El concepto de “inmunidad de grupo” o “inmunidad colectiva” fue ampliamente manejado al principio de la pandemia, pero ¿tiene aún sentido aplicarlo con las peculiaridades de la covid-19? ¿Se alcanzará totalmente algún día?
El 70 % de personas vacunadas era la cifra esperada para acabar con las principales medidas no farmacológicas. Pero la variante delta y otros factores disparan la cifra y se hace difícil de alcanzar.
¿Sirve de algo vacunar al 70% de la población de los países más ricos si sólo el 27% de la población mundial ha recibido la pauta completa de la vacuna?
Escuchamos hablar de la inmunidad de grupo como el fin de nuestros problemas y de las restricciones pandémicas. Como una especie de protección mágica que nos librará del virus a todos. Pero, ¿sabemos realmente qué es y cómo funciona?
Conforme el número de personas vacunadas aumenta, se impone una sensación de mayor libertad. Se están preparando medidas para la movilidad de las personas vacunadas sin limitaciones. ¿Es buena idea?
Aunque la cobertura vacunal en España es de momento insuficiente, 3 millones de personas vacunadas son muchísimas. Y la cifra crece cada día. Saber qué pueden hacer y qué no es fundamental.
¿Cuáles son las razones de los diferentes porcentajes de vacunación entre países? Para poder responder hay que tener en cuenta qué se necesita para producir, fabricar, envasar, almacenar y distribuir una vacuna.
Con la información actual no podemos afirmar que ninguna vacuna sea superior a otra. Aunque esto no quiere decir que sean iguales, porque tampoco disponemos de estudios comparativos de no-inferioridad que nos permitan equipararlas.
¿En qué consisten las vacunas contra la covid-19? ¿Son seguras? ¿Tendré que vacunarme en el futuro otra vez? Expertos crean una guía para entender todas las dudas que plantean las vacunas.
Para que las medidas de seguridad puedan relajarse hay que alcanzar la inmunidad de grupo, es decir, que un 66 % de la población sea inmune a la covid-19. Para ello, la vacunación es imprescindible.
Pese a que muchos presentan a Suecia como la demostración del éxito de evitar los confinamientos, los datos de salud y económicos lo desmienten. Aunque eso tampoco implica que no tengamos cosas que aprender de la vía sueca.
No es fácil determinar cuándo una enfermedad dejará de propagarse a través de una población con “inmunidad de rebaño”. El informe de seroprevalencia español nos aleja mucho de esa deseable inmunidad.
Vicente Soriano, UNIR - Universidad Internacional de La Rioja
Es inevitable que haya pequeños rebrotes hasta que se alcance la inmunidad de rebaño. Su benignidad permite pensar en tolerar un “ritmo saludable de contagios entre personas no vulnerables” en verano.
Se acaba de publicar la primera parte del estudio nacional de seroprevalencia de la infección por el coronavirus SARS-CoV-2 en España. Veamos qué quiere decir.
Desde hace unos días, el término “inmunidad de rebaño” se ha sumado a la escena de la crisis del coronavirus. El gobierno de Reino Unido lo anunció como su estrategia para frenar la pandemia, y cientos de científicos manifestaron su desacuerdo. ¿En qué consiste?
Catedrática de Sanidad Animal y codirectora del Grupo de Virus Animales. Universidad Complutense de Madrid. Miembro de la SEV., Universidad Complutense de Madrid
Catedrático del área de Biología Celular. Investigador asociado del Centro Andaluz de Biología del Desarrollo. Investigador en metabolismo, envejecimiento y sistemas inmunológicos y antioxidantes., Universidad Pablo de Olavide
Profesor Titular. Dpto. de Medicina Preventiva y Salud Pública (UV). Unid. Mixta Investigación Enfermedades Raras FISABIO-UVEG. CIBER Epidemiología y Salud Pública, Universitat de València
Bioquímica y bióloga molecular, inmunológa, experta en vacunas y profesora de investigación en Procesos Sanitarios en la Facultad de Educación y en Avances en Enfermedades Infecciosas y terapia antimicrobiana en la Facultad de Ciencias de la Salud, UNIR - Universidad Internacional de La Rioja
Personal Docente e Investigador en Inmunología Humana. Instituto de Biología y Genética Molecular (IBGM), Universidad de Valladolid-CSIC y CIBEREHD, Universidad de Valladolid