Liliya Kazantseva, Instituto de Investigación Biomédica de Málaga (IBIMA)
¿Quién no ha experimentado un cambio brusco de ánimo solo por no haber comido? La falta de alimento desencadena una cascada de respuestas fisiológicas que afectan a nuestra conducta.
Últimamente la dieta cetogénica y el ayuno intermitente han ganado popularidad tanto como estrategia para reducir el peso corporal como por sus potenciales efectos beneficiosos para la salud y el cerebro. ¿Qué hay de cierto?
Normalmente, lo mejor es hacer ejercicio con el estómago lleno, pero la actividad física leve o moderada en ayunas podría reportar beneficios a quienes sufren algún tipo de desajuste metabólico.
Estas plantas se consumen en buena parte del mundo, sobre todo en forma de agua o té. Además de ser baratas, podrían resultar beneficiosas para nuestro cuerpo.
Existe cierto desconcierto sobre los verdaderos efectos de edulcorantes como el eritritol, la estevia o el aspartamo, y si realmente ayudan a perder peso o controlar la diabetes. Esto es lo que se sabe hasta el momento.
Los avances de la inteligencia artificial han mejorado el tratamiento de la diabetes, pero aún es necesario que el paciente siga controlando su dieta y su actividad física.
Hay quien se salta el desayuno pero también quien lo considera la comida más importante del día. ¿Quién tiene razón? ¿Puede ser el desayuno un factor determinante en el desarrollo físico y mental a lo largo del día?
Pocos productos han generado tanto debate como el azúcar. ¿Es realmente veneno? ¿Es lo mismo el azúcar de la fruta que el azúcar añadido? Si lo necesitamos para vivir, ¿cuál es la cantidad idónea?
Los tratamientos convencionales aumentan la supervivencia de personas con cáncer de páncreas pero no a largo plazo. ¿Por qué? ¿Cuáles son las nuevas terapias ya en marcha?
Los carbohidratos son nuestra fuente principal de energía y no hay que tener miedo a incluirlos en la dieta. Sin embargo, es importante identificar los más saludables para nuestro organismo.
Leixuri Aguirre, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea; Helen Carr-Ugarte, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea; Itziar Eseberri Barace, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea y Maitane González Arceo, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
El índice glucémico es un indicador que clasifica los alimentos en función del poder que tienen para aumentar la glucemia (glucosa en sangre). ¿Significa eso que debemos evitar todos los alimentos de índice glucémico alto?
La falta de tiempo nos lleva a adoptar hábitos de vida poco saludables. Nuestra alimentación es clave para mantener la estabilidad entre el intestino, la microbiota y el cerebro.
Un exceso de azúcar en sangre (hiperglucemia) es tóxico para muchos órganos, entre ellos el cerebro. De hecho, existen evidencias de que favorece la aparición de párkinson.
Si el equilibrio de la glucosa en sangre se descompensa, por exceso o por defecto, se desarrollan patologías, como la obesidad y la diabetes, responsables de una gran mortalidad y morbilidad.
Profesora Contratada Doctor del Área de Histología de la Facultad de Medicina. Investigadora del Grupo CTS429 Biología e Histología Médicas, del CIBER en Enfermedades Neurodegenerativas (CIBERNED) y del IBIMA, Universidad de Málaga
Doctora en Nutrigenómica y Nutrición Personalizada. Profesora e investigadora en la UPV/EHU. Investigadora del CiberObn del Instituto de Salud Carlos III y el Instituto de Investigación Biosanitaria Bioaraba, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
Profesora e investigadora en la UPV/EHU. Investigadora del CIBERObn del Instituto de Salud Carlos III y del Instituto de Investigación Biosanitaria Bioaraba, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea