en los resultados, con una disminución en la probabilidad de caer en los dos niveles más bajos en 2 puntos en lengua. </p>
<p>Incluso la existencia de un servicio de televisión o incluso una plataforma de <em>streaming</em> reduce la probabilidad de caer en los dos niveles más bajos en 5,2 puntos y en 4 puntos respectivamente, conjugando tanto la capacidad de continuidad educativa en tiempos de pandemia como el nivel socioeconómico del hogar.</p>
<h2>La pandemia exacerbó las desigualdades</h2>
<p>El efecto de la pandemia sobre la vinculación efectiva de los estudiantes estuvo mediado por la calidad de las interacciones y por la importancia del retorno temprano a la presencialidad. </p>
<p>Sin embargo, las tasas de inasistencias no reflejan la historia completa, ni se puede interpretar la pandemia como la única causa de estos rendimientos académicos deslucidos. Ya se evidenciaban con anterioridad a la pandemia. </p>
<p>Estas desigualdades, lejos de encontrar una trayectoria de convergencia, se toparon con un evento único y disruptivo que no hizo más que exacerbarlas. El análisis pormenorizado de los microdatos disponibles resulta una herramienta para diseñar políticas efectivas de cara a su corrección.</p>
<p>Estas desigualdades, lejos de encontrar una trayectoria de convergencia, se toparon con un evento único y disruptivo que no hizo más que exacerbarlas. El análisis pormenorizado de los microdatos disponibles resulta una herramienta útil para diseñar políticas efectivas de remediación.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/194650/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Las personas firmantes no son asalariadas, ni consultoras, ni poseen acciones, ni reciben financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y han declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado anteriormente.</span></em></p>Ser mujer, vivir en condiciones de hacinamiento, trabajar o cuidar de otros familiares, tener una madre que terminó estudios secundarios o acceso a internet determinan los resultados de las pruebas.Julian Gabriel Leone, Investigador en Economía. Facultad de Ciencias Económicas, Universidad de Buenos AiresSofía Kastika, Investigadora y Docente, Universidad de Buenos AiresLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1940002022-11-20T18:49:18Z2022-11-20T18:49:18Z‘Argentina, 1985’, las imágenes de un juicio histórico<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/495683/original/file-20221116-26-612vqp.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C0%2C2995%2C1994&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Ricardo Darín como el fiscal Julio César Strassera en 'Argentina, 1985'.</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://m.media-amazon.com/images/M/MV5BNjMzYzc5ZGMtNzBmYS00ODBlLThmODItMzU0YWFmODdlYjU4XkEyXkFqcGdeQXVyNDQxOTAyNA@@._V1_.jpg">Amazon Prime</a></span></figcaption></figure><p>Dado que el filme al que me referiré en las siguientes líneas y a las que dedicará su lectura de los próximos minutos remite a un hecho histórico, resulta imprescindible poner ese hecho en contexto. </p>
<p>Argentina atravesó el proceso dictatorial más feroz de su historia entre los años 1976 y 1983. En diciembre de 1983, Raúl Alfonsín asumió la presidencia de la nación y se inició un tiempo de recomposición de derechos y garantías para la ciudadanía mientras se intentaba forjar una democracia definitiva. </p>
<p>Una de las primeras medidas del gobierno electo fue conformar en 1983 la <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Comisi%C3%B3n_Nacional_sobre_la_Desaparici%C3%B3n_de_Personas">Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (CONADEP)</a>. Su informe final titulado <a href="http://www.derechoshumanos.net/lesahumanidad/informes/argentina/informe-de-la-CONADEP-Nunca-mas.htm">Nunca Más</a> fue <a href="https://www.youtube.com/watch?v=0jppaE7JGFs">entregado al presidente el 20 septiembre de 1984</a> y publicado. Entre los meses de abril y diciembre de 1985 se llevó a cabo el <a href="https://www.argentina.gob.ar/sites/default/files/2022/09/juicio_a_las_juntas_final_oct.pdf">Juicio a las juntas militares</a>, que ponía el foco en nueve militares que dirigían estas Juntas durante la dictadura.</p>
<p>El filme <a href="https://www.filmaffinity.com/es/film117089.html"><em>Argentina, 1985</em></a> (Santiago Mitre, 2022) narra este hecho histórico centrándose en la figura del fiscal <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Julio_C%C3%A9sar_Strassera">Julio Strassera</a>.</p>
<figure>
<iframe width="440" height="260" src="https://www.youtube.com/embed/AAbvYzDtrLs?wmode=transparent&start=0" frameborder="0" allowfullscreen=""></iframe>
<figcaption><span class="caption">Tráiler de la película <em>Argentina, 1985</em>.</span></figcaption>
</figure>
<h2>La visibilidad de juicio ayer y hoy</h2>
<p>Cuando el juicio se llevó a cabo en 1985, a través de la televisión pública se transmitían cotidianamente unos pocos minutos de imágenes sin sonido que daban cuenta de cada instancia del proceso judicial. Solo el veredicto final se emitió en vivo y con sonido. </p>
<p>Tampoco los medios radiales tuvieron permiso de emisión –aunque así parezca en el filme–. Así que la población solo tuvo acceso a las sesiones a través de ese breve resumen diario y el relato de los medios gráficos hasta que, en 1998, se pudo emitir por TV el documental producido con las horas registradas inicialmente.</p>
<p>La investigadora <a href="https://kansas.academia.edu/Ver%C3%B3nicaGaribotto">Verónica Garibotto</a> se pregunta: ¿Por qué el gobierno decidiría llevar a cabo juicios orales públicos si iban a estipular una transmisión sin sonido? ¿Por qué la administración de Alfonsín exigiría quinientas horas de grabación pero solo permitiría tres minutos de transmisión por día? ¿Qué sentido tiene dar voz a sobrevivientes y a familiares de las víctimas si sus historias permanecen en silencio y sus rostros ocultos?</p>
<p>Tal como sugieren estudios sobre el tema, la razón de la supresión sonora y del aparente escamoteo de imágenes a la ciudadanía parecía fundarse, por un lado, en la fragilidad de la democracia naciente que continuó enfrentando posibles reversiones autoritarias hasta 1990 y, por otro, en la decisión de evitar la espectacularización. Las imágenes, aunque pocas y mudas, daban sobrada muestra de la realidad del juicio y evidenciaban que el hecho inédito de que un tribunal civil estuviese juzgando a los altos mandos militares por delitos de lesa humanidad efectivamente estaba aconteciendo.</p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/495676/original/file-20221116-18-jnp76f.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/495676/original/file-20221116-18-jnp76f.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/495676/original/file-20221116-18-jnp76f.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=405&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/495676/original/file-20221116-18-jnp76f.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=405&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/495676/original/file-20221116-18-jnp76f.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=405&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/495676/original/file-20221116-18-jnp76f.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=509&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/495676/original/file-20221116-18-jnp76f.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=509&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/495676/original/file-20221116-18-jnp76f.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=509&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Juicio a las Juntas (22/05/1985). Integrantes de la Junta Militar ingresan a la sala de audiencias.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Juicio_a_las_Juntas.jpg">Telam</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Hoy, el filme repone las imágenes vistas y las veladas. La película desvela la cara oculta de esa imagen de archivo de los ochenta. Los testimonios, cómo las y los testigos miran al público a los ojos, nos enfrentan e interpelan. El diálogo con las imágenes del pasado le da carnadura a la película, imprime el sello de la historia en la ficción. No faltará quien cuestione el gesto de completar esos huecos que la historia nos legó, la intromisión de la megaproducción en los pliegues de la memoria.</p>
<h2>La narración del pasado y el éxito del presente</h2>
<p>Hace muchos años ya que sabemos que el pasado no es algo dado, fijado para siempre. De igual manera, comprendemos que cada vez que ese pasado es revisitado teórica o culturalmente se produce una nueva actualización de la historia en un presente con el que necesariamente dialoga. </p>
<p><em>Argentina, 1985</em> es –ni más, ni menos– eso, una versión, un recorte, un relato sobre el Juicio a las juntas militares.</p>
<p><a href="https://www.conicet.gov.ar/new_scp/detalle.php?keywords=&id=20803&datos_academicos=yes">Claudia Feld</a>, autora del libro de 2002 <a href="https://www.sigloxxieditores.com/libro/del-estrado-a-la-pantalla_16596/"><em>Del estrado a la pantalla: Las imágenes del juicio a los ex comandantes en Argentina</em></a>, escribió un interesante <a href="https://www.pagina12.com.ar/491996-argentina-1985-y-un-heroe-a-la-medida-del-presente">artículo</a> tras el éxito comercial de la película y la amplia gama de repercusiones que suscitó. En él analiza la construcción de <a href="https://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/f/f1/NUNCA_MAS.ogv">la figura de Strassera como un <em>héroe solitario</em></a>. Además de reconocer la importancia de <em>Argentina, 1985</em>, Feld señala una serie de omisiones y decisiones de representación que llevan a reflexionar sobre la idea de hecho histórico (que el filme propone) versus la idea de proceso histórico. </p>
<p>El fiscal Strassera y su equipo se representan en la película con todo el peso del proceso judicial sobre sus hombros (y no niego ni resto mérito a su tenaz y dificultosa labor) sin explicitar el valor determinante de otros actores para que el juicio se desarrollara y para que la carga probatoria resultara contundente. La incansable tarea de los organismos de Derechos Humanos que desde la dictadura tuvieron un rol fundamental se encuentra a penas esbozada. </p>
<p>De esta misma manera, el Juicio trabajado como hecho resta representación al proceso histórico. Se omite que se juzgó porque ya había elementos para hacerlo, porque, a pesar de los riesgos y las presiones, existió la decisión política de juzgar. </p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/495675/original/file-20221116-22-nnmxol.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/495675/original/file-20221116-22-nnmxol.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/495675/original/file-20221116-22-nnmxol.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=338&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/495675/original/file-20221116-22-nnmxol.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=338&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/495675/original/file-20221116-22-nnmxol.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=338&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/495675/original/file-20221116-22-nnmxol.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=425&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/495675/original/file-20221116-22-nnmxol.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=425&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/495675/original/file-20221116-22-nnmxol.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=425&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Ernesto Sábato entrega al presidente Raúl Alfonsín el informe sobre los Desaparecidos conocido como ‘Nunca más’.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Ernesto_S%C3%A1bato_entrega_a_Ra%C3%BAl_Alfonsin_el_Nunca_m%C3%A1s.jpg">Daniel Merle / Archivo General de la Nación</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p>De los nueve juzgados, cinco recibieron condena. Jorge Rafael Videla y Emilio Eduardo Massera fueron condenados a reclusión perpetua, Orlando Ramón Agosti a cuatro años y seis meses de prisión, Roberto Eduardo Viola a diecisiete años y Armando Lambruschini a ocho. Omar Graffigna, Leopoldo Fortunato Galtieri, Basilio Lami Dozo y Jorge Anaya fueron absueltos por diferentes razones. En los años sucesivos, las leyes de Punto Final (1986) y Obediencia Debida (1987) limitaron el avance de la justicia y entre 1989 y 1990, Carlos Menem indultó a los condenados tendiendo un manto de impunidad. El 21 de agosto de 2003, durante el gobierno de Néstor Kirchner, <a href="https://www.argentina.gob.ar/noticias/18-anos-de-la-anulacion-de-las-leyes-de-obediencia-debida-y-punto-final">se anularon</a> estas leyes y se reabrieron los juicios a los responsables del Terrorismo de Estado, logrando avances verdaderamente significativos.</p>
<p>En las placas que se incluyen hacia el final del filme podría reponerse información que contextualizara al hecho. Pero no aparecen en ellas datos históricos, solo una mención sutil a las leyes y a la continuidad de los juicios. El mayor énfasis está al servicio de subrayar la continuidad ininterrumpida de la vida democrática desde 1983 a la actualidad.</p>
<h2>La carrera de la película</h2>
<p><em>Argentina, 1985</em> ha sido propuesta para representar a Argentina en los premios Óscar y se aguarda con entusiasmo conocer si integrará la terna que premie a la mejor película extranjera. <a href="https://www.filmaffinity.com/es/film986932.html"><em>La historia oficial</em></a> (Luis Puenzo, 1985) y <a href="https://www.filmaffinity.com/es/film313601.html"><em>El secreto de sus ojos</em></a> (Juan José Campanella, 2009), películas que también se vinculaban con la Memoria, recibieron ese mismo galardón. </p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/494888/original/file-20221111-14-jktuxf.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=3%2C3%2C2009%2C1336&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/494888/original/file-20221111-14-jktuxf.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=3%2C3%2C2009%2C1336&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/494888/original/file-20221111-14-jktuxf.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/494888/original/file-20221111-14-jktuxf.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/494888/original/file-20221111-14-jktuxf.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/494888/original/file-20221111-14-jktuxf.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/494888/original/file-20221111-14-jktuxf.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/494888/original/file-20221111-14-jktuxf.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Imagen de la película ‘Argentina, 1985’, de Santiago Mitre.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://www.imdb.com/title/tt15301048/">IMDB</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Por otra parte, es innegable el interés masivo que despierta el filme, con una gran convocatoria de espectadores y espectadoras en las salas de cine y su llegada a un público internacional a través de plataformas de <em>streaming</em> en tiempos en que vemos con preocupación aflorar discursos neofascistas y negacionistas.</p>
