Las esposas tradicionales (‘tradwives’) abogan por un estilo de vida organizado en torno a una visión concreta de la familia, el hogar o la religión, y promocionan sus creencias en redes sociales.
En un momento de decadencia de X (antes Twitter), la red social Threads nace como alternativa. Analizamos el algoritmo, los usuarios y sus limitaciones.
Vivimos una época de erosión de la confianza. Los medios de comunicación se han visto especialmente afectados por este fenómeno. Muchos ciudadanos se informan a través de las redes sociales. ¿Pero son fuentes fiables?
Es posible conocer la distancia que nos separa de cualquier persona del mundo. Las redes sociales han acortado distancias, y ya podemos hablar de menos de seis grados de separación.
La obsesión por la apariencia puede llevar a que la persona afectada por este trastorno quiera asemejarse a su imagen modificada por los filtros de las redes sociales, incluso acudiendo a la cirugía estética.
El eterno debate de los estereotipos de género en el espacio virtual no termina. Así son las contradicciones de género entre ‘influencers’ actuales y ‘celebrities’ de hace décadas.
Cuando la gente ve a sus amigos comportarse de forma egoísta o imprudente en vacaciones, es posible que asuma que puede hacer lo mismo. Es la pescadilla que se muerde la cola.
Las redes sociales contribuyen al desarrollo adolescente, aunque también comportan riesgos, como las agresiones online. Prevenirlas pasa por enseñar a los jóvenes a utilizar las redes sociales, afirman las autoras en este artículo original de Revista Telos.
La publicación de la reacción emocional del hijo de la chef a una reprimenda de su madre cuestiona el uso de vídeos que muestran la intimidad de menores para visibilizar o normalizar determinadas situaciones o causas sociales.
Las familias son el referente fundamental para jóvenes y adolescentes en cuanto a cómo usar de manera sana las redes sociales e internet. Pero muchas carecen de las herramientas o conocimientos.
Charlie y Olatz narraron el curso de su cáncer hasta el último momento, un acto que desmonta el ideal de mostrar vidas idílicas a través de las redes sociales.
Instagram copió con éxito el modelo de Snapchat para consolidar su liderazgo, pero ahora tiene a parte de su comunidad en contra por ‘tiktokizar’ la experiencia de usuario. Meta ve en el vídeo su evolución natural.
Al igual que han irrumpido en nuestras vidas, los ‘influencers’ también se han convertido en personajes de las ficciones audiovisuales. Sin embargo, no siempre se ofrece una buena imagen de esta figura.
La guerra de Ucrania nos llega con imágenes duras y muy explícitas de fotoperiodistas junto a vídeos y contenidos al más puro estilo de TikTok e Instagram. La avalancha y el contraste de todas estas imágenes plantea interesantes cuestiones de fondo.
Si buscamos en Instagram los términos ansiedad o depresión, la red social pondrá a nuestra disposición diferentes recursos de salud mental. ¿Son útiles? ¿Acudiría a ellos para gestionar sus emociones?
La cobertura de la guerra iniciada por Rusia contra Ucrania el pasado 24 de febrero nos muestra la oposición entre el periodismo libre y comprometido y la desinformación que presenta Rusia.
Del funcionamiento de la comunicación digital de los candidatos a las presidenciales chilenas hemos aprendido el enorme valor de los directos, del contenido orgánico generado por el usuario por encima del pagado y la rápida condena pública a la desinformación.
Instagram podría perder fiabilidad si sigue saltándose las reglas sobre lo que es información o consejos y lo que es publicidad. La falta de transparencia va camino de llevar al desgaste a esta red social.
Necesitamos reflexionar para decidir qué Internet queremos para poder seguir compartiendo espacio sin poner en peligro nuestra salud física y mental ni la autenticidad de nuestras relaciones ‘online’.
Profesora del Grado en Fotografía. Investigadora sobre cultura visual, humanidades médicas y Autorreferencialidad., UNIR - Universidad Internacional de La Rioja
Catedrático de Comunicación Audiovisual y Publicidad en la Universidad de Valladolid y Director del Laboratorio LipsiMedia Ad-Lab, Universidad de Valladolid