tag:theconversation.com,2011:/fr/topics/chile-57005/articlesChile – The Conversation2024-03-03T20:53:10Ztag:theconversation.com,2011:article/2240012024-03-03T20:53:10Z2024-03-03T20:53:10ZLos sonidos del universo de hace 7000 millones de años dan pistas sobre la energía oscura<p>En sus primeros instantes, después del Big Bang, el universo era una sopa muy densa y muy caliente de partículas elementales, lo que los físicos llaman un plasma. Dos fuerzas contrapuestas actuaban en ese momento. Por una parte la presión, que trataba de separar las partículas. Por otra la gravedad, que trataba de juntarlas. <a href="https://svs.gsfc.nasa.gov/13768#media_group_318436">Este tira y afloja cósmico produjo ondas de densidad, o acústicas, que se propagaron en el plasma</a>. Esos son los sonidos del universo temprano. </p>
<p>Ahora hemos podido <a href="https://www.darkenergysurvey.org/the-des-project/science/">medir la huella de esas ondas sonoras en el universo</a> de hace 7 000 millones de años y ofrecen pistas sobre la energía oscura. </p>
<h2>Las ondas acústicas se congelaron</h2>
<p>Las ondas acústicas viajaban por el cosmos mientras éste se expandía y se enfriaba. Unos 400 000 años después del Big Bang el plasma se había enfriado tanto que se empezaron a formar los átomos neutros y las ondas sonoras se detuvieron. Pero dejaron una huella en el modo en que se distribuye la materia. Esta huella, sorprendentemente, se observa hoy en día, y podemos medirla, en la distribución de las galaxias. </p>
<p>Los cosmólogos llaman a esta distancia la escala de las oscilaciones acústicas de los bariones (BAO, por <em>Baryon Acoustic Oscillations</em>). Esa escala permite, además, algo interesantísimo: <a href="https://theconversation.com/el-destino-del-universo-esta-en-manos-de-la-energia-oscura-222225">medir la energía oscura</a> en la distribución de galaxias. </p>
<h2>Una regla de medir cósmica</h2>
<p>La distancia que recorrió la onda sonora en el plasma primordial puede calcularse con gran precisión y nos da una vara de medir para el universo. Una vara con una longitud de unos 489 millones de años-luz. Es gigantesca, y por eso está muy bien adaptada para medir distancias cósmicas. Es el ejemplo más importante de lo que los cosmólogos llaman una regla estándar.</p>
<p>De hecho, el universo es tan enorme que la luz de las galaxias tarda miles de millones de años en llegar a los observatorios de la Tierra. Por lo tanto, detectamos las galaxias distantes como eran cuando la luz salió de ellas, y así vemos la historia del universo primitivo.</p>
<p>Observando la escala de las oscilaciones acústicas (BAO) a diferentes distancias (diferentes épocas del universo) podemos conocer la evolución de la expansión cósmica, y con ella las propiedades del sector oscuro: la materia oscura y la energía oscura.</p>
<h2>DES ha medido galaxias del universo de hace 7 000 millones de años</h2>
<p>El <a href="https://www.darkenergysurvey.org/es/">Cartografiado de la Energía Oscura</a> (DES, por sus siglas en inglés, <em>Dark Energy Survey</em>) acaba de publicar una <a href="https://arxiv.org/abs/2402.10696">nueva medida de la escala BAO</a> en el universo de hace 7 000 millones años. Esto es más o menos la mitad de su edad. La medida tiene una gran precisión (un 2%). Es la más precisa nunca realizada en una época tan temprana del universo.</p>
<p>DES es un gran proyecto internacional en el que participan más de 400 científicos de 7 países. España forma parte del proyecto desde su inicio, en 2005, a través de 4 instituciones, dos en Barcelona (<a href="https://www.ifae.es/">IFAE</a> e <a href="https://www.ice.csic.es/">ICE</a>) y dos en Madrid (<a href="https://www.ciemat.es">CIEMAT</a> e <a href="https://www.ift.uam-csic.es/">IFT</a>). El equipo científico internacional de DES diseñó e instaló una de las mayores cámaras del mundo en el <a href="https://noirlab.edu/public/programs/ctio/victor-blanco-4m-telescope/">telescopio Blanco</a>, en Chile. Con sus 500 millones de píxeles, es capaz de tomar imágenes de objetos enormemente distantes. </p>
<h2>400 millones de galaxias</h2>
<p>El proyecto DES está especialmente diseñado para estudiar la energía oscura tomando imágenes muy profundas del universo. Ha fotografiado una octava parte del cielo desde el hemisferio sur. En estas imágenes se identifican más de 400 millones de galaxias, además de muchos otros objetos celestes. Tomó datos de 2013 a 2019 y ahora ha entrado en la fase final de su análisis científico. DES utiliza varios métodos independientes para el estudio de la energía oscura. Uno de ellos es la medida de la escala BAO, liderada por los investigadores españoles y que ahora se ha hecho pública. </p>
<p>Para medir la escala BAO se han seleccionado 16 millones de galaxias, específicamente elegidas para determinar con precisión la distancia a la que se encuentran. La luz que emitieron hace unos 7 000 millones de años llega ahora a la cámara de DES, lo que le permite observar el universo antiguo. Y observa que, en efecto, las galaxias tienen una mayor tendencia a estar separadas entre sí por un ángulo de 2,90 grados en el cielo. Esta es la señal de la escala BAO, la evidencia de esas señales acústicas que dejaron su huella en la distribución de las galaxias.</p>
<p>Esta escala se puede determinar también en el cosmos temprano, utilizando la luz más antigua del universo, la <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Radiaci%C3%B3n_de_fondo_de_microondas">radiación de fondo de microondas</a>. Esta radiación data de cuando se formaron los átomos y la onda de sonido se detuvo, unos 400 000 años después del Big bang. </p>
<h2>Un examen muy exigente para la teoría del Big Bang</h2>
<p>La comparación entre el resultado obtenido en la radiación de fondo y el obtenido utilizando cartografiados de galaxias es una de las pruebas más exigentes a las que se puede someter a la teoría del Big Bang. En esta comparación el resultado de DES resulta ser un 4% mayor de lo que se esperaría según la radiación de fondo, <a href="https://arxiv.org/abs/1807.06209">medida por el satélite Planck en 2018</a>, aunque está en buen acuerdo con medidas previas de otros cartografiados de galaxias, como <a href="https://www.sdss3.org/surveys/boss.php">BOSS</a> y su extensión <a href="https://www.sdss4.org/surveys/eboss/">eBOSS</a>. </p>
<p>Todas estas medidas están de acuerdo con la teoría del Big Bang y la energía oscura en forma de constante cosmológica, pero hay que tomar más datos para confirmar si esa pequeña diferencia del 4% es real o una mera fluctuación estadística. </p>
<p>El paso siguiente es combinar este resultado con otras técnicas de estudio de la energía oscura en DES, que se obtendrán a lo largo de este año. Además, hay otros proyectos que publicarán sus resultados también a lo largo de 2024, como <a href="https://www.desi.lbl.gov/">DESI</a>, especialmente diseñado para medir la escala BAO con enorme precisión a lo largo de la historia del universo. </p>
<p>Si hay física nueva en el cosmos, lo confirmaremos muy pronto.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/224001/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Eusebio Sánchez Álvaro recibe fondos del Ministerios de Ciencia, Innovación y Universidades </span></em></p>El Big Bang produjo ondas acústicas en el universo primitivo. El Cartografiado de la Energía Oscura las ha medido en galaxias de hace 7.000 millones de años y confirma el efecto de la energía oscura en el cosmos.Eusebio Sánchez Álvaro, cosmología y física de partículas, Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT) Licensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/2228562024-02-07T22:13:08Z2024-02-07T22:13:08Z¿Hay que estigmatizar a los incendiarios para que no se repita la tragedia de Chile?<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/573850/original/file-20240206-32-ms165y.jpeg?ixlib=rb-1.1.0&rect=3%2C0%2C1194%2C740&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Incendio en la región de Valparaíso, en Chile, el 3 de febrero de 2024.</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://twitter.com/BomberosdeChile/status/1753564381676253215/photo/1">Bomberos de Chile</a></span></figcaption></figure><p>Los incendios forestales que durante los pasados 2 y 3 de febrero <a href="https://www.rtve.es/play/videos/telediario-fin-de-semana/incendios-arrasan-montanas-rodean-localidad-chilena-vina-del-mar/15955514/">azotaron la ciudad costera chilena Viña del Mar</a>, conocida también como la “Ciudad Jardín”, han dejado detrás de sí un rastro devastador: 15 000 casas destruidas, 44 000 damnificados y por lo menos 131 personas fallecidas. </p>
<p>Existen <a href="https://cnnespanol.cnn.com/video/incendios-chile-bomberos-presidente-intencionados-primera-manana-tv/">indicios preliminares de intencionalidad</a>, vinculados a la detección simultánea de varios focos de fuego. Desde el Palacio de La Moneda, el presidente Gabriel Boric <a href="https://prensa.presidencia.cl/comunicado.aspx?id=280236">fue contundente al declarar</a>: “Se está investigando la eventual intencionalidad de estos incendios y, aunque cuesta imaginar quién podría estar dispuesto a causar tanta tragedia y tanto dolor, sepan que se va a investigar hasta las últimas consecuencias y con todos los recursos necesarios”.</p>
<p>Lamentablemente, la voluntad de esclarecer estos casos no es suficiente, ya que los incendios, especialmente aquellos provocados intencionalmente, y aún más si son forestales, se caracterizan por su dificultad probatoria. En este contexto, la tarea de identificar a los responsables se vuelve ardua debido a la complejidad inherente a la investigación de incendios dolosos. La destrucción masiva y la rápida propagación del fuego dificultan la recopilación de pruebas sólidas.</p>
<p><div data-react-class="Tweet" data-react-props="{"tweetId":"1753543757494993211"}"></div></p>
<h2>Una historia que se repite</h2>
<p>Desde que aprendimos a utilizar y dominar el fuego, este elemento nos ha fascinado y definido como especie de manera única. Esencial para nuestra evolución, moldeó la historia humana y se convirtió en el emblema elemental de la civilización. Sin embargo, a pesar de los beneficios evidentes que el fuego aporta, también porta consigo una dualidad innegable. Mientras nos brinda calor y luz, su potencial destructivo nos confronta constantemente. Esta dualidad se hace más palpable cuando la figura del incendiario de vez en cuando regresa, desafiando los límites de nuestra coexistencia con el fuego.</p>
<p>El <a href="https://psychiatryonline.org/doi/10.1176/appi.ajp-rj.2016.110707">incendiario</a>, al utilizar el fuego como herramienta para causar daño, nos obliga a recordar la amenaza que puede representar este elemento esencial y la obligación que tenemos como sociedad de vigilar, enfrentar y <a href="https://archivo-es.greenpeace.org/espana/es/news/2010/November/greenpeace-pone-rostro-a-los-8/">denunciar</a> estos delitos.</p>
<p>Desde tiempos antiguos, <a href="https://www.fundeu.es/recomendacion/incendiario-piromano/">el término incendiario</a> se erige como arquetipo de maldad. Un ejemplo es Tiberio Claudio Nerón, último emperador Julio-Claudio. Aunque historiadores descartan su participación en el incendio de Roma del 64 a.e.c., <a href="https://www.thecollector.com/great-fire-of-rome/">la imagen de él impasible</a> mientras la Ciudad Eterna arde persiste, generando aversión. </p>
<p>A lo largo de los siglos, el incendiario se ha convertido en el epítome del criminal más despreciable. <a href="https://books.google.cl/books?id=BtnxCFlJHwkC&printsec=frontcover&dq=C%C3%B3digo+y+pr%C3%A1ctica+criminal,+arreglado+a+las+leyes+de+Espa%C3%B1a,+Tomo+II,+Madrid,+1797,+%E2%80%9CIncendiar%E2%80%9D&hl=es&newbks=1&newbks_redir=0&sa=X&redir_esc=y#v=onepage&q&f=false">Como señalaba en el siglo XVIII el jurista español Vizcaíno Pérez</a>: “Incendiar casas, mieses, montes, naves u otra cualquier cosa, no siendo por un descuido o casualidad inculpable es de los más atroces delitos si se ejecuta de intento o con deliberación … es gravísimo por los estragos que puede causar a muchos que no le han ofendido, dejándoles en un instante sin los bienes cuya adquisición les costó tantos años de afán y de trabajo, como por las muertes que pueden acaecer”. </p>