<p>En 1983, a días de asumir como director del Instituto Nacional de Cinematografía, Manuel Antín declaró: “<a href="https://theconversation.com/el-renacer-del-cine-argentino-tras-la-dictadura-188045">Al futuro gobierno le interesa mucho apoyar el cine</a>, porque lo considera no solamente un vehículo de cultura sino una comunicación con el mundo, una ventana abierta al exterior para dar fe de la democracia que hemos conquistado”. </p>
<p>Hoy, el cine argentino continúa dando muestras de las conquistas históricas y el Juicio a las Juntas Militares obtiene un lugar absolutamente merecido en la historia y en la pantalla.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/194000/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Viviana Andrea Montes recibe fondos de CONICET. </span></em></p>La película ‘Argentina, 1985’ está cosechando grandes éxitos internacionales. Narra el Juicio a las juntas militares de la dictadura. Y presenta imágenes que durante los juicios no pudieron verse en directo.Viviana Andrea Montes, Licenciada y Profesora en Artes, Doctoranda en Historia y Teoría de las Artes. Área de Especialización: Estudios sobre Cine, Universidad de Buenos AiresLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1926372022-10-25T18:03:34Z2022-10-25T18:03:34ZUn método para certificar que el litio de las baterías se obtiene de forma sostenible<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/490000/original/file-20221017-13-4mqfc9.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C10%2C1203%2C786&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Montones de sal que contienen litio en el salar de Uyuni, en Bolivia.</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.flickr.com/photos/tomab/4147784984/in/photolist-7jwtYd-S98sqr-T9d6F1-T9d6sf-To1b28-TjpQFb-S98uBv-S98sbt-S98shk-mStdaa-mSscCT-mSse7H-8S4TfB-mSydxz-mSrWoH-mSy5gK-mSs7F6-mSs13B-mSxavM-mSsAL6-mSzEYj-mSt2in-mSu3aj-mSxHTa-mReVUh-mSvurq-nbRvRV-nt4nTe-mRdCBH-mSrSYD-mR7FgJ-mR9fKA-mR7mic-mRdx7p-mR5Rbi-mRd2yM-mReZeJ-mR5Vur-mRdsjZ-cpGbH9-mRfsX9-mR6D4Z-mRbtS3-mR85cy-mRduxB-mR8S5q-mRdFZ6-mR8xJg-mRaavB-mR68JM">TomaB/Flickr</a>, <a class="license" href="http://creativecommons.org/licenses/by/4.0/">CC BY</a></span></figcaption></figure><p>Nos gusta saber de dónde proceden los productos que consumimos, como demuestra la denominación de origen de los quesos y los vinos, el etiquetado de las frutas y hortalizas o la indicación de las condiciones de producción de comercio justo del chocolate o el café. Pero mientras que el impacto medioambiental y social asociado a nuestros dispositivos electrónicos es cada vez más importante (consumo de agua, huella de carbono, condiciones laborales, respeto a los pueblos indígenas, etc.), todavía no podemos saber de dónde procede el litio, uno de los elementos más problemáticos de las baterías en la actualidad, y por tanto no podemos estar seguros de su origen.</p>
<p>Proponemos un enfoque geoquímico que establezca una huella digital del litio para poder rastrear el que está presente en nuestras baterías y, potencialmente, ofrecer garantías de una extracción social y ambientalmente sostenible.</p>
<h2>Litio, el nuevo oro blanco</h2>
<p>El litio desempeña un papel fundamental en las baterías recargables de dispositivos electrónicos portátiles (tabletas y teléfonos), del transporte eléctrico (vehículos híbridos y eléctricos, <em>scooters</em> y bicicletas eléctricas) y de las tecnologías de almacenamiento de energía estacionaria, que son esenciales para el desarrollo de las energías renovables intermitentes.</p>
<p>En otras palabras, las sales de litio son actualmente una de las piedras angulares de la transición energética hacia la descarbonización.</p>
<p>Se prevé que las toneladas de litio necesarias para la fabricación de baterías de litio superen los <a href="https://www.mineralinfo.fr/fr/ecomine/marche-du-lithium-2020-enjeux-paradoxes">100 kilotones en 2025</a>, sobre todo porque la electrificación del transporte, fomentada o impuesta por varios países de la UE, aumentará considerablemente la necesidad de litio en los próximos años.</p>
<p>A medida que crezca la demanda de litio, aumentarán los impactos ambientales y sociales de la minería, así como las expectativas de los consumidores en cuanto a las garantías sobre el origen del litio y los esfuerzos por reducir su impacto ambiental y social.</p>
<h2>¿De dónde viene el litio?</h2>
<p>En la actualidad, sólo <a href="https://www.mineralinfo.fr/fr/ecomine/marche-du-lithium-2020-enjeux-paradoxes">dos tipos de yacimientos</a> representan la mayor parte de la producción mundial de litio. Se trata de yacimientos de litio en forma de rocas duras, por ejemplo, pegmatitas de espodumena (Australia, Canadá, China) y salmueras en los salares sudamericanos del <em>triángulo del litio</em> (Bolivia, Argentina, Chile) y China.</p>
<p>En Argentina, las comunidades indígenas ya están denunciando que la extracción de litio en sus tierras amenaza <a href="https://www.amnesty.org/fr/latest/press-release/2019/03/amnesty-challenges-industry-leaders-to-clean-up-their-batteries/">su supervivencia y el ejercicio de sus derechos ancestrales</a>.</p>
<p>En Zimbabue, donde la extracción de litio es actualmente escasa, algunas ONG ya han identificado <a href="https://www.business-humanrights.org/fr/derni%C3%A8res-actualit%C3%A9s/investigating-illicit-financial-flows-in-zimbabwes-lithium-mining-sector/">flujos financieros ilícitos</a> en el sector de la extracción de litio.</p>
<p>Estas dos fuentes de litio también tienen diferentes impactos ambientales. Por ejemplo, la extracción de salmueras de litio consume grandes cantidades de agua por evaporación y provoca un <a href="https://www.nature.com/articles/s43247-020-00080-9">riesgo de escasez de agua dulce</a> para las poblaciones locales y los ecosistemas en zonas ya muy áridas. </p>
<p>El impacto medioambiental de la extracción de litio de roca dura está dominado por el tratamiento con ácido sulfúrico y por un proceso que implica la fracturación mecánica y el tratamiento térmico del mineral, que es más intensivo en energía que el proceso de salar. Así, para el proceso de roca dura el impacto es mayor en términos de <a href="https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/32250776/">calentamiento global (emisiones de CO₂) y acidificación</a> que para el proceso de salar.</p>
<p>Por ejemplo, las sales de litio procedentes de espodúmenos australianos que luego se extraen y purifican en China tienen una <a href="https://www.jadecove.com/research/liohco2impact">huella de carbono tres veces mayor</a> que las producidas a partir de salares chilenos y argentinos.</p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/491039/original/file-20221021-12-596rcw.jpeg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/491039/original/file-20221021-12-596rcw.jpeg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/491039/original/file-20221021-12-596rcw.jpeg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/491039/original/file-20221021-12-596rcw.jpeg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/491039/original/file-20221021-12-596rcw.jpeg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/491039/original/file-20221021-12-596rcw.jpeg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/491039/original/file-20221021-12-596rcw.jpeg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/491039/original/file-20221021-12-596rcw.jpeg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Una muestra de espodumena de 12,5 centímetros en Itagassu, Espirito Santo, Brasil.</span>
<span class="attribution"><span class="source">BRGM, Urbain de Cayeux</span>, <span class="license">Author provided</span></span>
</figcaption>
</figure>
<h2>Una cadena de suministro compleja</h2>
<p>La cadena de suministro para la fabricación de baterías es compleja y se divide en muchas etapas, que suelen llevarse a cabo en diferentes lugares y países: minería, metalurgia de extracción y purificación, síntesis de materiales activos de cátodos, fabricación de celdas de baterías y montaje de paquetes de baterías.</p>
<p>Además, un fabricante de baterías puede tener varias fuentes de suministro y diferentes lotes de producción del mismo modelo de coche eléctrico pueden, por ejemplo, contener litios de orígenes muy diferentes.</p>
<p>La complejidad de esta cadena de suministro dificulta que los usuarios finales se aseguren de que el litio se obtiene de forma responsable y sostenible.</p>
<h2>Las huellas del litio</h2>
<p>Para ayudar a controlar y certificar el origen y el comercio de la producción de litio, proponemos un método analítico basado en el análisis de los isótopos del litio.</p>
<p>Este metal tiene dos isótopos estables –los isótopos son variantes de un mismo elemento que se distinguen por su masa, en el caso del litio, el 6Li y el 7Li–. Ambos se encuentran en las muestras de litio, pero su proporción varía según el mineral y, en particular, según las condiciones fisicoquímicas de formación.</p>
<p>Esta firma isotópica representa una huella digital del litio. Por ejemplo, el litio de las salmueras contiene proporcionalmente más 7Li que el de los depósitos de roca dura.</p>
<h2>¿Trazabilidad geoquímica del litio?</h2>
<p>En realidad, esta huella digital se conserva, en la mayoría de los casos, hasta en el litio de las baterías de nuestros coches y teléfonos. En otras palabras, al analizar nuestras baterías, podemos saber de dónde procede el litio que contienen mediante el análisis de isótopos.</p>
<p>De hecho, hemos demostrado en un estudio reciente publicado en <a href="https://www.nature.com/articles/s41467-022-31850-y"><em>Nature Communications</em></a> que mientras algunos procesos de extracción y purificación tienden a aumentar el contenido relativo de 7Li en comparación con la firma isotópica natural, otros pasos de fabricación de las pilas no alteran la firma isotópica. De este modo, es posible determinar si el litio procede de un depósito de salmuera o de roca dura.</p>
<p>Para una determinación más detallada del origen será necesario desarrollar una base de datos que contenga los valores de la relación isotópica de las sales de litio disponibles en el mercado. La mayor limitación de este enfoque será el solapamiento de las firmas de los productos de diferentes sitios o productores de sal.</p>
<h2>Una cadena de suministro de litio sostenible</h2>
<p>En el contexto de la voluntad política de reindustrializar la producción de baterías en Europa, y de defender una cadena de producción de baterías sostenible y responsable, disponer de los medios para certificar el litio es importante.</p>
<figure class="align-center ">
<img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/484041/original/file-20220912-26-mvs4db.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/484041/original/file-20220912-26-mvs4db.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=214&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/484041/original/file-20220912-26-mvs4db.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=214&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/484041/original/file-20220912-26-mvs4db.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=214&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/484041/original/file-20220912-26-mvs4db.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=269&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/484041/original/file-20220912-26-mvs4db.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=269&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/484041/original/file-20220912-26-mvs4db.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=269&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px">
<figcaption>
<span class="caption">La cadena de certificación propuesta.</span>
<span class="attribution"><span class="source">BRGM, Desaulty</span>, <span class="license">Fourni par l'auteur</span></span>
</figcaption>
</figure>
<p>El principio de este método analítico es el mismo que el desarrollado para la <a href="https://www.brgm.fr/fr/actualite/video/tao-tracabilite-analytique-or-guyane">trazabilidad del oro</a> y del <a href="https://www.bgr.bund.de/EN/Themen/Min_rohstoffe/Rohstoff_forsch/LF_Herkunftrsnachweis_COLTAN_Newsletter01-2010.html">coltán</a>, que permite verificar si el producto corresponde a su origen declarado comparando la muestra en cuestión con muestras de referencia de origen conocido almacenadas en una base de datos.</p>
<p>El aspecto crucial para el litio será el desarrollo de la base de datos de referencia que contenga las firmas isotópicas completas y actualizadas de los diferentes productos disponibles en el mercado. Esta base de datos deberá incrementarse a medida que se exploten nuevos yacimientos o se desarrollen nuevos procesos de extracción y purificación. Para ello, será necesario colaborar con los mineros y productores de sales de litio para evaluar la firma de sus productos. </p>
<p>Esta colaboración entre la investigación pública y los distintos actores del sector es una condición <em>sine qua non</em> para el desarrollo de una cadena de suministro de litio responsable y sostenible.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/192637/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Les auteurs ne travaillent pas, ne conseillent pas, ne possèdent pas de parts, ne reçoivent pas de fonds d'une organisation qui pourrait tirer profit de cet article, et n'ont déclaré aucune autre affiliation que leur organisme de recherche.</span></em></p>Analizar el litio de las baterías permite conocer su procedencia y método de extracción para promover una gestión más sostenible de los recursos.Anne-Marie Desaulty, Chercheur en géochimie isotopique, BRGM, BRGMCatherine Guerrot, PhD Géochimie isotopique et géochronologie, BRGMDaniel Monfort Climent, Ingénieur géologue, ressources minérales et économie circulaire, BRGMGaetan Lefebvre, Chercheur, BRGMSébastien Perret, Technicien en analyses isotopiques, BRGMLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1911932022-09-28T17:00:52Z2022-09-28T17:00:52ZAprendizaje de idiomas: un método argentino innovador<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/486082/original/file-20220922-15568-l1oes4.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C2%2C1000%2C529&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">En determinadas condiciones, la mezcla de lenguas en el aula puede ayudar a los alumnos a progresar.</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/fr/image-photo/young-woman-man-headphones-learning-different-1173570004">Shutterstock</a></span></figcaption></figure><p>Publicado en 2001 y ampliado en 2018, el <a href="https://rm.coe.int/cecr-volume-complementaire-avec-de-nouveaux-descripteurs/16807875d5">Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas</a> (MCERL) del Consejo de Europa ha destacado cinco competencias importantes en <a href="https://rm.coe.int/16802fc3a8">el dominio de las lenguas</a>: la producción oral, la comprensión oral, la producción escrita, la comprensión escrita y la interacción, que a menudo se olvida.</p>
