tag:theconversation.com,2011:/ca-fr/topics/gestion-de-residuos-68157/articlesgestión de residuos – La Conversation2022-11-28T22:39:36Ztag:theconversation.com,2011:article/1949302022-11-28T22:39:36Z2022-11-28T22:39:36ZYa reciclamos vidrio, plástico y papel. ¿Qué hacemos con los residuos orgánicos?<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/497187/original/file-20221124-12-pebl9k.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C0%2C3930%2C2622&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">
</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-photo/close-hands-compost-vegetable-peelings-on-1735216880">Troyan / Shutterstock</a></span></figcaption></figure><p>Durante los últimos años se han intensificado los esfuerzos para separar, clasificar y gestionar los residuos de manera más eficiente. El reciclado y reutilización del vidrio, el papel y algunos plásticos están bien consolidados, pero ¿qué ocurre con los residuos orgánicos?</p>
<p>En la Unión Europea los biorresiduos representan <a href="https://www.eea.europa.eu/publications/bio-waste-in-europe">la fracción más grande (34 %)</a> entre los desechos sólidos de los municipios. En la actualidad genera alrededor de 86 millones de toneladas cada año a los que debe darse una salida. </p>
<p>Las cifras son también impactantes en otras regiones del mundo, como en <a href="https://www.unep.org/es/resources/informe/perspectiva-de-la-gestion-de-residuos-en-america-latina-y-el-caribe">América Latina y el Caribe</a>, donde se generan más de 195 millones de toneladas al año de residuos urbanos. De esa cantidad, el 50 % son residuos orgánicos y tan solo un 10 % se aprovecha. </p>
<p>Convertir los biorresiduos, sobre todo restos de alimentos y jardinería, en recursos es uno de los pasos necesarios para transformar nuestro sistema actual de economía lineal (usar y tirar) en un modelo de <a href="https://www.miteco.gob.es/es/calidad-y-evaluacion-ambiental/temas/economia-circular/">economía circular</a>.</p>
<p>Por eso, en la <a href="https://energia.imdea.org/investigacion-unidades-de-procesos-termoquimicos/">Unidad de Procesos Termoquímicos</a> de IMDEA Energía trabajamos en desarrollar rutas que permitan su valorización. En particular, empleamos un proceso usado tradicionalmente para fabricar carbón vegetal: la pirólisis. </p>
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<iframe width="440" height="260" src="https://www.youtube.com/embed/5zFOfNZSpKI?wmode=transparent&start=0" frameborder="0" allowfullscreen=""></iframe>
<figcaption><span class="caption">¿Qué es la pirólisis? Fuente: Grupo Ciberimaginario / YouTube.</span></figcaption>
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<h2>Redescubriendo la pirólisis</h2>
<p>La pirólisis consiste en la descomposición de la materia orgánica presente en el residuo al ser calentado en ausencia de oxígeno. No estamos inventando algo nuevo, sino adaptando una tecnología madura a un nuevo propósito. </p>
<p>La pirólisis de materia orgánica siempre genera tres productos: un gas, un sólido y un líquido. El gas puede emplearse como combustible para suministrar energía al proceso. El sólido es un material carbonoso, también llamado biochar. Sus aplicaciones son diversas. Nosotros investigamos su uso como filtros para depuración de gases. Por último, el líquido, denominado bioaceite, es una mezcla compleja de compuestos orgánicos. </p>
<p>Es en la obtención del bioaceite donde prestamos especial atención. Nuestro interés es convertirlo en productos químicos comerciales o en combustibles líquidos. La proporción y propiedades de los productos de pirólisis <a href="https://link.springer.com/referenceworkentry/10.1007/978-1-4939-7813-7_963">dependen de la naturaleza del residuo que se esté tratando y de las condiciones de operación</a>. </p>
<h2>Mejorando el proceso: pirólisis catalítica</h2>
<p>No obstante, los bioaceites obtenidos mediante pirólisis son demasiado complejos y muy poco estables. Presentan problemas de almacenamiento y son corrosivos. Además, los rendimientos a los productos deseados son muy bajos. Una manera eficaz de resolver estas limitaciones es añadiendo al proceso un catalizador (<a href="https://pubs.rsc.org/en/content/articlelanding/2018/gc/c8gc01722k">pirólisis catalítica</a>). </p>
<p>Los catalizadores son sustancias que tienen la capacidad de acelerar o retardar reacciones químicas. Como no participan directamente en las reacciones, no se consumen y pueden reutilizarse. Seleccionando adecuadamente su composición y estructura podemos dirigir un proceso hacia las reacciones deseadas. Como resultado, aumentamos la selectividad hacia los productos deseados. En pirólisis catalítica, las <a href="https://www.tandfonline.com/doi/full/10.1080/01614940.2017.1389109">zeolitas</a> son los catalizadores más eficientes investigados hasta el momento. </p>
<p>El proyecto <a href="https://madrid.bio3project.es/que-es-bio3/">BIO3</a> surge con el propósito de contribuir a alcanzar los objetivos de transición hacia la economía circular. En él, investigadores de diferentes instituciones trabajamos en la integración de rutas biológicas y químicas para la valorización de biorresiduos. </p>
<p>Una de las rutas investigadas es la pirólisis catalítica. Hemos llevado a cabo reacciones con mezclas de residuos de poda y alimentos, ya que forman parte de la <a href="https://www.youtube.com/watch?v=8VAikEABCaU&list=PL0XEM-j0HJQclG3VRyKGP3CY7XNnlJPny&index=2">fracción orgánica de los residuos sólidos urbanos</a>. Con el fin de encontrar las condiciones más favorables, hemos comparado los resultados con y sin catalizador. </p>
<p>Los resultados nos han confirmado que la utilización del catalizador mejora de manera drástica la calidad del bioaceite. Su composición es mucho más homogénea y estable, y está enriquecida en compuestos de valor comercial. Estos son los hidrocarburos <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Compuesto_arom%C3%A1tico">monoaromáticos</a> y los <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Fenol">fenoles</a>. </p>
<h2>Desinfectantes, disolventes y carburantes</h2>
<p>Los compuestos monoaromáticos y los fenoles tienen aplicaciones muy diversas. Pueden emplearse directamente como componentes de desinfectantes y disolventes, entre otros usos. En otras ocasiones son el material de partida para obtener otros compuestos. Es el caso de la fabricación de fármacos, resinas, explosivos y detergentes.</p>
<p>Por otro lado, los análisis que hemos realizado nos indican que tienen propiedades muy cercanas a las de los <a href="https://eur-lex.europa.eu/resource.html?uri=cellar:9cdbfc9b-d814-4e9e-b05d-49dbb7c97ba1.0010.02/DOC_1&format=PDF">carburantes del sector transporte</a>. Son candidatos, por tanto, para sustituirlos. Con ello reduciríamos la dependencia de los combustibles de origen fósil así como su impacto ambiental. </p>
<p>La <a href="https://www.un.org/es/">Organización de Naciones Unidas</a> confirmaba recientemente que <a href="https://www.un.org/es/desa-es/la-poblaci%C3%B3n-mundial-llega-los-8000-millones-de-habitantes">la población mundial ha superado los 8 mil millones de habitantes</a>. Es una cifra abrumadora, sabiendo además que <a href="https://www.un.org/es/un75/shifting-demographics#:%7E:text=Se%20espera%20que%20la%20poblaci%C3%B3n,disminuyendo%20la%20tasa%20de%20fecundidad.">la previsión es que sigamos aumentando</a>. </p>
<p>El continuo crecimiento de la población mundial y nuestros estándares de vida han llevado al planeta a una situación insostenible. La escasez de recursos y el deterioro del medio ambiente son los mayores retos a los que la humanidad debe hacer frente. </p>
<p>Aunque aún queda mucho por investigar, nuestros resultados son alentadores y demuestran que la economía circular está a la vuelta de la esquina. Es responsabilidad de todos frenar este desequilibrio galopante. Debemos asegurar que las generaciones futuras puedan vivir, y no sobrevivir, con unos mínimos de calidad.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/194930/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Patricia Pizarro de Oro recibe fondos de la Comunidad de Madrid a través del proyecto BIOTRES-CM (P2018/EMT4344). </span></em></p><p class="fine-print"><em><span>Ines Moreno recibe fondos de la Comunidad de Madrid a través del proyecto BIOTRES-CM (P2018/EMT4344).</span></em></p>Un proceso usado tradicionalmente para producir carbón vegetal puede emplearse para descomponer la materia orgánica en componentes aprovechables, como aceites para fabricar fármacos y combustibles.Patricia Pizarro de Oro, Investigadora senior en la Unidad de Procesos Termoquímicos, IMDEA ENERGÍAInés Moreno García, Investigadora Titular Asociada, IMDEA ENERGÍALicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1608292021-05-25T19:09:29Z2021-05-25T19:09:29Z¿Pueden los bioplásticos sustituir a los plásticos convencionales?<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/402682/original/file-20210525-21-a8sgw9.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C11%2C7940%2C5285&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Vasos fabricados con bioplástico.</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-photo/coloured-glasses-compostable-bioplastic-plastic-free-1554934805">Shutterstock / MikeDotta</a></span></figcaption></figure><p>Los plásticos convencionales que empleamos masivamente en la actualidad, como el polietileno, el poliestireno y otros, tienen dos problemas fundamentales:</p>
<ul>
<li><p>Se obtienen del petróleo, una fuente no renovable que acabará agotándose.</p></li>
<li><p>Suponen un grave problema medioambiental y de salud. </p></li>
</ul>
<p>La causa no es el plástico en sí, sino <a href="https://theconversation.com/por-que-no-se-reciclan-mas-plasticos-una-cuestion-de-rentabilidad-119179">que una parte importante de sus residuos se abandona en el entorno</a> donde se descomponen lentamente, <a href="https://theconversation.com/la-contaminacion-quimica-del-plastico-una-amenaza-silenciosa-116669">liberando algunos productos potencialmente peligrosos</a>, contribuyendo al cambio climático y <a href="https://www.bbc.com/future/article/20210510-how-to-recycle-any-plastic">generando micro y nanoplásticos</a> que pueden acabar entrando en nuestros organismos.</p>
<p>Ante esta situación, muchos ojos se han vuelto hacia los bioplásticos, buscando alternativas que puedan sustituir a los plásticos convencionales, sin los problemas mencionados. </p>
<p>Pero la cuestión es compleja y hay que plantearse algunas preguntas: ¿pueden los bioplásticos sustituir a los plásticos convencionales a gran escala? ¿En todo tipo de aplicaciones? ¿Desaparecen realmente los problemas ambientales y de salud asociados a los plásticos? En la actualidad hay gran controversia sobre estos temas, que son objeto de numerosos <a href="https://bioplasticseurope.eu/">proyectos de investigación</a>.</p>
<h2>¿Qué entendemos por bioplásticos?</h2>
<p>El término bioplástico es poco específico. Se pueden considerar bioplásticos dos tipos de productos:</p>
<ul>
<li><p>Los plásticos biodegradables, aunque procedan del petróleo.</p></li>
<li><p>Los plásticos biobasados, que se obtienen de fuentes renovables como maíz, caña de azúcar o celulosa, sean o no biodegradables (figura 1). </p></li>
</ul>
<p>Los más prometedores para resolver los problemas de los plásticos convencionales son los plásticos biobasados y, a la vez, biodegradables. Algunos ejemplos son los almidones termoplásticos (TPS), los polihidroxialcanoatos (PHA) y el poliácido láctico (PLA).</p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/401858/original/file-20210520-21-3u3kbb.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/401858/original/file-20210520-21-3u3kbb.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/401858/original/file-20210520-21-3u3kbb.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=491&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/401858/original/file-20210520-21-3u3kbb.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=491&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/401858/original/file-20210520-21-3u3kbb.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=491&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/401858/original/file-20210520-21-3u3kbb.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=617&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/401858/original/file-20210520-21-3u3kbb.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=617&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/401858/original/file-20210520-21-3u3kbb.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=617&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Figura 1. Producción de bioplásticos en 2020.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://www.european-bioplastics.org/market/">European Bioplastics, nova-Institute</a></span>
</figcaption>
</figure>
<h2>¿Pueden sustituir a los convencionales?</h2>
<p>El primer paso para analizar si los plásticos biobasados y biodegradables pueden sustituir a los convencionales es saber si sus prestaciones son suficientes. </p>
<p>Los plásticos convencionales tienen problemas, pero tienen también unas magníficas propiedades, que son las que justifican su uso. Aquí, la respuesta es positiva. Aunque tradicionalmente se ha considerado que los plásticos biobasados y biodegradables tenían bajas resistencia y estabilidad, en la actualidad se han desarrollado nuevas versiones con propiedades mejoradas y que pueden sustituir a los convencionales en casi todas las aplicaciones. Así, por ejemplo, hoy día el PLA se emplea en aplicaciones tan diversas y exigentes como en medicina, en envases de alimentos o en automoción.</p>
<p>La segunda cuestión sería la capacidad de producción de bioplásticos (figura 1). Mientras que al año se producen del orden de <a href="https://www.plasticseurope.org/en/resources/publications/4312-plastics-facts-2020">370 millones de toneladas (Mt) de plásticos</a>, la <a href="https://www.european-bioplastics.org/market/">producción total de bioplásticos no llega al 1 % de esa cantidad</a>. </p>
<p>La realidad es que el petróleo sigue siendo una materia prima de coste moderado, adecuada y bien conocida. Esto permite fabricar plásticos de bajo coste. Sin embargo, las fuentes renovables de las que se obtienen los plásticos biobasados son menos fáciles de trabajar y queda mucho camino para mejorar los procesos de obtención. </p>
<p>Hoy día, los plásticos biobasados son más escasos y más caros que los convencionales, por lo que difícilmente podrán sustituirlos a gran escala y a corto plazo. Pero también hay que decir que la producción de biobasados crece a mayor ritmo que la de convencionales, espoleada también por las <a href="https://www.treehugger.com/china-biodegradable-plastics-wont-solve-pollution-problem-5092996">normativas medioambientales en todo el mundo</a>. Por eso cabe esperar que los biobasados reemplacen cada día a más plásticos convencionales.</p>
<h2>Una producción limitada</h2>
<p>Tampoco se puede aumentar enormemente el ritmo de producción porque, actualmente, la mayoría de los bioplásticos se obtiene de productos alimenticios como maíz o caña de azúcar. Es técnicamente posible <a href="https://theconversation.com/quienes-son-los-responsables-del-desperdicio-de-alimentos-151230">obtenerlos de subproductos y residuos de biomasa</a>, pero es más complicado y todavía está muy poco extendido. </p>
<p>Hay que considerar que un aumento brusco de la producción en la actualidad podría conllevar que demasiada tierra cultivable y agua se dedicaran a producir materia prima para fabricar bioplásticos, especialmente en países en desarrollo. Esto podría <a href="https://www.treehugger.com/china-biodegradable-plastics-wont-solve-pollution-problem-5092996">conducir a problemas potencialmente graves de abastecimiento de alimentos</a>. </p>
<p>Además, surgirían <a href="https://noticiasdelatierra.com/mas-bioplasticos-no-contribuyen-necesariamente-a-la-mitigacion-del-cambio-climatico/">problemas ambientales en caso de deforestación para generar tierras de cultivo</a>. Así, un crecimiento más razonable del ritmo de producción de plásticos biobasados exigiría la mejora sustancial de los procesos de obtención a partir de biomasa residual.</p>
<h2>Los bioplásticos también contaminan</h2>
<p>Queda la cuestión, tampoco sencilla, de si los plásticos biobasados y biodegradables son una solución a los problemas medioambientales de los plásticos convencionales. </p>
<p>Podría pensarse que los plásticos biodegradables pueden abandonarse de cualquier manera porque se biodegradarán rápidamente y sin generar problemas, <a href="https://theconversation.com/when-biodegradable-plastic-is-not-biodegradable-116368">pero no es así</a>. </p>
<p>Por una parte, los plásticos biobasados pueden liberar aditivos igual que los convencionales al degradarse. Por otra parte, la velocidad de biodegradación depende no solo del plástico y de los microorganismos, sino también de las condiciones (temperatura, humedad, pH, concentración de oxígeno). </p>
<p>Por ejemplo, un plástico biobasado, empleado en envasado de alimentos, puede biodegradarse bien, cumpliendo la normativa, en compostadoras industriales, es decir, a temperaturas relativamente elevadas (58 °C) y con las cantidades adecuadas de agua y oxígeno. Pero tarda años en degradarse en compostadoras domésticas o en agua de mar, donde hay menos oxígeno y menor temperatura. Ese material se comportaría prácticamente como un plástico convencional si fuera abandonado en un entorno como el agua de mar.</p>
<p>No obstante, el hecho de poder compostar en condiciones industriales es una ventaja frente a los plásticos convencionales, especialmente en aquellos casos en los que un plástico es casi imprescindible. Pero resulta imposible recogerlo y reciclarlo de forma económica, como sucede en algunos envases de alimentos o en algunas aplicaciones en medicina. Esta cuestión podría ayudar a seleccionar las aplicaciones para estos materiales.</p>
<p>Concluyendo, podemos decir que los plásticos biobasados y biodegradables pueden ya sustituir a los convencionales en la mayoría de las aplicaciones. Su importancia actual es moderada porque la producción es todavía muy reducida, aunque crecerá mucho en los próximos años. Y su capacidad para degradarse en condiciones industriales, sin causar problemas medioambientales o de salud, es una ventaja que puede abrirles camino en algunas aplicaciones.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/160829/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Joaquín Martínez Urreaga recibe fondos de la Unión Europea (proyecto BIO-PLASTICS EUROPE) y del Gobierno de España (proyecto CTM2017-88989-P) para financiar la investigación sobre bioplásticos y reciclado de plásticos.</span></em></p><p class="fine-print"><em><span>Freddys R. Beltrán González recibe fondos del Gobierno de España (proyecto CTM2017-88989-P) y de la Unión Europea (proyecto BIO-PLASTICS EUROPE)</span></em></p><p class="fine-print"><em><span>Jorge Ramírez García es miembro de la American Physical Society (APS), American Chemical Society (ACS), Society of Rheology (SoR), Real Sociedad Española de Química (RSEQ) y es miembro de la Junta de Gobierno del Grupo Español de Reología. Él recibe fondos de la Comunidad Autónoma de Madrid (APOYO-JOVENES-01HQ1S-129-B5E4MM), del Ministerio de Ciencia e Innovación (PID2019-105898GA-C22) y de la Unión Europea (BIO-PLASTICS EUROPE).</span></em></p><p class="fine-print"><em><span>Marina Patricia Arrieta Dillon es miembro de Real Sociedad Española de Química (RSEQ), del Grupo Especializado de Polímeros (GEP) y la Asociación de Mujeres Investigadoras y Tecnólogas (AMIT). Ella recibe y/o ha recibido fondos para investigación del Ministerio de España (MINECO y MAE), la Unión Europea, la Generalitat Valenciana, Fundación MAPFRE, Fundación Santander Universidades y Santander-UCM. </span></em></p><p class="fine-print"><em><span>Mª Ulagares de la Orden Hernández recibe fondos de la Unión Europea y del Gobierno de España para realizar su investigación sobre bioplásticos</span></em></p>Si bien estos productos pueden sustituir a los polímeros procedentes del petróleo, su fabricación es todavía limitada. También contaminan, por lo que deben degradarse de forma industrial.Joaquín Martínez Urreaga, Catedrático de Ingeniería Química, Universidad Politécnica de Madrid (UPM)Freddys R. Beltrán González, Investigador postdoctoral especializado en el reciclado de plásticos y bioplásticos, Universidad Politécnica de Madrid (UPM)Jorge Ramírez García, Profesor Titular de Universidad, Ingeniería Química, Universidad Politécnica de Madrid (UPM)Marina Patricia Arrieta Dillon, Profesor Ayudante Doctor e Investigadora en Polímeros Sostenibles, Universidad Politécnica de Madrid (UPM)Mª Ulagares de la Orden Hernández, Catedrática de Química Orgánica, Universidad Complutense de MadridLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1602942021-05-18T19:44:48Z2021-05-18T19:44:48ZCómo poner freno al comercio ilegal de residuos plásticos<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/401337/original/file-20210518-19-1shxyr5.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C7%2C4985%2C3293&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">
</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-illustration/man-stands-on-top-plastic-waste-1383743690">Shutterstock / lassedesignen</a></span></figcaption></figure><p>Una reciente operación mundial contra la contaminación marina, coordinada por Interpol y Frontex en Europa, <a href="https://www.europol.europa.eu/newsroom/news/1-600-offences-detected-in-global-operation-against-marine-pollution">ha sacado a la luz 1 600 delitos ambientales</a>, muchos de ellos relacionados con el mercado ilegal de residuos. Uno de los resultados ha sido la detención de 22 sospechosos vinculados a una red criminal de tráfico de desechos plásticos entre Europa y Asia. </p>
<p>En los países de la OCDE, solo en el año 2020 se enviaron más de <a href="https://www.ban.org/news/2021/2/22/activists-ask-shipping-lines-to-stop-exporting-plastic-waste-to-developing-countries">1 700 millones de toneladas</a> de residuos plásticos de manera ilegal a terceros países por intermediarios o “corredores”.</p>
<p>El consumo de plástico en el mundo alcanzó en 2018 <a href="https://www.statista.com/statistics/282732/global-production-of-plastics-since-1950/">los 360 millones de toneladas</a>. La generación de residuos es tan importante que su reciclaje o valorización energética genera un mercado con un volumen de negocio esperado para 2022 de más de 50 000 millones de dólares. En la Unión Europea (UE), se generan cada año <a href="https://ec.europa.eu/commission/presscorner/detail/en/IP_18_5">25 millones de toneladas de residuos plásticos, pero solo se recuperan para su reciclaje el 30 %</a>. </p>
<p>La exportación de estos desechos a países de la UE o fuera de la UE es una opción que está prevista y permitida por la normativa europea, siempre que haya pruebas sólidas de que la recuperación de materiales se lleva a cabo en condiciones equivalentes a las marcadas por la legislación de la UE. </p>
