Los sensores instalados en edificios y vehículos recogen abundantes datos relacionados con sus usuarios. No solo debe garantizarse la protección de estos datos, también la privacidad.
Crecen los ciberataques a empresas y organizaciones, que deben aumentar las medidas de previsión y monitoreo para evitar sus consecuencias: pérdida de confianza, multas y daños a la gestión.
El confinamiento ha sido un escenario ideal para los ciberdelincuentes. Al haber mayor actividad en la red, ha habido también mayor exposición y por tanto más ventanas abiertas por donde intentar colarse.
Un ciberataque a una empresa involucrada en la producción de móviles, ordenadores o de los programas que utilizan puede comprometer la seguridad del cliente final.
Dada la creciente capacidad de cómputo de los ordenadores que utilizan los ciberdelincuentes y la cantidad de cuentas que mantenemos abiertas, ¿es inevitable que se comprometan nuestras contraseñas?
Los fallos humanos, y no los agujeros de seguridad tecnológicos, son la causa más habitual de los ciberataques. Su prevención tiene que ver principalmente con hábitos personales de seguridad.
Si bien es más cómodo que crear una nueva cuenta en cada web o ‘app’ que utilizamos, iniciar sesión a través de algún proveedor externo como Facebook o Google supone riesgos para la privacidad.
Vigilar los remitentes de los correos y no descargar aplicaciones de origen desconocidos son algunas de las claves para evitar que roben nuestra información sensible, o la de nuestra empresa.
Asia y Estados Unidos avanzan imparables en el tratamiento de los datos. Mientras, Europa permanece en una especie de parálisis que afecta a investigadores, empresas, universidades y hasta los propios Gobiernos.
La sobreexposición en internet de los jóvenes hará que creen una huella digital que pueda no beneficiarles en el futuro. Estas son las claves para que padres e hijos puedan controlarla.
Distintas herramientas de inteligencia artificial ayudan a las fuerzas de seguridad a prevenir infracciones, estudiar la dinámica de actividades delictivas y desmantelar redes criminales.
Profesora agregada. Directora del Máster Universitario en Seguridad de las Tecnologías de la Información y de las Comunicaciones, UOC - Universitat Oberta de Catalunya