<p>En realidad, para un mismo nivel de lengua, los individuos no tienen por lo general una relación equilibrada entre estas competencias: un estudiante de francés puede tener una muy buena comprensión escrita de esta lengua, por su proximidad al español, pero puede tener más dificultades en las interacciones orales, por razones sociopragmáticas (por ejemplo, cuando saluda a una persona en un contexto informal y sólo conoce los saludos clásicos, puede ser difícil adaptarse).</p>
<p>Este desarrollo asimétrico puede provocar la frustración de los alumnos que son capaces de comprender textos complejos, pero que no son capaces de demostrar esta comprensión en la misma lengua extranjera.</p>
<p>Esto es aún más difícil para los alumnos que acaban de llegar a un país y están descubriendo una de sus lenguas, o para los alumnos que son nuevos en una lengua extranjera, cuando se les pide que no utilicen su(s) primera(s) lengua(s) en el aula.</p>
<p>Sin embargo, el ejemplo del método de lectocomprensión utilizado en Argentina muestra que el plurilingüismo en el aula puede, bajo ciertas condiciones, ser una ventaja. ¿En qué consiste exactamente este método? ¿Cómo podría utilizarse en otros países y contextos?</p>
<h2>Un primer acercamiento a la lectocomprensión</h2>
<p>La lectocomprensión consiste en leer un texto en la lengua que se está aprendiendo y resolver actividades cuya textualización se realiza en la primera o las primeras lenguas. Considerarla como una actividad educativa es definir la lectura como una <a href="https://dumas.ccsd.cnrs.fr/dumas-02747724/document">práctica social compleja</a>, que no se limita a descodificar formas escritas. </p>
<p>Por ello, los cursos de lectocomprensión tienen como objetivo ayudar a los estudiantes a convertirse en lectores estratégicos y <a href="https://gerflint.fr/Base/Monde8-T2/klett.pdf">autónomos</a> de su disciplina de estudio en una lengua extranjera.</p>
<p>En Argentina, estos cursos se dirigen a estudiantes universitarios hispanohablantes, que generalmente son principiantes en la lengua extranjera o carecen de competencia en la lengua meta, pero que tienen una experiencia de lectura importante significativa en un campo específico.</p>
<h2>Una actividad gratificante</h2>
<p>El reconocimiento de estas prácticas de lectura es especialmente relevante cuando el tiempo asignado a la lengua extranjera es muy reducido y el público es nuevo en la lengua meta, ya que este tipo de enfoque permite obtener resultados sólidos y gratificantes en un corto período de tiempo. </p>
<p>En 2001, la ciudad de Buenos Aires intentó incluir <a href="https://www.buenosaires.gob.ar/areas/educacion/curricula/dle_web.pdf">este tipo de prácticas en la escuela secundaria</a> pero su impacto sobre el terreno fue limitado.</p>
<p>Los cursos se basan en textos auténticos –no transformados ni recortados– que proceden de las disciplinas especializadas de los alumnos (humanidades, ciencias exactas, etc.). Se hace hincapié en los distintos géneros habituales en el ámbito académico, tanto en la lectura (capítulo de libro de texto, artículo) como en la escritura (resumen, síntesis, ensayo). Las guías de lectura con instrucciones ayudan a orientar la construcción del significado sin constreñirlo.</p>
<figure>
<iframe width="440" height="260" src="https://www.youtube.com/embed/xo42-SaSimg?wmode=transparent&start=0" frameborder="0" allowfullscreen=""></iframe>
<figcaption><span class="caption">Presentación del libro “Lectocomprensión en lenguas extranjeras”</span></figcaption>
</figure>
<h2>Aprovechar el dominio de la(s) primera(s) lengua(s)</h2>
<p>Cabe señalar que, por lo general, la producción escrita que sigue a la comprensión se realiza en la(s) primera(s) lengua(s) del alumno, que en Argentina es el español. El objetivo es aprovechar el dominio de la(s) primera(s) lengua(s) para resolver tareas que den cuanta de la comprensión de los textos. </p>
<p>Este tipo de enfoque reconoce que el desarrollo de las habilidades de producción escrita necesarias para expresar sutilezas, argumentos y conceptos lleva más tiempo que el de la comprensión.</p>
<p>Por lo tanto, una actividad que se realiza en la lengua extranjera en la recepción y en la primera lengua en la producción permite la idea de “literacia plurilingüe” porque, para comprender un enunciado o un texto, el alumno movilizará todos sus recursos lingüístico–culturales.</p>
<p>En el paisaje contextual argentino, que es exolingüe –es decir, el francés no es la lengua nacional–, las clases de lectocomprensión son espacios privilegiados de encuentro transcultural. </p>
<p>De este modo, los alumnos crean sus relaciones con “la cultura extranjera, confrontando universos de pensamiento, categorías y puntos de vista, en definitiva, experimentando la alteridad (…) acompañada del descubrimiento de uno mismo”, <a href="https://www.cairn.info/revue-ela-2007-4-page-467.htm">según Rosana Pasquale, investigadora argentina</a>. Los textos funcionan así como mediadores entre las culturas propias y las nuevas.</p>
<h2>Relaciones franco–argentinas</h2>
<p>Los <a href="https://dumas.ccsd.cnrs.fr/dumas-02747724/file/Quadrana%20Daniela%20Victoria_2019.pdf">cursos de lectura–comprensión</a> en las universidades argentinas surgieron a mediados del siglo XX, cuando la separación de las actividades en torno a la práctica de las lenguas (leer, escribir, escuchar, hablar) era impensable, incluso un tabú. </p>
<p>Con el aumento de las exportaciones al final de la Segunda Guerra Mundial, la situación económica y social de Argentina mejoró y la escolarización aumentó, mientras que la instalación de editoriales españolas que habían huido de la dictadura franquista en España aceleró la difusión de los libros.</p>
<p>Entre 1880 y 1930, la relación entre Argentina y Francia fue muy estrecha. En los años cincuenta y sesenta, la atracción por la lengua persistía, lo que obligó a revisar las formas de enseñanza. </p>
<p>En el contexto de un tenso debate entre <a href="http://www.didacticale.unlu.edu.ar/sites/www.didacticale.unlu.edu.ar/files/site/Informe%20final%20de%20Beca%20de%20Formaci%C3%B3n%20Superior.pdf">el uso o la prohibición de la primera lengua en el aprendizaje de lenguas extranjeras</a>, los cursos de lectura universitaria en francés como lengua extranjera pasaron a formar parte de los planes de estudio de las diferentes carreras de humanidades.</p>
<figure>
<iframe width="440" height="260" src="https://www.youtube.com/embed/GHvgN_iHsLQ?wmode=transparent&start=0" frameborder="0" allowfullscreen=""></iframe>
<figcaption><span class="caption">Destino Francofonía #224 – Librería francesa en Buenos Aires (TV5 Monde).</span></figcaption>
</figure>
<h2>Los cursos libres de los años 50</h2>
<p>Los orígenes de estos cursos se remontan a 1953, con los “cursos libres” de francés en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires, que tenían como objetivo la lectura–explicación–traducción de textos literarios. </p>
<p>Estos cursos eran innovadores porque buscaban <a href="https://www.cairn.info/revue-ela-2007-4-page-437.htm">partir de las necesidades y el perfil de los alumnos</a>. No fue hasta 1985 cuando se produjo el primer cambio al sustituir los textos literarios por textos de las disciplinas impartidas.</p>
<p>Fue también en esta época cuando se acuñó el término “lectocomprensión”, un término compuesto que considera el acto de leer desde el punto de vista del acto de comprender. </p>
<p>Desde principios de la década del 2000, la gran influencia del MCERL en Argentina acompañó esta evolución introduciendo la perspectiva accional. A través de esta este enfoque, las actividades de aula se convirtieron en tareas, es decir, en problemas a resolver en contexto.</p>
<p>Esta práctica de la lectocomprensión ha sido objeto de algunas críticas, ya que la lectura llevaría al desarrollo de una competencia parcial porque no requiere la capacidad de producir en la misma lengua extranjera.</p>
<p>Sin embargo, cabe señalar que la noción de competencia parcial también puede tener un efecto positivo. No se centra en las habilidades de las que carece el alumno, sino en la existencia de un <a href="https://rm.coe.int/168069d29c#">repertorio complejo, asimétrico y socialmente apropiado</a>, según Coste, Moore y Zarate, investigadores del plurilingüismo.</p>
<h2>Abriendo horizontes</h2>
<p>Para los <a href="https://gerflint.fr/Base/Bresil12/klett.pdf">especialistas argentinos en la materia</a>, el francés sigue desarrollándose en el ámbito universitario, convirtiéndose en la principal orientación, mientras que tiende a disminuir en el resto del sistema educativo por <a href="https://information.tv5monde.com/culture/argentine-la-langue-francaise-tente-de-trouver-sa-place-191131">cierre regular de aulas en</a> <a href="https://information.tv5monde.com/culture/argentine-la-langue-francaise-tente-de-trouver-sa-place-191131">Profesorado</a> –la escuela de formación de los futuros profesores–.</p>
<p>En un contexto exolingüe y académico, el enfoque en la lectocomprensión causó preocupación en sus inicios y todavía hoy, en ocasiones, se malinterpreta por romper las habilidades lingüísticas. Pero se se ha convertido en un hecho destacable en este país. Gracias a ello, también se desarrolla en otros idiomas como el <a href="http://www.didacticale.unlu.edu.ar/sites/www.didacticale.unlu.edu.ar/files/site/ARTICULO%20LARRAMENDI.pdf">inglés</a> o el <a href="http://www.didacticale.unlu.edu.ar/sites/www.didacticale.unlu.edu.ar/files/site/ARTICULO%20Aren%20-%20Fern%C3%A1ndez%20Polcuch.pdf">alemán</a>.</p>
<p>Alice Burrows, especialista en la historia de los vínculos francófonos entre Francia y Argentina, subraya que <a href="https://tel.archives-ouvertes.fr/tel-02147468">la lectura–comprensión</a> es “una didáctica específicamente argentina, fruto del cuestionamiento local en relación con los desarrollos didácticos internacionales”.</p>
<p>Según la investigadora, la didáctica y la pedagogía de las lenguas se beneficiarían de un mayor reconocimiento de todas las áreas de producción de conocimiento, especialmente las de los espacios considerados “periféricos”. Es en estos espacios donde las necesidades dan lugar a la creatividad y la experiencia que podrían beneficiar a toda la comunidad educativa global. </p>
<p>El caso de la lectocomprensión es un buen ejemplo. Esto es aún más cierto en el caso de Francia, en un contexto en el que la centralización tiende a enmascarar estas relevantes iniciativas locales.</p>
<p>Considerar la <em>glocalidad</em> <a href="https://sk.sagepub.com/books/global-modernities/n2.xml">de Roland Robertson</a> –es decir, el diálogo permanente entre la constitución de identidades globales y el reconocimiento de las legitimidades locales– puede ser una de las formas de responder a las expectativas pedagógicas del siglo XXI.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/191193/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Les auteurs ne travaillent pas, ne conseillent pas, ne possèdent pas de parts, ne reçoivent pas de fonds d'une organisation qui pourrait tirer profit de cet article, et n'ont déclaré aucune autre affiliation que leur organisme de recherche.</span></em></p>Cuando se aprende una nueva lengua, la capacidad de entenderla y escribirla no se desarrolla tan rápidamente. Esto conduce a la frustración de los alumnos, que puede evitarse con un método de origen argentino.Grégory Miras, Professeur des Universités en didactique des langues, Université de LorraineDaniela Victoria Quadrana, Enseignante-chercheuse, Universidad de Buenos AiresLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1880452022-08-14T17:52:53Z2022-08-14T17:52:53ZEl renacer del cine argentino tras la dictadura<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/478735/original/file-20220811-13-kjg38d.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C0%2C1010%2C545&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Chela Ruiz en un fotograma de 'La historia oficial', de Luis Puenzo (1985).</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.imdb.com/title/tt0089276/?ref_=vp_close">IMDB</a></span></figcaption></figure><p>Entre los años 1976 y 1983 Argentina atravesó <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Proceso_de_Reorganizaci%C3%B3n_Nacional">la última dictadura cívico-militar que interrumpió la vida democrática del país</a>. En esos años, el dispositivo represivo incluyó la censura como arma de control cultural y político, los secuestros, la privación de la libertad en centros clandestinos de detención, la tortura, el asesinato, el robo de bebés nacidos en cautiverio con reemplazo de sus identidades y la desaparición forzada de personas. </p>
<p>El mundo del cine se vio afectado por la pérdida de importantes referentes como <a href="https://www.imdb.com/name/nm1100463/">Pablo Szir</a>, <a href="https://www.buenosaires.gob.ar/museos/museo-del-cine-pablo-ducros-hicken/noticias/rescate-de-la-obra-de-enrique-juarez">Enrique Juárez</a> y <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Raymundo_Gleyzer">Raymundo Gleyzer</a> y sufrió las consecuencias de la censura, la exclusión y el exilio de figuras centrales. La industria cinematográfica tuvo que revertir en democracia el estado de devastación en que había quedado.</p>
<h2>Cine <em>de</em> transición, cine <em>en</em> transición</h2>
<p>A la manera en que Pierre Bourdieu entiende la noción de <a href="https://campusacademica.rec.uba.ar/pluginfile.php?file=%2F989623%2Fmod_folder%2Fcontent%2F0%2Fpierre%20bourdieu%20campo%20de%20poder.pdf&forcedownload=1">campo intelectual</a> como un sistema de fuerzas en interacción, propongo pensar la rehabilitación del campo cinematográfico argentino en los primeros tiempos de la posdictadura. </p>
<p>El Instituto Nacional de Cinematografía (INC) tuvo un rol protagónico en esa tarea. Uno de los principales ejes de gestión de la entidad fue reactivar la producción tendiendo a una pronta renovación del sector. Para ello se promovió la incorporación de una importante cantidad de <a href="https://perio.unlp.edu.ar/ojs/index.php/question/article/view/6196"><em>operaprimistas</em></a> , es decir, de directores y directoras que estrenaran comercialmente su primera película.</p>
