tag:theconversation.com,2011:/es/topics/habilidades-95511/articleshabilidades – The Conversation2022-06-08T17:17:11Ztag:theconversation.com,2011:article/1753602022-06-08T17:17:11Z2022-06-08T17:17:11Z¿Cuáles deberían ser las habilidades de los futuros ingenieros?<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/458575/original/file-20220419-11-c9he1t.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=23%2C23%2C7916%2C4428&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">
</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-photo/young-femal-e-engineer-concept-gui-1377112199">Shutterstock / metamorworks</a></span></figcaption></figure><p>Las futuras generaciones de profesionales en Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas (CTIM) necesitan estar preparadas para retos considerables. Por ejemplo, garantizar la salud de una población que envejece y garantizar la seguridad de provisiones energéticas sostenible. </p>
<p>Los métodos de enseñanza de estas áreas están siendo revisados para garantizar un conocimiento de alcance internacional y a la vez ajustable a las características locales. Pero la urgencia de los problemas sociales, económicos y ambientales de cada región hace difícil el enfoque sobre las habilidades más duraderas y efectivas que los recién graduados deben tener. </p>
<p>Afortunadamente, hay una ola emergente de <a href="https://onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1002/jee.20301">expertos</a> indicando una <a href="https://advances.asee.org/empathy-instruction-through-the-propagation-paradigm-a-synthesis-of-developer-and-adopter-accounts/">manera duradera</a> de <a href="https://repository.tudelft.nl/islandora/object/uuid%3Aae3b30e3-5380-4a07-afb5-dafd30b7b433">educar</a> a los <a href="https://theconversation.com/future-engineers-need-to-understand-their-works-human-impact-heres-how-my-classes-prepare-students-to-tackle-problems-like-climate-change-173651">ingenieros</a> del futuro. </p>
<h2>Navegando el tsunami de información</h2>
<p>Es relativamente fácil perderse entre la cantidad de informes o noticias señalando retos de envergadura social y económica que impactan en el medio ambiente y la sostenibilidad de nuestro modo de vida. Unido a esto, los <a href="https://www.un.org/sustainabledevelopment/">Objetivos de Desarrollo Sostenible</a> de las Naciones Unidas abarcan una cantidad impresionante de aspectos estrechamente relacionados pero de difícil resolución. </p>
<p>En esta dirección, varios expertos de diferentes disciplinas han logrado alinear tecnologías existentes para mitigar ciertos riesgos. La idea de resolver problemas no se limita a satisfacer las necesidades actuales, sino incluir a las futuras generaciones. </p>
<p>Por ejemplo, la <a href="https://www.vox.com/energy-and-environment/2019/9/4/20829431/climate-change-carbon-capture-utilization-sequestration-ccu-ccs">captura de gases</a> que contribuyen al <a href="https://www.bbc.com/future/article/20210310-the-trillion-dollar-plan-to-capture-co2">incremento de la temperatura</a> ambiental. </p>
<p>Otro ejemplo es la posibilidad de inyectar medicinas sin causar daño a la piel y <a href="https://www.weforum.org/agenda/2021/10/new-technology-could-allow-you-to-have-a-needle-free-injection/?utm_source=twitter&utm_medium=social_video&utm_term=1_1&utm_content=24118_Dutch_scientist_needle_free_injections&utm_campaign=social_video_2021">mitigando los miedos a las agujas</a>. Reducir el uso de agujas y materiales necesarios para su transporte y uso contribuye a menor contaminación y riesgos ambientales. </p>
<p><div data-react-class="Tweet" data-react-props="{"tweetId":"1450159775321399300"}"></div></p>
<p>En algunos casos, la tecnología necesaria no existe. En otros, aún no están claros los problemas que conllevan, como con el uso de tecnologías embrionarias, como <a href="https://pubs.rsc.org/en/content/articlelanding/2018/ee/c7ee03639f">el hidrógeno solar y la electrólisis</a>.</p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/446982/original/file-20220217-23-fihjf2.gif?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/446982/original/file-20220217-23-fihjf2.gif?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/446982/original/file-20220217-23-fihjf2.gif?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=219&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/446982/original/file-20220217-23-fihjf2.gif?