Hablamos de un fenómeno llamado escopaestesia. En la mayoría de los casos, puede explicarse por la tendencia de nuestro cerebro a estar siempre atento a lo que ocurre en su entorno.
El exceso de serotonina por abuso de fármacos no produce una alegría desbordante, sino una afección rara y peligrosa conocida como síndrome serotoninérgico.
Según todas las evidencias, este acto involuntario sirve para refrigerar el cerebro, no para oxigenarlo, como erróneamente a menudo se cree. Además, los bostezos son contagiosos y nos ayudan a concentrarnos.
Mientras vivimos nuestras “películas” nocturnas, el cerebro está ocupado en tareas muy importantes: desde organizar recuerdos y fomentar la creatividad hasta ajustar nuestras emociones y prepararnos para desafíos futuros.
Varios estudios demuestran que la baja calidad del aire acelera el deterioro cognitivo en las personas mayores y es un importante factor de riesgo para desarrollar demencia.
El fabuloso embrollo de conexiones que une el cerebro con el resto de nuestro sistema nervioso vuelve prácticamente imposible una operación de este tipo.
Mientras que el cerebro termina de madurar entre los 25 y los 30 años, los adolescentes españoles comienzan, de media, a consumir alcohol a los 14 años. ¿Qué efectos puede tener?
Liliya Kazantseva, Instituto de Investigación Biomédica de Málaga (IBIMA)
¿Quién no ha experimentado un cambio brusco de ánimo solo por no haber comido? La falta de alimento desencadena una cascada de respuestas fisiológicas que afectan a nuestra conducta.
Los desagradables síntomas que experimentamos durante una infección no son solo efectos colaterales de la enfermedad, sino que permiten a nuestro cuerpo redirigir su energía hacia la lucha contra los patógenos. Es decir, nos sentimos mal para poder estar bien.
Los mecanismos que “desconectan” el cerebro cuando nos sometemos a una anestesia siguen sin conocerse con exactitud, aunque nuevas investigaciones arrojan luz sobre el misterio.
Es un problema que sigue intrigando a las mentes más inquietas, y para el que, quizá, ni siquiera haya respuesta. Pero preguntarnos qué es la conciencia humana mantiene viva la llama de la exploración y el asombro.
Al líquido cefalorraquídeo se le atribuye la función de retirar de las neuronas los compuestos tóxicos. Hasta ahora se creía que este sistema funcionaba, sobre todo, mientras dormimos, pero un nuevo estudio lo ha puesto en duda.
Investigadores españoles han llevado a cabo un experimento para analizar la actividad cerebral de hombres y mujeres durante el visionado de una película violenta. Y no la ven igual.
La memoria autobiográfica se inicia con el primer recuerdo vital, que surge alrededor de los tres años. Y desde entonces nuestro cerebro no para de almacenar escenas de momentos significativos y desechar (olvidar) los que considera poco importantes.
Un estudio reciente apunta a que las generaciones más jóvenes están experimentando un significativo engrosamiento de su encéfalo. Esto seguramente no nos hace más listos, pero puede ayudar a protegernos del deterioro cognitivo.
Las personas afectadas por este trastorno, que sufre uno de los componentes del grupo Supersubmarina, no son conscientes de su enfermedad o discapacidad. Ello acarrea serias consecuencias tanto para los pacientes como para sus cuidadores.
Catedrático del área de Biología Celular. Investigador asociado del Centro Andaluz de Biología del Desarrollo. Investigador en metabolismo, envejecimiento y sistemas inmunológicos y antioxidantes., Universidad Pablo de Olavide
Doctor en Psicología Clínica. Director del Máster en Gerontología y Atención Centrada en la Persona (Universidad Internacional de Valencia), Universidad Internacional de Valencia
Profesora del Departamento Psicología/ Psicología Básica. Grupo de investigación HUM-891 Investigación en Neurociencia Cognitiva, Universidad de Almería
Profesora de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Internacional de Valencia - Codirectora de la Cátedra VIU-NED de Neurociencia global y cambio social - Miembro del Grupo de Investigación Psicología y Calidad de vida (PsiCal), Universidad Internacional de Valencia