<p>En esos años, el cine argentino tuvo que enfrentar desafíos económicos y adaptarse a cambios significativos. Se trató del cine <em>de la transición democrática</em> –como con frecuencia se lo menciona–, pero también y sobre todo de un cine <em>en transición</em>. Un cine conmovido por el contexto político en un país que intentaba fundar, de una vez y para siempre, una democracia sostenida y sostenible. Un cine afectado por crisis económicas y por los nuevos modos de producir y consumir imágenes. </p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/478733/original/file-20220811-19-7t36qv.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C0%2C1369%2C1077&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="Un hombre retiene violentamente a una mujer que busca liberarse dentro de una casa." src="https://images.theconversation.com/files/478733/original/file-20220811-19-7t36qv.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C0%2C1369%2C1077&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/478733/original/file-20220811-19-7t36qv.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=473&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/478733/original/file-20220811-19-7t36qv.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=473&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/478733/original/file-20220811-19-7t36qv.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=473&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/478733/original/file-20220811-19-7t36qv.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=595&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/478733/original/file-20220811-19-7t36qv.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=595&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/478733/original/file-20220811-19-7t36qv.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=595&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Fotograma de la película <em>La historia oficial</em>, de Luis Puenzo, con Héctor Alterio y Norma Aleandro.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://www.imdb.com/title/tt0089276/?ref_=vp_close">IMDB</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Hoy los tiempos vuelven a ser cambiantes (cada vez con mayores niveles de aceleración) y el contexto se torna nuevamente desafiante para sostener la actividad cinematográfica en el ámbito local. Por eso, volver la mirada reflexiva hacia el pasado tal vez pueda brindarnos mejores herramientas para encarar las tensiones del presente, retomar los interrogantes de ayer para confrontar las respuestas que ensayamos hoy y cuestionar las experiencias anteriores reconociendo aciertos y esquivando errores.</p>
<h2>Tiempos de cambio: una década, múltiples transiciones</h2>
<p>Si observamos la primera década de la última posdictadura argentina tendremos que considerar la transición entre el terrorismo de Estado y la democracia naciente. Por transición se entiende el tiempo comprendido entre un estado de situación y otro que no necesariamente se encuentra determinado de antemano. Como explican los politólogos <a href="https://www.prometeoeditorial.com/libro/478/Transiciones-desde-un-gobierno-autoritario">O’Donnell y Schmitter</a>, se trata del intervalo que se extiende entre un régimen político y otro. En la historia argentina, las interrupciones de la vida constitucional fueron tan frecuentes que más que el retorno a un modelo previo se imponía la necesidad de fundar nuevos consensos. </p>
<p>Este tránsito imprimió un particular ánimo en el cine de la época. Fue un ciclo de producción tironeado entre las sombras del pasado que arrastraba, las promesas de una primavera que no acababa de asentarse y un nuevo cine que llegó recién a mediados de la década del noventa. </p>
<p>Es ese intervalo, ese tiempo entre dos tiempos, sobre el que me interesa centrar mi atención. Una buena parte de la producción cinematográfica del decenio hizo gala de esta cualidad intersticial, inscribiéndose varios de los filmes estrenados en lo que llamaríamos <a href="https://bibliotecavirtual.unl.edu.ar/publicaciones/index.php/Culturas/article/view/11234">narrativas de transición</a>. </p>
<figure class="align-right zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/478741/original/file-20220811-20-ra91u0.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="Cartel de la película _Hay unos tipos abajo_, de Rafael Filippelli y Emilio Alfaro." src="https://images.theconversation.com/files/478741/original/file-20220811-20-ra91u0.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=237&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/478741/original/file-20220811-20-ra91u0.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=855&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/478741/original/file-20220811-20-ra91u0.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=855&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/478741/original/file-20220811-20-ra91u0.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=855&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/478741/original/file-20220811-20-ra91u0.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=1074&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/478741/original/file-20220811-20-ra91u0.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=1074&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/478741/original/file-20220811-20-ra91u0.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=1074&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Cartel de la película <em>Hay unos tipos abajo</em>, de Rafael Filippelli y Emilio Alfaro.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://www.filmaffinity.com/es/film324940.html">FilmAffinity</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Una de las características más sobresalientes del cine de la época fue constituirse como un eslabón fundamental en términos de memoria(s) y asentar las bases del cine por venir. En este sentido fueron frecuentes las películas que abordaron el pasado reciente. Algunas lo hicieron de manera más directa como la emblemática cinta ganadora del Óscar <em>La historia oficial</em> (Luis Puenzo, 1985) o <em>Los chicos de la guerra</em> (Bebe Kamin, 1984), <em>La noche de los lápices</em> (Héctor Olivera, 1986), <em>Hay unos tipos abajo</em> (Emilio Alfaro y Rafael Filipelli, 1985) y <em>Un muro de silencio</em> (Lita Stantic,1993), entre muchas otras. Otros filmes como <em>Malayunta</em> (José Santiso, 1986) o <em>Lo que vendrá</em> (Gustavo Mosquera, 1988), por ejemplo, pusieron en diálogo el presente con ese pasado ominoso desvelando los resabios que todavía permanecían latentes. </p>
<p>Manuel Antín, director del INC en los primeros años de la posdictadura, manifestó en una entrevista un particular interés del gobierno en el cine como muestra al mundo de la democracia reconquistada. Quizás se pueda rastrear en ese propósito alguna de las causas del desigual éxito de varias producciones dentro y fuera del país. </p>
<p>Muchas películas que triunfaron en festivales internacionales e incluso resultaron premiadas tuvieron baja afluencia de público en los cines nacionales. Hoy, a la distancia, podemos apreciar que junto con la democracia se reconquistó el lugar de relevancia que el cine argentino había tenido en la escena internacional durante muchos años. Ahora bien, tanto la democracia como el cine precisaron de un tiempo de reconstrucción y consolidación.</p>
<p>Por otra parte, el avance de la década del ochenta y la llegada de los noventa vieron modificarse tanto los modos de hacer cine como el consumo de películas. Desde entonces fue más accesible captar imágenes y creció el consumo hogareño mediante la tecnología que ofrecían el <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/VHS"><em>Video Home System</em></a> (VHS) o el visionado televisivo a través de operadoras de cable. El impacto sobre el campo cinematográfico resultó significativo. Cambiaron las imágenes y cambió nuestra forma de vincularnos con ellas. Algo más tendría que cambiar en ese escenario para conseguir darle continuidad de calidad al cine nacional. </p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/478738/original/file-20220811-617-vbiyic.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="Carátula del VHS de _Malayunta_, ópera prima de José Santiso." src="https://images.theconversation.com/files/478738/original/file-20220811-617-vbiyic.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/478738/original/file-20220811-617-vbiyic.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=440&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/478738/original/file-20220811-617-vbiyic.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=440&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/478738/original/file-20220811-617-vbiyic.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=440&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/478738/original/file-20220811-617-vbiyic.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=553&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/478738/original/file-20220811-617-vbiyic.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=553&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/478738/original/file-20220811-617-vbiyic.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=553&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Carátula del VHS de <em>Malayunta</em>, ópera prima de José Santiso.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://www.rarovhs.com/malayunta-cine-naciona/">Raro VHS</a></span>
</figcaption>
</figure>
<h2>Actualidad: ¿una nueva transición?</h2>
<p>En el libro <a href="https://www.cetycli.org/publicaciones/libros-electronicos/71-anios-ochenta.html"><em>Nuestros años ochenta</em></a> se señala la necesidad de repensar los años ochenta. Se plantea allí la importancia de esta década como dispositivo de lectura del mundo tal como lo conocemos hoy. </p>
<p>En este caso, extiendo la reflexión hasta los primeros años de la década de noventa, ya que en 1994 se sancionó en Argentina una nueva ley de cine <a href="http://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/anexos/0-4999/767/norma.htm">(Ley N° 24377)</a> que intentaba reconocer, incorporar y aprovechar los cambios que se venían dando en el sector. La esfera del cine devino en un campo más amplio: el audiovisual. Si volvemos sobre esta norma notaremos la centralidad que las instituciones estatales tienen en el sostenimiento de la cultura. Tanto ayer como hoy es ineludible y urgente el compromiso del Estado para impulsar la producción cultural.</p>
<p>En la actualidad se debate en Argentina el fortalecimiento del Fondo de Fomento Cinematográfico. La pospandemia y la multiplicidad de plataformas de <em>streaming</em> demandan un análisis profundo que permita revisar los <a href="https://espacioaudiovisualnacional.org/">marcos legislativos</a> para que la producción audiovisual pueda mantener una oferta diversa (comercial e independiente). En definitiva, el futuro del cine depende en buena medida de las decisiones del presente. No obstante, es bueno hacer memoria, contemplar otros momentos de la historia y poner en valor las experiencias pasadas. Sin más, considerar de donde venimos para afirmar el destino hacia donde vamos.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/188045/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Viviana Andrea Montes recibe fondos de CONICET. </span></em></p><p class="fine-print"><em><span>Clara Beatriz Kriger Trabaja para Universidad de Buenos Aires</span></em></p>Una vez finalizada la dictadura argentina, y con el impulso del Instituto Nacional de Cinematografía, el cine argentino vivió un resurgimiento que llega hasta nuestros días.Viviana Andrea Montes, Licenciada y Profesora en Artes, Doctoranda en Historia y Teoría de las Artes. Área de Especialización: Estudios sobre Cine, Universidad de Buenos AiresLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1854602022-06-29T17:41:17Z2022-06-29T17:41:17ZLas conductoras de Uber en Argentina se enfrentan a la desigualdad de género<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/469835/original/file-20220620-8262-63vax6.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C28%2C3775%2C2192&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Vista aérea del Obelisco de Buenos Aires, monumento histórico situado en la plaza de la República, en la esquina de las avenidas Corrientes y 9 de Julio.</span> <span class="attribution"><span class="source">Marianna Ianovska/Shutterstock</span></span></figcaption></figure><p>En un <a href="https://www.afd.fr/es/carte-des-projets/plataformas-laborales-digitales-buenos-aires-area-metropolitana-condiciones-de-trabajo-y-desigualdad-de-genero">estudio</a> realizado entre 2020 y 2021, analizamos la inserción laboral de las mujeres que prestan el servicio de <a href="https://www.afd.fr/en/ressources/labour-market-trayectories-and-esfuerzos-de-conciliaci%C3%B3n-entre-conductoras-de-uber">transporte de pasajeros</a> a través de la plataforma Uber en el Área Metropolitana de Buenos Aires.</p>
<p>Nos propusimos conocer la experiencia de las mujeres conductoras y señalar las barreras materiales y simbólicas que enfrentan en su trabajo cotidiano.</p>
<p>Para ello, realizamos una serie de entrevistas y nos interesamos especialmente por las trayectorias profesionales de un grupo de 14 conductoras, mujeres de entre 29 y 60 años.</p>
<h2>La división sexual del trabajo</h2>
<p>Históricamente las sociedades han asignado roles y han facilitado la construcción de habilidades de modo diferencial para varones y mujeres. Esas diferencias redundan en un proceso que denominamos <a href="https://www.tandfonline.com/doi/abs/10.1080/00324728.2020.1851748">división sexual del trabajo</a> que tiene efectos muy profundos en el mercado laboral.</p>
<p>Esto explica en gran medida la desigualdad que experimentan <a href="https://www.oxfamfrance.org/inegalites-et-justice-fiscale/comprendre-et-combattre-inegalites-femmes-hommes/">varones y mujeres</a> respecto al acceso y la permanencia en el trabajo, a la percepción de ingresos y a la construcción de su autonomía personal.</p>
<p>En el corazón de la actividad del transporte de pasajeros se encuentran la capacidad de moverse en el espacio público, la relación con los automóviles y el conocimiento técnico de los vehículos, habilidades que a menudo se asocian con el género masculino.</p>
<p>Al igual que <a href="http://www.senat.fr/rap/r15-835/r15-8350.html">en otros países</a>, las mujeres en Argentina tienen menos acceso al permiso de conducir que los hombres: solo 3 de cada 10 de estos permisos están en <a href="https://www.ambito.com/informacion-general/mujeres/al-volante-y-un-gran-desafio-7-cada-10-conductores-son-hombres-n5140926">manos femeninas</a>. Por lo tanto, las mujeres tienen menos acceso a la movilidad en el espacio público. Ello también implica una baja integración de las mujeres a las oportunidades laborales en la actividad del transporte de pasajeros.</p>
