El párkinson es una enfermedad con muchas caras que, además, afecta de modo diferente a las mujeres. Aún queda mucho por descubrir sobre una dolencia neurodegenerativa que va más allá de los temblores.
Dormir es una actividad vital para asentar la memoria, regular las emociones y reparar las células dañadas. Si no descansamos lo suficiente, tendremos más posibilidades de sufrir, por ejemplo, párkinson o alzhéimer.
Los artículos ‘¿Se puede oler la enfermedad de Parkinson?’, de la investigadora de la Universidad del País Vasco Maider Zubelzu Irazusta, y ‘Hacer visible lo invisible: la luz y la vida íntima de las células’, del investigador de la Universidad de Murcia Enrique Ortega Forte, son los ganadores de la III edición del Premio de Divulgación sobre Medicina y Salud Fundación Lilly-The Conversation 2023.
Entre las enfermedades que dejan un rastro de olor se encuentra el párkinson. La mujer de un afectado, dotada de un olfato excepcional, puso sobre la pista a la comunidad científica, que luego comprobó empíricamente su hallazgo.
La clave para parar o atenuar el avance de esta dolencia neurodegenerativa es el diagnóstico precoz. El equipo de investigación al que pertenecen las autoras ha localizado un marcador metabólico que aparece mucho antes de que los síntomas se manifiesten.
Elena Vecino Cordero, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
Varias investigaciones han demostrado que el análisis de las lágrimas, menos invasivo que la extraccion de sangre, puede ayudar a diagnosticar enfermedades como el párkinson o el cáncer de mama.
Los síntomas del párkinson no se limitan a movimientos lentos, rigidez muscular y temblor. Además puede causar trastornos sexuales, alucinaciones, dificultad para concentrarse, depresión, insomnio, disfagia, estreñimiento y un largo etcétera.
Colocarse un casco de realidad virtual y transportarse a un universo distinto donde cualquier cosa es posible no solo resulta divertido. Puede usarse con fines terapéuticos en persons mayores y enfermos de Párkinson.
AL es un paciente de 58 años al que le diagnosticaron párkinson recién cumplidos los 36. Su cotidianiedad se vió muy limitada por esta enfermedad neurodegenerativa desde el principio. Pero los tratamientos, la logopedia y la estimulación cerebral profunda han mejorado su calidad de vida.
Cada 11 de abril se celebra el Día Mundial de la enfermedad de Parkinson, una enfermedad producida por la muerte de las neuronas que producen dopamina, conocida como la molécula de la felicidad.
El párkinson es la segunda enfermedad neurodegenerativa más frecuente, y amenaza con duplicarse en dos décadas. De momento no hay tratamiento curativo. Aunque una línea de investigación apunta a una hormona relacionada con la insulina como posible tratamiento.
La inflamación no solamente tiene un papel importante en producir la diabetes, sino también en los problemas derivados de esta. Conocer su origen es fundamental para el desarrollo de nuevos fármacos.
Edgar Soria-Gómez, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
En un intento por descifrar las bases celulares de los efectos de la marihuana, un estudio ha observado que esta planta provoca efectos terapéuticos o adversos según la región celular que activen.
En los enfermos de párkinson, a veces los temblores y la rigidez van precedidos de síntomas gastrointestinales, como el estreñimiento. La causa podría ser la alteración de la microbiota intestinal.
El número de enfermos podría triplicarse en los próximos 30 años debido al envejecimiento de la población, con el agravante de que se diagnostica tarde y no existen terapias que puedan prevenir, ralentizar o detener la enfermedad. Cada 11 de abril celebramos el Día Mundial del Párkinson.
El alzhéimer y el párkinson son enfermedades de alta prevalencia pero sumamente complejas. Por suerte, es posible usar herramientas basadas en la inteligencia artificial para ayudar en el diagnóstico.
Investigator Principal, Fisiologia cardiovascular y renal, Molecular Inflammation Group, Instituto Murciano de Investigación Biomédica (IMIB-Arrixaca), Universidad de Murcia
Investigador Distinguido Senior Beatriz Galindo. Investigador del Centro de Investigación Biomédica en Red en Enfermedades Neurodegenerativas (CIBERNED) y del Instituto de Investigación Biomédica de Málaga (IBIMA), Universidad de Málaga
Investigadora FPI. Investigadora del Centro de Investigación Biomédica en Red en Enfermedades Neurodegenerativas (CIBERNED) y del Instituto de Investigación Biomédica de Málaga (IBIMA), Universidad de Málaga