<p>Ahora bien, la gestión operativa final de estos desechos plásticos (reciclaje y valorización energética) en los países que incentivan este tipo de gestión conlleva unos costos y pagos de tasas e impuestos. Esto a su vez genera un mercado negro para aumentar los beneficios eludiendo los gastos.</p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/401046/original/file-20210517-23-1pskm2v.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="Esquema del mercado negro de residuos" src="https://images.theconversation.com/files/401046/original/file-20210517-23-1pskm2v.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/401046/original/file-20210517-23-1pskm2v.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=393&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/401046/original/file-20210517-23-1pskm2v.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=393&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/401046/original/file-20210517-23-1pskm2v.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=393&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/401046/original/file-20210517-23-1pskm2v.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=493&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/401046/original/file-20210517-23-1pskm2v.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=493&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/401046/original/file-20210517-23-1pskm2v.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=493&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Los principales cambios en las exportaciones de residuos plásticos hacia Asia desde enero de 2018.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://www.interpol.int/es/Noticias-y-acontecimientos/Noticias/2020/Un-informe-de-INTERPOL-alerta-del-drastico-aumento-de-los-delitos-relacionados-con-los-residuos-plasticos">Interpol</a></span>
</figcaption>
</figure>
<h2>Por qué existe un mercado negro de residuos</h2>
<p>Los motivos de este comercio ilegal son varios, pero básicamente se centran en tres:</p>
<ul>
<li><p>Obtención de beneficios de un material en bruto evitando los costes del tratamiento adecuado.</p></li>
<li><p>El precio del plástico reciclado no es competitivo con el del plástico virgen cuando el precio del petróleo está relativamente bajo. Esto supone un incentivo para eliminarlo a través de terceros países.</p></li>
<li><p>Existencia de un excedente importante en el mercado generador y falta de trazabilidad, por una clara <a href="https://ec.europa.eu/commission/presscorner/detail/en/IP_18_6444">brecha entre la oferta y la demanda</a> de plásticos reciclados.</p></li>
</ul>
<p>Los envíos ilegales están favorecidos por el poco control en puertos de salida y unas licencias de exportación de materiales plásticos, cuando realmente se trata de basura plástica (declaraciones fraudulentas). </p>
<p>Los residuos acaban en países donde se procesan ilegalmente: o bien se queman en instalaciones de energía, o bien se tiran a vertederos directamente o, en el mejor de los casos, se forma un falso tejido industrial, ilegal, para reciclaje de plásticos sin el control pertinente sanitario ni de la mano de obra utilizada.</p>
<h2>Más incendios en vertederos</h2>
<p>Tras el aumento de los controles de las importaciones en los países tradicionalmente receptores de estos residuos, habiendo aún un excedente en su producción, los países del sur de Europa informaron del aumento de los incendios de residuos plásticos en plantas de tratamiento y vertederos (Fig.2). </p>
<p>En concreto, la Administración española también ha observado un <a href="https://www.interpol.int/es/Noticias-y-acontecimientos/Noticias/2020/Un-informe-de-INTERPOL-alerta-del-drastico-aumento-de-los-delitos-relacionados-con-los-residuos-plasticos">aumento de incendios en vertederos y centros de tratamiento de residuos</a> con el fin de eliminar los residuos acumulados en las campas y almacenes de algunos recicladores. </p>
<p>España solía exportar casi el 60 % de sus residuos plásticos a China y, ahora que el país asiático no permite su entrada, los centros de reciclaje no tienen la capacidad de reciclar todo el plástico que ya no se exporta. Se ha estimado que de <a href="https://www.interpol.int/es/Noticias-y-acontecimientos/Noticias/2020/Un-informe-de-INTERPOL-alerta-del-drastico-aumento-de-los-delitos-relacionados-con-los-residuos-plasticos">2017 a 2018, las incidencias de incendios de residuos en España aumentaron un 100 %</a>.</p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/401047/original/file-20210517-23-r3ctwp.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/401047/original/file-20210517-23-r3ctwp.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/401047/original/file-20210517-23-r3ctwp.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=392&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/401047/original/file-20210517-23-r3ctwp.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=392&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/401047/original/file-20210517-23-r3ctwp.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=392&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/401047/original/file-20210517-23-r3ctwp.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=493&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/401047/original/file-20210517-23-r3ctwp.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=493&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/401047/original/file-20210517-23-r3ctwp.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=493&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
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<span class="caption">Tipos de actividades ilegales de tratamiento de residuos plásticos desde enero de 2018.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://www.interpol.int/es/Noticias-y-acontecimientos/Noticias/2020/Un-informe-de-INTERPOL-alerta-del-drastico-aumento-de-los-delitos-relacionados-con-los-residuos-plasticos">Interpol</a></span>
</figcaption>
</figure>
<h2>Soluciones para mejorar la gestión de plásticos</h2>
<p>La situación actual es compleja. Existe un mayor control de estos hechos delictivos. Los países del sudeste asiático, tradicionalmente importadores de residuos plásticos, ya no lo son, al menos en las mismas cantidades. A la población se le anima a incrementar su contribución al reciclaje, y es verdad que la recuperación de materiales plásticos va en aumento, pero la industria del reciclaje es incapaz de asimilar todos los desechos.</p>
<p>Esto conduce por parte de las mafias a buscar nuevos destinos o “mercados” ilegales. Se ha observado el traslado de estos residuos a nuevos países como Turquía, e incluso dentro de la UE a Bulgaria, Rumanía y Polonia. Allí se emplean en plantas de producción energética como combustible alternativo con ahorros de unos 40 €/t de plástico quemado sin control.</p>
<p>Las soluciones a esta situación se enmarcan en tres áreas:</p>
<p><strong>1. Técnicas:</strong></p>
<ul>
<li><p>Reducir o eliminar la fabricación de plásticos no reciclables o difícilmente reciclables, como los de <a href="https://www.boe.es/doue/2019/155/L00001-00019.pdf">un solo uso</a>, y promover materiales alternativos biodegradables. </p></li>
<li><p>Incrementar la calidad de los materiales recuperados, mejorando los sistemas de recogida selectiva y eficiencia en plantas de clasificación.</p></li>
</ul>
<p><strong>2. Económicas:</strong> </p>
<ul>
<li><p>Hacer el reciclaje más rentable para las empresas, a través de normas de reciclabilidad y aumentando el % de contenido de plásticos reciclados en los nuevos productos. <a href="https://eur-lex.europa.eu/resource.html?uri=cellar:2df5d1d2-fac7-11e7-b8f5-01aa75ed71a1.0023.02/DOC_1&format=PDF">Mejorar los sistemas de gestión de los residuos puede suponer ahorros de 77-120 € por tonelada recogida</a>. </p></li>
<li><p>Impulsar la innovación y la financiación para el desarrollo de plásticos más inteligentes y reciclables. Se estiman unas necesidades de inversión de entre <a href="https://www2.deloitte.com/content/dam/Deloitte/my/Documents/risk/my-risk-blueprint-plastics-packaging-waste-2017.pdf">8 400 y 16 600 millones de euros</a>.</p></li>
</ul>
<p><strong>3. Políticas:</strong> </p>
<ul>
<li>Hacer frente a las importaciones ilegales, basándose en la modificación del <a href="https://www.basel.int/Portals/4/Basel%20Convention/docs/text/BaselConventionText-s.pdf">Convenio de Basilea</a>, un tratado internacional sobre el control de los movimientos transfronterizos de desechos peligrosos y su eliminación firmado por 180 países. El objetivo es hacer más estrictas las normas de exportación y obligar a los operadores del comercio de residuos a solicitar el consentimiento del gobierno del país receptor para la exportación. </li>
</ul>
<p>En el seno de la UE se han adoptado varios objetivos ambiciosos. <a href="https://ec.europa.eu/info/research-and-innovation/research-area/environment/circular-economy/plastics-circular-economy_en">Diez millones de toneladas</a> de plásticos reciclados se utilizarán en nuevos productos para 2025. En <a href="https://eur-lex.europa.eu/legal-content/EN/TXT/?uri=celex:32018L0852">2030</a>, el 55 % de los residuos de envases de plástico se reciclará. Las botellas de bebidas deberán contener un mínimo del 30 % de contenido reciclado.</p>
<p>Todas estas medidas y otras más que vayan surgiendo contribuirán a disminuir y eliminar la brecha entre la oferta y la demanda. Así, harán que el tratamiento ilegal de los residuos plásticos sea más difícil para las mafias y recicladores desaprensivos. </p>
<p>El reto es complicado y los consumidores también tenemos que aportar nuestro esfuerzo para cambiar pautas de consumo para que determinados productos plásticos dejen de consumirse y fabricarse.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/160294/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>José Vicente López no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>En el 2020 se enviaron ilegalmente más de 1 700 millones de toneladas de desechos plásticos a terceros países. Su gestión es costosa y los materiales reciclados siguen saliendo más caros que los vírgenes.José Vicente López, Investigador en el Departamento de Ingeniería y Gestión Forestal y Ambiental, Universidad Politécnica de Madrid (UPM)Licensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1604692021-05-17T20:27:23Z2021-05-17T20:27:23ZNecesitamos fertilizantes para alimentar al planeta, pero ¿qué hacemos con sus residuos tóxicos?<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/401073/original/file-20210517-21-uq6i00.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C900%2C5176%2C2762&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Panorámica de las balsas de fosfoyeso de Huelva.</span> <span class="attribution"><span class="source">Jesús D. de la Rosa</span>, <span class="license">Author provided</span></span></figcaption></figure><p>Los fertilizantes fosfatados son fundamentales para mantener los actuales niveles de producción agrícola en el mundo. Para obtenerlos se necesita ácido fosfórico, que se obtiene disolviendo rocas fosfáticas con ácido sulfúrico. Inevitablemente, este proceso industrial genera un subproducto residual: el fosfoyeso. </p>
<p>Este residuo, fundamentalmente formado por yeso, hereda gran parte de las impurezas de los materiales con los que se obtiene. Es a menudo peligroso y altamente contaminante. Sin embargo, también contiene ciertos elementos básicos para nuestro desarrollo tecnológico actual. ¿Por qué no transformar este residuo en un recurso?</p>
<h2>El ácido fosfórico, una materia prima esencial</h2>
<p>Actualmente, unos 7 700 millones de personas habitamos el planeta Tierra. Algunas proyecciones indican que <a href="https://www.un.org/es/global-issues/population">se podría llegar a los 9 700 millones en el año 2050</a>. Está claro que todas estas personas necesitarán alimentarse. La agricultura proporciona una fuente básica en nuestra dieta, por lo que parece evidente que en las próximas décadas deberá incrementarse la producción agrícola.</p>
<p>Sin embargo, solo el 12 % de la superficie del planeta es cultivable, de forma que la capacidad para alimentar a toda la población está muy limitada. Aquí entran en juego los fertilizantes fosfatados (entre otros), que aumentan la capacidad productiva de los suelos cultivables. Así, <em>a priori</em>, podrían producir lo suficiente para satisfacer las necesidades de todos.</p>
<p>La materia prima necesaria para obtener estos fertilizantes es el ácido fosfórico, un producto muy común en la industria alimentaria (aditivo E-338). Le da esa especial característica a los refrescos de cola; se podría decir que es su secreto. Cada litro de estas bebidas contiene unos 500 miligramos.</p>