<h2>Crece el número conductoras de Uber</h2>
<p>Durante nuestra investigación, el mercado laboral argentino se caracterizó por una alta tasa de desempleo, <a href="https://www.insee.fr/fr/metadonnees/definition/c1935">subempleo</a> y una gran cantidad de actividades laborales precarias. Esta situación se vio agravada por la recesión económica que comenzó en 2018 y se profundizó durante la pandemia.</p>
<p>La llegada de Uber a Argentina en 2016 fomentó el desarrollo del mercado del transporte privado de pasajeros. Aunque las mujeres siguen siendo una minoría en este rubro, constituían el 11 % de los conductores de plataforma durante el <a href="https://labordoc.ilo.org/discovery/fulldisplay/alma995048891902676/41ILO_INST:41ILO_V2">primer semestre de 2018</a>. Se estima que para el año 2019 había aproximadamente <a href="https://www.cippec.org/publicacion/economia-de-plataformas-y-empleo-como-es-trabajar-para--%20una-app-en-argentina/">55 000 conductores activos</a> en el Área Metropolitana de Buenos Aires. Y en junio de 2019 la participación de mujeres conductoras había aumentado un <a href="https://www.infobae.com/sociedad/2019/09/14/bajo-el-lema-juntas-en-el-viaje-uber-realizo-un-encuentro-con-mas-de-400-conductoras">110 % respecto al año anterior</a>.</p>
<p>Dado que esta ocupación suele considerarse preponderantemente masculina, el aumento del número de conductoras mujeres podría constituir un cuestionamiento a los trabajos socialmente asignados a <a href="https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0305750X1930511X">varones y mujeres</a>. Sin embargo, nuestro análisis de las trayectorias ocupacionales previas también muestra que la mayoría de estas mujeres conductoras ya habían adquirido las habilidades necesarias para esta ocupación a través del ejercicio de trabajos masculinizados o relacionados con la conducción. Por ejemplo, muchas de ellas trabajaban como taxistas o como visitantes médicas utilizando sus propios automóviles.</p>
<p>Además, también encontramos ejemplos aún más elocuentes de inserción en el entorno profesional masculino, como en el caso de Alejandra. Alejandra aprendió a conducir una camioneta y se presentó a un aviso de trabajo para repartir pan a la vez que también trabajaba en una fábrica automotriz realizando el servicio de preentrega de los automóviles para lo cual debía ocuparse de su limpieza y de la revisión de los fluidos.</p>
<h2>Los límites del trabajo independiente</h2>
<p>Uber no posee una flota de automóviles ni genera relaciones típicas de empleo asalariado. La plataforma utiliza algoritmos para asignar viajes a los conductores y establece tarifas según la hora del día y la disponibilidad entre la oferta y la demanda. Además, en concordancia con los usuarios, la empresa evalúa a los conductores. La puntuación obtenida redunda en un sistema de asignación de sanciones y recompensas para los trabajadores.</p>
<p>Uber recluta personas para prestar el servicio de pasajeros utilizando la figura de <a href="https://www.nber.org/papers/w22843"><em>socias y socios conductores</em></a> a la vez que promueve el carácter independiente de la actividad. Aunque esta <a href="https://theconversation.com/gig-workers-arent-self-employ-theyre-modern-day-feudal-serfs-179152">independencia tiene límites</a>. Como se sugirió anteriormente, los conductores tienden a adoptar la idea de la autodeterminación en el trabajo. Una expresión muy utilizada por los conductores y que ilustra esta idea es: “Enciendo y apago la aplicación cuando quiero”, que sugiere que hay un margen significativo de libertad para organizar el trabajo.</p>
<p>Consultamos a mujeres y varones respecto al significado que tiene para ellos el carácter independiente que promueve la plataforma.</p>
<p>Los conductores varones evocan principalmente nociones relacionadas con la cultura del emprendimiento y la posibilidad de ser sus “propios jefes”. Como lo expresa Fabián, de 23 años:</p>
<blockquote>
<p>“La verdad que dije: me quedo con Uber por la comodidad, sos tu propio jefe, no te molesta nadie, no rendís explicaciones, no tenés horarios que cumplir.”</p>
</blockquote>
<p>Para las conductoras mujeres, la independencia se traduce en un ideal que supone conciliar el trabajo remunerado con las tareas del cuidado (el cuidado de los demás y en particular el de su propia familia). Ello se traduce en expresiones como “Uber es una oportunidad perfecta para una mamá” o “puedo estar con mis hijos a la hora de algún problema”.</p>
<p>El hecho de que estas expresiones sean compartidas tanto por las mujeres con hijos a cargo como por las que no demuestra que las mujeres conductoras –más allá de su situación personal– consideran que su ocupación les permite cumplir con los roles de género que les son socialmente asignados.</p>
<h2>La influencia del género en la jornada laboral</h2>
<p>Las noches, los fines de semana y los horarios de salida y entrada de escuelas y oficinas están asociados a una alta demanda y, por tanto, a mayores tarifas pagadas por un viaje de Uber.</p>
<p>Sin embargo, las condiciones de acceso a esas oportunidades son desiguales por género, siendo las conductoras mujeres las que tienen más dificultades para acceder a estas franjas horarias. Esto sucede, por un lado, porque las mujeres se sienten más expuestas que los hombres al conducir de noche (<a href="https://blogs.iadb.org/igualdad/es/inseguridad-y-acoso-callejero-covid-19/">debido a la inseguridad y el acoso callejero</a>). </p>
<p>Por otro lado, quienes tienen responsabilidades familiares no pueden asegurar el trabajo nocturno, ni los periodos de entrada y salida de la escuela, porque deben acompañar a sus propios hijos. Esta misma dificultad se aplica los fines de semana, cuando las escuelas están cerradas y las conductoras no tienen ayuda con el cuidado de sus niños. Todo esto implica una brecha de género significativa en horas <a href="https://www.afd.fr/en/ressources/gender-inequalities-platform-economy-cases-delivery-and-private-passenger-transport-servicios-buenos-aires-area-metropolitana">trabajadas e ingresos</a>.</p>
<p>Alejandra, una conductora de 43 años, explica cómo percibe la situación:</p>
<blockquote>
<p>“Acá lo que te estipula cuánto ganas son los viajes que hagas. Entonces, si vos haces 12 horas de corrido ganás lo mismo que cualquier hombre que haga 12 horas de corrido. En eso no hay desigualdad. Lo que digo es que para una mujer es muy difícil hacer 12 horas de corrido”.</p>
</blockquote>
<p>En el mismo sentido, María del Carmen, de 39 años, refuerza en su intervención aspectos de la desigualdad de condiciones que afecta a las mujeres conductoras:</p>
<blockquote>
<p>“Yo sé que de noche se gana mucho mejor, hacés viajes por ahí más copados, más cara la tarifa y a la mañana, bien temprano también. O sea, yo tengo ese impedimento, en realidad no sé si es un impedimento, pero es lo que me toca digamos, que es tener un niño pequeño, entonces los horarios me los acomodo cuando no está él”.</p>
</blockquote>
<p>El último testimonio pertenece a Melisa, una conductora de 29 años que desafía la percepción de peligrosidad y enciende la aplicación en horas de la madrugada:</p>
<blockquote>
<p>“Mi hijo se queda durmiendo con mi abuela. Después vuelvo a las 8, lo levanto, lo llevo al jardín. Y después lo dejo en el jardín de infancia, trabajo hasta las 4, 5 de la tarde que él sale del jardín”.</p>
</blockquote>
<p>El incremento de la participación de mujeres conductoras en Uber representa un avance que cuestiona las nociones convencionales respecto a lo que implica un trabajo femenino o masculino. Sin embargo, estas mujeres todavía enfrentan significativas barreras para desenvolverse a la par que los <a href="https://www.tandfonline.com/doi/full/10.1080/13545701.2022.2044497">varones en la actividad</a>. </p>
<p>Es imprescindible que la sociedad redoble los esfuerzos para derribar un conjunto de barreras persistentes, entre las que se destaca la distribución desigual de las tareas de cuidado. Estas barreras impactan en el modo en que las mujeres desarrollan la ocupación, afectando negativamente su tiempo de participación y el nivel de sus ingresos.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/185460/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Les auteurs ne travaillent pas, ne conseillent pas, ne possèdent pas de parts, ne reçoivent pas de fonds d'une organisation qui pourrait tirer profit de cet article, et n'ont déclaré aucune autre affiliation que leur organisme de recherche.</span></em></p>Las plataformas VTC ofrecen ventajas innegables para las conductoras de Uber. Sin embargo, en esta profesión tan masculina, las desigualdades siguen siendo flagrantes.Cecilia Poggi, Economist, Social Protection Research Officer, Agence française de développement (AFD)Marina Garcia, Chercheuse en sociologie, Universidad Nacional de General SarmientoLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1859082022-06-27T17:40:59Z2022-06-27T17:40:59ZLa genialidad de Manuel Puig<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/471123/original/file-20220627-20-yz8asg.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=7%2C0%2C2489%2C1587&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Retrato de Manuel Puig en 1979.</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Manuel_Puig,_1979.jpg">Elisa Cabot / Wikimedia Commons</a>, <a class="license" href="http://creativecommons.org/licenses/by-sa/4.0/">CC BY-SA</a></span></figcaption></figure><p><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Manuel_Puig">Juan Manuel Puig Delledonne</a> (General Villegas, Argentina, 28 de diciembre de 1932-Cuernavaca, México, 22 de julio de 1990), autor de ocho novelas y cuatro obras teatrales, fue un escritor argentino de relevancia mundial conocido principalmente por sus novelas <em>Boquitas pintadas</em>, <em>El beso de la mujer araña</em> y <em>Pubis angelical</em>.</p>
<p>Su infancia transcurrió en su pueblo natal, un lugar “prácticamente de wéstern con vigencia total del machismo”. Siendo un niño sensible muy contrario a las actitudes y ademanes masculinos propios de la época, Coco, como le llamaba cariñosamente su familia, disfrutaba de la ficción cinematográfica. Las películas le ofrecían mundos alternativos a una realidad que le oprimía, especialmente las de corte antiguo o los musicales. </p>
<p>Siempre acompañado de su madre, de quien algunos malintencionados acusaban de haberle copiado las formas y el carácter afeminado, acudía con mucha frecuencia al cine: “Aquel pueblo perdido en La Pampa, castigado por el aire seco, solo contaba con una vía de escape: aquel cinematógrafo que cambiaba, además, de programación todos los días”. </p>
<p>Cursó la secundaria en Buenos Aires, donde descubrió que la agresividad de la que trataba de huir en su pequeña localidad llegaba mucho más lejos de General Villegas. Posteriormente, decidió estudiar cinematografía. Para ello se trasladó a Italia gracias a una beca otorgada por la Dante Alighieri, aunque no finalizó la formación y terminó realizándose como escritor. Con el tiempo, llegó a vivir en Roma, París, Londres, Estocolmo, Nueva York, Río de Janeiro y Cuernavaca, donde fallecería.</p>
<p>En lo personal, desde la pubertad se asumió como homosexual. A pesar de que abogaba por desprenderse de cualquier peso moral en cuanto a las relaciones sexuales y personales, pues no admitía que la identidad de una persona pasara por la sexualidad, fue miembro fundador, en 1971, del <a href="https://www.moleculasmalucas.com/post/manuel-puig-y-el-flh">Frente de Liberación Homosexual en Argentina</a> junto al sociólogo e historiador <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Juan_Jos%C3%A9_Sebreli">Juan José Sebreli</a>, el escritor y abogado <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Blas_Matamoro">Blas Matamoro</a> y el poeta <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/N%C3%A9stor_Perlongher">Néstor Perlongher</a>.</p>
<h2>Manuel Puig y su vida literaria</h2>
<p>Puig se había dado cuenta en el centro experimental de cine de Roma de que cuando intentaba escribir guiones cinematográficos solo producía copias de grandes películas. Además, el lenguaje que utilizaba era demasiado literario, así que dio el salto a la ficción narrativa y aquello que debía ser un guión terminó convirtiéndose en su primera novela: <em>La traición de Rita Hayworth</em> (1968). </p>
<figure class="align-right zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/471125/original/file-20220627-23-q56n68.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/471125/original/file-20220627-23-q56n68.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=237&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/471125/original/file-20220627-23-q56n68.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=1017&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/471125/original/file-20220627-23-q56n68.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=1017&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/471125/original/file-20220627-23-q56n68.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=1017&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/471125/original/file-20220627-23-q56n68.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=1277&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/471125/original/file-20220627-23-q56n68.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=1277&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/471125/original/file-20220627-23-q56n68.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=1277&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Retrato de Manuel Puig publicado en la revista <em>Gente y la actualidad</em>. Año 4 número 200, mayo de 1969, Buenos Aires, Argentina.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Manuel_Puig.JPG">Wikimedia Commons</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Ya instalado en Nueva York, vería la luz <em>Boquitas pintadas</em> (1969), la cual le valdría la aprobación del público y le consagraría como escritor, aunque sería censurada en Argentina por ser percibida como una intromisión en la vida de algunos villeguenses. Cinco años más tarde le seguiría <em>The Buenos Aires affair</em>, su obra más criticada y prohibida, hasta el punto de recibir amenazas de muerte: “En enero del 74 el libro fue secuestrado, y de ahí en adelante todo fue empeorando. Ya después de la muerte de Perón la cacería de brujas se desató”. </p>
<p>El autor se quedó en México, donde conservaba el primer borrador de <em>El beso de la mujer araña</em> (1976). En esas páginas vertería una crítica feroz a la izquierda política y a la represión sexual. Esta novela también estaría prohibida en su país durante la dictadura militar (1976-1983), pero sería publicada en España. Gracias a <em>El beso de la mujer araña</em>, quizá la más conocida y rompedora de sus historias, porque abordaba temas muy pocas veces tratados abiertamente como la homosexualidad, se convirtió también <a href="https://ebuah.uah.es/dspace/bitstream/handle/10017/4526/El%20Teatro%20de%20Manuel%20Puig.pdf?sequence=1&isAllowed=y">en dramaturgo</a>. La novela fue llevada a la gran pantalla en 1985. </p>
