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¿Cómo garantizar búsquedas efectivas y críticas en internet?

El acceso masivo a las tecnologías digitales, a la información y a las redes sociales ha creado nuevas oportunidades y retos para la educación.

Ser competente digital no solo supone conocer las tecnologías, sino saberlas aplicar para comunicarse, gestionar la información, colaborar, crear y compartir contenidos digitales teniendo en cuenta los aspectos legales y éticos, la privacidad y la seguridad, además de mostrar una visión crítica de las tecnologías.

En este escenario, saber buscar la información en internet de forma crítica es una de las claves para devenir un ciudadano del siglo XXI.

¿Qué es la competencia digital?

La Comisión Europea define la competencia digital como uno de los 8 estándares de competencia clave para el aprendizaje permanente. El marco europeo de competencias digitales proporciona un marco completo y exhaustivo para la ciudadanía europea. En este sentido, los centros educativos deben integrar estas competencias digitales en los estudiantes de primaria y secundaria.

Sin embargo, y teniendo en cuenta que ninguna investigación actual se ha centrado en desarrollar un marco común para la educación primaria y secundaria, el proyecto europeo CRISS en el que participamos definió unas áreas competenciales para los estudiantes de primaria y secundaria.

Estas son: ciudadanía digital, comunicación y colaboración digital, búsqueda y gestión de la información digital, creación de contenidos digitales y resolución de problemas digitales. En concreto, nos centraremos en la búsqueda y gestión de la información digital: la capacidad de buscar y seleccionar los datos, la información y los contenidos digitales.

La complejidad de una búsqueda

La navegación por internet se ha convertido en una actividad absolutamente integrada en nuestro día a día. Por eso, tendemos a despreciar la complejidad tecnológica que hay detrás de una simple búsqueda y la fragilidad de los fundamentos en los que se sustenta.

Pero es importante que los estudiantes de primaria y secundaria tomen conciencia que llevar a cabo una búsqueda no es solo hacer un clic en Google introduciendo una palabra.

Para garantizar que las búsquedas en internet sean efectivas y críticas, es necesario llevar a cabo un proceso que se sistematiza en tres fases.

Antes de iniciar una búsqueda

Debemos planificar la búsqueda que queremos hacer. Hay que tener muy claro qué se quiere encontrar. Esto supone tener en cuenta algunos de los siguientes aspectos:

  1. Tener bien definido nuestro objetivo de búsqueda: qué queremos buscar, para qué lo necesitamos, en qué formato nos interesa, cómo contrastaremos la información.

  2. Elegir qué tipo de buscador procede a cada necesidad: Google es un excelente buscador genérico pero seguro que podemos indagar en un buscador más especializado para obtener mejores resultados. Igualmente, se hace necesario completarlo en otros lugares bases de datos o bibliotecas virtuales.

  3. Pensar algunas palabras clave que describan de manera precisa y, si puede ser, única, el objeto que hay que buscar y sobretodo escribirlas en una lengua mayoritaria en internet (inglés, español, francés, etc.) ya que nos ampliará el número de resultados.

  4. Elegir o discriminar diferentes canales o formatos (texto, imagen, vídeo, PDF, etc.) nos acercará a lo que realmente queremos encontrar.

  5. Usar conectores lógicos entre las palabras clave nos ayudará a refinar los términos de la búsqueda. De manera alternativa, usar determinados símbolos, como las comillas o el asterisco, eliminará resultados no deseados. La mayoría de los buscadores entienden y aceptan los operadores lógicos (AND, NOT, NEAR y OR) y sus equivalencias en forma de símbolos matemáticos.

Una vez iniciada la búsqueda

Es importante definir qué parámetros utilizaremos para seleccionar la información obtenida y evitar navegar entre resultados sin rumbo fijo. Los resultados siempre tienen que ser verificados por el usuario y contrastados con diferentes fuentes y páginas.

Muchas veces, la primera opción no es la más adecuada. Para ello debemos analizar:

  1. La procedencia de la autoría.

  2. La vigencia de la última actualización.

  3. Destinatarios de los contenidos.

  4. La calidad del contenido (gramática, ortografía, ilustraciones, etc.).

Pero ¿qué ocurre si no encontramos lo que queremos buscar? Si los resultados de nuestra búsqueda no son satisfactorios, o bien por exceso de resultados dificultando la selección, o bien por resultados insuficientes, o no concuerdan con nuestros objetivos de búsqueda, hay que revisar la estrategia utilizada y modificar algunos parámetros de la búsqueda.

Una vez finalizada la búsqueda

¿Qué hago con la información? Si la información es mucha, hay herramientas para almacenar la información de forma sencilla y ordenada, seleccionada en los diferentes procesos de búsqueda:

  1. Marcadores del navegador. La mayoría de los navegadores (Google Chrome, Mozilla Firefox, Microsoft Edge, Safari) tiene la opción que permite añadir y guardar de forma organizada direcciones de interés. Además permite la función de sincronización de favoritos y listas de lectura entre diferentes dispositivos. Acostumbran a estar situados al lado de la dirección con un icono en forma de estrella.

  2. Marcadores sociales (social bookmarks, en inglés) son herramientas que permiten localizar, etiquetar, guardar, recuperar y compartir recursos de la red desde cualquier dispositivo hecho facilita la sincronización.

  3. Sindicación de contenidos (RSS). Permite recibir información actualizada de sitios web que resulten de interés. La finalidad de la sindicación de contenidos, más conocida por las siglas RSS (Really Simple Syndication, o Sindicación Realmente Simple), es permitir un fácil acceso a la información actualizada de determinados sitios web que resulten interesantes.

Cómo citar y señalar fuentes

Para utilizar la información seleccionada la debemos referenciar correctamente: es fundamental el respeto hacia la propiedad intelectual del autor o la autora cuando procesamos, gestionamos y presentamos información localizada en internet.

Citar es la acción de indicar la procedencia de la fuente, la autoría de aquel material e información que hemos utilizado para elaborar un nuevo contenido. Si no lo hacemos estamos cometiendo plagio.

El papel del profesorado

Más allá de ser sistemáticos en el proceso de búsqueda, también es importante tener una visión crítica en el desarrollo de la competencia digital no sólo por parte de los estudiantes sino también del profesorado y la dirección del centro educativo.

El proyecto europeo DETECT (siglas en inglés de “Desarrollando la Alfabetización Digital Crítica del Profesorado”) da apoyo a los docentes de primaria y secundaria en el trabajo de las competencias digitales desde la perspectiva crítica.

Proporciona también un curso online, denominado SOLET (siglas en inglés de Entorno de Autoaprendizaje para Profesores) donde se proporciona una serie de recursos y actividades para aplicar las tecnologías desde una perspectiva crítica en el aula. De manera especial se hace énfasis en la búsqueda y localización de información en la red, ya que pone en juego que los estudiantes tomen conciencia de las implicaciones legales y de seguridad haciendo uso de las tecnologías digitales.

Importancia en bachillerato

Trabajar la búsqueda crítica de la información en la red es pues una competencia transversal que se debe trabajar en distintas asignaturas o en proyectos interdisciplinares y que se debe consolidar al finalizar la educación obligatoria. Esta habilidad adquiere especial importancia en el crédito de síntesis de bachillerato.

Dominar la competencia de búsqueda de información en internet supone ser capaz de recuperar, almacenar, organizar, presentar y difundir la información obtenida. El papel del docente es clave para facilitar y orientar en el uso y aplicación de las tecnologías en el ámbito educativo.

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