<p>Se explotan anualmente <a href="https://pubs.usgs.gov/periodicals/mcs2021/mcs2021.pdf">unos 250 millones de toneladas de rocas</a> con minerales fosfatados para producir ácido fosfórico. Por cada tonelada de este ácido obtenida, se producen 5 toneladas de fosfoyeso. Con los esperados incrementos de población y producción agrícola, será inevitable que aumente notablemente la generación de fosfoyeso. </p>
<p>Se estima que la industria de fertilizantes fosfatados a nivel mundial <a href="https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/19406560/">produce 280 millones de toneladas de fosfoyeso al año</a>. Este valor se incrementará considerablemente en tiempos venideros. </p>
<h2>¿Qué es y qué se hace con el fosfoyeso?</h2>
<p>El fosfoyeso es una mezcla de un material sólido (fundamentalmente yeso), un mineral comúnmente utilizado en la industria de la construcción y una parte líquida extraordinariamente ácida. Esta porción líquida está formada por ácidos fosfórico y fluorhídrico, que no pudieron ser recuperados en el proceso industrial, y ácido sulfúrico, resto de la materia prima con la que se disuelve la roca fosfatada. </p>
<p>En la mezcla también se acumulan grandes cantidades de metales y metaloides procedentes de los componentes originales. Muchos de ellos son áltamente tóxicos, como el arsénico o el cadmio. También contiene radionúclidos como el uranio, el radio y el radón.</p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/400321/original/file-20210512-24-1dk14li.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/400321/original/file-20210512-24-1dk14li.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/400321/original/file-20210512-24-1dk14li.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=800&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/400321/original/file-20210512-24-1dk14li.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=800&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/400321/original/file-20210512-24-1dk14li.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=800&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/400321/original/file-20210512-24-1dk14li.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=1005&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/400321/original/file-20210512-24-1dk14li.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=1005&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/400321/original/file-20210512-24-1dk14li.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=1005&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Imagen de detalle del fosfoyeso de Huelva.</span>
<span class="attribution"><span class="source">Carlos Ruiz</span>, <span class="license">Author provided</span></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Debido a esa toxicidad, la parte sólida del residuo (el yeso) tiene una aplicación muy limitada. Lo más común es depositarlo en grandes acumulaciones, habitualmente cerca de zonas costeras donde se encuentran las factorías de producción de ácido fosfórico.</p>
<p>Cabe destacar el estado de Florida (EE. UU.) como zona productora de ácido fosfórico y, por lo tanto, de fosfoyeso. Allí se asienta una de las mayores industrias de fertilizantes fosfatados del mundo. Solo en este estado, hay aproximadamente <a href="https://fipr.floridapoly.edu/about-us/phosphate-primer/phosphogypsum-stacks.php">un billón de toneladas de fosfoyeso acumulados en unos 25 vertederos gigantescos</a>, con extensiones de hasta 2 kilómetros cuadrados y más de 60 metros de altura. Otros ejemplos los podemos encontrar en China, Canadá, Brasil, Túnez, y un largo etcétera. </p>
<p>En España, esta industria no está especialmente asentada. Sin embargo, en la ciudad de Huelva (Andalucía) existe una gran acumulación de fosfoyeso con una importante repercusión social, ambiental e incluso mediática. </p>
<p>En esta balsa, a menos de 100 metros de la ciudad, <a href="https://sge.usal.es/archivos/geogacetas/geo62/geo62_27.pdf">se acumularon aproximadamente 100 millones de toneladas generadas entre 1967 y 2010</a>. Ocupan una superficie de 12 kilómetros cuadrados. El residuo fue depositado directamente sobre las marismas del río Tinto, sin ningún tipo de aislamiento. Once años después del cese de la actividad aún no se ha ejecutado un plan de restauración que, por otro lado, esta siendo muy discutido.</p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/400502/original/file-20210513-12-eceguh.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="Imagen con delimitación de las zonas industriales y balsas de fosfoyeso de Huelva" src="https://images.theconversation.com/files/400502/original/file-20210513-12-eceguh.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/400502/original/file-20210513-12-eceguh.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=404&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/400502/original/file-20210513-12-eceguh.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=404&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/400502/original/file-20210513-12-eceguh.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=404&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/400502/original/file-20210513-12-eceguh.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=507&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/400502/original/file-20210513-12-eceguh.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=507&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/400502/original/file-20210513-12-eceguh.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=507&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Imagen aérea de las balsas de fosfoyeso de Huelva.</span>
<span class="attribution"><span class="source">Imagen tomada de Google Earth</span></span>
</figcaption>
</figure>
<h2>Impacto ambiental del fosfoyeso</h2>
<p>Desafortunadamente la gestión ambiental de estos residuos no es siempre la adecuada. Un claro ejemplo <a href="https://www.youtube.com/watch?v=JxUfzRJsAMw">ocurrió en septiembre de 2016 en Mulberry (Florida)</a>. Más de 800 millones de litros de aguas radioactivas y contaminadas fueron vertidas al acuífero de Florida, <a href="https://www.forbes.com/sites/trevornace/2016/09/23/massive-sinkhole-leaks-radioactive-water-into-floridas-aquifer/?sh=47dc0d665ed8">la mayor y principal fuente de agua potable del Estado</a>.</p>
<p>Más recientemente, el 3 de abril de 2021, <a href="https://www.theguardian.com/us-news/2021/apr/03/florida-emergency-piney-point-phosphate-plant-pond-leak-radioactive-flood-ron-desantis">el gobernador de Florida declaró el estado de emergencia en el condado Manatee (Tampa)</a> por la posibilidad de una “descarga inminente y no controlada” del agua de otra balsa de fosfoyesos. La noticia tuvo gran repercusión en la prensa local de Huelva. Reinició <a href="https://www.huelvainformacion.es/huelva/Fertiberia-Florida-Huelva_0_1562545959.html">la eterna discusión sobre la viabilidad del proyecto de restauración de los depósitos de fosfoyeso de Huelva</a>.</p>
<p>El caso de las balsas de Huelva es singular, y su impacto ambiental relevante. Debido a su localización en las marismas del río Tinto, sufren un constante proceso de interacción con el agua del estuario asociado a las mareas. Esto fomenta un constante flujo de contaminantes hacia el estuario, y, por lo tanto, conlleva un riesgo ambiental. </p>
<h2>¿Fosfoyeso, un residuo o un recurso?</h2>
<p>El fosfoyeso se ha considerado tradicionalmente un residuo. Pero en los últimos años se está investigando en todo el mundo su potencial revalorización.</p>
<p>Este material podría ser utilizado directamente en agricultura. Su alto contenido en calcio, fósforo y azufre permitiría su uso como enmienda en suelos, mejorando sus características agronómicas. Ha sido utilizado en la industria de la construcción como aditivo en la fabricación de ladrillos, tejas, cemento e incluso en carreteras. Sin embargo, en la mayoría de los casos es necesario un tratamiento previo para evitar la liberación de contaminantes al medio ambiente. Este costoso proceso hace inviable su reciclado. </p>
<p>Una opción muy prometedora es la obtención de las materias primas contenidas en el fosfoyeso. Este es el caso de las tierras raras, elementos muy valiosos por su aplicación en productos tecnológicos como catalizadores, imanes, dispositivos móviles, etc. Pero estas iniciativas requieren de una inversión inicial elevada y apoyo gubernamental. En ocasiones, como la agricultura, se enfrentan con el rechazo social. Por eso las experiencias de reutilización y reciclado del fosfoyeso son muy limitadas a nivel mundial.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/160469/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Francisco Macías recibe fondos del programa FEDER Andalucia 2014-2020 a través del proyecto RENOVAME (FEDER-UHU-1255729)</span></em></p><p class="fine-print"><em><span>Carlos Ruiz Cánovas recibe fondos del Ministerio Español de Economía y Competitividad a través del proyecto VALOREY (MINECO; RTI2018-101276-J-I00) y del Subprograma Estatal de Incorporación Ramón y Cajal 2019 (RYC2019-027949-I)</span></em></p><p class="fine-print"><em><span>Rafael Pérez recibe fondos del Ministerio Español de Economía y Competitividad a través del proyecto CAPOTE (MINECO; CGL2017-86050-R) y del Fondo Europeo de Desarollo Regional y la Universidad de Huelva a través del proyecto EMFHA-SIST (FEDER; UHU-1253533).</span></em></p>La fabricación de estos productos utilizados para aumentar la producción agrícola genera fosfoyeso, un residuo contaminante que podría gestionarse para recuperar materias primas.Francisco Macías, Investigador del Departamento de Ciencias de la Tierra, Universidad de HuelvaCarlos Ruiz Cánovas, Investigador Ramón y Cajal en Geoquímica Ambiental, Universidad de HuelvaRafael Pérez, Profesor Titular en el Área de Cristalografía y Mineralogía, Universidad de HuelvaLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1599582021-05-03T20:08:15Z2021-05-03T20:08:15ZLos vertederos son una fuente de alimento para muchas aves: ¿qué pasará si los cerramos?<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/397878/original/file-20210429-13-1fg4164.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C0%2C4608%2C3435&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Cigüeñas blancas en un vertedero.</span> <span class="attribution"><span class="source">David González del Portillo</span>, <span class="license">Author provided</span></span></figcaption></figure><p>Cada año se generan más de <a href="https://datatopics.worldbank.org/what-a-waste/trends_in_solid_waste_management.html">2 000 millones de toneladas</a> de basura en el mundo. De ellas, aproximadamente el 50 % son restos orgánicos procedentes del desperdicio de alimentos. El destino final de gran parte de esta basura son los vertederos a cielo abierto.</p>
<p>Este dato dibuja un escenario claramente dramático desde un punto de vista social y de sostenibilidad ambiental. Sin embargo, <a href="https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S2351989417301257">muchos animales</a> han encontrado en los vertederos una fuente de alimentación realmente atractiva, que han sabido explotar casi a la perfección. </p>
<p>Los vertederos son fuentes de alimento muy abundantes y predecibles: hay comida en el mismo sitio durante todo el año. Especies de aves oportunistas como las gaviotas, los córvidos o los milanos son asiduas a nuestros vertederos. </p>
<p>Además, aves migratorias como las cigüeñas pueden usar los <a href="https://onlinelibrary.wiley.com/doi/abs/10.1111/ibi.12566">vertederos como lugares de parada</a> y repostaje en sus viajes, sabiendo que siempre encontrarán alimento allí. De hecho, el aumento de la materia orgánica en vertederos durante las últimas décadas ha ocasionado que algunas especies hayan atenuado o incluso suprimido su comportamiento migratorio. Al existir comida todo el año, no han tenido tanta necesidad de migrar a zonas con climas más suaves.</p>
<h2>Una fuente de alimento fácil y 24 horas</h2>
<p>Los restos orgánicos son fácilmente accesibles en el vertedero. No hace falta una gran inversión energética para obtenerlos. Esto los convierte en algo parecido a un supermercado gratuito abierto 24 horas. </p>