<p>En el año 1979 se publicaría <em>Pubis angelical</em> (también trasladada al cine). Tres años después, en 1982, Puig fue candidato al Premio Nobel de Literatura, pero finalmente se le concedió a Gabriel García Márquez. En 1980 apareció <em>Maldición eterna a quien lea estas páginas</em> y, dos años más adelante, <em>Sangre de amor correspondido</em>. En 1986, una vez publicadas las obras teatrales <em>El beso de la mujer araña</em> (1981), <em>Bajo un manto de estrellas</em> (1983), <em>La cara del villano</em> (1985) y <em>Recuerdos de Tijuana</em> (1985), terminó de escribir su última novela, <em>Cae la noche tropical</em> (1989).</p>
<h2>La originalidad de un escritor rompedor</h2>
<p>Manuel Puig no solo fue un gran renovador de las formas y géneros literarios, sino que demostró la viabilidad del material oral como construcción poética. Además, empleó en sus novelas recursos hasta la fecha inexplorados, como es el caso de las notas a pie de página en <em>El beso de la mujer araña</em>, que en realidad son paráfrasis de grandes psicólogos elucubrando sobre el posible origen de la homosexualidad. </p>
<p>De igual modo, destacan como rasgos fundamentales de su literatura el uso del monólogo interior, la superposición de voces dentro de una misma narración y <a href="https://revistaalpha.com/index.php/alpha/article/view/693/693">la aparición de los boleros</a>, las epístolas, las películas y, en general, los estilos musicales, visuales y literarios populares.</p>
<p>Muchas de las entrevistas realizadas al escritor giraban en torno a la composición de sus novelas por ser rupturistas tanto en forma como en argumento. Tal como él explicaba en una entrevista publicada en 1981 en Madrid, todas tienen una génesis común que se interrelaciona con factores personales: “Mis novelas siempre empiezan con un conflicto personal no resuelto que necesito sacar al exterior. De pronto se cruza una anécdota, o un personaje concreto, y la novela encarna su propia problemática a partir de eso. […] Yo, a través de un personaje, me siento con más energías para resolver mi propio conflicto”.</p>
<p>El teatro de Manuel Puig responde a las mismas preocupaciones temáticas y estéticas de sus novelas: la ilusión de la desaparición del narrador para ceder protagonismo a la voz de los personajes, la reducción del espacio, la combinación de múltiples temporalidades y una estructura basada en los binomios vida/sueños, realidad/apariencias. </p>
<p>Siempre nos quedará la duda de si el novelista habría devenido un dramaturgo si la muerte no le hubiera sorprendido en los inicios de su actividad creadora.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/185908/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Laura Martínez Català recibe fondos del Ministerio de Ciencia e Innovación como beneficiaria de una beca predoctoral sujeta a un proyecto de investigación</span></em></p>Aunque inicialmente quiso dedicarse al cine, el argentino Manuel Puig acabó escribiendo novelas y fue un gran renovador de las formas y los géneros literarios.Laura Martínez Català, Investigador en formación (personal PDI), Universitat de LleidaLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1827732022-05-22T18:38:06Z2022-05-22T18:38:06ZEmborracharse para divertirse: ¿hay alternativas?<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/463912/original/file-20220518-14-75xfi8.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=7%2C0%2C4737%2C3122&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">
</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-photo/teen-alcohol-addiction-drunk-teens-vodka-175022423">Shutterstock / B-D-S Piotr Marcinski</a></span></figcaption></figure><p>El consumo de alcohol representa un grave problema de salud pública a escala global. La Organización Mundial de la Salud ha advertido acerca de los peligros asociados al <a href="https://iris.paho.org/bitstream/handle/10665.2/51352/OPSNMH19012_spa.pdf?sequence=1%20&isAllowed=y">consumo excesivo de alcohol</a>: <a href="https://observatorio.gov.ar/media/k2/attachments/InformeZMortalidadZ2017_2.pdf">daños a la salud</a>, aumento de comportamientos de riesgo, problemas de salud mental y violencia. <a href="https://iris.paho.org/handle/10665.2/52705">Abundantes datos</a> muestran que el alcohol es uno de los <a href="https://apps.who.int/iris/bitstream/handle/10665/332091/9789289055000-eng.pdf">principales factores de riesgo</a> de enfermedad y muerte prematura.</p>
<p>Si hablamos de patrones de riesgo, el consumo episódico excesivo de alcohol que implica grandes cantidades (aproximadamente más de 5 UBs = 60 gr/cc de alcohol puro) en una sola ocasión o lapso breve (3 a 4 horas) ha recibido especial atención por su prevalencia y consecuencias entre los jóvenes. </p>
<p>Este patrón <a href="https://www.observatorio.gov.ar/media/k2/attachments/15.pdf">continúa escalando</a> de manera alarmante entre los adolescentes (12 a 18 años aproximadamente), registrándose una edad de inicio cada vez más temprana y un aumento de la ingesta en mujeres (achicándose la brecha con los varones).</p>
<h2>Más de la mitad de los adolescentes</h2>
<p>Actualmente, <a href="https://bancos.salud.gob.ar/sites/default/files/2020-01/encuesta-mundial-salud-escolar-2018.pdf">más de la mitad</a> de los adolescentes escolarizados de Argentina (sean varones o mujeres) consumen alcohol, proporción que alcanza a casi el 80 % a partir de los 17 años. </p>
<p>Por otra parte, <a href="https://observatorio.gov.ar/media/k2/attachments/1.pdf">la mitad de los niños o adolescentes</a> que consumen realizan un consumo episódico de alcohol. El consumo episódico excesivo en esta etapa vital se asocia a un riesgo aumentado de lesiones, problemas legales, conductas de riesgo (sexo sin protección, conducción temeraria, peleas violentas, etc.), estados emocionales negativos (ansiedad, depresión, ideación suicida, etc.) y problemas escolares (bajo rendimiento, deserción, etc.).</p>
<p>Dados los evidentes perjuicios que genera el alcohol: ¿por qué la mayoría de los jóvenes optan por esta práctica, que domina los escenarios nocturnos de fines de semana? ¿Cuál es el sentido que le otorgan los jóvenes al consumo?</p>
<h2>Fuente de diversión y socialización</h2>
<p>El consumo de alcohol es una práctica socialmente naturalizada y, entre los adolescentes, frecuentemente alentada e incentivada por el grupo de pares. La ingesta adquiere así sus sentidos en un contexto de significados compartidos. </p>
<p><a href="https://doi.org/10.18294/sc.2019.2171">Desde la percepción de los jóvenes</a>, la diversión en contexto social es señalada como uno de los motivos más fuertes para consumir. El alcohol se asocia a despejarse, relajarse, desinhibirse y “desconectar” (de las obligaciones y la rutina). </p>
<p>Pero también al encuentro con otros, la posibilidad de conocer nuevos amigos y pertenecer o <a href="https://www.teseopress.com/individuacion/chapter/experiencias-comunitarias-de-cuidado-y-diversion-en-circuitos-de-musica-electronica/">“no quedar afuera”</a>. En síntesis, el alcohol tiene sentido en tanto es ubicado como fuente de diversión y vehículo de socialización. ¿Existen otras alternativas disponibles para reducir los riesgos vinculados al alcohol?</p>
<h2>Alternativas saludables</h2>
<p>Existen formas alternativas de disfrute y de encuentro con otros no mediadas por el alcohol y que es posible alentar. Estudios recientes muestran que los sentimientos y experiencias positivas que generan algunas actividades tienen efectos en el bienestar personal, guardan <a href="http://revistas.um.es/reifo">estrecha relación</a> con la felicidad y la realización personal e inciden de manera significativa en la salud psicofísica.</p>
<p>Muchos jóvenes eligen realizar deportes como actividad recreativa. Durante décadas se ha señalado al deporte como factor protector del consumo de alcohol. </p>
<p>Pero <a href="https://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1578-84232019000300004">distintos grupos de investigación</a> hemos encontrado que no es el deporte per se lo que protege del consumo (ya que los adolescentes deportistas también consumen de manera riesgosa, tanto como los no deportistas), sino que son las experiencias de disfrute, el compromiso y la realización personal que genera esta actividad las que se asocian a menor consumo. Es decir, las experiencias positivas a través del deporte pueden funcionar como factor protector del consumo de alcohol. </p>
<p>Otras actividades capaces de generar experiencias positivas de compromiso y disfrute profundo también funcionan como factores que promueven un desarrollo positivo y menor consumo de alcohol.</p>
<h2>El papel de los adultos</h2>
<p>Asimismo, es innegable el papel que cumplen los adultos en favorecer (u obstaculizar) las experiencias que los adolescentes tienen en sus actividades diarias. Los que practican deporte mantienen relaciones sociales diarias con sus profesores y entrenadores, quienes influyen en su experiencia a través de comportamientos, valores y actitudes que transmiten con su filosofía de enseñanza. </p>
<p>Aquello que hacen y dicen estos adultos, cómo se organizan y comunican, y cuándo y cómo recompensan o brindan una respuesta significativa después de una acción adecuada o de un error <a href="https://observatorio.gob.ar/media/k2/attachments/AnlisisZdeZlosZcontextos.pdf">influye</a> no sólo en el rendimiento, sino también en sus experiencias de diversión o estrés, en la probabilidad de abandonar o continuar en el deporte y en aspectos motivacionales que constituyen factores de prevención del consumo de alcohol.</p>
<p>En síntesis, las experiencias positivas a través de las actividades recreativas que desarrollan con pares y con conducción adulta cumplen un <a href="https://www.aacademica.org/000-111/87">rol importante</a> en la vida de los adolescentes. Sentirse involucrados y comprometidos con una actividad, aun cuando su desarrollo implica esfuerzo y dedicación, genera importantes consecuencias para la vida emocional e interpersonal de los adolescentes.</p>
<h2>¿Qué camino nos queda por recorrer?</h2>
<p>Los padres y madres, educadores y profesionales de la salud tenemos un importante papel y debemos promover actividades facilitadoras de experiencias positivas, proponer desafíos y, a su vez, desnaturalizar y cuestionar el propio consumo.</p>
<p>Por otra parte, el juego, el acceso a las actividades recreativas y los espacios de esparcimiento son un derecho de niños, niñas y adolescentes. Las políticas públicas deberán tener en cuenta estos resultados y promover y cuidar los espacios recreativos y de esparcimiento, promotores de salud mental de toda la población, pero en especial de niños y adolescentes.</p>
<p>El camino no es fácil e implica un compromiso genuino de toda la sociedad y las políticas de estado para generar las condiciones que faciliten el acceso y la oportunidad de actividades que promuevan la vida comprometida y con sentido de nuestros adolescentes.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/182773/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Vanina Schmidt recibe fondos de universidades y CONICET (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina).</span></em></p><p class="fine-print"><em><span>María Julia Raimundi recibe fondos del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) </span></em></p>El ejemplo de los adultos de su entorno y la posibilidad de vivir experiencias de socialización y disfrute tienen un impacto relevante en el consumo de alcohol por los adolescentes.Vanina Schmidt, Investigadora Independiente Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), Prof. Adjunta Regular Facultad de Psicología UBA, Prof. Titular Regular Facultad de Psicología UAI - Área de Especialización: Psicología del Desarrollo, Universidad de Buenos AiresMaría Julia Raimundi, Docente-investigadora en Psicología del Deporte y Desarrollo Positivo Adolescente, Universidad de Buenos AiresLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1800682022-04-06T18:37:35Z2022-04-06T18:37:35ZGilda, el viaje a Argentina de los nazis y el cártel del tungsteno<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/455291/original/file-20220330-5976-bsovyo.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C58%2C2995%2C2267&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Rita Hayworth y Glenn Ford hablando con Steven Geray en 'Gilda' (1946).</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.imdb.com/title/tt0038559/mediaviewer/rm3032206848/">IMDB / Columbia Pictures</a></span></figcaption></figure><p>Pocas películas tienen tanto trasfondo como <a href="https://www.filmaffinity.com/es/film943832.html"><em>Gilda</em></a>. Detrás de la tumultuosa historia de amor a tres que todo el mundo recuerda de esta película, y el guante que se quita Rita Hayworth mientras canta <em>Put the Blame on Mame</em>, hay una historia muy sórdida: la huida de los mayores criminales del siglo XX. </p>
<figure>
<iframe width="440" height="260" src="https://www.youtube.com/embed/cbqSKLSV7Zg?wmode=transparent&start=0" frameborder="0" allowfullscreen=""></iframe>
<figcaption><span class="caption">Rita Hayworth cantando ‘Put the Blame on Mame’ en <em>Gilda</em>.</span></figcaption>
</figure>
<h2>El trasfondo de la película</h2>
<p>A partir de un contexto real, <em>Gilda</em> imagina el entramado de un cártel u oligopolio muy poderoso durante la Segunda Guerra Mundial, el del tungsteno o wolframio, un material cerámico tan duro como el diamante que recubría los misiles y otras armas. Como muchos materiales desarrollados para uso militar, posteriormente tuvo acomodo como material de uso civil para fabricar bombillas y las herramientas que taladran paredes, cortan baldosas y afilan cuchillos. </p>
<p><em>Gilda</em> se estrenó en 1946 y fue interpretada por Rita Hayworth (Gilda), George MacReady (Ballin Mundson) y Glenn Ford (Johnny Farrell). La película narra la historia de Farrell, un jugador de poca monta que es contratado por el dueño de un casino en Buenos Aires, Ballin Mundson, para que descubra a los jugadores que hacen trampa. </p>