<p>El incendiario, por naturaleza, es un individuo difícil de atrapar. Realiza sus actos delictivos en soledad, a menudo resguardado por la oscuridad o, en incendios forestales, oculto en la vastedad del territorio para evitar ser detectado. Además, el fuego mismo borra pruebas, complicando su identificación. </p>
<h2>Penas severas y estigmatización</h2>
<p>Nuestros ancestros, sin tecnologías modernas, entendieron la importancia de disuadir incendios intencionales, dada la dificultad de identificar a los responsables, a menos que fueran sorprendidos in fraganti, confesaran voluntariamente o hubiera testigos capaces de denunciarlos. Por ello, implementaron <a href="https://www.lanzadigital.com/blogs/cronicas-de-la-historia/incendiarios/">penas severas</a> y <a href="https://www.administracionpublica.com/incendiarios-resistentes-al-codigo-penal/">estrategias de estigmatización social</a> para desalentar a quienes pudieran convertirse en incendiarios. </p>
<p>Los perpetradores enfrentaban la posibilidad de una muerte atroz por hoguera y la certeza de carecer del perdón divino, con la excomunión al ser descubiertos. Refugiarse en iglesias era inviable, ya que la creencia arraigada sostenía que Dios no protegería a seres despreciables. Las consecuencias de sus actos recaerían sobre sus familias, con la confiscación de bienes.</p>
<p>A pesar del avance tecnológico, esta realidad persiste: la vastedad del territorio y la furia de las llamas siguen protegiendo a los incendiarios. La defensa contra estos criminales pasa principalmente por tres vías: la puesta en seguridad del territorio, el civismo (donde aquel que tiene conocimiento debe hablar y denunciar a los responsables, incluso si implica señalar a parientes, amigos o vecinos) y la implementación de campañas de estigmatización social.</p>
<p>Las <a href="https://www.bcn.cl/portal/leyfacil/recurso/aumento-de-penas-a-los-que-causen-incendios-forestales">duras penas</a> en <a href="https://www.newtral.es/penas-por-incendio-provocado/20220719/">nuestros códigos penales</a> no disuaden lo suficiente a muchos de los incendiarios, pues conscientes de la dificultad probatoria inherente a los incendios, saben que pueden encontrar refugio en las garantías de los sistemas judiciales basados en la presunción de inocencia. </p>
<p>El rechazo social se vuelve, por lo tanto, un elemento clave para disuadir a más personas de convertirse en incendiarios. Además, su arraigo en la visión social fomentará un sentido de responsabilidad en la población para denunciar. </p>
<p>Estigmatizar estas conductas criminales permitirá generar un impacto y rechazo social inquebrantables hacía los incendiarios, lo que hará que muchas menos personas se atrevan a provocar incendios intencionales y la ciudadanía sea más propensa a denunciarlas.</p>
<hr>
<p>
<em>
<strong>
Leer más:
<a href="https://theconversation.com/asturias-no-arde-la-queman-203107">Asturias no arde, la queman</a>
</strong>
</em>
</p>
<hr>
<h2>Su rostro según Concepción Arenal</h2>
<p>Se trata de mostrar a la colectividad el verdadero rostro del incendiario, como <a href="https://civio.es/espana-en-llamas/2016/11/24/motivaciones-de-incendios-intencionados/">sus intenciones y deseos</a>. Según <a href="https://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/cartas-a-los-delincuentes--0/html/fef8a368-82b1-11df-acc7-002185ce6064_4.html">las palabras de la penalista española Concepción Arenal</a>, el incendiario es un individuo débil y cobarde, capaz de cometer atrocidades, buscando destruir sin beneficio propio, que premedita el crimen “con fría calma y rastrera alevosía”. </p>
<p>Es un individuo que “busca el fuego, ese monstruo que devora, esa fuerza que destruye, ese ímpetu que aniquila, ese poder misterioso, impalpable é irresistible, enigmático y ciego, que como una furia obediente á la voz del infierno, lleva por mensajero al espanto, deja huellas de desolación, respira ayes, bebe lágrimas, ordena a la muerte que le alce un trono sobre cenizas, y descansa cuando ya no tiene nada que aniquilar”. Un individuo que tiene como objetivo final siempre y solo “destruir los montes, las mieses, y con ellas el sustento y la esperanza de los que no contaban con otra cosa para vivir”.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/222856/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Loris De Nardi es Investigador Responsable de una investigación financiada mediante el proyecto ANID FONDECYT Iniciación (N°11220159).</span></em></p>Los incendios en Viña del Mar (Chile) han dejado al menos 122 muertos, 15 000 casas destruidas y se investiga la posible intencionalidad. Identificar a los incendiarios es un desafío debido a la dificultad probatoria. La estigmatización y la denuncia por parte de sus familiares se considera una vía fundamental para que estos hechos no se repitan fácilmente.Loris De Nardi, Investigador Facultad de Derecho/Centro de Estudios Históricos, Facultad de Ciencias Humanas, Universidad Bernardo O'Higgins, Chile, Universidad Bernardo O´HigginsLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/2201892023-12-27T22:41:32Z2023-12-27T22:41:32ZLa dificultad de hacer una reforma constitucional en el siglo XXI (no solo en Chile)<p>Los procesos constituyentes buscan establecer un nuevo sistema político-constitucional o adaptar el sistema democrático existente a las nuevas necesidades de la sociedad a través de la sustitución de la Constitución vigente. </p>
<p>Así se planteó en Chile hace cuatro años <a href="https://www.rtve.es/noticias/20191022/senado-chile-aprueba-proyecto-ley-para-anular-aumento-del-precio-del-billete-metro/1983840.shtml">tras el estallido social provocado por la subida del precio del billete del metro</a> en la ciudad de Santiago. Con la convocatoria del proceso constituyente que ahora termina <a href="https://www.bbc.com/mundo/articles/cpr3drr9dw0o">tras el rechazo de dos propuestas de nueva constitución</a>, se buscaba sustituir una Constitución original de 1980, pero que había sufrido más de 70 reformas durante estos más de 40 años y que había servido de marco jurídico de los más 30 años de democracia chilena. </p>
<p>Se pretendía así una solución, más simbólica que estructural, para las causas que habían generado una movilización social sin precedentes, ignorando que los procesos constituyentes tienen sentido cuando buscan dar respuesta a problemas de naturaleza constitucional. Y así lo manifestaba el maestro de constitucionalistas Pedro de Vega al advertir que la reforma constitucional solo es <a href="https://www.iustel.com/diario_del_derecho/noticia.asp?ref_iustel=1225954">“políticamente conveniente cuando resulta jurídicamente necesaria”</a>. </p>
<p>Tras <a href="https://theconversation.com/plebiscito-constituyente-un-viaje-de-chile-hacia-el-centro-190017">el fracaso del primer intento</a>, rechazado por el 62 % de los participantes en el plebiscito de septiembre de 2022, se inició una segunda fase del proceso. Frente al entusiasmo con el que se había acogido el primero, al menos en el mundo académico, este segundo ha transcurrido con menos entusiasmo, y fue rechazado por el 55 % de los participantes. De poco sirvió el cambio de procedimiento que otorgaba un <a href="https://www.bcn.cl/historiapolitica/proceso_constitucional/comision_experta.html">mayor protagonismo a los expertos</a>, ni el cambio en la composición del Consejo Constitucional. </p>
<h2>Otros proyectos fallidos</h2>
<p>Aunque el papel de los expertos ayudó a mejorar el texto desde una perspectiva formal, no logró limitar su contenido al propio de la naturaleza de una Constitución. Pese a una alteración importante de su contenido fruto de un cambio profundo en la orientación ideológica de los miembros del Consejo Constitucional, el proceso tampoco consiguió proponer una Constitución con la que se sintieran identificados una parte importante de los chilenos. </p>
<p>El rechazo se suma así a la lista de procesos fallidos que en la última década incluyen, entre otros, a <a href="https://www.eldinamo.cl/politica/2022/09/02/islandia-el-pais-que-demando-una-nueva-constitucion-y-quedo-inconclusa/">Islandia</a> o <a href="https://www.wilsoncenter.org/blog-post/constitutional-process-wartime-ukraine">Ucrania</a>. El nuevo fracaso constituyente plantea nuevos interrogantes que van mucho más allá del caso chileno y que giran en torno a la posibilidad de aprobar una Constitución en el momento actual en casi cualquier lugar del mundo. </p>
<p>Chile ha confirmado que la apertura de un proceso de esta naturaleza no puede ser un botón del pánico que se pulsa ante una situación de crisis. Señalar a la Constitución como la solución de todos los problemas supone culpar a la propia Constitución de todos ellos. </p>
<p>El resultado confirma que los problemas de una sociedad, por profundos que sean, no son necesariamente constitucionales, y que esa utilización simbólica, lejos de resolver los problemas, los prolonga en el tiempo al paralizar durante un periodo largo las posibles vías no constitucionales de respuesta.</p>
<p>Además, esto afecta a la gestión de los tiempos y las expectativas, que también se han demostrado esenciales para el éxito de este tipo de procesos. Todo cambio constituyente tiene siempre un componente revolucionario, transformador, que no encaja bien en el cortoplacismo de las dinámicas políticas actuales, generando falsas expectativas que se ven defraudadas durante su transcurso que, necesariamente, debe prolongarse en el tiempo. </p>
<p>Las prioridades políticas que sirvieron como causa para el comienzo del proceso van cambiando durante su elaboración, y la futura Constitución se ve envuelta en los debates políticos del momento, incapaz de adaptarse a estos cambios de humor y de prioridades.</p>
<h2>Falta de consenso en algunas sociedades</h2>
<p>A esto se le suma la dificultad del consenso en sociedades mas heterogéneas, fragmentadas y polarizadas. Un proceso constituyente requiere de un consenso mantenido en el tiempo, como señaló <a href="https://www.venice.coe.int/webforms/documents/?Language=19&year=all">la Comisión de Venecia</a> en sus dos dictámenes sobre el proceso chileno, donde este consenso brilló por su ausencia en ambos casos. </p>
<p>La elaboración de una Constitución no puede ser el intento de un bloque de establecer unas reglas del juego que le den ventaja o que recojan su visión del país, excluyendo al resto. De ser así, los enfrentamientos partidistas se trasladan, con más o menos razón, pero con la misma intensidad, al campo de juego de la Constitución, especialmente en casos de plebiscito, que se resuelven en el plano del apruebo o rechazo, no tanto del texto constitucional, sino de aquellos que lo soportan.</p>
<p>De ahí la necesidad de cerrar la brecha entre lo social y lo institucional, sin presentar el proceso constituyente como un enfrentamiento entre sociedad civil y los actores políticos. La aparente delegación en la sociedad civil, lejos de aislar el debate del ruido partidista, sirve de eco al mismo. A menos que los públicos que protestan se transformen con el tiempo en movimientos cívicos, capaces de trabajar con las élites políticas, difícilmente lograrán las reformas necesarias, adaptándose mal a procesos abiertos a toda la sociedad. </p>
<p>Para lograrlo hay que buscar el equilibrio entre órganos constituyentes, instituciones ordinarias, expertos y la apertura a aportaciones externas. Un equilibrio entre participación y representatividad que en ocasiones pueden no coincidir. </p>
<p>Es necesario entender la naturaleza híbrida de estos procesos, donde participación y deliberación juegan papeles complementarios y deben utilizarse de manera estratégica en función del objetivo buscado, asumiendo la necesidad de ambos y los riesgos de confundirlas entre sí. Además, es imprescindible asumir una verdad clara: que, aunque es evidente la correlación positiva entre la inclusión en el proceso y unos resultados con mayor legitimidad, también lo es su relación inversamente proporcional con la viabilidad de llevar este tipo de procesos a buen puerto.</p>
<p>En resumen, resulta clara la importancia de evitar entornos de conflicto, huyendo de la tentación de plantear la reforma constitucional como una solución mágica a problemas coyunturales, distanciando las distintas fases del proceso para que no sea fruto de una situación excepcional y propiciando un equilibrio entre la sociedad y las instituciones. Lo que no es tan evidente es que esto sea posible en nuestros días.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/220189/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Rafael Rubio recibe fondos del Programa Estatal para Impulsar la Investigación Científico-Técnica y su Transferencia, del Plan Estatal de Investigación Científica, Técnica y de Innovación 2021-2023.</span></em></p>Tras el segundo fracaso del proceso constituyente chileno se hace evidente que la apertura de estos procesos no debe ser una respuesta de emergencia a crisis momentáneas. Tal vez no sean viables en la actualidad.Rafael Rubio, Catedrático de Derecho Constitucional, Universidad Complutense de MadridLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/2152032023-10-06T17:32:29Z2023-10-06T17:32:29ZNarges Mohammadi gana el Nobel de la Paz en nombre de miles de mujeres iraníes<p>Narges Mohammadi, destacada defensora iraní de los derechos de la mujer, ha sido galardonada con el Premio Nobel de la Paz 2023 por su larga lucha contra la opresión de las mujeres en Irán. Mohammadi cumple varias condenas en la prisión de Evin, en Teherán, acusada, entre otros cargos, de difundir propaganda contra el Estado. Fue <a href="https://www.nobelprize.org/prizes/peace/2023/press-release/">distinguida por el comité</a> por “su lucha contra la opresión de las mujeres en Irán y su lucha por promover los derechos humanos y la libertad para todos”. </p>
<p>El premio llega en un momento en que las mujeres de Irán y de todo el mundo siguen protestando por el trato que reciben en el país tras la muerte de <a href="https://theconversation.com/mahsa-amini-a-year-into-the-protest-movement-in-iran-this-is-whats-changed-212661">Mahsa Amini</a>, quien se encontraba bajo custodia de la policía de moralidad por violar supuestamente el código de vestimenta femenino de la República Islámica.</p>
<p>Según el comité: “El lema adoptado por las manifestantes –"Mujer-Vida-Libertad”– expresa adecuadamente la dedicación y el trabajo de Narges Mohammadi".</p>
<p>El hecho de que las protestas por la Libertad de la Mujer y la Vida hayan perdurado tanto tiempo frente a la represión del Estado iraní es de por sí notable. Este año, que ha vivido la última oleada de batallas libradas por las mujeres contra el autoritarismo religioso, parece estar provocando un cambio sin precedentes en las décadas de lucha contra uno de los regímenes más represivos de la historia moderna.</p>
<p>Tras la revolución de 1979 en Irán, los clérigos islámicos dirigidos por <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Ruhollah_Jomein%C3%AD">el ayatolá Ruhollah Jomeini</a> se hicieron con el control del gobierno. El régimen introdujo rápidamente una serie de leyes opresivas <a href="https://www.jstor.org/stable/pdf/162994.pdf">destinadas específicamente a las mujeres</a>. Pero a pesar de la <a href="https://women.ncr-iran.org/2020/11/22/violence-against-women-in-iran/">violencia dirigida contra ellas</a>, continuaron al frente de las protestas.</p>
<p>Narges Mohamaddi se unió a la lucha como estudiante a principios de la década de 1990. Tras licenciarse en física y trabajar como ingeniera, empezó a defender los derechos de la mujer y a escribir columnas en periódicos reformistas. </p>
<p>Fue detenida por primera vez en 1998 <a href="https://iliberty.org.uk/wp-content/uploads/2016/07/Narges-Mohammadi.pdf">por sus críticas al gobierno iraní</a>. En 2003 ya trabajaba en el Centro de Defensores de los Derechos Humanos de Teherán, creado por Shirin Ebadi, galardonada con el Premio Nobel de la Paz de ese año, siendo la primera mujer del mundo islámico en <a href="https://www.nobelprize.org/prizes/peace/2003/ebadi/facts/">recibir el galardón</a>.</p>
<p>Mohammadi ha sido detenida 13 veces y condenada en cinco ocasiones a un total de <a href="https://www.nobelprize.org/prizes/peace/2023/press-release/">31 años de prisión y 154 latigazos</a>. Fue encarcelada en la prisión más conocida de Teherán en 2022, cuando las protestas de Mujer-Vida-Libertad comenzaron a tener reconocimiento mundial. </p>
<p>Mohammadi organizó acciones solidarias con otras reclusas y fue castigada por las autoridades prohibiéndole las visitas y las llamadas telefónicas. A pesar de ello, consiguió sacar a escondidas un artículo que escribió para el <a href="https://www.nytimes.com/2023/09/16/opinion/narges-mohammadi-iran-women.html"><em>New York Times</em></a>, que se publicó en septiembre de 2023 con el siguiente titular: “Cuanto más nos encierran, más fuertes nos hacemos”.</p>
<h2>Las voces de las mujeres se alzan en protesta</h2>
<p>Los movimientos liderados por mujeres han sido a menudo eficaces para forzar el cambio democrático. Los ejemplos son abundantes a lo largo de la historia. </p>
<p>En Argentina, en los últimos años, el movimiento <em>#NiUnaMenos</em>, <a href="https://www.opensocietyfoundations.org/voices/the-womens-movement-is-leading-reform-in-argentina">que busca justicia por los femicidios</a>, llevó en 2019 directamente a la creación por parte del gobierno del presidente Alberto Fernández de un nuevo Ministerio de la Mujer, Género y Diversidad.</p>
<p>Las mujeres han ocupado un lugar destacado en el movimiento por los derechos en Chile, tanto antes como después de la <a href="https://en.wikipedia.org/wiki/Military_dictatorship_of_Chile">dictadura de Pinochet</a>. El actual movimiento feminista, que reclama el derecho al aborto, ha sido fuertemente influenciado por <em>#NiUnaMenos</em>. </p>
<p>Como resultado de sus demandas, se incluyeron protecciones legales para el aborto en una nueva constitución que se <a href="https://www.reuters.com/world/americas/chile-abortion-debate-gets-key-place-constitution-redraft-2022-03-16/">preparó en 2022</a> para sustituir a la constitución establecida bajo el régimen de Pinochet. En septiembre de 2022, un plebiscito rechazó la nueva redacción constitucional, pero las mujeres siguen batallando <a href="https://www.reuters.com/world/americas/chile-voters-sour-right-wing-constitution-abortion-clause-stirs-debate-2023-10-06/">mientras continúa el debate</a>.</p>
<h2>Mujer-Vida-Libertad</h2>
<p>Mientras tanto, las iraníes siguen marchando por sus derechos. Un año después de que el movimiento cobrara vida, sigue siendo imposible predecir si tendrá éxito frente a la salvaje represión del clero y sus partidarios conservadores. </p>
<p>Pero la sensación de invencibilidad del régimen –y la marginación de las mujeres de la política– se ha visto seriamente puesta en duda. Aunque los servicios de seguridad intenten reprimir a los manifestantes, la lucha continuará. </p>
<p>Incluso si las protestas no conducen al colapso del régimen, las voces femeninas que exigen libertad de expresión, autonomía corporal y compromiso político pueden haber <a href="https://www.hrw.org/news/2023/06/26/unveiling-resistance-struggle-womens-rights-iran">cambiado ya el panorama social y político</a> en Irán. </p>
<p>El jurado del Premio Nobel ha reconocido la labor de Narges Mohammadi durante 30 años de lucha. Pero ha <a href="https://www.nobelprize.org/prizes/peace/2023/press-release/">dejado claro</a> que el premio es también para los “cientos de miles de personas que, el año anterior, se manifestaron contra las políticas de discriminación y opresión del régimen teocrático contra las mujeres”.</p>
<p>Las voces de las mujeres se están convirtiendo en una seria amenaza para la legitimidad de la teocracia iraní. Los escépticos pueden decir que en el pasado el régimen siempre ha utilizado con éxito la violencia y la censura para silenciar las protestas. Pero esta nueva oleada de protestas ha resonado en todo el mundo, elevando el perfil de la lucha de las mujeres en las calles de las ciudades iraníes y animando a las mujeres de todo el planeta a luchar por sus propios derechos y libertades.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/215203/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Hind Elhinnawy no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>El comité del premio Nobel dijo que Narges Mohammadi representaba la lucha de muchos miles de mujeres valientes que luchan por sus derechos.Hind Elhinnawy, Senior Lecturer, School of Social Sciences, Nottingham Trent UniversityLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/2134052023-09-18T20:32:15Z2023-09-18T20:32:15ZEl debate de los neuroderechos llega a los tribunales: dos sentencias pioneras en Chile y España<p>En tiempos en que <a href="https://www.carissaveliz.com/books">los datos son el oro del siglo XXI</a>, no es de extrañar el creciente interés de las <a href="https://image-ppubs.uspto.gov/dirsearch-public/print/downloadPdf/20230225659">empresas neurotecnológicas</a> en descifrar el que es su código fuente por excelencia: el cerebro humano. Ello, unido a la fascinación que despierta este órgano vital, en buena medida aún desconocido para la ciencia, hacía presagiar la magnitud de la problemática que se enfrenta.</p>
<p>Así lo advirtieron, ya en 2017, distintas voces autorizadas desde las <a href="https://lsspjournal.biomedcentral.com/articles/10.1186/s40504-017-0050-1">ciencias sociales y jurídicas</a> y la <a href="https://www.nature.com/articles/551159a">neurobiología</a>, en lo que son los dos artículos más citados sobre la materia. En ambos se insta a las autoridades competentes a establecer un marco normativo nuevo y general que proteja los derechos de la mente.</p>
<p>Esta <a href="https://theconversation.com/la-urgencia-de-los-neuroderechos-humanos-176071">urgencia</a> obedece a la amenaza de que un tercero pueda acceder y, en su caso, interferir deliberadamente en el pensamiento humano en contra del principio bioético de autonomía.</p>
<p>En este sentido, se ha publicado una iniciativa que identifica <a href="https://neurorights-initiative.site.drupaldisttest.cc.columbia.edu/sites/default/files/content/The%20Five%20Ethical%20NeuroRights%20updated%20pdf_0.pdf">cinco neuroderechos</a> vinculados a los derechos humanos.</p>
<p>No obstante, la existencia de derechos que otorgan protección internacional (art. 17 del <a href="https://www.ohchr.org/es/instruments-mechanisms/instruments/international-covenant-civil-and-political-rights">Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos</a>) y, en la mayoría de países occidentales, constitucional (a la integridad moral, la libertad y la intimidad, entre otros) ha suscitado algunos <a href="https://www.frontiersin.org/articles/10.3389/fnhum.2021.703121/full">recelos jurídicos en la doctrina</a>. La prevención surge ante el riesgo de incurrir en duplicidad y, por tanto, en inflación e, incluso, devaluación de derechos.</p>
<p>En todo caso, como se verá, este es un debate ineludible y que ya no solo es teórico.</p>
<h2>Chile, paradigma del liderazgo en neuroderechos</h2>
<p>Si hay un país en el mundo que ha hecho <em>casus belli</em> de los neurodatos es, sin duda, el chileno. A la aprobación de una <a href="https://www.diariooficial.interior.gob.cl/publicaciones/2021/10/25/43086-B/01/2031873.pdf">enmienda constitucional</a> a finales de 2021 para preservar los datos cerebrales le sigue la <a href="https://www.diarioconstitucional.cl/wp-content/uploads/2023/08/GIRARDICONEMOTIVSUPREMA.pdf105.065-2023.pdf">Sentencia de la Corte Suprema, de 9 de agosto de 2023</a>.</p>
<p>El demandante era Guido Guirardi, exsenador chileno y uno de los impulsores de la reforma. En marzo de 2022, Guirardi adquirió el dispositivo <em>Insight</em>, un casco inalámbrico no invasivo que lo conecta con interfaces inteligentes (cerebro-ordenador) desarrollado por la compañía <a href="https://www.emotiv.com/insight/"><em>Emotiv. Inc</em></a>. Estos sensores monitorizan las ondas cerebrales para obtener numerosas métricas de rendimiento (como la concentración o el estrés) en tiempo real. Con ellas se puede optimizar la productividad.</p>
<p>No obstante, el recurrente optó por no contratar la licencia PRO que se oferta en la web de <em>Emotiv</em>. La versión gratuita no le permitía importar ni exportar su propia actividad neurológica, que sí quedó almacenada en la nube de la demandada, solicitando su eliminación.</p>
<h2>A vueltas con el consentimiento</h2>
<p>Uno de los problemas centrales consiste en dirimir si la aceptación genérica de los términos y condiciones del servicio por parte del usuario es suficiente para amparar tácitamente todo tratamiento de su información cerebral. A juicio de la <a href="https://www.pjud.cl/prensa-y-comunicaciones/noticias-del-poder-judicial/93100">Corte de Apelaciones de Santiago</a>, una vez emitido consentimiento libre y voluntario no se infringe la privacidad y confidencialidad, por lo que desestimó su recurso.</p>
<p>La Corte Suprema corrige este fallo, precisando que los datos que se recaben no pueden tener diversos fines que no sean conocidos ni aprobados por el titular. De este modo, la empresa ha de especificar con qué fines de investigación científica van a ser utilizados, debiendo indicar como mínimo <a href="https://diariolaley.laleynext.es/Content/Documento.aspx?params=H4sIAAAAAAAEAMtMSbF1CTEAAmNzEyMTE7Wy1KLizPw8WyMDI2MDC2MDkEBmWqVLfnJIZUGqbVpiTnEqADHpC7k1AAAAWKE">la rama de investigación</a>, lo que requiere un consentimiento expreso y revocable.</p>
<p>Esto se alinea con el carácter “<a href="https://www.aepd.es/es/preguntas-frecuentes/2-rgpd/4-consentimiento-de-los-interesados/FAQ-0211-segun-el-rgpd-como-debe-solicitarse-el-consentimiento-de-los-interesados-para-tratar-sus-datos-personales">inequívoco</a>” al exigir “una manifestación del interesado o una clara acción afirmativa”. En consecuencia, la sentencia considera vulnerada la integridad física, psíquica y el derecho a la privacidad (arts. 19.1 y 19.4 de la <a href="https://www.bcn.cl/leychile/navegar?idNorma=242302">Constitución chilena</a>).</p>
<p>Sin embargo, lo novedoso es que el máximo órgano judicial somete la comercialización y uso del producto al <a href="https://www.comares.com/libro/principio-de-precaucion-biotecnologia-y-derecho_94510/">principio de precaución</a>.</p>
<p>Por un lado, remite a su evaluación por parte del Instituto de Salud Pública, en aras de analizar su clasificación como dispositivo médico-terapéutico. Esto es esencial, ya que, en caso afirmativo, se podría tratar de una <a href="https://www.aepd.es/es/prensa-y-comunicacion/blog/neurodatos-privacidad-y-proteccion-de-datos-personales-ii">categoría especial de datos</a>, cuyo tratamiento está prohibido cuando pueda revelar información biométrica dirigida a identificar de manera unívoca datos relativos a la salud (art. 9.1 del <a href="https://www.boe.es/doue/2016/119/L00001-00088.pdf">Reglamento General de Protección de Datos</a>).</p>
<p>Por otro, apela al Servicio Nacional de Aduanas por no disponer del Certificado de Destinación Aduanera. Dicho con otras palabras, es la ausencia de autorización por parte de las autoridades competentes la que subyace a la estimación del recurso.</p>
<p>Esta es la línea que, en efecto, sigue la <a href="https://eur-lex.europa.eu/resource.html?uri=cellar:e0649735-a372-11eb-9585-01aa75ed71a1.0008.02/DOC_1&format=PDF">propuesta de Reglamento sobre Inteligencia Artificial</a> al prohibir la introducción en el mercado de este tipo de prácticas (Considerando 16 y art. 5.1).</p>
<h2>España: una sentencia que defiende la neurociencia</h2>
<p>La prueba neurológica ha sido objeto de análisis en la jurisprudencia española desde 2013; en concreto, a través de los potenciales evocados cognitivos (P300). Este neurotest permite detectar la activación de regiones del sistema nervioso ante estímulos externos (habitualmente, auditivos o visuales) en torno a los 300 milisegundos.</p>
<p>Con esta tecnología se pretende obtener información relevante sobre los hechos delictivos o probarse empíricamente cuál era el estado mental de la persona investigada en el momento de cometer el acto ilícito. Por ejemplo, si sufría cualquier anomalía o alteración psíquica, lo que, en función de su permanencia y gravedad, podría convertirle en inimputable y, por tanto, eximirle de responsabilidad criminal (art. 20.1 del <a href="https://www.boe.es/buscar/pdf/1995/BOE-A-1995-25444-consolidado.pdf">Código Penal</a>).</p>
<p>En la práctica procesal-penal solo se ha admitido para localizar cadáveres, una vez recaída sentencia firme y con consentimiento del condenado: Fernando Silva Sande en el caso del empresario Publio Cordón y Miguel Carcaño en el de Marta del Castillo, ambos sin éxito.</p>
<p>Pero la <a href="https://www.poderjudicial.es/search/AN/openCDocument/cac2ec927df2ac2410b129baa45c19bf7ef1be27ecf5f288">Sentencia del Tribunal Supremo de 5 de mayo de 2020</a> (más conocida por ser la que enjuició al llamado <a href="https://www.europapress.es/castilla-lamancha/noticia-supremo-aumenta-penas-prision-permanente-revisable-patrick-nogueira-cuadruple-asesino-pioz-20200505133232.html">“asesino de Pioz”</a>) parece abrir la puerta a futuro. Si bien el juez no la aceptó por la ausencia de un perito neurólogo que pudiera interpretarla adecuadamente, sembró dudas sobre la influencia del determinismo neuronal en el libre albedrío y llevó a cabo una encendida defensa de la neurociencia.</p>
<p>Este criterio fue reforzado por el <a href="https://www.fiscal.es/documents/20142/9fe276ae-cc62-9f19-d0c3-084201d1392a">Informe del Consejo Fiscal al Anteproyecto de Ley Orgánica de Enjuiciamiento Criminal, de 7 de julio de 2021</a>, en su Adenda 54.</p>
<p>Legislativamente, España es el país europeo que ha secundado la iniciativa chilena. Entre otros hitos, cabe destacar la <a href="https://www.lamoncloa.gob.es/presidente/actividades/Documents/2021/140721-Carta_Derechos_Digitales_RedEs.pdf">Carta de Derechos Digitales</a>, de 14 de julio de 2021, que regula los derechos digitales en el empleo de las neurotecnologías. Aquí interesa su art. 26.1.c), en el que ordena: “Asegurar la confidencialidad y seguridad de los datos obtenidos o relativos a sus procesos cerebrales y el pleno dominio y disposición sobre los mismos”.</p>
<p>A pesar de que tiene el inconveniente de ser una declaración de principios y, por tanto, no vinculante, sirve como referencia y exhorta al legislador a su regulación ante los retos de la era digital.</p>
<p>Más reciente es la creación del <a href="https://www.lamoncloa.gob.es/serviciosdeprensa/notasprensa/asuntos-economicos/Paginas/2022/221222-centro-nacional-neurotecnologia.aspx">Centro Nacional de Neurotecnología (<em>Spain Neurotech</em>) en la Universidad Autónoma de Madrid</a>, en el marco de la <a href="https://portal.mineco.gob.es/es-es/ministerio/areas-prioritarias/Paginas/inteligencia-artificial.aspx">Estrategia España Digital 2026</a>.</p>
<p>En suma, la incesante actividad en ambos países aventura sobre los riesgos latentes para el órgano que representa la última frontera de la identidad y personalidad humana.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/213405/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Ekain Payán Ellacuria recibe fondos del Programa Posdoctoral, de Perfeccionamiento de Personal Investigador Doctor, promovido por el Gobierno Vasco - Eusko Jaurlaritza (2022)</span></em></p>Cada vez más, la tecnología permite interferir y registrar la actividad de nuestro cerebro, lo que apremia a legislar para protegerlo frente a las potenciales intromisiones.Ekain Payán Ellacuria, Investigador Postdoctoral del Gobierno Vasco - Eusko Jaurlaritza, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko UnibertsitateaLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/2111512023-08-08T08:32:00Z2023-08-08T08:32:00ZUna de las olas de calor más extremas de 2023 se está produciendo en pleno invierno austral<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/541508/original/file-20230807-26178-6usu56.png?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C2%2C1920%2C1063&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Anomalía de la temperatura el miércoles 2 de agosto de 2023. Las zonas rojas de Chile y el norte de Argentina son mucho más calurosas que la media a largo plazo para esta época del año.</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://climatereanalyzer.org/clim/t2_daily/">ClimateReanalyzer.org</a>, <a class="license" href="http://creativecommons.org/licenses/by-sa/4.0/">CC BY-SA</a></span></figcaption></figure><p>Las temperaturas en algunas zonas de Chile y el norte de Argentina se han disparado hasta <a href="https://twitter.com/extremetemps/status/1686485331539820545">10 °C-20 °C por encima de la media</a> en los últimos días. Las ciudades de la cordillera de los Andes han alcanzado los <a href="https://twitter.com/extremetemps/status/1686535219350806528">38 °C o más</a>, mientras que en la capital argentina, Buenos Aires, se registraron temperaturas <a href="https://www.ctvnews.ca/world/a-scorching-winter-argentina-s-capital-breaks-record-for-hottest-start-to-august-in-117-years-1.6503065">superiores a los 30°C</a>, superando en más de 5 °C su anterior récord de agosto. En la ciudad de <a href="https://twitter.com/SMN_Argentina/status/1687079796692398080">Rivadavia</a> se alcanzaron temperaturas máximas de 39 °C. </p>
<p>Hay que tener en cuenta que estamos en pleno invierno en esta parte del mundo. Y está lo suficientemente al sur como para que las variaciones estacionales tengan un impacto sustancial en las temperaturas. Buenos Aires, por ejemplo, está tan al sur como Japón, el Tíbet o Tennessee al norte. </p>
<p>En términos de desviación de las temperaturas que cabría esperar en un determinado lugar y época del año, esta ola de calor es comparable, si no mayor, que las recientes olas de calor en <a href="https://theconversation.com/european-heatwave-whats-causing-it-and-is-climate-change-to-blame-209653">el sur de Europa</a>, Estados Unidos y China. En Vicuña, una de las ciudades de los Andes chilenos que recientemente alcanzó los 38 °C, un día típico de agosto podría ser de <a href="https://weatherspark.com/y/26539/Average-Weather-in-Vicu%C3%B1a-Chile-Year-Round">18 °C más o menos</a> –imagínese que hace 20 °C más de lo normal dondequiera que esté ahora–.</p>
<p>No es de extrañar que algunos climatólogos ya hayan sugerido que ésta podría ser <a href="https://twitter.com/ClimateDann/status/1687032987135725569">una de las olas de calor más extremas jamás registradas</a>.</p>
<h2>¿Qué está causando el calor extremo?</h2>
<p>Durante los últimos seis días, una persistente zona de altas presiones, o anticiclón, ha permanecido al este de los Andes. También conocida como “alta de bloqueo”, parece ser la principal causa del intenso calor. </p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/541258/original/file-20230804-25-f3znn9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="Mapa anotado de Sudamérica" src="https://images.theconversation.com/files/541258/original/file-20230804-25-f3znn9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/541258/original/file-20230804-25-f3znn9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=409&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/541258/original/file-20230804-25-f3znn9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=409&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/541258/original/file-20230804-25-f3znn9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=409&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/541258/original/file-20230804-25-f3znn9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=514&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/541258/original/file-20230804-25-f3znn9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=514&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/541258/original/file-20230804-25-f3znn9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=514&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">El anticiclón de bloqueo que está provocando la ola de calor entre Chile y Argentina.</span>