<p>El resultado es que los animales que se alimentan en los vertederos suelen tener mejor condición corporal, pueden destinar más recursos a reproducirse y disponen de mayor cantidad de alimento y de manera más constante para alimentar a sus crías. Por consiguiente, tienen más descendientes que sus congéneres que no explotan estos recursos. También permite que individuos heridos o enfermos, que en condiciones normales no sobrevivirían, puedan no solo sobrevivir, sino reproducirse y sacar adelante su prole.</p>
<p>Más aún, para muchas especies animales en declive o amenazadas, como la cigüeña blanca, el buitre negro o el alimoche, los vertederos han supuesto, o suponen, el acceso asegurado a una fuente de alimento alternativa en algunas zonas. Este alimento puede ser crucial para muchos de ellos cuando presentan dificultades para acceder al alimento habitual o directamente se les ha privado de sus fuentes de alimentación tradicionales.</p>
<h2>Venenos y enfermedades</h2>
<p>Sin embargo, no todo son ventajas. En los vertederos el alimento se mezcla con metales, plásticos y otros compuestos tóxicos. Alimentos intactos en sus bandejas de plástico se juntan con otros podridos, generando la proliferación de bacterias y hongos. Por tanto, alimentarse en los vertederos también tiene sus riesgos. </p>
<p>La “comida basura” se puede convertir en una trampa a corto y largo plazo debido a la intoxicación por plásticos y metales pesados, el desarrollo de infecciones y enfermedades o, incluso, la proliferación de heridas o amputaciones causadas por el contacto con materiales cortantes o punzantes. Estos peligros afectan tanto a los adultos que se alimentan allí como a sus crías, que son alimentadas con este recurso.</p>
<p><a href="https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0048969721012857">En un reciente estudio</a>, hemos comprobado que, en el caso de la cigüeña blanca, un uso intenso del vertedero por parte de los padres incrementa la mortalidad de los descendientes tras la independencia. Seguramente se debe a los efectos nocivos a medio y largo plazo de la alimentación de los jóvenes con “comida basura”. </p>
<p>Sin embargo, las aves que apenas visitan el vertedero tampoco lo tienen fácil. Estos individuos tienen más dificultades para sacar adelante a su progenie durante el periodo que están en el nido. Seguramente, porque les es más difícil encontrar alimento, pero la supervivencia de sus pollos en el futuro será más alta. </p>
<p>La estrategia ideal para asegurar la descendencia es, por tanto, un uso moderado del vertedero. Complementar los recursos disponibles en la naturaleza con la alimentación en los vertederos cuando aquellos escasean permite que los adultos saquen adelante a más crías, mejorando su éxito reproductor y la supervivencia futura.</p>
<h2>El futuro incierto de los vertederos</h2>
<p>Además de la adecuada separación y procesamiento de los desperdicios orgánicos aprovechándolos para compostaje o producción energética, la <a href="https://eur-lex.europa.eu/legal-content/ES/TXT/?uri=celex%3A31999L0031">actual política europea</a> favorece la reducción de la generación de desperdicios alimenticios en todas las etapas: producción, consumo y desecho. </p>
<p>La misma <a href="https://eur-lex.europa.eu/legal-content/ES/TXT/HTML/?uri=CELEX:32018L0850&from=EN">política</a> incentiva también la transformación de los vertederos a cielo abierto en instalaciones cerradas para impedir el acceso de los animales, principalmente debido a su papel como potenciales dispersantes de enfermedades y en accidentes aéreos. A día de hoy, la gran disponibilidad de materia orgánica en vertederos que utilizan numerosas especies animales está desapareciendo conforme los vertederos se adaptan a la normativa.</p>
<p>Muchas especies animales disminuirán sus poblaciones, migrarán a zonas con vertederos todavía activos o cambiarán su tipo de alimentación, como ya se ha <a href="https://imedea.uib-csic.es/communication_details.php?id=1861&tp=n#.YIgn1rUzZPY">documentado en las gaviotas</a>. Sin embargo, no queda tan claro que otras especies puedan hacer lo mismo, más aún cuando las áreas de alimentación tradicionales que utilizaban anteriormente han sido transformadas o han desparecido. ¿Qué ocurrirá con estas especies cuando no dispongan de los vertederos para cubrir sus requerimientos alimenticios?</p>
<p>Es una incógnita difícil de responder, por ello el seguimiento de las especies que se alimentan en los vertederos se convierte en un elemento crucial desde un punto de vista sanitario, ecológico y de conservación.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/159958/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Alejandro López García ha recibido fondos de Fundación Universidad Complutense de Madrid en relación al proyecto "Seguimiento y análisis de la población de Cigüeña blanca en el VRSU de Alcalá de Henares". Actualmente Alejandro López García esta financiado por un contrato predoctoral UCM Fundación Banco Santander (CT63/19-CT64/19).</span></em></p><p class="fine-print"><em><span>Ana Sanz Aguilar y Jose I. Aguirre no reciben salarios, ni ejercen labores de consultoría, ni poseen acciones, ni reciben financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y han declarado carecer de vínculos relevantes más allá del puesto académico citado.</span></em></p>Muchos animales se alimentan en los vertederos. Allí encuentran comida fácilmente que les permite sobrevivir, aunque pueden ingerir sustancias tóxicas y contraer enfermedades.Ana Sanz Aguilar, Investigadora en el Grupo de Ecología y Demografía Animal del IMEDEA y en el Grupo Zoología Aplicada y de la Conservación, Universitat de les Illes BalearsAlejandro López García, PhD Student, Universidad Complutense de MadridJose I. Aguirre, Prof. Dpto. Biodiversidad, Ecología y Evolución, Universidad Complutense de MadridLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1410042020-06-28T19:39:01Z2020-06-28T19:39:01ZPlástico o vidrio: ¿qué botella debemos escoger para cuidar el medioambiente?<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/342782/original/file-20200618-41221-qu37rm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C0%2C3494%2C2326&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">El análisis de ciclo de vida evalúa la sostenibilidad de un producto.</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.pexels.com/photo/glass-bottles-in-bag-3735218/">Polina Tankilevitch/Pexels</a></span></figcaption></figure><p>Imagine que entra en un supermercado a hacer la compra. Quiere comprar dos botellas grandes de agua. Localiza el lineal de las bebidas y cuando está a punto de coger instintivamente dos botellas de plástico (concretamente <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Tereftalato_de_polietileno">PET</a>, pero vamos a llamarlo plástico), se para durante un segundo y piensa: ¿plástico? </p>
<p>No quiere seguir usando plástico, así que mejor escoge las de vidrio. Pero ¿en base a qué ha tomado esa decisión?</p>
<p>Si queremos hacer un análisis más profundo, debemos entender bien dos conceptos: el análisis de ciclo de vida y la unidad funcional. </p>
<h2>Desde la fábrica al frigorífico</h2>
<p>El análisis de ciclo de vida (ACV) es una herramienta que nos permite observar y analizar la vida entera del producto, mucho antes de que llegue a sus manos. </p>
<p>En el caso de una botella, empezamos por el momento que extraemos de la naturaleza los materiales que se van a utilizar para fabricarla (fase de extracción). A continuación, se analizan los procesos de fabricación de la botella (fase de producción) y después el transporte a una planta de relleno de agua y a la tienda donde comprará su botella de agua (fase de transporte). </p>
<p>Ahora ya tiene la botella en su mano y puede beber tranquilamente (fase de uso). Finalmente, ¿qué hacemos con la botella? La podemos reciclar, o tirar a la basura (fase de fin de vida). </p>
<p>El ACV tiene en cuenta todas las fases y estudia qué materiales y energía se utilizan en cada una. También toma nota de las emisiones que se producen en cada fase y cuantifica el daño que estas emisiones hacen al medioambiente.</p>
<h2>El concepto de unidad funcional</h2>
<p>Cuando queremos saber qué producto es mejor para el medioambiente (por ejemplo, botella de plástico o de cristal) no se puede comparar el producto en sí. Lo vemos con un ejemplo. Imaginamos el siguiente escenario: un viaje entre Gijón y Madrid de 500 km. Queremos saber qué transporte es más sostenible: un coche de 5 plazas o un autobús de 60 plazas.</p>
<p>No podemos comparar un viaje en coche con un viaje en autobús, porque cada uno de ellos lleva distinto número de personas. Podríamos establecer como unidad de comparación el desplazamiento de 60 personas entre Gijón y Madrid. De esta forma, compararíamos un viaje en autobús (500 km), con 50 viajes en coche, o sea 25 000 km (el vehículo es de cinco plazas, pero el conductor solo deja a cuatro ocupantes, luego tiene que volver a Gijón a por más). </p>
<p>Esa unidad de comparación se denomina unidad funcional y es importante definirla bien antes de hacer cualquier comparación. </p>
<p>En el caso de la botella, la unidad funcional que nos sirve de comparación podría ser una botella que almacena 33 cl de agua. Es importante subrayar la función: almacenar una determinada cantidad de agua porque nuestro primer pensamiento podría ser “comparo un kilogramo de plástico con un kilogramo de vidrio”. Error. Debemos pensar cuánta cantidad de plástico necesito para almacenar 33 cl de agua y cuánta de vidrio. Eso sí es una buena comparación.</p>
<p>Bien, sabemos cuál es la unidad funcional y también que debemos analizar todas las fases del ciclo de vida del producto, entonces ¿qué es mejor para el medioambiente, la botella de vidrio o la botella de plástico?</p>
<h2>¿Qué significa “ser mejor”?</h2>
<p>Todavía no se desvela el ganador. Es necesario ponerse de acuerdo en lo que significa “ser mejor para el medioambiente”. Podemos elegir las emisiones de CO₂ como baremo: cuantas más emisiones, peor para el medioambiente. Pero qué ocurre si el que menos CO₂ emite es el que más materiales o agua necesita, o daña más la salud humana… Entonces, ¿qué es mejor para el medioambiente?</p>
<p>Podemos llegar a una combinación de todos estos efectos. <a href="https://www.researchgate.net/publication/230770853_Recipe_2008">La metodología ReCiPe</a> tiene en cuenta, entre otros factores, el cambio climático, la acidificación, la toxicidad, el daño a la salud por ozono, el agotamiento de recursos fósiles y minerales. Estos se agrupan en: agotamiento de recursos, deterioro de ecosistemas y daño a la salud humana. Es uno de los métodos más conocidos de evaluación del impacto del ciclo de vida y la puerta a descubrir si es mejor el vidrio o el plástico. </p>
<h2>Y el ganador es…</h2>
<p>El plástico. Pero… ¿cómo puede ser? Eso no es lo que esperaba…</p>
<p>Coca-Cola fue, en 1969, la primera empresa en utilizar un análisis de ciclo de vida para decidirse entre vidrio o plástico. Presentó su botella de plástico en los años 70. <a href="https://www.nytimes.com/1975/06/04/archives/cocacola-trying-a-plastic-bottle-pepsicola-contends-it-will.html">El <em>New York Times</em> publicaba la noticia</a> que presentaba los beneficios del plástico frente al vidrio, principalmente por el mayor impacto ambiental del vidrio en la fase de transporte.</p>
<p>Desde entonces se han hecho <a href="https://www.researchgate.net/publication/314100348_Comparison_of_Life_Cycle_Assessment_of_PET_Bottle_and_Glass_Bottle">más análisis</a> que corroboran aquel primer estudio. Ojo, que no estamos diciendo que el plástico sea bueno, sino que, con un análisis profundo, el vidrio es peor.</p>