<p>Al poco tiempo, Farrell se convierte en la mano derecha del dueño y este le permite llevar el negocio a su manera. Cuando Mundson vuelve casado con una bella mujer, Gilda, antigua pareja de Farrell, comienza el triángulo amoroso más famoso del cine de los años cuarenta.</p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/455295/original/file-20220330-5959-16h9ega.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/455295/original/file-20220330-5959-16h9ega.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/455295/original/file-20220330-5959-16h9ega.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=440&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/455295/original/file-20220330-5959-16h9ega.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=440&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/455295/original/file-20220330-5959-16h9ega.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=440&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/455295/original/file-20220330-5959-16h9ega.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=553&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/455295/original/file-20220330-5959-16h9ega.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=553&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/455295/original/file-20220330-5959-16h9ega.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=553&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Rita Hayworth en otra escena de <em>Gilda</em>.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://m.imdb.com/title/tt0038559/mediaviewer/rm1007256576/">IMDB / Columbia Pictures</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p>El personaje de Ballin Mundson podría ser el alter ego de <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Fritz_Thyssen">Fritz Thyssen</a>, afiliado al partido nazi e hijo del industrial y magnate alemán August Thyssen, dueño de empresas especializadas en acero que producían armas y municiones para el ejército alemán. </p>
<p>Fritz Thyssen trabajó para la compañía familiar y fue dado de baja en el ejército en 1914 por su mala condición pulmonar. En 1940 emigró a Francia y comenzó los trámites de emigración a Argentina. Poco se sabe de cuándo llego, pero allí se nacionalizó y vivió hasta su muerte en 1951.</p>
<h2>¿Por qué y cómo viajaron los nazis a Argentina?</h2>
<p>En 1933, <a href="https://books.google.es/books/about/El_nazismo_y_los_refugiados_alemanes_en.html?id=RnAxAAAAIAAJ&redir_esc=y">entró en vigor en Argentina un Decreto</a> que permitía la reunificación de las familias. Una vez cumplidos dos años de residencia se podía realizar un llamado a un familiar. Entre 1933 y 1945, ingresaron en Argentina casi 7 000 alemanes, casi todos judíos. </p>
<p>En 1934 se dictó un nuevo decreto relacionado con los viajes de turismo. Las personas que viajaban en primera clase en el barco (los anteriores lo hacían en segunda o tercera clase) debían presentar tan solo un certificado de turismo otorgado por la autoridad consular argentina del punto de embarque y su pasaporte. En 1945 entraron 24 turistas alemanes en la Argentina por mar. </p>
<p>Para muchos jerarcas nazis que buscaban huir de los aliados, dicho viaje transatlántico era su última vía de escape. Esas rutas se han denominado <a href="https://www.bbc.com/mundo/noticias-53522118"><em>ratlines</em></a> (rutas de ratas, flechaduras), que es como en jerga marinera se llaman las escalerillas hechas con cabos que usaban los marineros para subir a lo alto de las velas, especialmente cuando el barco se hundía. Era posiblemente su última opción de mantenerse con vida. Al final, el origen náutico de la palabra resultó ser irónicamente adecuado para los nazis que huían de Europa. </p>
<h2>El cártel del tungsteno o wolframio</h2>
<p>El tungsteno es un material estratégico. El carburo de tungsteno es un compuesto cerámico de gran dureza perteneciente al grupo de los <em>cermets</em> (<a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Cermet">metales cerámicos</a>). Tiene el punto de fusión más elevado de todos los metales (3 422 ºC) y una alta densidad, además de ser muy estable térmica y químicamente y de ser un excelente conductor. Resumiendo, es el material más duro presente en la naturaleza (después del diamante) y es bastante respetuoso con el medio ambiente.</p>
<p>En <em>Gilda</em>, el personaje de Ballin Mundson controla el cártel de este metal. Cuando un individuo aparece muerto en el casino, Mundson tiene que improvisar. Decide dejar a Farrell como heredero y le da instrucciones para abrir su caja fuerte, donde encontrará unas cartas firmadas. Poco después, finge su muerte para evitar ser perseguido. </p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/455294/original/file-20220330-23-1s74oev.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/455294/original/file-20220330-23-1s74oev.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/455294/original/file-20220330-23-1s74oev.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=471&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/455294/original/file-20220330-23-1s74oev.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=471&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/455294/original/file-20220330-23-1s74oev.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=471&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/455294/original/file-20220330-23-1s74oev.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=592&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/455294/original/file-20220330-23-1s74oev.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=592&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/455294/original/file-20220330-23-1s74oev.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=592&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Glen Ford y Rita Hayworth en <em>Gilda</em>.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://www.imdb.com/title/tt0038559/mediaviewer/rm3015429632/">IMDB / Columbia Pictures</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p>En la caja fuerte, Farrell descubre que ha heredado una mina de tungsteno, unas pocas patentes y una docena de pequeñas empresas. Se reúne entonces con los otros doce miembros del cártel para decirles que nada va a cambiar y, ante las protestas de algunos de ellos, concluye que “solo uno debe dirigirlos”.</p>
<p>Posteriormente, un mensajero alemán informa a Farrell de que “las patentes pertenecen a los principales”, es decir, que Mundson era uno más en el cártel. Explica que le dieron permiso a Mundson para comprar las patentes (y le adelantaron el dinero) con la condición de que las devolviera después de la guerra en un “pacto entre caballeros”. </p>
<p>Mundson se había llevado a Argentina algunas de las patentes más relevantes de uso civil. La presencia de los mensajeros y la persecución de la policía argentina hacen sospechar que tal vez alguna de ellas pudiera tener uso militar.</p>
<h2>¿Y al final?</h2>
<p>La película recrea una situación –la del cártel del tungsteno– que podría haber ocurrido en la vida real a partir de las historias de los emigrantes alemanes a Argentina, pero no deja de ser una fabulación. Actualmente, los mayores productores de tungsteno son Rusia, China y Vietnam, pero no se puede hablar de cárteles, sino más bien de mercados de materias primas (incluso de mercados de minerales raros).</p>
<p>En la gran pantalla, cuando Mudson finge su muerte, Gilda, ya viuda, se casa con Farrell. Después de varias acusaciones de infidelidad y discusiones entre la nueva pareja, se reconcilian. Pero Mundson les descubre cuando aparece por sorpresa. Al intentar atacarlos, es asesinado. </p>
<p>La policía argentina alega que, como había simulado estar ya muerto, el caso no se investigaría. Después le piden a Farrell que le indique dónde está la caja fuerte. Farrell se la descubre y se interpreta que todos los documentos del cártel quedan en manos de la policía, mientras la pareja se mantiene unida. Un final aceptable para el triángulo amoroso que es la trama central de la película. </p>
<p>Espero que al final de este artículo el lector vuelva a ver <em>Gilda</em> prestando atención a cómo la película encumbra a un jugador de medio pelo al estatus de jefe absoluto de un cártel en el que los cabecillas eran nazis alemanes.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/180068/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Ana Isabel Rosado Cubero no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>En ‘Gilda’ no hay solo una historia de amor o un baile sensual con un guante. El trasfondo de la trama habla de la huida a Argentina de algunos de los mayores criminales del siglo XX.Ana Isabel Rosado Cubero, Profesora de Economía , Universidad Complutense de MadridLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1782372022-03-15T17:54:39Z2022-03-15T17:54:39ZPor qué el desprestigio entre los políticos desacredita su propio trabajo<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/451918/original/file-20220314-16-1mm57l6.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=1%2C3%2C1196%2C794&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">
</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-vector/group-mutual-recriminations-hand-pointing-316455458">Shutterstock / saiful bahri 46</a></span></figcaption></figure><p>Los políticos se dedican muchas veces con tanto entusiasmo a desprestigiarse mutuamente que contribuyen a debilitar a la política. Este comportamiento parece irracional, pero no lo es. Al contrario, varios factores se combinan para alentar a los políticos a seguir ese camino. </p>
<p>La organización de las sociedades contemporáneas se centra en el Estado, que supuestamente encarna al interés general. Sin embargo, nuestras sociedades son complejas, diversas, cambiantes y desiguales. En la práctica, innumerables actores disputan continuamente por conseguir que los Estados impulsen sus propios intereses sobre los de otros. </p>
<p>Esas disputas son la materia misma de la política. Mediante la política, intereses diferentes y muchas veces contrapuestos son jerarquizados, seleccionados, redefinidos y presentados en el lenguaje del bien común. </p>
<p>Así, intereses opuestos son negociados hasta llegar a arreglos aceptables para las partes. Lo que conviene a algunos empresarios es presentado como algo que, a la larga, será bueno para todos. Lo que va en contra de los intereses de sectores poderosos es mostrado como malo para el país. A veces, lo que beneficia a alguna minoría o a la mayoría de la población es promovido como bueno para la totalidad.</p>
<p>Los políticos profesionales son los protagonistas más visibles de esa articulación de intereses. Hay muchos otros jugadores (los medios de prensa, los juristas, las cámaras empresarias, los sindicatos, las ONG, etc.), pero los políticos ocupan el centro de la escena porque compiten abiertamente por dirigir los organismos del Estado, y así tener la última palabra a la hora de consagrar ciertos intereses en el lenguaje del bien común. </p>
<p>¿Como es posible, entonces, que los políticos dediquen tantos esfuerzos a desacreditarse los unos a los otros?, ¿no deberían, más bien, tratar de reforzar su posición frente a los demás jugadores? La respuesta es que deberían hacerlo, porque cuando los políticos se concentran demasiado en debilitarse mutuamente, la primera víctima es la propia política.</p>
<h2>La política hecha en términos morales</h2>
<p>Las descalificaciones entre políticos se hacen muy frecuentes cuando toman fuerza los modos de hacer política que podemos llamar “moralizantes”. Se trata de formas de actuar en política que se plantean objetivos morales, como la defensa de ciertos valores contra otros políticos que supuestamente los atacan. </p>
<p>La <a href="https://ri.conicet.gov.ar/bitstream/handle/11336/73361/CONICET_Digital_Nro.72932993-1b67-4f4e-aaf7-2482a25f08d4_A.pdf?sequence=2&isAllowed=y">moral</a> implica juzgar los comportamientos en términos de la oposición entre el bien y el mal. Ahora bien, como ya dijimos, la materia de la política son disputas entre partes que tienen distintos intereses, y los políticos se dedican a articular esos intereses. ¿Cómo pueden hacerlo en términos morales?</p>
<p><a href="http://revistascientificas.filo.uba.ar/index.php/CAS/article/view/4042">Cuando adoptan posturas moralizantes</a>, los políticos se muestran como los defensores de ciertos valores incuestionables, evitando así admitir que están priorizando los intereses de ciertos actores. Y, a la inversa, presentan a sus adversarios como enemigos de esos valores y, por ende, como representantes de intereses oscuros, ilegítimos. Así, se instala en la política la oposición entre el bien y el mal. </p>
<p>Por ejemplo, algunos políticos y partidos se presentan como campeones de la lucha contra la corrupción. Todas sus posiciones en los debates públicos y cualquier política que defiendan son justificadas como necesarias para combatir la corrupción. Sus adversarios, en cambio, son descritos como corruptos, y todas sus acciones son explicadas por esa falla moral. Lo mismo ocurre cuando algunos políticos y partidos presumen de ser los defensores de la república, la libertad, la democracia o la familia. </p>
<p>Hecha en términos morales, la política tiende a organizarse como una oposición entre el bien y el mal. Y, aunque esto siempre beneficia a algunos políticos y partidos, a la larga los perjudica a todos.</p>
<p>Un problema es que cuando la política se hace en nombre de valores que se consideran incuestionables, se tiende siempre a descalificar a los adversarios. En casos extremos, se llega al punto en que cada parte considera a la otra como ilegítima. Así, la tensión aumenta, el juego político se recalienta, y la gobernabilidad se reduce más y más, como hemos visto en Argentina desde 2008.</p>
<p>Además, el juego de acusaciones cruzadas entre políticos los hace cada vez más dependientes de los medios de comunicación, que son las principales tribunas para difundirlas y para defenderse públicamente. Hoy, los políticos recurren también a las redes sociales (muchos no dejan pasar un día sin acusar por Twitter a algún rival diciendo que es corrupto o antirrepublicano). Pero los medios siguen siendo centrales, y los políticos dependen de quienes los controlan.</p>
<p>Finalmente, ese juego lleva a los políticos a contribuir a la <a href="https://doi.org/10.14409/da.v0i24.4767">judicialización de la política</a>. Hay políticos que presentan recursos ante los tribunales para impedir actos de gobierno. Muchos presentan denuncias de corrupción contra sus colegas sin otra base que notas de prensa. Así, jueces y fiscales pasan a ser árbitros de la política, mientras que los políticos, los partidos y los gobiernos ven sus manos cada vez más atadas. Las persecuciones políticas por la vía judicial, tan frecuentes durante la última década en América Latina, no son ajenas a estos viejos malos hábitos de los políticos.</p>
<h2>El debilitamiento como fin del camino</h2>
<p>Hay varias razones que inducen a los políticos a recorrer ese camino que desemboca en el debilitamiento de la política.</p>
<p>Ya dijimos que los discursos políticos moralizantes ponen el foco en los valores más que en los intereses. Además, los juicios morales son, ante todo, juicios sobre los individuos, en los que sus acciones son explicadas por las virtudes o los defectos que se les atribuyen. Así, las discusiones políticas se alejan del problema de a quiénes beneficia y perjudica cada política o medida, para centrarse en la estatura moral de los políticos y en los valores que defienden o atacan. </p>
<p>Alimentada por la prensa y amplificada por las redes sociales, esta clase de estrategia política es muy eficaz. En Argentina, dirigentes importantes como <a href="https://en.wikipedia.org/wiki/Elisa_Carri%C3%B3">Elisa Carrió</a> o <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Margarita_Stolbizer">Margarita Stolbizer</a> construyen sus imágenes públicas mediante puestas en escena (denuncias mediáticas y judiciales, etc.) dirigidas a mostrar que solo actúan en defensa de la república y en contra de la corrupción y el autoritarismo.</p>
<p>Hacer política de esta forma resulta especialmente tentador cuando varios partidos políticos compiten entre sí sin tener diferencias ideológicas importantes. Discutir cuestiones morales les permite disimularlo, llevando su competencia al terreno de las cualidades de sus dirigentes, que resulta más manejable. </p>
<p>En Argentina, la defensa de la república y la lucha contra la corrupción son banderas que se disputan distintos sectores que promueven políticas neoliberales. En 2015, <a href="https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=6759619">varios de esos partidos aprovecharon algunos escándalos de corrupción y formaron la alianza Cambiemos</a>, acusando al gobierno de Cristina Kirchner de ser una amenaza para la república. Al presentarse como una alternativa moral al Gobierno, pudieron desviar la atención de su propia orientación neoliberal. El Gobierno, por su parte, hizo todo lo posible por descalificarlos poniéndola en evidencia. Cambiemos ganó las elecciones de ese año y consagró al empresario Mauricio Macri como presidente.</p>
<h2>¿Oportunismo?</h2>
<p>Contra lo que se podría pensar, estas formas de hacer política no son solo muestras de oportunismo. Al contrario, muchas veces hunden sus raíces en las trayectorias de los políticos y de los partidos. </p>
<p>La Unión Cívica Radical es el partido político más antiguo de la Argentina. A lo largo del siglo XX, <a href="http://revistascientificas.filo.uba.ar/index.php/CAS/article/view/4042">llegó a verse como un partido consagrado a defender las instituciones de la república</a>. En 2015, fue uno de los partidos que integraron Cambiemos. Los dirigentes radicales contemporáneos (al igual que Carrió y Stolbizer, que son exradicales) se muestran como totalmente concentrados en la defensa de la república, y suman en ese marco la <a href="https://www.jstor.org/stable/23612347?refreqid=excelsior%3Abb029406d6d0a8fb9bf1005f46794a9a">lucha contra la corrupción</a>, que es un tema central en la política del país desde la década del noventa.</p>
<p>El partido de Macri, Propuesta Republicana, fue <a href="https://nuso.org/articulo/meterse-en-politica-la-construccion-de-pro-y-la-renovacion-de-la-centroderecha-argentina/">organizado en torno a personas que, como él, provenían del medio empresarial y de otras que venían del mundo del voluntariado</a>. Así, fue concebido por sus miembros como un partido formado por individuos que venían “desde fuera” de la política para “servir” al país. En este caso, los temas de la corrupción y la república remiten a la desconfianza hacia los políticos que suele predominar en esos ambientes.</p>
<p>En definitiva, la estrechez del espectro político, combinada con convicciones arraigadas y una buena dosis de sentido de la oportunidad, alientan a los políticos a actuar de manera tal que la política misma se ve debilitada. Se trata de una forma de suicidio de la política muy actual –aunque no nueva– que habría que desterrar.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/178237/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Fernando Alberto Balbi no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>Las descalificaciones entre los políticos llevan a que los ciudadanos pierdan la confianza en la política en sí misma. Además, el juego de acusaciones cruzadas entre ellos los hace cada vez más dependientes de los medios de comunicación.Fernando Alberto Balbi, Profesor e Investigador en Antropología Política, Universidad de Buenos AiresLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1742572022-02-03T20:07:50Z2022-02-03T20:07:50ZCómo predecir inundaciones y sequías para minimizar los daños en los cultivos<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/443684/original/file-20220201-19-1hxit55.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C619%2C2296%2C1676&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Laguna seca en La Pampa, Argentina.</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-photo/broken-dry-soil-pampas-lagoon-la-2109103514">Shutterstock / Foto 4440</a></span></figcaption></figure><p>La sequía actual que afecta al este de Argentina, Uruguay y sur de Brasil, y que comenzó en 2019, es clasificada como uno de los <a href="https://sissa.crc-sas.org/blog/2021/10/19/la-sequia-de-2019-2021-en-la-cuenca-del-plata-una-mirada-en-profundidad/">cinco eventos de sequía más importantes desde 1950</a>. Su persistencia hizo que sus impactos se manifestaran en diferentes aspectos del clima, como el estado de humedad del suelo, el caudal de los ríos y la vegetación. </p>
<p>Este fenómeno ha generado mucha tensión sobre el sector agrícola en la región ya que el desempeño de la producción de los diferentes cultivos es muy sensible a los cambios en las condiciones climáticas. </p>
<h2>Impacto en la agricultura</h2>
<p>Las actividades agropecuarias en Argentina son muy vulnerables a los fenómenos atmosféricos y climáticos. Fenómenos como las sequías e inundaciones son las principales causas en la pérdida de rendimiento de los cultivos con un fuerte impacto económico. </p>
<p>La Oficina de Riesgo Agropecuario (ORA) del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de Argentina se especializa en la evaluación del riesgo agropecuario y, en particular, del riesgo agroclimático. Para realizar esta tarea ha generado una serie de herramientas que permiten el <a href="http://www.ora.gob.ar/camp_actual_reservas.php">monitoreo en tiempo real de las condiciones de humedad en el suelo para cultivos específicos</a>. </p>
<p>Estas herramientas combinan la información de las condiciones climáticas actuales con la información sobre el desarrollo de los cultivos (momentos de siembra, floración, entre otros) para entender si las condiciones hídricas pueden afectar el desarrollo normal de los cultivos. De esta forma, permiten a los productores planificar las tareas agronómicas y a la ORA estimar de manera temprana la merma en los rendimientos de los cultivos en campaña y pérdidas probables.</p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/440507/original/file-20220112-27-1ao3fan.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/440507/original/file-20220112-27-1ao3fan.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/440507/original/file-20220112-27-1ao3fan.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=408&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/440507/original/file-20220112-27-1ao3fan.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=408&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/440507/original/file-20220112-27-1ao3fan.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=408&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/440507/original/file-20220112-27-1ao3fan.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=513&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/440507/original/file-20220112-27-1ao3fan.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=513&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/440507/original/file-20220112-27-1ao3fan.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=513&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Evolución de la reserva de agua en el suelo para la localidad de Paraná, Entre Ríos (Argentina). El eje horizontal indica las fechas de registro de la información y el eje vertical indica el contenido de agua en el suelo (mm).</span>
<span class="attribution"><span class="source">Oficina de Riesgo Agropecuario</span></span>
</figcaption>
</figure>
<h2>Variabilidad climática en Argentina</h2>
<p>La variabilidad climática que experimenta Argentina, y en especial su región centro-este, ha sido muy estudiada en las últimas décadas tanto para entender las causas que producen esta variabilidad como la capacidad para poder pronosticarla con meses de anticipación. </p>
<p>En particular, se sabe que el fenómeno de El Niño - Oscilación del Sur (ENOS), que produce cambios en la temperatura del océano Pacífico Tropical, <a href="https://www.nature.com/articles/s43017-020-0040-3">afecta a la ocurrencia de lluvias en el sudeste de Sudamérica</a>. </p>
<p>Durante eventos de El Niño, donde el océano Pacífico Tropical es más cálido que sus condiciones típicas, las lluvias suelen ser más abundantes en el <a href="https://www.smn.gob.ar/como_nos_afecta">este de Argentina</a>. Lo opuesto suele ocurrir durante eventos relacionados con La Niña, como el que ocurre actualmente, donde la lluvia suele ser escasa.</p>
<p>Los avances en las investigaciones han permitido el desarrollo de modelos numéricos de pronóstico del tiempo y el clima que prevén el desarrollo de fenómenos de ENOS con <a href="https://link.springer.com/article/10.1007/s00382-017-3603-3">moderado éxito hasta 6 meses antes de su ocurrencia</a>. </p>
<p>Estas herramientas numéricas son utilizadas también para estimar las condiciones climáticas con meses de antelación, aunque con desempeño dispar según la región de interés. En el caso del sudeste de Sudamérica, se pueden obtener pronósticos sobre las condiciones climáticas del trimestre siguiente con <a href="https://link.springer.com/article/10.1007/s00382-021-05845-2">buen desempeño</a>. </p>
<p>Estos pronósticos son de carácter probabilístico. No brindan un valor específico de lluvia o temperatura esperado sino la probabilidad de que estas variables sean muy diferentes a sus valores típicos.</p>
<h2>Pronósticos para el sector agropecuario</h2>
<p>A partir del proyecto de desarrollo estratégico Aplicación de los Pronósticos Climáticos al Manejo del Riesgo Agropecuario, un grupo de investigadores de la <a href="http://www.economicas.uba.ar/institutos_y_centros/provul/">Faculta de Ciencias Económicas</a> y la <a href="http://www.cima.fcen.uba.ar/divar.php">Facultad de Ciencias Exactas y Naturales</a> de la Universidad de Buenos Aires hemos trabajado junto a la ORA para extender la aplicación de los pronósticos climáticos a las herramientas de monitoreo de las condiciones del suelo. </p>
<p>En el marco de esta colaboración, generamos pronósticos a 30 días de las condiciones hídricas del suelo cultivado de soja en diferentes estaciones de Argentina. </p>
<p>Para desarrollar esta herramienta, utilizamos los pronósticos a 30 días de las variables climáticas que influyen en las condiciones de humedad del suelo, como la temperatura máxima y mínima, la lluvia, el viento y la intensidad de la radiación solar. </p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/440509/original/file-20220112-19-12n8zfw.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/440509/original/file-20220112-19-12n8zfw.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/440509/original/file-20220112-19-12n8zfw.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=386&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/440509/original/file-20220112-19-12n8zfw.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=386&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/440509/original/file-20220112-19-12n8zfw.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=386&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/440509/original/file-20220112-19-12n8zfw.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=485&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/440509/original/file-20220112-19-12n8zfw.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=485&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/440509/original/file-20220112-19-12n8zfw.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=485&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Perspectiva de la reserva de agua en el suelo para la localidad de Paraná, Entre Ríos, a partir de los pronósticos iniciados el 1 de diciembre de 2021. El eje horizontal indica las fechas desde la siembra del cultivo considerado hasta la finalización estimada de su ciclo. El eje vertical indica el contenido de agua en el suelo (mm).</span>
<span class="attribution"><span class="license">Author provided</span></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Los pronósticos suelen presentar errores, ya que no es posible representar el clima perfectamente. Por eso, aplicamos técnicas matemáticas que corrigen los errores sistemáticos para mejorar su desempeño. </p>
<p>Luego, estos pronósticos son implementados en las herramientas desarrolladas por la ORA para obtener una perspectiva a 30 días de las condiciones del suelo en diferentes localidades de Argentina. Como más de un pronóstico es utilizado en el desarrollo de la perspectiva, esta se presenta de tal manera que muestra la incertidumbre asociada a las condiciones futuras, lo que permite estimar la probabilidad de que las condiciones hídricas se encuentren entre valores normales o atípicos.</p>
<p>Las investigaciones muestran que pronósticos como los que desarrollamos bajo este proyecto suelen tener un buen desempeño durante los primeros <a href="https://journals.ametsoc.org/view/journals/wefo/36/1/waf-d-19-0203.1.xml">10 días del período elegido</a> y su calidad se degrada conforme pasa el tiempo. No obstante, bajo ciertas condiciones climáticas, los pronósticos pueden presentar un buen desempeño <a href="https://www.nature.com/articles/s41612-018-0013-0">hasta los primeros 20 días</a>. </p>
<p>Contar con buenos predicciones en estas escalas temporales puede permitir a los productores agropecuarios tomar acciones tempranas en caso de eventos extremos. También permitirían a la ORA desarrollar evaluaciones cuantitativas de riesgos agroclimáticos relacionados con las condiciones climáticas futuras en tiempo real.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/174257/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Marisol Osman no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>Una serie de herramientas permiten predecir el riesgo de que ocurra un fenómeno climático extremo y las condiciones de humedad del suelo para planificar los cultivos y estimar pérdidas.Marisol Osman, Postdoctoral Researcher at Karlsruhe Institute of Techonology, Researcher at Centro de Investigaciones del Mar y la Atmósfera (CONICET/UBA), Universidad de Buenos AiresLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.