<span class="attribution"><span class="source">GFS analysis data</span>, <span class="license">Author provided</span></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Los anticiclones de bloqueo pueden provocar olas de calor de tres formas principales. En primer lugar, atraen hacia ellos aire más cálido procedente de las proximidades del ecuador. El sistema también comprime y atrapa el aire, calentándolo, como fue el caso de la <a href="https://www.nature.com/articles/s41467-023-36289-3">ola de calor de 2021 en el noroeste del Pacífico</a>, que batió el récord canadiense de temperatura en casi 5 °C. Por último, las altas presiones hacen que haya poco aire ascendente y, por tanto, poca nubosidad. Esto permite que el sol caliente la tierra continuamente durante el día, <a href="https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0169809515001738?via%3Dihub">acumulando calor</a>.</p>
<p>Sin embargo, los científicos necesitan analizar con más detalle la meteorología de este acontecimiento sin precedentes para obtener una comprensión más completa.</p>
<h2>El Niño lo hizo más probable</h2>
<p>La ola de calor entre Chile y Argentina puede haber sido más probable debido al <a href="https://theconversation.com/asi-puede-influir-el-nino-en-el-calentamiento-global-209543">desarrollo de El Niño</a> en el océano Pacífico. Los fenómenos de El Niño, que suelen producirse cada cuatro años aproximadamente, se caracterizan por temperaturas cálidas en la superficie del mar en el Pacífico tropical central y oriental. En la actualidad, las temperaturas en el Pacífico central se sitúan <a href="https://www.metoffice.gov.uk/research/climate/seasonal-to-decadal/gpc-outlooks/el-nino-la-nina">aproximadamente 1 °C por encima de la media</a> para la época del año.</p>
<p>Estas temperaturas oceánicas más cálidas hacen que el aire flote más sobre el Pacífico central, haciendo que el aire se eleve. Esto provoca cambios en los patrones de circulación atmosférica más allá. Los cambios en la circulación atmosférica inducidos por El Niño suelen traducirse en una mayor presión y temperaturas invernales más cálidas para <a href="https://adgeo.copernicus.org/articles/22/3/2009/adgeo-22-3-2009.pdf">esta parte de Sudamérica</a>.</p>
<h2>El cambio climático lo empeoró</h2>
<p>El sistema de bloqueo que provocó el calor extremo probablemente habría dado lugar a temperaturas cálidas incluso en ausencia de cambio climático antropogénico. Sin embargo, el rápido calentamiento provocado por el cambio climático permitió que la ola de calor se haya convertido en algo realmente sin precedentes.</p>
<p>Los científicos del clima esperan ver <a href="https://www.science.org/doi/full/10.1126/sciadv.abm6860">batirse récords de temperatura</a> a medida que nuestro planeta siga calentándose. Esto se debe a que la distribución de las posibles temperaturas se está desplazando cada vez más alto.</p>
<p>Chile ya ha experimentado recientemente los efectos del cambio climático a través de una grave ola de calor en febrero – a finales del verano – que provocó varias muertes por <a href="https://apnews.com/article/wildfires-latin-america-caribbean-climate-and-environment-fires-f1eaf0919c9b9b9d1f88d60be2191d78">incendios forestales</a>, así como una <a href="https://www.theguardian.com/world/2022/jun/01/chiles-water-crisis-megadrought-reaching-breaking-point">megasequía</a> de una década de duración. Recientemente, el país <a href="https://www.climatechangenews.com/2022/09/05/gigantic-missed-opportunity-chile-rejects-green-constitution-faces-uncertainty/">rechazó</a> una nueva redacción de la Constitución que habría obligado a su gobierno a tomar medidas contra las crisis natural y climática.</p>
<h2>El impacto a largo plazo de una ola de calor invernal</h2>
<p>Las temperaturas más altas parecen haber remitido en gran medida en los Andes. Sin embargo, las temperaturas siguen siendo muy superiores a la media en el norte de Argentina, Bolivia y Paraguay, y seguirán siéndolo durante los próximos cinco días.</p>
<p>Los efectos de las olas de calor invernales son menos conocidos que los de las olas de calor estivales. Para Chile, el impacto más probable es sobre <a href="https://www.wionews.com/world/climate-change-chile-argentina-face-scorching-heat-wave-in-middle-of-winter-621920">la capa de nieve en las montañas</a>, que proporciona agua para <a href="https://earthobservatory.nasa.gov/images/150100/snow-blanket-for-the-andes">beber, la agricultura y la generación de energía</a>. El derretimiento del manto de nieve probablemente afectará también a la diversa flora y fauna de los Andes.</p>
<p>En general, esta ola de calor es un sorprendente recordatorio de cómo el ser humano está cambiando el clima de la Tierra. Seguiremos viendo estos extremos sin precedentes hasta que dejemos de quemar combustibles fósiles y de emitir gases de efecto invernadero a la atmósfera.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/211151/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Matthew Patterson recibe financiación del Natural Environment Research Council.</span></em></p>Algunas zonas de Argentina y los Andes chilenos registraron algunas de las temperaturas más altas jamás registradas.Matthew Patterson, Postdoctoral Research Assistant in in Atmospheric Physics, University of OxfordLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/2014852023-03-26T20:24:43Z2023-03-26T20:24:43ZEl Laco: el volcán más raro del mundo<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/515304/original/file-20230314-18-9oxeqm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=17%2C11%2C3976%2C2982&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Vista de el Laco (Chile)</span> <span class="attribution"><span class="license">Author provided</span></span></figcaption></figure><p>Cerca del Paso Sico, una remota frontera entre Chile y Argentina y entre las conocidas zonas de la Quebrada de Humahuaca y el Salar de Atacama, los turistas que visitan esos grandiosos paisajes ven un cerro anodino de 5 400 m reflejándose en la Laguna Tuyaito. Se trata del Cerro de El Laco, uno de los lugares geológicamente hablando más controvertidos e intrigantes de la Tierra. </p>
<h2>Rocas hechas de magnetita</h2>
<p>A finales de los años 1950 del siglo pasado, <a href="https://www.miningfoundationsw.org/Charles_Park">Charles Park</a>, profesor de yacimientos minerales de la Universidad de Stanford, describió unas coladas volcánicas formadas por<a href="https://www.mindat.org/show.php?id=2538"> magnetita</a> en un lugar remoto de los Andes. Este descubrimiento apoyaba la teoría, ya planteada por el geólogo sueco Geiger en 1910, de que rocas similares y mucho más antiguas que se explotaban en la <a href="https://en.wikipedia.org/wiki/Kiruna_mine">mina de Kiruna</a>, en Laponia, estaban formadas por la cristalización de un magma desconocido, rico en hierro. </p>
<p>La magnetita es una fuente importante de hierro y un mineral que raramente se encuentra en cantidades tan elevadas como en Kiruna o El Laco. Una fábula de <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Plinio_el_Viejo">Plinio el Viejo</a> atribuye el nombre de la magnetita al de un pastor de nombre Magnes que descubrió este mineral en el monte Ida, observando que se adhería a los clavos de su calzado.</p>
<p>El Laco es un volcán reciente, formado hace “solo” unos 2-3 millones de años, lo que significa que podemos estudiar en sus laderas unas rocas que están casi intactas. </p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/517391/original/file-20230324-22-l2ejn2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/517391/original/file-20230324-22-l2ejn2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/517391/original/file-20230324-22-l2ejn2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=450&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/517391/original/file-20230324-22-l2ejn2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=450&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/517391/original/file-20230324-22-l2ejn2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=450&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/517391/original/file-20230324-22-l2ejn2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=566&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/517391/original/file-20230324-22-l2ejn2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=566&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/517391/original/file-20230324-22-l2ejn2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=566&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Chile. En el cuerpo de Laco Sur a 4.800 m.</span>
<span class="attribution"><span class="license">Author provided</span></span>
</figcaption>
</figure>
<h2>La rareza del volcán</h2>
<p>Alrededor de este volcán clásico de los Andes hay unas coladas muy similares a las de cualquier volcán, pero algo más oscuras y con formas de erosión caprichosas. En detalle, estas coladas tienen todas las estructuras que podemos esperar en un volcán. Son coladas de lava que han descendido por la ladera, <a href="https://petroignea.wordpress.com/tiposrocosos/clasificacion/rocas-piroclasticas/">rocas piroclásticas</a> o bombas volcánicas.</p>
<p>Parecen rocas convencionales, pero no lo son: están formadas por magnetita. Es difícil percatarse de esto hasta oír el sonido metálico al impactar un martillo o acercar un imán. Con la lupa podemos también observar que la magnetita es masiva, solo tiene unas pequeñas inclusiones de <a href="https://www.mindat.org/min-1572.html">fluorapatito</a>, mineral rico en fósforo y flúor, y <a href="https://www.mindat.org/min-1294.html">diopsido</a>.</p>
<h2>Una lava inusual en la Tierra</h2>
<p>La formación de estas rocas ha suscitado un debate científico enconado. Aun hoy, más de 60 años después del descubrimiento, no hay una teoría unánimemente aceptada sobre su origen. </p>
<p>Las hipótesis sobre cómo se han podido formar unas rocas tan únicas son de lo más variado. Incluyen, junto con la <a href="https://pubs.geoscienceworld.org/gsa/geology/article-abstract/44/6/427/132097/Iron-rich-melts-magmatic-magnetite-and-superheated">hipótesis</a> <a href="https://pubs.geoscienceworld.org/canmin/article-abstract/16/4/581/11278/Crystal-growth-textures-in-magnetite-flows-and?redirectedFrom=fulltext">magmática</a>, modelos que sugieren que la magnetita <a href="https://pubs.geoscienceworld.org/segweb/books/book/1232/chapter-abstract/107025734/Geology-and-Rare-Earth-Element-Geochemistry-of?redirectedFrom=fulltext">se formó por aguas de los salares que fueron calentadas por la actividad magmática y extrajeron el hierro de las rocas volcánicas para depositarlo en la superficie</a>. O que el hierro fue transportado por agua caliente que procedía de las <a href="https://pubs.geoscienceworld.org/segweb/economicgeology/article-abstract/98/7/1501/22408/NEW-FIELD-EVIDENCE-BEARING-ON-THE-ORIGIN-OF-THE-EL?redirectedFrom=fulltext">raíces del volcán</a>. </p>
<p>Sin embargo, en los últimos años hay más evidencias geológicas y geoquímicas de que la magnetita sea una <a href="https://pubs.geoscienceworld.org/segweb/economicgeology/article-abstract/112/7/1595/516651/The-Magmatic-to-Magmatic-Hydrothermal-Evolution-of?redirectedFrom=fulltext">lava inusual</a>. </p>