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=219&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/446982/original/file-20220217-23-fihjf2.gif?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=219&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/446982/original/file-20220217-23-fihjf2.gif?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=275&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/446982/original/file-20220217-23-fihjf2.gif?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=275&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/446982/original/file-20220217-23-fihjf2.gif?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=275&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Término aproximado de utilización de tecnologías solares y de hidrógeno (10 años), y algunas aplicaciones promisorias. Con permiso de Royal Society of Chemistry. ‘Pathways to electrochemical solar-hydrogen technologies’ publicado en Energy Environ. Sci., 2018, 11, 2768 DOI: 10.1039/C7EE03639F.</span>
</figcaption>
</figure>
<p><div data-react-class="Tweet" data-react-props="{"tweetId":"1490550920425480192"}"></div></p>
<p>Lógicamente, es necesario mantener y mejorar las habilidades técnicas o de conocimiento científico que ayuden a mantener los logros tecnológicos alcanzados. Y los métodos tradicionales de enseñanza, en las diferentes áreas, han contribuido en gran medida a este fin. </p>
<p>Sin embargo, es casi tanto o más importante llamar la atención sobre lo que se conoce como <a href="https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S1749772822000161">habilidades “suaves” o “blandas”</a>.</p>
<h2>¿Por qué suaves?</h2>
<p>La suavidad a la que se refiere el término tiene que ver con el hecho de que no son habilidades técnicas, por ejemplo, de cálculo, escritura, manuales o constructivas. Pero son <a href="https://www.weforum.org/agenda/2021/10/unilever-leena-nair-future-of-work-soft-skills-hard-skills/">cruciales</a> en los grandes logros tecnológicos y descubrimientos científicos: hablamos de <a href="https://www.catalyst.org/reports/empathy-work-strategy-crisis/">la habilidad de liderar</a> un equipo multidisciplinar de trabajo, por ejemplo, y del manejo y gestión de proyectos.</p>
<p>Pese al valor de estas habilidades, digamos más bien interpersonales o sociales, no <a href="https://www.thechemicalengineer.com/features/empathy-enabling-students-to-be-entrepreneurs/">todos los programas de estudios de ingeniería</a> o de las ciencias tienen un enfoque explícito para desarrollarlas durante el período de formación tradicional. </p>
<p>A diferencia de programas de estudios legales o de las ciencias médicas, donde es común entrenar a los estudiantes en el manejo de pacientes o clientes en procesos jurídicos, en las carreras de ingenierías y ciencias es algo secundario, en el mejor de los casos.</p>
<h2>Habilidades duraderas</h2>
<p>Por esta razón sería útil renombrar estas habilidades como duraderas en lugar de blandas o suaves. En primer lugar, el adjetivo suave no hace mérito al esfuerzo que conlleva adquirirlas. Típicamente es necesario recibir entrenamiento especializado de larga duración, por ejemplo en aspectos de negociación o comunicación verbal o por escrito. Los resultados de adquirir estas habilidades suele verse con el paso de los años, y además se benefician de la supervisión o tutoría de expertos de larga y reconocida trayectoria profesional.</p>
<p>En segundo lugar, son habilidades que duran toda la vida. Mientras que gran parte del conocimiento técnico tiende a volverse obsoleto durante la vida promedio de cualquier profesional (como la habilidad de utilizar calculadoras o programar con tarjetas perforadas), la habilidad de ponernos en el lugar de otros individuos nos acompaña de por vida.</p>
<h2>El ingeniero del futuro y de hoy</h2>
<p>De entre las habilidades duraderas, hay una en particular que resalta por su marcada relevancia y versatilidad: la empatía. </p>
<p>Existen muchas <a href="https://www.encyclopedia.com/medicine/psychology/psychology-and-psychiatry/empathy">definiciones</a> de la palabra empatía, según las diferentes subdisciplinas o actividades profesionales. Por ejemplo, es común encontrarla asociada a un adjetivo: empatía cognitiva, afectiva, emocional, de comportamiento, contagiosa y de proyección, por solo nombrar unas cuantas. En el campo de las carreras técnicas y tecnológicas, se habla de <a href="https://resilienteducator.com/classroom-resources/stempathy-stem-education/">STEMPathy</a>.</p>
<p>Por simplicidad, y en el contexto de este artículo, vamos a referirnos a la
<a href="https://www.youtube.com/watch?v=-DspKSYxYDM">empatía</a> como la habilidad de entender o predecir con cierta precisión las perspectivas de otros. Estos otros pueden ser personas o grupos de personas. Por ejemplo, en un equipo de trabajo o una asociación de pacientes o clientes de algún producto o servicio.</p>
<p>Partiendo de esta definición, es posible identificar las necesidades o deseos de estos otros para actuar al respecto. La acción, en este caso, se refiere a la que busca resolver el problema de los otros. Esto podría llamarse <em>empatía accionable</em>.</p>
<p>Conviene entonces redefinir lo que pudiera definirse como el ingeniero del siglo XXI:</p>
<ol>
<li><p>Es un conector activo entre la Ciencia, la Tecnología y la Sociedad.</p></li>
<li><p>Ajusta sus niveles de conocimiento e ingenio a retos prácticos. </p></li>
<li><p>Nunca cesa de aprender y enseñar a otros.</p></li>
</ol>
<p>Los profesionales de CTIM que sean capaces de empatizar en situaciones reales o imaginarias podrán entender mejor la magnitud de los problemas que aquejan a los otros. </p>
<p>Esta habilidad contribuye a encontrar y predecir el funcionamiento de soluciones tecnológicas a los problemas que se enfrentan a diario. En particular, un nivel adecuado de empatía ayuda a entender qué necesita modificarse en situaciones problemáticas. </p>
<p>Esta empatía accionable también se puede tener hacia otros seres vivos, sobre todo animales. De igual manera se puede empatizar con las generaciones que todavía están por nacer, garantizando que les dejemos un planeta más sostenible y habitable. Para esto, es necesario educar a <a href="https://www.degruyter.com/document/isbn/9783110746822/html?lang=en">ingenieros emprendedores y empáticos</a>.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/175360/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>David Fernandez Rivas recibe fondos de European Research Council y Dutch Research Council. </span></em></p>En las carreras técnicas o tecnológicas no se suele dar el espacio y la importancia necesarios a las habilidades ‘suaves’. Una vez adquiridas, son duraderas, como la capacidad de liderazgo y la empatía.David Fernandez Rivas, Professor, University of TwenteLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1781972022-03-24T20:12:36Z2022-03-24T20:12:36ZLa observación del arte como estrategia didáctica para fomentar la empatía<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/452263/original/file-20220315-15-1i8mhqo.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C450%2C5463%2C3178&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">
</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-photo/madrid-spain-march-26-2018-visitors-1086812741">Shutterstock / dmitro2009</a></span></figcaption></figure><p>En la tradición de las Ciencias Sociales, las técnicas de investigación que permiten el desarrollo de la empatía han sido las propias del método etnográfico, que se han ido exportando a otras disciplinas: observación participante y entrevista en profundidad. </p>
<p>Las metodologías de aprendizaje significativo activo en el marco de una investigación centrada en la docencia se articulan así en la intersección entre entrenar la escucha y la mirada. El objetivo didáctico sería aprender a escuchar y a observar atentamente. Para ello incorporamos técnicas como la entrevista en profundidad, las narrativas, el método biográfico con historias o relatos de vida, o la aplicación del <em>storytelling</em>. </p>
<p>El objetivo de estas prácticas es que los estudiantes consigan registrar información obtenida mediante observación participante, procesos de creación/recepción visual (foto/vídeo), mapas cognitivos, o desarrollo de <em>storyboard</em>.</p>
<p>Siendo este esquema general válido para diferentes ámbitos de conocimiento, se puede aplicar, y de hecho se aplica, en la formación específica de profesionales de la salud. La empatía podría ser considerada como una <a href="https://www.dykinson.com/libros/marco-competencial-en-promocion-y-educacion-para-la-salud-experiencias-iberoamericanas/9788413773582/">competencia genérica esencial</a> para todos aquellos profesionales que trabajan atendiendo a otras personas en el cumplimiento de los derechos fundamentales: salud, educación, justicia.</p>
<h2>¿Un departamento de empatía?</h2>
<p>En este sentido, presentamos una propuesta utilizada con frecuencia en otros países como el Reino Unido y Estados Unidos, en la formación universitaria de estudiantes de ciencias de la salud, pero que se puede utilizar en cualquier ámbito. </p>
<p>Algunos debates siguen vigentes sobre si la empatía se puede enseñar o no. Muchos de los <a href="https://doi.org/10.1136/medhum-2014-010584">estudios recientes</a> <a href="https://doi.org/10.1177/23821205211000346">indican</a> que, aunque hay personas más empáticas que otras, efectivamente es una habilidad que se puede y debe fomentar <a href="https://doi.org/10.1136/emermed-2021-212078">desde las aulas universitarias</a>. De hecho, la Universidad de Oxford, en el Reino Unido, cuenta con un departamento, parte de la Facultad de Filosofía, dedicado a la investigación y la enseñanza de la empatía a trabajadores de la salud.</p>
<h2>Cómodos en la incertidumbre</h2>
<p>La Educación en Salud Apoyada en Museos (<em>Museum Based Health Education</em>) plantea <a href="https://eric.ed.gov/?id=ED568850">estrategias para fomentar la empatía</a> al estimular el pensamiento crítico, la <a href="https://www.routledge.com/Slow-Looking-The-Art-and-Practice-of-Learning-Through-Observation/Tishman/p/book/9781138240414">observación lenta</a>, la escucha atenta, el respeto por opiniones diversas y diferentes puntos de vista y al invitar al estudiante a sentirse más cómodo con la incertidumbre y a aceptar que hay algunas situaciones para las cuales puede no haber <a href="https://journals.lww.com/academicmedicine/Fulltext/2021/08000/How_Visual_Arts_Based_Education_Can_Promote.32.aspx">una respuesta específica</a>.</p>
<p>El escenario ideal de estas actividades son las galerías y museos. Sacan al estudiante de su medio usual de aulas y hospitales, y propician que muestre otras facetas de sí mismo. En este ámbito, ni las jerarquías ni el conocimiento previo son requerimientos para la actividad. Se trata de proveer un espacio seguro y de respeto donde las personas se pueden expresar libremente y puedan explorar sus sentimientos, sesgos y prejuicios.</p>
<h2>Qué son buenas prácticas</h2>
<p>Podemos enumerar varias buenas prácticas, aunque nos centramos en dos por haber constatado su utilidad en la práctica docente; no sólo en Ciencias Sociales sino también en Ciencias de la Salud. Tanto en la observación lenta de pinturas, como en el <a href="https://closler.org/connecting-with-patients/the-personal-responses-tour-in-medical-education">tour de respuesta personal</a>, la obra de arte actúa como un <a href="https://doi.org/10.4300/JGME-D-11-00036.1">“tercer objeto”</a>. </p>
<p>En la observación lenta de pinturas se invita a los estudiantes a mirar los detalles de una obra de arte, entenderlos con relación a la vida del autor y su obra, y cómo se puede relacionar con las actividades diarias que realizarán como profesionales. </p>
<p>En el tour de <a href="https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3244323/">respuesta personal</a>, se les invita a encontrar una obra de arte que responda a preguntas específicas que se escogen, dependiendo del objetivo de la actividad, entre “algo que me parece bello”, “algo que me produce rabia”, “algo que me es difícil aceptar”, “algo que me parece triste”; una vez escogida la obra, la presentan ante el grupo poniendo énfasis en sus razones para escogerlas. </p>
<p>El objetivo de aprendizaje no es el debate en sí mismo, tampoco se trata de que haya respuestas correctas o incorrectas; la práctica persigue generar un espacio y un tiempo para explorar emociones y fomentar la empatía.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/178197/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Las personas firmantes no son asalariadas, ni consultoras, ni poseen acciones, ni reciben financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y han declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado anteriormente.</span></em></p>La educación en salud apoyada en museos busca sacar a los estudiantes de medicina o ciencias sociales del ámbito jerárquico de la universidad, observar obras de arte y compartir sentimientos sobre ellas.Ana Martínez Pérez, Profesora titular de Sociología, Universidad Rey Juan CarlosNatalia Mesa Freydell, PhD candidate, Universidad Rey Juan CarlosLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1454282020-11-03T20:12:41Z2020-11-03T20:12:41ZUsted tiene poca habilidad para recordar el nombre de una persona… ¡y lo sabe!<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/367225/original/file-20201103-15-uligh5.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C13%2C9310%2C6192&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">
</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-photo/senior-handsome-greyhaired-businessman-wearing-tie-1804307896">Shutterstock / Krakenimages.com</a></span></figcaption></figure><p>Las personas tendemos a sobrestimar muchos de los rasgos propios: honestidad, capacidad de liderazgo, de observación… Acostumbramos a creer que somos mejores que los demás en una gran cantidad de habilidades y capacidades de lo que realmente somos. <a href="https://psycnet.apa.org/record/2020-29806-001">Esto concluyeron</a> varios investigadores de la universidad de Texas en un estudio publicado recientemente.</p>
<p>Seguramente, ahora mismo usted estará pensando: “Esto no me ocurre a mí, yo sí que soy una persona objetiva”. Sin embargo, con esa afirmación no haría más que confirmar que también se atribuye más capacidad de objetividad a usted que a los demás.</p>
<p>Esto nos ocurre porque a menudo intentamos justificar nuestros propios actos y hechos. Está claro que hacemos lo que hacemos porque creemos que es lo mejor, lo que no significa que realmente lo sea. Y, obviamente, es más fácil justificarlo si consideramos que las habilidades que nos han ayudado a tomar una decisión concreta o a comportarnos como lo hemos hecho son mejores que las de otras personas.</p>
<p>No solemos tener en cuenta que en nuestros actos influyen una gran cantidad de procesos inconscientes que actúan tanto a nivel cognitivo como emocional y que, además, determinan en gran parte que cualquier capacidad que tengamos sea sumamente mermada en pro de esos procesos. </p>
<h2>Procesos inconscientes que nos influyen</h2>
<p>Entre estos se encuentran nuestro <a href="https://scholar.google.es/scholar?q=decision+making+process+emotions&hl=es&as_sdt=0&as_vis=1&oi=scholart">estado de ánimo o emocional</a>, nuestro estado fisiológico, <a href="https://psycnet.apa.org/doiLanding?doi=10.1037/0033-2909.113.3.440">nuestras motivaciones (entre las que se encuentra la autoprotección)</a> y nuestras experiencias previas (más allá de que las recordemos). </p>
<p>Por ejemplo, sabemos que no compramos las mismas cosas antes o después de comer porque nuestro estado fisiológico (tener hambre) influye en nuestra toma de decisiones. Tampoco tenemos las mismas discusiones o intercambio de opiniones cuando hemos descansado que cuando no. De hecho, es inteligente aplazar discusiones para momentos tranquilos.</p>
<p>Respecto a las experiencias previas o culturales, ¿cuántas veces ha vivido situaciones embarazosas porque ha interpretado algo de una manera determinada, basándose en una experiencia anterior (por ejemplo, algo que pasó en la infancia o incluso lo que usted decidió o reflexionó a partir de ese hecho, o una costumbre propia de su lugar natal) que no tenía nada que ver realmente con lo que había acontecido?</p>
<p>Probablemente, nos iría mucho mejor si consideráramos que es muy posible que lo que estemos viendo o pensando no sea correcto al 100%, debido a las diferentes circunstancias antes mencionadas. ¿Cuántas cosas se nos estarán escapando en cada decisión que tomamos y que no somos capaces de ver (desde nuestro cansancio, tristeza o rabia, nuestra historia previa, costumbres sociales y culturales, hábitos, información, etc.) porque tal vez no somos conscientes de ellas en ese momento?</p>
<h2>La excepción</h2>
<p>Sin embargo, hay una excepción. Una que encontró este grupo de investigadores de la Universidad de Texas. La única habilidad sobre la que creemos que los demás son mejores que nosotros es la capacidad para recordar nombres. Curioso, muy curioso. Pero, ¿por qué?</p>
<p>Seguramente, porque todos recordamos un episodio embarazoso en el que nos hemos confundido de nombre y hemos llamado a alguien de manera equivocada. Así, mientras todas las demás expectativas sobre nuestras buenas capacidades son más difíciles de negar porque tenemos menos pruebas objetivas que pongan las habilidades de los demás claramente por encima de las nuestras, no hay nada más obvio que equivocarnos de nombre para no poder disimular un error. </p>
<p>Según el estudio, muchas personas, especialmente los adultos mayores, se esfuerzan por recordar los nombres de los demás y son conscientes de este esfuerzo. Nuestras creencias sobre nuestra memoria de nombres pueden ser diferentes de la memoria que tenemos para otras cosas.</p>
<p>Algunas investigaciones han demostrado que los nombres propios son más difíciles de aprender y recordar que otro tipos de información (por ejemplo, ocupaciones), pero pocas han explorado el papel de los factores metacognitivos en el aprendizaje de los nombres propios. </p>
<p>Estamos acostumbrados a decirle a los demás cómo haríamos nosotros algo cuando es obvio que esas personas tendrán mucha más información sobre sus propias vidas que nosotros. Pero lo hacemos. Sin embargo, no se le puede decir a alguien que no se llama como dice llamarse y que nosotros recordamos su nombre mejor que él o ella.</p>
<p>¿Qué pasaría si tuviéramos pruebas objetivas de que alguien es mejor que nosotros en otras habilidades? Depende de la persona, por supuesto, pero en este caso sería muy razonable pensar en dos palabras clave: ego y envidia. </p>
<p><a href="http://www.gestaltgranada.es/blog/el_ego_en_terapia_gestalt/">El ego puede no ser tan negativo como creemos</a>, pero solo si tenemos un buen nivel de introspección y somos capaces de revisarnos y tomar la parte que nos ayuda a cuidar de nosotros mismos y de las demás personas.</p>
<p>Solo los individuos que realmente se quieren como son, se aprecian y se cuidan son capaces de no sufrir si se pone encima de la mesa un resultado de comparación en el que salen perdiendo. </p>
<p>Esos son los seres humanos que no necesitan halagos, aunque los disfruten, que son capaces de alegrarse con los éxitos de las personas cercanas (o lejanas), las que ven la grandeza de cada cual, a pesar de que la suya en esa característica o capacidad no sea tanta. Esas son las personas evolucionadas que entienden que estamos en este mundo para hacer equipo y no para ponernos la zancadilla.</p>
<p>Desgraciadamente, esas personas son tan pocas que no se recogen en los estudios, porque si no, no saldría la capacidad para recordar nombres como la única en la que somos objetivos.</p>
<p>Y ahora, dígame: ¿dónde cree que está usted?</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/145428/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Beatriz Montes Berges no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>Las personas tendemos a sobreestimarnos en muchos aspectos de la vida: somos los más honestos, las mejores personas, los más observadores… Hasta que nos preguntan por nuestra capacidad para recordar los nombres de los demás. En eso ya no somos tan buenos.Beatriz Montes Berges, Profesora Titular de Psicología Social, Universidad de JaénLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1273842019-12-03T20:25:27Z2019-12-03T20:25:27Z¿Cuáles serán los perfiles laborales más demandados?<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/304101/original/file-20191127-112526-1p7gph7.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=8%2C0%2C5973%2C2982&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">
</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-illustration/competition-people-robots-jobs-technological-revolution-1373410898">Studiostoks / Shutterstock</a></span></figcaption></figure><p>¿La inteligencia artificial y la robótica cambiarán nuestra vida personal y laboral? ¿Perderemos el trabajo o los robots son tan solo una moda? </p>
<p>Hay varios momentos en la historia que marcan un cambio definitivo en el curso de la humanidad: el saber producir el fuego, la invención de la rueda, la pólvora o la energía nuclear. Estos hechos cambiaron el rumbo del ser humano.</p>
<h2>Cambio en las relaciones de trabajo</h2>
<p>Hoy hay acontecimientos que están produciendo cambios de forma acelerada. Son los relacionados con la robótica y la inteligencia artificial. Ambos fenómenos están cambiando las relaciones laborales a nivel mundial y el sector de los recursos humanos, el liderazgo y el ordenamiento jurídico que regula estos aspectos.</p>
<p>La perspectiva <a href="https://www.xataka.com/robotica-e-ia/inteligencia-artificial-reemplazara-40-trabajos-proximos-15-anos-asegura-kai-fu-lee-pionero-ia">para el año 2025</a> es que afectarán a millones de empleos. Según las cifras del <a href="https://www.weforum.org/reports/the-future-of-jobs-report-2018">Foro Económico Mundial</a> se destruirán <a href="https://www.xataka.com/robotica-e-ia/automatizacion-eliminara-75-millones-empleos-para-2025-creara-133-millones-nuevas-funciones-wef">unos 75 millones de empleos</a> pero se crearán otros 133 millones, para los cuales se requiere una formación muy específica y un conocimiento robusto. </p>
<p>Por lo tanto, el problema radica en el reentrenamiento de las personas y de los equipos de trabajo y en la reestructuración de los modelos de empresa. </p>
<p>En Finlandia, por ejemplo, las empresas automatizadas están necesitando empleados, pero no hay suficientes con las competencias y habilidades <a href="https://www.bbva.com/es/nuevas-competencias-profesionales-requeridas-revolucion-digital-globalizacion/">necesarias en ese mercado laboral</a>.</p>
<p>La tendencia es que poco a poco se sustituyan los trabajos manuales y repetitivos. La creatividad, las artes, los especialistas en marketing digital, los profesores con competencias digitales, los auditores de innovación digital, los forenses informáticos, los abogados y legisladores que entiendan el paradigma informático serán, entre otros, <a href="https://www.channelpartner.es/negocios/noticias/1109660002202/estos-profesionales-informaticos-mas-demandados-y-salarios.1.html">los perfiles más demandados</a>.</p>
<h2>El uso de la inteligencia artificial</h2>
<p>En un <a href="http://www.academicus.edu.al/nr20/Academicus-MMXIX-20-106-118.html">artículo</a> publicado recientemente en la revista científica albanesa <em>Academicus</em> analizo en profundidad este cambio, que no es una moda, sino que está impactando todas las áreas de la empresa tal y como las conocemos hoy en día.</p>
<p>Junto a los nuevos perfiles, hay otros ya existentes que verán cómo sus tareas se simplifican con el uso de la inteligencia artificial. Los ejemplos más claros son la automatización de la <a href="https://audalialumesse.com/la-automatizacion-en-rr-hh/">criba de currículums en el área de recursos humanos</a>, la localización de sentencias en sistemas legales como el anglosajón que ya está siendo agilizada con procesos automatizados, y los analistas financieros, que solo serán necesarios para las recomendaciones de venta de carteras, pues para la adquisición de las mismas la inteligencia artificial está haciendo ya ese papel.</p>
<h2>La cuarta Revolución Industrial</h2>
<p>Estamos viviendo la cuarta Revolución Industrial. Muchos modelos de negocio sufren importantes cambios. Grandes empresas como Nokia o Blackberry lo han sentido muy claramente, y eso que eran empresas de productos tecnológicos, pero si no innovamos constantemente otros lo harán, y tanto las empresas como el consumidor quieren maximizar las ganancias y facilitarse la vida.</p>
<p>No son un secreto las miles de <em>apps</em> para el móvil que salen al mercado todos los días para solucionar una cosa u otra, problemas incluso que jamás nos habíamos planteado o situaciones que serían impensables: por ejemplo, una <em>app</em> para tener conversaciones ficticias.</p>
<p>Pero la perspectiva actual no pinta bien para muchas personas que están siendo <a href="https://www.sage.com/es-es/blog/uberizacion-del-empleo-todas-las-claves-para-entenderla/">“uberizadas”</a>, es decir, que no están amparadas por contrato alguno (y, de tenerlos, llegan a ser de 24 horas o menos). También el derecho a la huelga se extingue de forma muy evidente. </p>
<p>Vemos sistemas como el <a href="https://www.amazon.jobs/es/teams/mechanical-turk">Mechanical Turk de Amazon</a>, que paga centavos por hacer tareas repetitivas, como ordenar alfabéticamente miles de bases de datos en 24 horas. </p>
<p>La robotización y la implantación de la IA están impactando incluso a los modelos de gobierno electrónico y su forma de relacionarse con los ciudadanos. Ya los parques tecnológicos serán cosa del pasado, pues el trabajar desde casa se volverá aún más común de lo que es ahora.</p>
<p>En resumen, los constantes cambios tecnológicos y su impacto en la fuerza laboral están causando un efecto dominó que puede cambiar la cultura corporativa, las leyes y los trabajadores en los próximos años. Y esos cambios y transformaciones digitales seguirán aumentando.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/127384/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Jessica Bayón Pérez no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>Dentro de tan solo cinco años se crearán unos 133 millones de empleos, para los cuales se requiere una formación muy específica. El mundo está cambiando y la tecnología (sobre todo, la inteligencia artificial) están a punto de revolucionar el mercado laboral.Jessica Bayón Pérez, Coordinadora de la clínica jurídica. Profesora de Derecho del Trabajo y Seguridad Social y Recursos Humanos., Universidad NebrijaLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.