<p>El mayor problema del plástico es <a href="https://theconversation.com/por-que-no-se-reciclan-mas-plasticos-una-cuestion-de-rentabilidad-119179">su fin de vida</a>. A pesar de todas las campañas de publicidad, <a href="https://www.europarl.europa.eu/news/es/headlines/society/20181212STO21610/reciclaje-y-residuos-de-plastico-en-la-ue-hechos-y-cifras">el nivel de reciclado en Europa es del 30 %</a>. Eso implica que se acaba incinerando (39 %) o termina en vertedero (31 %). En ambos casos, se liberan sustancias tóxicas al aire y a la tierra. </p>
<p>Un 70 % es una cantidad muy alta y por eso la <a href="https://ec.europa.eu/environment/efe/news/ambitious-new-strategy-make-plastic-fantastic-2018-03-16_es">Unión Europea está tomando medidas</a> para modificar los patrones de consumo. Porque puede que la culpa no sea toda del material, sino de cómo nos deshacemos de él.</p>
<p>Llegamos ya a la caja del supermercado y mientras esperamos en la cola, pensamos en lo que hemos aprendido: ver toda la vida del producto, analizar la función cuando se comparan, ser consciente de la importancia del fin de vida del plástico…. Es nuestro turno. Colocamos nuestras botellas de plástico en el mostrador y el cajero nos pregunta, <a href="https://www.ted.com/talks/leyla_acaroglu_paper_beats_plastic_how_to_rethink_environmental_folklore/transcript#t-3357">¿quiere una bolsa de plástico o de papel?</a>.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/141004/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Ramón Rubio García es miembro de Compromiso Asturias XXI y de la Asociación de Makers de Asturias. </span></em></p>Si hacemos un análisis de ciclo de vida de los mismos productos hechos con distintos materiales para evaluar su sostenibilidad podemos llevarnos una sorpresa.Ramón Rubio García, Profesor de Ecodiseño y Dibujo Industrial, Universidad de OviedoLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1406562020-06-24T20:36:07Z2020-06-24T20:36:07ZFaltan incineradoras para tantos guantes y mascarillas<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/343292/original/file-20200622-54993-1imtrs4.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=17%2C0%2C5973%2C3988&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">
</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-photo/worker-hand-wearing-gloves-putting-used-1754362157">Shutterstock / Doucefleur</a></span></figcaption></figure><p>En España hay <a href="https://www.mapama.gob.es/ide/metadatos/srv/spa/metadata.show?uuid=3604297e-756a-4d7b-83da-9967fb342a28">cerca de 200 vertederos controlados</a> entre los que acogen residuos sólidos urbanos, peligrosos e inertes. Hay también alrededor de <a href="https://www.lasexta.com/noticias/medio-ambiente/en-espana-hay-mas-de-1500-vertederos-ilegales-denuncian-descontrol-en-la-gestion-de-residuos_202002225e5147940cf2e7d8ac13ff61.html">1 500 vertederos ilegales</a>. Sin embargo, se dispone solamente de 11 incineradoras de residuos urbanos y solo una de <a href="https://www.veolia.es/medios-de-comunicacion/actualidad/veolia-amplia-su-plataforma-europea-de-tratamiento-de-residuos">residuos especiales</a>. </p>
<p>Se envía a vertedero mucha más basura <a href="https://www.retema.es/noticia/espana-es-el-pais-de-la-union-europea-que-mas-residuos-tira-a-los-vertederos-DorUZ">que sus vecinos europeos</a>, a pesar de que muchos vertederos españoles están ya completos o <a href="https://theconversation.com/los-vertederos-de-la-comunidad-de-madrid-al-borde-del-colapso-127771">a punto de alcanzar su máximo</a>. Esto, junto con los accidentes como <a href="https://www.efe.com/efe/espana/sociedad/sofocado-el-fuego-en-zaldibar-que-habia-reactivado-la-alerta-a-poblacion/10004-4178660">el derrumbe en Zaldívar</a> y los <a href="https://www.europapress.es/andalucia/huelva-00354/noticia-ecologistas-solicita-paralizacion-actividad-vertedero-nerva-ultimo-incendio-20190823193159.html">incendios en Nerva</a>, pone en tela de juicio la gestión de los residuos. </p>
<p>A pesar de ello, todavía hay una fuerte <a href="http://archivo-es.greenpeace.org/espana/es/Trabajamos-en/Parar-la-contaminacion/Incineracion-de-residuos/">oposición</a> a la incineración de residuos en España.</p>
<h2>Desventajas de la incineración</h2>
<p>A los detractores de las incineradoras no les falta razón a la hora de enfatizar los riesgos que supone la quema de residuos. Son de dos tipos principalmente:</p>
<ul>
<li><p>El riesgo de emisión de contaminantes gaseosos tales como dioxinas y furanos. </p></li>
<li><p>Los riesgos asociados a una gestión inadecuada de los residuos y la energía. Es decir, el temor a que la incineración desincentive el reciclaje o la obtención de energía por fuentes renovables. </p></li>
</ul>
<p>Estos riesgos existen y hay que conocerlos y entenderlos bien para poder hacerles frente.</p>
<h2>La incineración como proceso seguro y eficiente</h2>
<p>Con respecto a la seguridad ambiental, como ingeniero químico me corresponde defender la labor profesional de mi gremio. Desde el punto de vista ingenieril, es posible diseñar estaciones de revalorización energética de residuos seguras y eficientes. A nivel tecnológico, eso ya está superado.</p>
<p>Un posible ejemplo es la recién inaugurada central de <a href="https://www.arquitecturaydiseno.es/arquitectura/copenhill-esquiar-sobre-planta-residuos_3041/2">Copenhill</a> en Copenhague. Los daneses, para demostrar la seguridad de la operación, han construido sobre el edificio de la propia incineradora una pista de esquí y un centro de educación medioambiental.</p>
<h2>Su papel en la gestión integrada de residuos</h2>
<p>Con respecto al rol de la incineración en la gestión integrada de residuos, no debemos olvidar la pirámide invertida de prioridades. Las tres erres (reducir, reciclar y reutilizar) tienen preferencia.</p>
<p>Debemos reducir el consumo, evitando y prohibiendo las compras estacionales e innecesarias y los productos de <a href="https://www.tierra.org/una-salida-justa-y-sostenible-de-la-crisis-debe-avanzar-hacia-el-residuo-cero/">usar y tirar</a>. </p>
<p>Como consumidores, deberíamos además apostar por aquellos productos fabricados a partir de materiales reciclados, aunque a veces sean más caros o de peor calidad. También debemos reutilizar los productos adquiridos, ya sea para el mismo fin o con una nueva utilidad. Muchos productos, como la ropa, pueden ser donados para su reutilización por otras personas. </p>
<p>De forma paralela, se pueden desarrollar iniciativas para incentivar las reparaciones de los productos estropeados. Por ejemplo, desgravando las reparaciones y luchando contra la <a href="https://theconversation.com/podemos-escapar-de-la-obsolescencia-programada-113328">obsolescencia programada</a>.</p>
<p>Cuando llega el momento de deshacernos de un residuo, debemos ayudar al reciclaje mediante la separación selectiva en contenedores específicos o en los puntos limpios. En este contexto, es vital establecer la separación selectiva de la materia orgánica en un contenedor específico (<a href="https://ecoembesdudasreciclaje.es/contenedores-de-reciclaje/contenedor-marron-organico/">el contenedor marrón</a>). La separación selectiva de la materia orgánica fácilmente biodegradable permite generar un compost de calidad, que puede usarse de forma segura como aporte de nutrientes para suelo agrícola.</p>
<p>Aunque maximicemos todas estas etapas previas, es inevitable que quede una fracción no aprovechable, normalmente compuesta por residuos que no podemos o no sabemos aun reciclar. Esta fracción, y solo esta, es la que debería contemplarse como válida para revalorización energética mediante incineración. Esta permite reducir su posible peligrosidad y su volumen.</p>
<p>Se debe enviar a vertedero solamente aquello que no se pueda incinerar junto con las cenizas de la incineración.</p>
<h2>Una alternativa a los combustibles fósiles</h2>
<p>La incineración de residuos ha de hacerse buscando el aprovechamiento energético. Es decir, la incineradora de residuos debe ser una central capaz de producir electricidad a través del calor desprendido al quemar los residuos. </p>
<p>La basura puede desplazar parcialmente al combustible fósil en la producción de electricidad, por lo que la convierte en un tipo de fuente de energía parcialmente renovable. </p>
<p>Sin embargo, una correcta gestión integrada de residuos y energía debe evitar que la producción de energía sea prioritaria frente a la gestión de los residuos. </p>
<p>En otras palabras, se debe evitar a toda costa la incineración de residuos reutilizables o reciclables para producir electricidad buscando satisfacer la demanda energética. Como se ha dicho antes: primero van las tres erres y después la incineración.</p>
<h2>Los residuos de la COVID-19</h2>
<p>En las últimas semanas hemos sido testigos de la aparición de un nuevo residuo sólido urbano consecuencia de la crisis de la COVID-19: <a href="https://theconversation.com/danos-colaterales-de-la-covid-19-el-resurgir-del-plastico-137803">el material sanitario de uso en los hogares</a>. En la nueva normalidad, tenemos que utilizar guantes de un solo uso en los establecimientos y mascarillas donde no se pueda asegurar el distanciamiento social adecuado.</p>
<p>Cada hogar, residencia o negocio se ha convertido en un pequeño hospital, donde se genera diariamente una importante cantidad de <a href="https://theconversation.com/como-afecta-la-covid-19-a-la-gestion-de-residuos-municipales-137426">estos residuos no reciclables</a>, que deberían ser tratados como material sanitario. </p>
<p>Este tipo de residuo se está depositando en el <a href="https://ecoembesdudasreciclaje.es/donde-tirar-las-mascarillas/">contenedor gris o de resto,</a>. En la mayoría de las localidades españolas, su destino final es el vertedero, con los riesgos que eso supone.</p>
<p>Incluso la reciente orden <a href="https://www.boe.es/eli/es/o/2020/03/19/snd271">SND/271/2020</a>, de 19 de marzo, por la que se establecen instrucciones sobre gestión de residuos en la situación de crisis sanitaria ocasionada por la COVID-19, recomienda la incineración de estos residuos. Sin embargo, no tenemos suficientes incineradoras en España. Poner en marcha una incineradora que cumpla con los aspectos mencionados (suficiente seguridad ambiental y adecuada gestión de residuos y de energía) es un proyecto que puede tardar entre cinco y diez años. </p>
<p>Con un poco de suerte, para la próxima pandemia, ya tendremos las infraestructuras apropiadas para hacer frente de forma segura a los residuos que genere.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/140656/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Juan Manuel Paz García no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>No hay suficientes incineradoras en España para gestionar el aluvión de residuos como guantes y mascarillas, que deben ser tratados como material sanitario y evitar que terminen en vertederos.Juan Manuel Paz García, Profesor Ayudante Doctor, Departamento de Ingeniería Química, Universidad de Málaga, Universidad de MálagaLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1351622020-05-23T19:12:19Z2020-05-23T19:12:19ZMinería urbana: ¿realidad o leyenda?<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/337088/original/file-20200522-124836-xrl67q.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=12%2C6%2C4122%2C3082&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">
</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-photo/scrap-factory-292987217">yoshi0511 / shutterstock</a></span></figcaption></figure><p>En el siglo XVII, durante la <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Revoluci%C3%B3n_cient%C3%ADfica">revolución científica</a>, ya se fabricaban máquinas industriales, como los digestores a vapor (precursores de la máquina de vapor). Para su producción se utilizaban tan solo tres elementos químicos: hierro, carbono y calcio, aprovechando los nuevos métodos de producción de acero. </p>
<p>Con el avance de la sociedad, hemos ido incorporado nuevos elementos de la <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Tabla_peri%C3%B3dica_de_los_elementos">tabla periódica</a> que fue desarrollada por <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Dmitri_Mendel%C3%A9yev">Dimitri Mendeléyev</a> hace más de 150 años. </p>
<p>En el s. XVIII se introdujeron el estaño, el wolframio, el cobre y también el manganeso y el plomo. Hoy la lista de elementos que forman parte de nuestro desarrollo industrial y de nuestro entorno y que facilitan nuestra calidad de vida supone casi la totalidad de la tabla periódica. </p>
<p>Lo anterior es un indicativo del aumento exponencial de la cantidad y variedad de materiales usados por la sociedad, de la existencia de muchos más elementos en cada producto y de la utilización de mezclas complejas de elementos. </p>
<p>Llegados a este punto, podríamos preguntarnos: ¿hay suficientes minerales concentrados en la naturaleza para abastecer la demanda creciente?</p>
<h2>Elementos que se agotan rápido</h2>
<p>En 2019, coincidiendo con el <a href="https://iypt2019.org/">Año Internacional de la Tabla Periódica</a>, la UNESCO publicó la tabla periódica que aparece en la siguiente imagen:</p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/327295/original/file-20200411-124196-10odch0.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/327295/original/file-20200411-124196-10odch0.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/327295/original/file-20200411-124196-10odch0.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=423&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/327295/original/file-20200411-124196-10odch0.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=423&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/327295/original/file-20200411-124196-10odch0.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=423&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/327295/original/file-20200411-124196-10odch0.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=532&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/327295/original/file-20200411-124196-10odch0.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=532&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/327295/original/file-20200411-124196-10odch0.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=532&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Tabla periódica de los elementos publicada por la UNESCO.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://www.euchems.eu/wp-content/uploads/2018/10/Periodic-Table-ultimate-PDF.pdf">UNESCO</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p>La tabla está codificada por colores para mostrar que en algunos casos estamos consumiendo elementos muy rápido. Si continuamos haciéndolo, su disponibilidad será limitada (a menos que trabajemos en encontrar formas de reciclarlos adecuadamente). </p>
<p>Hay elementos cuya utilización está seriamente comprometida en los próximos 100 años. Un ejemplo es el indio (In). Se usa en todas las <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Pantalla_plana">pantallas planas</a> (<a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Pantalla_LED">LED</a>, QLED, OLED) como parte de una película conductora transparente de óxido de indio y estaño. También se emplea en láseres para fibra óptica, para soldadura en frío de componentes eléctricos y en LED azules. </p>
<p>El indio se encuentra hoy muy disperso por todo el planeta porque los yacimientos ricos han sido ya explotados. Aparece concentrado junto con minerales que contienen zinc. Por eso el indio es un subproducto de la extracción de zinc. Se calcula que esta fuente solo durará unos 20 años. Luego el precio del indio aumentará muy significativamente. </p>
<p>Otro ejemplo es el litio (Li). Este elemento es clave para la fabricación de baterías de <a href="https://theconversation.com/es-hora-de-hablar-del-impacto-social-y-medioambiental-del-coche-electrico-101264">coches eléctricos</a>, híbridos y para muchas baterías ligeras de nuestros teléfonos inteligentes, tabletas, etc.</p>
<p>Si <a href="https://publications.jrc.ec.europa.eu/repository/bitstream/JRC108710/jrc108710-pdf-21-12-2017_final.pdf">todos los vehículos que fabricamos hoy</a> llevaran baterías de litio, necesitaríamos una cantidad tan elevada que sobrepasa la disponible en la naturaleza. </p>
<h2>Metales y minerales de conflicto</h2>
<p>¿Qué podemos decir de nuestros teléfonos inteligentes? Un móvil moderno incorpora 30 elementos diferentes. Algunos de ellos, como el estaño (Sn), el tántalo (Ta), el wolframio (W) y el oro (Au), forman parte de minerales que se extraen en zonas de conflicto y en condiciones de explotación laboral. </p>
<p>Si tenemos en cuenta que solo en la Unión Europea se cambian mensualmente <a href="https://www.euronews.com/2020/02/18/our-disposable-culture-must-end-we-need-right-to-repair-not-recycle-our-smartphones-view">10 millones de teléfonos inteligentes</a>, podemos ver la magnitud del problema de suministro de materias primas.</p>
<p>Todos estos elementos forman parte de una <a href="https://ec.europa.eu/growth/sectors/raw-materials/specific-interest/critical_en">lista de metales y minerales críticos elaborada por la UE</a>. Existe un alto riesgo de que su suministro se pueda interrumpir.</p>
<p>Por otra parte, los yacimientos más ricos de muchos metales han sido ya explotados. A medida que la ley del mineral disminuye en la mina, el consumo total de energía por tonelada de mineral extraída parece aumentar. </p>
<p>Un ejemplo son las minas de cobre chilenas. La ley de mineral promedio <a href="https://dc.engconfintl.org/lca_waste/4/">ha disminuido aproximadamente un 28,8 %</a> en solo diez años. Se ha observado un incremento del consumo energético en esas minas del 46 % entre 2003 y 2013, mientras que el aumento de cobre producido para ese mismo período es del 30 %. </p>
<h2>Los comienzos: la leyenda</h2>
<p>El concepto de minería urbana surgió en los primeros años del siglo XX. Planteaba que las grandes ciudades podían producir suficientes cantidades de recursos secundarios para la producción a gran escala de materias primas. </p>
<p>La idea consistía en implementar <a href="https://theconversation.com/como-reciclar-un-coche-electrico-108868">plantas de reciclaje</a> de metales como el hierro, el aluminio y el cobre y aprovechar la energía procedente de los residuos. Esta combinación podría satisfacer las necesidades energéticas de la ciudad (calefacción y refrigeración, electricidad) y mejoraría su sostenibilidad. </p>
<p>En cierto modo, esta aproximación considera a la ciudad como un distrito minero donde los espacios urbanos son fuente de <a href="https://mitpress.mit.edu/books/metabolism-anthroposphere-second-edition">materiales antropogénicos que se pueden utilizar y reutilizar de manera cíclica</a>.</p>
<h2>La realidad</h2>
<p>La escasez de materias primas ha hecho que esta leyenda se vaya convirtiendo en inexorable realidad: en la ciudad encontramos todos los materiales de postconsumo que genera nuestra sociedad. </p>
<p>No solo producimos papel, cartón, acero, aluminio y plásticos, que son los más tradicionales. También otros mucho más preciados: </p>
<ul>
<li><p><strong>Metales.</strong> Procedentes de baterías, tubos fluorescentes, infinidad de materiales electrónicos (teléfonos móviles, ordenadores, pantallas de televisión, entre otros) y paneles fotovoltáicos.</p></li>
<li><p><strong>Cauchos.</strong> De neumáticos fuera de uso.</p></li>
<li><p><strong>Materiales de construcción y demolición.</strong></p></li>
</ul>
<p>Invertimos materias primas y energía para la fabricación y distribución de una larga lista de materiales. ¿Por qué no utilizarlos como <em>minerales urbanos</em> y extraer de ellos las materias primas críticas?</p>
<p>Detengámonos primero en los <a href="https://twenergy.com/ecologia-y-reciclaje/residuos/que-son-residuos-urbanos/">residuos sólidos urbanos</a> (RSU). Con la producción de 500 000 toneladas de este tipo de residuos y teniendo en cuenta la composición media de los mismos, podemos recuperar 17 000 toneladas de acero, 570 toneladas de cobre y 330 toneladas de aluminio. Además, podemos generar mediante sistemas de cogeneración, alrededor de 1500 GWh de energía. </p>
<p>Si tenemos en cuenta el <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Anexo:Pa%C3%ADses_por_consumo_de_electricidad">consumo medio per cápita de energía en Europa</a>, la energía producida a partir de los RSU cubriría el consumo anual de energía de una ciudad de unos 300 000 habitantes. </p>
<p>Los yacimientos urbanos suponen grandes reservas. Se estima que en <a href="https://www.deutschland.de/es/topic/medio-ambiente/mineria-urbana-las-materias-primas-del-futuro-estan-en-la-ciudad">Alemania</a> hay 60 000 millones de toneladas de material en depósitos antropogénicos.</p>
<h2>Los residuos electrónicos, una mina de oro</h2>
<p>Sin duda, el ejemplo más relevante de minería urbana es la recuperación de metales a partir de <a href="https://www.miteco.gob.es/es/calidad-y-evaluacion-ambiental/temas/prevencion-y-gestion-residuos/flujos/aparatos-electr/electricos-y-electronicos-que-son-sus-residuos.aspx">residuos de materiales eléctricos y electrónicos</a> (REE). Se trata de residuos muy peculiares que presentan altos contenidos en materiales valiosos y en sustancias peligrosas. </p>
<p>Algunos ejemplos de REE son los electrodomésticos, los equipos informáticos, los equipos de telecomunicaciones, la electrónica de consumo y las lámparas de descarga. </p>
<p>La producción mundial de REE alcanzó la cifra de <a href="https://www.unenvironment.org/news-and-stories/press-release/un-report-time-seize-opportunity-tackle-challenge-e-waste">44,7 millones de toneladas en el 2017</a> y se espera alcanzar en 2021 la cantidad de 52 millones de toneladas. En la <a href="https://www.comunidad.madrid/servicios/urbanismo-medio-ambiente/residuos-aparatos-electricos-electronicos-raee">Comunidad de Madrid</a>, la producción per cápita es de 4,75 kg/año</p>
<p>Todos estos residuos contienen metales valiosos en concentraciones superiores a los minerales de la naturaleza. Por ejemplo, en una placa de <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Circuito_impreso">circuito impreso</a> el contenido de plata (Ag) es de 3 300 gramos/tonelada y el de oro de 80 g/t. Otros elementos más valiosos aún, como el galio (Ga) y el paladio (Pd), presentan concentraciones de 35 g/t y 28 mg/kg, respectivamente. </p>
<p>Se estima que cada año se producen en todo el mundo unos <a href="https://www.infona.pl/resource/bwmeta1.element.elsevier-997b4b04-ca72-33ab-b6af-fa21df9edad9">3 millones de toneladas</a> de circuitos impresos. </p>
<p>A los anteriores elementos hay que añadir el tántalo (Ta), que forma parte de los <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Condensador_el%C3%A9ctrico">capacitores o condensadores</a> eléctricos y que también se puede recuperar. El contenido en tántalo en un <a href="https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC6515287/">capacitador EcSETCs</a> es del orden del 40-42 % de su peso. Esto supone que una placa de circuito impreso sea un verdadero yacimiento de minerales.</p>
<p>Los teléfonos móviles son otro ejemplo de <em>mineral urbano</em>. Se estima que en 2035 desecharemos unos <a href="https://en.reset.org/act/recycling-your-unwanted-mobile-phone">90 millones de unidades</a>. El contenido en oro es del orden de 0,35 g/kg. Es decir, de una tonelada de móviles se pueden recuperar 350 gramos de oro (el contenido en oro en un yacimiento rico es de unos 5 g/t).</p>
<p>Hay otros muchos ejemplos de <em>minerales urbanos</em> que afianzan la idea de que la minería urbana es una actividad esencial para la recuperación de materiales, el suministro de materias primas críticas, la sostenibilidad y la economía circular.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/135162/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Félix Antonio López Gómez recibe fondos del Ministerio de Ciencia e Innovación y de la Unión Europea (Programa H2020).</span></em></p>Los residuos sólidos urbanos y los electrónicos pueden aprovecharse para extraer elementos escasos en la corteza terrestre como el indio, el oro y el wolframio y para producir energía.Félix Antonio López Gómez, Investigador Científico del CSIC. Reciclado de Materiales, Centro Nacional de Investigaciones Metalúrgicas (CENIM-CSIC)Licensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1133152019-03-25T21:40:22Z2019-03-25T21:40:22ZAsí contribuyen los sistemas de gestión de residuos al cambio climático<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/264926/original/file-20190320-93048-qahdh.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=33%2C0%2C2760%2C2363&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">
</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/image-photo/different-colored-bins-collection-recycle-materials-416709460">Alika/Shutterstock</a></span></figcaption></figure><p>Las distintas fases que integran la gestión de residuos (recogida, transporte y tratamiento) generan impactos ambientales asociados a factores como el uso de bolsas para almacenar los residuos, los contenedores dispuestos para su depósito, el transporte hasta las plantas de tratamiento y la construcción y el funcionamiento de estas.</p>
<p>La Unión Europea ha establecido una serie de acciones prioritarias para la optimización de la gestión de los residuos municipales, cuya aplicación debería traducirse en una reducción del impacto ambiental, así como en la obtención de beneficios económicos y ventajas sociales. En ese sentido, la <a href="https://eur-lex.europa.eu/legal-content/ES/TXT/?uri=celex%3A32008L0098">Directiva 2008/98/CE</a> sobre residuos insta a los Estados miembros a desarrollar políticas de gestión que protejan el medio ambiente y la salud de las personas, asegurando un uso sostenible de los recursos. </p>
<p>Esta directiva jerarquiza los tratamientos de gestión en cinco niveles, estableciendo su prioridad. Así, la prevención es la opción preferencial por delante de la reutilización, reciclado y otras valorizaciones (valorización energética, por ejemplo), con el depósito final en vertedero como la última de las opciones posibles.</p>
<h2>La huella de carbono como indicador</h2>
<p>La evaluación del impacto sobre el cambio climático asociado a cada etapa de gestión se lleva a cabo a través de la metodología de huella de carbono, basada a su vez en la metodología de análisis de ciclo de vida, que permite evaluar de forma objetiva, sistémica y científica su impacto sobre el medio ambiente y la salud humana.</p>
<ul>
<li><strong>Etapa de recogida</strong></li>
</ul>
<p>Esta fase está constituida por el conjunto de contenedores o buzones (en el caso de la recogida neumática) puestos a disposición del ciudadano para que deposite los residuos. Su impacto está determinado por aspectos como el tipo de contenedor (de carga superior, lateral, frontal o superior o iglú), los materiales de fabricación del mismo, la dotación (litros de contenedor por habitante) y la efectividad del sistema de contenerización (masa de residuo recogido por litro de contenerización).</p>
<p>En el caso de la ciudad de Madrid, aplicando <a href="https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0959652617304389">la metodología</a> desarrollada por el grupo de investigación <a href="http://tarindustrial.etsii.upm.es/">TARIndustrial</a> de la Universidad Politécnica de Madrid, hemos estimado que el sistema de contenerización genera un impacto que asciende a 3.907 toneladas anuales de <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/CO2_equivalente">CO₂ equivalente</a>: 1,22 kg/habitante al año o 3,59 kg CO₂ equivalente/tonelada de residuo recogida.</p>
<p>Un diseño inadecuado del sistema puede aumentar el impacto sobre el medio ambiente debido al uso de más contenedores de los necesarios o la elección incorrecta del tipo de contenedor. Los de carga lateral maximizan la relación capacidad/masa, por lo que, a igualdad de material de construcción, reducen la huella de carbono en su fabricación.</p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/265073/original/file-20190321-93036-1uohytm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/265073/original/file-20190321-93036-1uohytm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/265073/original/file-20190321-93036-1uohytm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/265073/original/file-20190321-93036-1uohytm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/265073/original/file-20190321-93036-1uohytm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/265073/original/file-20190321-93036-1uohytm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/265073/original/file-20190321-93036-1uohytm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/265073/original/file-20190321-93036-1uohytm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Buzones para la recogida selectiva de residuos.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://www.flickr.com/photos/fuenlabrada/13559297724/">Ayuntamiento de Fuenlabrada/Flickr</a>, <a class="license" href="http://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/4.0/">CC BY-NC-SA</a></span>
</figcaption>
</figure>
<ul>
<li><strong>Etapa de transporte</strong></li>
</ul>
<p>Esta etapa incluye las operaciones de vaciado del contenido de los sistemas de recogida sobre un vehículo colector (camión) y su transporte hasta las plantas de tratamiento.</p>
<p>La huella de carbono de esta fase en Madrid <a href="https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S136192091630791X">asciende a 25,1 kg CO₂ equivalente/tonelada</a> de residuo recogido. Un 92,1% del impacto corresponde al ciclo de vida del combustible y el 7,9% restante a los subprocesos dentro del ciclo de vida del vehículo.</p>
<p>La reducción de la huella de carbono de esta etapa está muy ligada al diseño de la etapa de recogida, a la fuente energética empleada por el vehículo, a la fabricación del mismo y a su vida útil. Un mal diseño del sistema de recogida puede incrementar las distancias a recorrer por los camiones y afectar a su régimen de conducción: a mayor número de paradas y arranques y menores velocidades de circulación, mayores serán sus emisiones de dióxido de carbono. </p>
<p>En cuanto a la fuente energética, ciudades como Madrid, Barcelona, Valencia, Murcia, Palma de Mallorca, Castellón, A Coruña y Vigo han ido sustituyendo el tradicional diésel por gas natural, lo que ha reducido la huella de carbono. En el caso de Madrid, esta sustitución ha supuesto una reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero en todo el ciclo de vida igual al 15,6%. </p>
<p>Además, esta sustitución también ha contribuido a la mejora de la calidad del aire urbano. Asimismo, la sustitución del gas natural por biogás purificado y concentrado obtenido a partir del aprovechamiento de la fracción orgánica de los residuos (biometano) contribuye a reducir en un 92% la huella de carbono. En el futuro, la penetración de vehículos eléctricos puede reducir aún más el impacto en el cambio climático, dependiendo de la forma en la que se produzca la energía eléctrica a consumir en los vehículos.</p>
<ul>
<li><strong>Etapa de tratamiento</strong></li>
</ul>
<p>La etapa de tratamiento comprende el conjunto de operaciones destinadas a la recuperación y aprovechamiento de los recursos contenidos en los residuos o a la disposición final o eliminación de los mismos. </p>
<p>La huella de carbono de esta etapa tiene en cuenta las siguientes emisiones de gases de efecto invernadero: </p>
<ul>
<li><p>Las emisiones directas que se producen en los propios tratamientos o debidas al uso de combustibles por parte de la maquinaria de las plantas de tratamiento.</p></li>
<li><p>Las emisiones indirectas asociadas a la generación y transporte de energía eléctrica consumida en las plantas o al transporte y distribución de los combustibles fósiles auxiliares empleados por las plantas (gasóleo en incineración o gas natural con el biogás de vertedero, por ejemplo) o en la maquinaria.</p></li>
<li><p>Las emisiones evitadas como resultado de los productos obtenidos en cada tratamiento que puedan reemplazar a otros productos o las materias primas para su producción. Por ejemplo, la generación de energía eléctrica en la incineración, de compost que se puede emplear como enmienda orgánica en vez de fertilizantes y de biometano, obtenido por tratamientos biológicos, que puede reemplazar al gas natural.</p></li>
</ul>
<p>En la ciudad de Madrid, la huella de carbono del conjunto de tratamientos implementados asciende a <a href="https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0959652618328233">253 kg CO₂ equivalente/tonelada de residuo</a> (es la etapa que más contribuye al impacto total). La cifra se encuentra un 88% por debajo de la generada en la peor de las opciones de tratamiento, aquella en la que la totalidad de los residuos va a vertedero sin recuperar el biogás. </p>
<p>En este sentido, implementando procesos de digestión anaerobia, Madrid ha conseguido reducir su impacto sobre el cambio climático. En el <a href="https://www.madrid.es/portales/munimadrid/es/Inicio/El-Ayuntamiento/Parque-Tecnologico-de-Valdemingomez/Informacion-relativa-al-Parque/Que-es-el-Parque-Tecnologico-de-Valdemingomez-/Que-es-el-Parque-Tecnologico-de-Valdemingomez-/?vgnextfmt=default&vgnextoid=7c8f77ecf1375210VgnVCM1000000b205a0aRCRD&vgnextchannel=893035f988865210VgnVCM1000000b205a0aRCRD">Parque Tecnológico de Valdemingómez</a> se realizan tratamientos de recuperación de materiales reciclables, incineración con recuperación de energía (generación de energía eléctrica), compostaje, biometanización y depósito final en vertedero con recuperación y aprovechamiento del biogás generado para obtener energía eléctrica. </p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/264873/original/file-20190320-93032-9ygj0y.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/264873/original/file-20190320-93032-9ygj0y.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/264873/original/file-20190320-93032-9ygj0y.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/264873/original/file-20190320-93032-9ygj0y.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/264873/original/file-20190320-93032-9ygj0y.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/264873/original/file-20190320-93032-9ygj0y.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/264873/original/file-20190320-93032-9ygj0y.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/264873/original/file-20190320-93032-9ygj0y.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">El plástico reciclado puede usarse como materia prima para fabricar nuevos productos.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://pixabay.com/es/photos/los-residuos-de-pl%C3%A1stico-3962409/">Stux/Pixabay</a></span>
</figcaption>
</figure>
<h2>¿En el buen camino?</h2>
<p>De acuerdo a los principios de la Unión Europea, se ha de trabajar en la reducción de la generación de residuos, pero, cuando estos ya se han generado, se ha de hacer un esfuerzo en la recuperación de todas aquellas fracciones valorizables.</p>
<p>La implementación de procesos de recuperación de materiales reciclables (plásticos, acero, aluminio, vidrio, papel y cartón, etc.) y la biometanización permiten reducir el impacto de los sistemas de gestión sobre el cambio climático y aprovechar el residuo como un recurso, alineándose así con uno de los pilares de la economía circular.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/113315/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Javier Pérez Rodríguez ha recibido fondos del Ministerio de Economía y Competitividad en el marco del proyecto de investigación Optimización de la Gestión de los Residuos Municipales.</span></em></p>La recuperación de materiales reciclables y el aprovechamiento de los productos generados en el tratamiento de algunas fracciones permite reducir la huella de carbono del conjunto de procesos.Javier Pérez Rodríguez, Profesor ayudante en el Departamento de Ingeniería química industrial y del Medio Ambiente, ETSII, UPM. Miembro del grupo de investigación de Tecnologías Ambientales y Recursos Industriales (TARIndustrial), Universidad Politécnica de Madrid (UPM)Licensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.