<p>El mayor problema es que nadie ha visto esas lavas en la Tierra, aunque hay investigadores que hipotetizan que son frecuentes en <a href="https://agupubs.onlinelibrary.wiley.com/doi/full/10.1029/2002JE001891">Marte y otros planetas</a>. Un problema similar pasó con unas rocas muy distintas, las carbonatitas, que también son extrañas lavas compuestas por carbonatos. Hasta que no se descubrió la lava carbonatítica emergiendo del volcán <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Ol_Doinyo_Lengai">Oldoinyo Lengai (Tanzania)</a> no se cerró la polémica.</p>
<p>Si El Laco tiene coladas volcánicas de magnetita, surgen dos grandes preguntas que resolver. La primera es que la magnetita funde a unos <a href="https://en.wikipedia.org/wiki/Magnetite">1590°C</a>, una temperatura que no se registra en la corteza terrestre. Además, la temperatura máxima de los magmas que llegan a su superficie no excede los 1300°C. </p>
<h2>¿Cómo se puede fundir magnetita?</h2>
<p>Los expertos en altos hornos saben que, si añadimos unos elementos como el fósforo o el flúor al hierro, la temperatura de fusión baja enormemente, casi hasta los 700°, una temperatura ya mucho más normal en <a href="https://link.springer.com/article/10.1007/s00410-020-01751-8">volcanes</a>. </p>
<p>Pero ¿de dónde vienen esos componentes relativamente poco habituales? </p>
<p>Debajo de El Laco hay evidencia geológica de que existen <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Cordillera_de_la_Sal">grandes capas de sal depositadas en un medio marino hace entre 40 y 90 millones de años</a>. Esta relación con la sal se repite en los pocos lugares del mundo donde hay depósitos de magnetita similares. </p>
<p>Una posible explicación es que los magmas de composición más corriente (andesitas) al ascender a través de la corteza terrestre, y ya cerca de su superficie, incorporaron la sal y los fundentes que, junto con la andesita, facilitaron la formación de estos <a href="https://www.nature.com/articles/s41467-018-03761-4">magmas tan ricos en hierro</a>.</p>
<p>Restos de estas rocas se han encontrado como fragmentos arrojados por el volcán o en forma de pequeñas inclusiones dentro de la propia magnetita. Los trazadores geoquímicos también muestran que la magnetita no está químicamente relacionada con las rocas volcánicas encajantes. La composición química de las rocas ricas en magnetita <a href="https://pubs.geoscienceworld.org/segweb/economicgeology/article-abstract/112/7/1595/516651/The-Magmatic-to-Magmatic-Hydrothermal-Evolution-of?redirectedFrom=fulltext">traza la reacción de esos magmas profundos con las rocas que están encima</a>.</p>
<p>Esta inusual relación entre magmas de origen profundo y capas salinas podría explicar la rareza de estos volcanes. </p>
<p>Nadie ha visto estas lavas ni tampoco hemos visto qué es lo que sucede en las raíces de estos volcanes. Los humanos hemos llegado tarde a la contemplación de un fenómeno que, si ocurrió, debió ser de los más espectaculares de la naturaleza, con coladas de hierro fundido bajando a velocidad inusitada por las laderas del volcán y acompañadas de grandes columnas piroclásticas.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/201485/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Fernando Tornos Arroyo ha recibido fondos de la Agencia Española de Investigación y FEDER, proyecto RTI2018-099157-A-I00 (MCI/AEI/FEDER, UE).</span></em></p>El volcán El Laco es uno de los puntos más controvertidos en la geología mundial.Fernando Tornos Arroyo, Investigador, Instituto de Geociencias (IGEO - CSIC - UCM)Licensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1997422023-02-12T19:19:59Z2023-02-12T19:19:59ZCatástrofes sísmicas: la memoria histórica nos hace resilientes<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/509560/original/file-20230211-18-z60nrl.jpeg?ixlib=rb-1.1.0&rect=6%2C12%2C4019%2C3005&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Estado de una comisaría de policía tras los terremotos de Siria y Turquía.</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Hatay_in_the_2023_Gaziantep-Kahramanmara%C5%9F_earthquakes_02.jpg">Wikimedia Commons / Hilmi Hacaloğlu</a></span></figcaption></figure><p>Los terremotos de magnitud 7,8 y 7,6 que sacudieron recientemente el sureste de Turquía y el norte de Siria nos recuerdan que no somos los dueños de la naturaleza. <a href="https://www.rtve.es/noticias/20230211/ultima-hora-terremoto-turquia-siria-muertos-rescate/2423586.shtml">Los más de 24.000 muertos</a> demuestran que nuestro desarrollo no puede suceder de espaldas al medio natural. Asimismo, los más de 3.500 edificios que <a href="https://theconversation.com/terremoto-en-turquia-por-que-muchos-edificios-se-derrumbaron-como-un-panqueque-199419">se derrumbaron como castillos de naipes</a> dejan patente que la catástrofe no debe imputarse a las fuerzas telúricas. En otras palabras, este sismo ofrece una ulterior prueba de que los desastres naturales no existen: las catástrofes relacionadas con amenazas de origen natural siempre son resultado de las acciones y decisiones humanas.</p>
<p>Hoy en día <a href="https://theconversation.com/por-que-los-terremotos-siguen-pillandonos-desprevenidos-199342">no es posible prever los terremotos con exactitud</a>, pero sí sabemos que, antes o después, l<a href="https://theconversation.com/el-terremoto-de-turquia-no-es-una-novedad-en-el-mediterraneo-199429">a tierra volverá a temblar</a> allí donde ya lo ha hecho una vez. Por ello, los desastres relacionados con sismos deben considerarse un producto histórico y político, ya que son el resultado de un proceso eminentemente social, es decir, impulsado y conformado por la sociedad que lo sufre.</p>
<p>Los terremotos de Turquía y Siria han provocado un número tan elevado de víctimas debido a que en esas zonas la gran mayoría de los edificios no cumplía la normativa sismorresistente. Tras <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Terremoto_de_%C4%B0zmit_de_1999">el temblor de 1999</a>, que produjo 17.000 muertos, el gobierno turco reconoció la urgencia de reducir el riesgo sísmico en el país. Para cumplir con este objetivo introdujo al año siguiente <a href="https://www.preventionweb.net/news/turkiye-building-resilience-against-earthquakes">nuevos estándares constructivos</a>, así como controles mucho más estrictos en el diseño de las nuevas edificaciones. Sin embargo, el Estado puso sobre la mesa escasos recursos para cumplir este objetivo y asignó un escaso número de funcionarios para la inspección de las nuevas construcciones. Muchas de ellas se levantaron sin pasar por el proceso de certificación y esto permitió a varias empresas sin escrúpulos construir sin respetar la nueva normativa arquitectónica.</p>
<h2>Invertir en prevención</h2>
<p>Si bien se sabe que es más rentable invertir en prevención que en intervención, muchos gobiernos, incluido el turco, no ven beneficio político en gastar dinero en políticas muy costosas, pero al mismo tiempo casi invisibles. Por otra parte, los terremotos altamente destructivos suelen producirse entre largos lapsos de tiempo, lo que impide que tanto la población como las autoridades interioricen una adecuada percepción del riesgo. Nuestra memoria histórica colectiva es muy frágil, lo que, junto con la baja frecuencia temporal de los sismos de gran magnitud, reduce la conciencia pública del riesgo.</p>
<p>Esto genera una mayor tendencia a no respetar estrictamente la normativa antisísmica por parte de la población y que las autoridades actúen de manera más laxa a la hora de hacer respetar dicha normativa. Hay que tener en cuenta que al igual que los desastres no son naturales, los riesgos tampoco lo son. Cada sociedad construye sus propios riesgos y así se explica, en el caso de Turquía, el gran número de edificios colapsados en la región afectada por el terremoto.</p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/509557/original/file-20230211-409-jbob0x.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/509557/original/file-20230211-409-jbob0x.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/509557/original/file-20230211-409-jbob0x.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=386&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/509557/original/file-20230211-409-jbob0x.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=386&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/509557/original/file-20230211-409-jbob0x.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=386&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/509557/original/file-20230211-409-jbob0x.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=485&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/509557/original/file-20230211-409-jbob0x.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=485&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/509557/original/file-20230211-409-jbob0x.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=485&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Un barco empotrado en una casa en Corral (Chile) tras el terremoto y tsunami de Valdivia en 1960, que alcanzó una magnitud de 9'5.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Un_barco_fue_arrojado_por_la_ola_del_tsunami_en_una_casa_-_Corral,_Oto%C3%B1o_1960.png">Wikimedia Commons / Buonasera</a>, <a class="license" href="http://creativecommons.org/licenses/by-sa/4.0/">CC BY-SA</a></span>
</figcaption>
</figure>
<h2>El caso de Chile</h2>
<p>Algunas naciones tienen la lección bien aprendida. Autoridades de países como Chile o Japón, que suelen registrar un terremoto de fuerte intensidad cada más o menos diez años, <a href="https://quieromibarrio.cl/wp-content/uploads/2016/04/Presentaci%C3%B3n-Ditec-Minvu.pdf">han impuesto estándares constructivos sismorresistentes muy elevados</a> y, sobre todo, han conseguido que estos sean respetados por la población. Los sismos en estos países son tan frecuentes que se han convertido en <a href="https://theconversation.com/las-incognitas-del-gran-terremoto-que-destruyo-atacama-hace-100-anos-194673">parte integrante de sus culturas</a>.</p>
<p>Por ejemplo, en Chile la población está tan habituada a los movimientos telúricos que tiene dos términos distintos para clasificarlos: sismos son los que alcanzan hasta una magnitud de 7,9 y los que superan esta cifra se denominan terremotos. Todos los chilenos son conscientes de que a lo largo de su vida les tocará vivir la catártica experiencia de un terremoto 8 o 9 y cada año en algún punto del país se registra al menos un terremoto de intensidad 6 o superior. Esto conlleva que los chilenos posean una muy clara percepción del riesgo sísmico y, justamente por eso, exigen que las autoridades velen por el cumplimiento de la estricta normativa que existe en esta materia.</p>
<p>La estrecha relación entre memoria, percepción del riesgo y construcción nos permite estar más preparados para afrontar las adversidades relacionadas con amenazas de origen natural y evitar que acaben desembocando en una tragedia.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/199742/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Soy beneficiario de una Beca Marie Curie financiada por la Unión Europea.</span></em></p>La memoria, la percepción del riesgo y las normas de construcción adecuadas nos permiten estar más preparados ante las amenazas de origen natural y evitar que acaben en tragedia.Loris De Nardi, Investigador Marie Curie en el Instituto Cultura y Sociedad (ICS), Universidad de NavarraLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1946732022-12-01T18:22:15Z2022-12-01T18:22:15ZLas incógnitas del gran terremoto que destruyó Atacama hace 100 años<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/498251/original/file-20221130-26-mdxsed.jpeg?ixlib=rb-1.1.0&rect=2%2C0%2C661%2C478&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">El 10 de noviembre de 1922 un fuerte terremoto seguido de un devastador tsunami afectó a las costas de las regiones chilenas de Atacama y también Coquimbo.</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.uchile.cl/noticias/192421/100-anos-del-terremoto-de-atacama-consideramos-el-peor-escenario">Universidad de Chile</a></span></figcaption></figure><p>En los últimos minutos del día 10 de noviembre de 1922 el extremo sur del desierto de Atacama (Chile) experimentó un gran terremoto. La tierra tembló durante más de 75 segundos como no había sucedido en varios siglos. No tardaron en llegar a las costas varios trenes de olas de tsunami que azotaron el litoral y obligaron a la población, todavía confundida, a abandonar sus casas para alcanzar los relieves cercanos y salvar sus vidas. </p>
<p>Cerca del 1 % de la población falleció a consecuencia del <a href="https://www.nature.com/articles/124391a0.pdf?origin=ppub">terremoto</a> y un número mucho mayor de personas resultaron damnificadas en una región minera que había sido duramente castigada por la fuerte depresión económica causada por la baja del precio del cobre tras la I Guerra Mundial. Llovía sobre mojado. Pasaron años hasta superar aquel duro golpe y volver a levantar ciudades como <a href="https://www.sciencedirect.com/science/article/abs/pii/S0031920102000523">Copiapó</a>, Vallenar o Freirina. </p>
<p>Las infraestructuras costeras y calles más cercanas al mar de las poblaciones de Chañaral o Caldera quedaron <a href="http://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-97802.html">completamente destruidas</a>. Algunas localidades, como Carrizal Bajo, jamás volvieron a conocer la prosperidad, e incluso a día de hoy la decadencia y el aura de tristeza derivada de aquella aciaga noche puede sentirse al pasear por calles y caletas.</p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/498248/original/file-20221130-22-ilujbx.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=2%2C2%2C746%2C485&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/498248/original/file-20221130-22-ilujbx.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=2%2C2%2C746%2C485&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/498248/original/file-20221130-22-ilujbx.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=390&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/498248/original/file-20221130-22-ilujbx.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=390&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/498248/original/file-20221130-22-ilujbx.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=390&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/498248/original/file-20221130-22-ilujbx.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=491&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/498248/original/file-20221130-22-ilujbx.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=491&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/498248/original/file-20221130-22-ilujbx.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=491&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Una de las calles de Coquimbo (Chile) después del tsunami producido por el terremoto originado en Atacama en noviembre de 1922.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="http://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-87207.html">Memoria Chilena - Biblioteca Nacional de Chile</a></span>
</figcaption>
</figure>
<h2>Lo que sí sabemos del gran terremoto de Atacama</h2>
<p>Ahora sabemos, <a href="https://doi.org/10.1016/j.tecto.2018.01.015">después de muchas reevaluaciones</a>, que este terremoto alcanzó una magnitud de 8,6 y que se trata del segundo más importante registrado en Chile, país sísmico donde los haya, durante el siglo XX. También se clasifica entre los de mayor potencial destructivo jamás registrado instrumentalmente. </p>
<p><a href="https://www.museodeatacama.gob.cl/galeria/catastrofes-de-chanaral-el-maremoto-de-1922-y-el-aluvion-de-1972">El tsunami</a> barrió las costas de Chile hacia el norte y el sur, alcanzando Lima y Concepción, a miles de kilómetros de distancia, y tuvo capacidad para atravesar todo el Pacífico, llegando a registrarse y generar daños en puntos tan lejanos como Hawái, las Islas Samoa, Taiwán y <a href="https://academic.oup.com/gji/article/219/1/645/5527934">Japón</a>.</p>
<p>La primera ola tardó entre 20 y 30 minutos en impactar contra los principales puertos localizados frente a la zona de ruptura. El puerto de Chañaral fue el más dañado por el impacto de 3 grandes olas que alcanzaron cotas de 9 metros sobre el nivel del mar y penetraron 200 metros tierra adentro, generando importantes daños en la zona baja de la ciudad y 20 fallecidos. </p>
<h2>Las olas arrancaron el edificio de la aduana</h2>
<p>En Caldera, las olas alcanzan cotas de 5,5 metros sobre el nivel del mar, inundando la estación y la maestranza de ferrocarriles, así como el edificio de la aduana, que llegó a separarse de los cimientos y flotar, chocando finalmente contra otras estructuras. En el reflujo máximo quedó al descubierto un naufragio localizado 25 metros bajo el agua. </p>
<p>En Carrizal Bajo el mar se internó 2 km siguiendo el valle y <a href="https://www.youtube.com/watch?v=OCc8op7EcjI">destruyendo a su paso el muelle del ferrocarril</a>, la maestranza y la estación. Las instalaciones de la fundición <em>Smelting Co</em>., junto al muelle, fueron arrasadas. Una locomotora, junto con sus vagonetas, fueron arrastradas varios metros y sepultadas bajo sedimentos por las olas. </p>
<p>Finalmente, en el puerto de Huasco las grandes olas destruyeron los muelles, la bodega y la aduana. La inundación marina penetró 1,5 km por la desembocadura del río y un barco naufragado frente a la costa fue devuelto a la playa.</p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/498250/original/file-20221130-16-ibosax.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/498250/original/file-20221130-16-ibosax.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/498250/original/file-20221130-16-ibosax.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=341&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/498250/original/file-20221130-16-ibosax.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=341&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/498250/original/file-20221130-16-ibosax.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=341&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/498250/original/file-20221130-16-ibosax.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=428&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/498250/original/file-20221130-16-ibosax.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=428&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/498250/original/file-20221130-16-ibosax.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=428&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Una de las calles de Coquimbo (Chile) después del tsunami producido por el terremoto originado en Atacama en noviembre de 1922.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="http://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-87208.html">Memoria Chilena - Biblioteca Nacional de Chile</a></span>
</figcaption>
</figure>
<h2>La incógnita del origen del terremoto</h2>
<p>A pesar de todo lo anterior, aún existen incógnitas, en términos sísmicos, de lo que sucedió aquel inolvidable día de noviembre. Todavía no localizamos el epicentro de este evento y su magnitud ha sido revisada y reevaluada multitud de veces. </p>
<p>El terremoto ocurrió en el inicio de la sismología moderna. El <a href="https://www.sismologia.cl/">Servicio Sismológico de Chile</a> se había creado en 1908 instalando un observatorio de primer orden en Santiago y cuatro de segundo orden a lo largo del país, en Tacna, Copiapó, Osorno y Punta Arenas. </p>
<p>El terremoto de 1922 tumbó el instrumental instalado en Copiapó, por lo que el sismógrafo solo registró el inicio del movimiento mientras que en Santiago, a 680 km de distancia, el equipo no contaba con amortiguadores. Las agujas, en su brusco movimiento, arrugaron y rasgaron el papel, algo similar a lo que ocurrió en el Observatorio Sismológico de La Plata en Argentina. </p>
<p>En cualquier caso, el terremoto de Atacama supuso una oportunidad excepcional para entender bien este tipo de fenómenos. Las miradas del mundo, por un breve instante, se posaron sobre este territorio desierto de inusual belleza. Han pasado 100 años desde entonces, y es un buen momento para recordar.</p>
<h2>La memoria de los grandes terremotos</h2>
<p>Las enseñanzas de lo ocurrido no sólo pueden ser <a href="https://www.dgeo.udec.cl/blog/2021/11/10/investigadores-de-geofisica-analizan-potencial-sismico-de-atacama-a-99-anos-de-su-ultimo-terremoto/">aplicadas para el norte de Chile</a>. La historia humana es breve, mucho más corta a veces que la periodicidad de los fenómenos naturales más destructivos. La cadencia de fenómenos como los grandes terremotos es larga, a veces de varios siglos o incluso milenios. Esto produce una falsa sensación de seguridad en zonas habitadas expuestas a estas amenazas: una baja percepción de ese riesgo. </p>
<p>En el caso del norte de Chile, las primeras <a href="https://en.wikipedia.org/wiki/Category:Megathrust_earthquakes_in_Chile">crónicas</a> se remontan sólo 500 años atrás, como mucho. En el mejor de los casos, los eventos de mayor magnitud que pueden experimentar <a href="https://link.springer.com/article/10.1007/s00024-016-1280-5">zonas de subducción fuertemente acopladas</a>, como las del Desierto de Atacama, sólo se han producido una vez desde que tenemos registros históricos, pero en muchos otros se han producido <a href="https://onlinelibrary.wiley.com/doi/full/10.1111/sed.12570">antes incluso de la llegada de comunidades capaces de narrar sus consecuencias</a> para que queden conservadas de forma escrita. </p>
<p>Esto significa que debemos mirar más atrás en el tiempo, y sólo mediante disciplinas como la geología y la arqueología podemos establecer cómo y cuándo tuvieron lugar estos eventos, cuál fue su impacto sobre antiguas comunidades o ecosistemas y, sobre todo, cuándo podrían volver a suceder. </p>
<p>El mensaje es claro. Es necesario estar preparados ante lo improbable, incluso ante lo que pensamos que jamás puede suceder porque nuestra memoria no llega tan lejos, o sólo porque hemos decidido olvidarlo.</p>
<hr>
<p><em>Miguel Cáceres Munizaga, investigador y colaborador del grupo de Recursos Hídricos y Geología del Cuaternario de Atacama y autor del libro “El terremoto que destruyó Atacama” ha asesorado la redacción de este artículo.</em></p>
<hr><img src="https://counter.theconversation.com/content/194673/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Tatiana Izquierdo recibe fondos del Proyecto TRAMPA PID2021-127268NB-I00 financiado por MCIN/ AEI /10.13039/501100011033/ y por FEDER Una manera de hacer Europa</span></em></p><p class="fine-print"><em><span>Manuel Abad de los Santos recibe fondos de investigación del Ministerio de Ciencia e Innovación del Gobierno de España (Proyecto TRAMPA PID2021-127268nb-100) y de la Universidad Rey Juan Carlos (Proyecto Puente TSUARA M2615)</span></em></p>Aún existen incógnitas, en términos sísmicos, de lo que sucedió durante el gran terremoto que destruyó Atacama. Todavía no se ha localizado el epicentro de este evento y su magnitud ha sido revisada y reevaluada multitud de veces.Tatiana Izquierdo, Profesora del Área de Geodinámica Externa, especialista en Recursos Hídricos y Riesgos Naturales, Universidad Rey Juan CarlosManuel Abad de los Santos, Profesor del área de Geodinámica externa, Geología, especialista en riesgos naturales, cambio global y patrimonio geológico, Universidad Rey Juan CarlosLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1900172022-09-05T20:12:59Z2022-09-05T20:12:59ZPlebiscito constituyente, un viaje de Chile hacia el centro<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/482824/original/file-20220905-22-e4prgw.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C391%2C4578%2C2656&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">El presidente de la República de Chile, Gabriel Boric Font, vota en el plebiscito constitucional celebrado el 4 de sepyiembre de 2022 y rechazado por una amplia mayoría de los votantes.
</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://prensa.presidencia.cl/fotografia.aspx?id=200204">Presidencia de Chile</a></span></figcaption></figure><p>El sábado en la tarde, en vísperas del plebiscito constituyente, me senté a ver las franjas televisivas con los mensajes políticos de los proponentes del apruebo y el rechazo. Chile tiene un buen sistema de comunicación pública en el que la televisión y la radio entregan tiempo para que las agrupaciones políticas expongan sus ideas y llamen al voto. La llamada franja electoral es gratuita y está regulada legalmente, abaratando costos en las campañas y democratizando el acceso a la información. En mi curso de sistemas políticos de la próxima semana estaremos analizando el proceso constituyente y quería llevar un par de buenos ejemplos para compartir con los alumnos. No fue tarea fácil.</p>
<p>Del lado del #rechazo había muy buenos <em>spots</em> que, invitando a votar contra la constitución propuesta, enfatizaban en su carácter divisivo y ahondaban en la esencia del mensaje: “Nueva constitución sí, pero ésta no”. </p>
<figure>
<iframe width="440" height="260" src="https://www.youtube.com/embed/zsbBwgASevo?wmode=transparent&start=0" frameborder="0" allowfullscreen=""></iframe>
</figure>
<p>Sin embargo, del lado del #apruebo, no sólo los <em>spots</em> eran de mala factura, sino que los mensajes iban desde un entusiasmo ramplón hasta la prodigalidad de derechos de la nueva Carta Magna, desde las reivindicaciones laborales hasta el derecho a la vivienda, arrojando en su conjunto gran dispersión del mensaje y pobreza argumental. </p>
<figure>
<iframe width="440" height="260" src="https://www.youtube.com/embed/64wZO7NvWns?wmode=transparent&start=0" frameborder="0" allowfullscreen=""></iframe>
</figure>
<p>Además de tener fallas importantes en su comunicación política, a los proponentes del apruebo les jugó en contra el sistema electoral. Hace casi dos años, en octubre de 2020, los chilenos habían votado muy masivamente a favor de la hechura de una nueva Constitución. <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Plebiscito_nacional_de_Chile_de_2020">Cerca de un 80% de los electores afirmaron en aquel momento querer una nueva Constitución</a> y que fuera redactada por nuevos constituyentes, en lugar de hacerlo parcialmente por parlamentarios. Caras nuevas exigió el electorado, y efectivamente la norma electoral las aupó en la elección de los constituyentes meses después. </p>
<p>Otra norma que jugó en contra del #apruebo fue la del voto obligatorio. En Chile el voto había sido mandatorio hasta la elección del año 2010, con niveles de participación en torno al 80%, mientras que con voto no obligatorio el promedio de participación está sobre el 47%. El plebiscito, con voto compulsivo, subió de nuevo a los valores tradicionales en tiempos del voto obligatorio e impulsó a quienes son políticamente neutros y más apáticos, pero también más centristas, a tomar partido.</p>
<h2>Retazos de buenos propósitos</h2>
<p>La <a href="https://www.chileconvencion.cl/convencionales/">Asamblea Constituyente electa en mayo 2021</a> estuvo repleta de caras nuevas, fundamentalmente inexpertos, mayoritariamente orientada hacia la izquierda, aunque fragmentada y diversa. Dos terceras partes de los constituyentes carecían de militancia partidista, pese a que tuvieran experiencia como activistas de causas nobles. Se sintieron triunfantes y engolosinados con la oportunidad de construir un país más parecido a ellos y así tejieron una colcha de retazos con <a href="https://www.chileconvencion.cl/wp-content/uploads/2022/07/Texto-Definitivo-CPR-2022-Tapas.pdf">162 pliegos</a> de buenos propósitos, que ampliaba los derechos de los ciudadanos pero también exacerbaba las diferencias. Lo hicieron desde una Asamblea que no estuvo a la altura de la responsabilidad de redactar la nueva Constitución para Chile.</p>
<p>Y es que además de establecer la estructura formal del Estado, una constitución debe articular los consensos básicos de una sociedad. Porque más allá del papelito escrito que resulte de la Asamblea Constituyente, existen prácticas y valores que deben sustentar el apego a la ley. <a href="https://papers.ssrn.com/sol3/papers.cfm?abstract_id=3906852">Cambiar el marco constitucional de un país tiene ínfimo impacto en la estabilidad de un régimen democrático</a>. Una democracia no sucumbe en tanto los actores políticos tengan incentivos para mantenerse dentro del marco de los acuerdos democráticos y la aceptación de los resultados electorales. Para la estabilidad de la democracia, y en general del sistema político, las reglas no escritas son tan o más importantes que las reglas escritas y constitucionales, como sostienen Levitsky y Ziblatt. En ese sentido y como arreglo de convivencia a largo plazo, nunca debería una constitución ser aprobada por una mayoría simple, sino por un consenso social.</p>
<p>Un consenso como el que aprobaba la institucionalidad de la Asamblea Constituyente cuando fue electa, o como el que hasta principios de este año afirmaba apoyaría en 56% a la nueva constitución, con un rechazo de apenas 33% (<a href="https://www.anda.cl/estudios/plaza-publica-cadem-segunda-semana-de-enero/">Plaza Pública, enero 2022</a>). Para julio de este año, sin embargo, ya había muchos elementos que hacían “ruido” entre los electores: la eliminación del Senado o la idea de que “no todos van a ser iguales ante la ley” (39%), o que “con la plurinacionalidad, Chile corre el riesgo de dividirse” (31%). (<a href="https://www.feedbackresearch.cl/encuesta-feedback-juli-2022">Feedback julio 2022</a>). Quizás uno de los detonantes fue la oferta final de aprobar para luego reformar, que sonaba demasiado a trabajo mal hecho, o el que los elementos más radicales de la propuesta, así como de sus proponentes, fueran amplificados para actuar de manera disuasiva.</p>
<h2>Chile centrista</h2>
<p>El caso es que el resultado del domingo, <a href="https://plebiscitoconstitucional.servel.cl/servel-realiza-balance-del-plebiscito-constitucional/">62% en contra y 48% a favor</a>, mandó un duro mensaje no solo a los constituyentes, sino al presidente Boric, quien había hecho campaña activamente por el apruebo. </p>
<p><div data-react-class="Tweet" data-react-props="{"tweetId":"1566573956915728384"}"></div></p>
<p>“Revivió Pinochet”, polemizó <a href="https://twitter.com/petrogustavo/status/1566573956915728384?s=20&t=x8zsGzxMnlaCyvLBp2Sxeg">en un tuit</a> el presidente colombiano Gustavo Petro, recientemente electo y aliado del presidente Boric. Se equivoca. Los chilenos votaron el domingo en contra de la constitución de Pinochet y de la nueva propuesta, todo al mismo tiempo. </p>
<p>Chile es un país de centro. Más centrista que Colombia. Aún cuando la curva ideológica tanto en Colombia como en Chile se aproximan a un comportamiento normal, con posiciones de centro ideológico claramente mayoritarias, las posturas extremistas de Chile son menores y muy poca gente se autoidentifica como de “extrema derecha” o “extrema izquierda”. </p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/482823/original/file-20220905-25-lk16u5.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/482823/original/file-20220905-25-lk16u5.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/482823/original/file-20220905-25-lk16u5.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=348&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/482823/original/file-20220905-25-lk16u5.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=348&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/482823/original/file-20220905-25-lk16u5.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=348&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/482823/original/file-20220905-25-lk16u5.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=438&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/482823/original/file-20220905-25-lk16u5.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=438&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/482823/original/file-20220905-25-lk16u5.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=438&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Chile y Colombia: utoposicionamiento político en el eje Izqda-Dcha (2017-2020)</span>
<span class="attribution"><span class="source">Carmen Beatriz Fernández a partir de datos World Values Survey (oleada 2017-2020)</span></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Chile ayer abrazó el centro político. Ojalá que tanto el presidente Boric como la derecha en la oposición así lo entiendan. No hay mayor valor en una democracia que el de lograr acuerdos.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/190017/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Carmen Beatriz Fernández no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>Al rechazar masivamente el trabajo de la Asamblea Constituyente en el plebiscito del domingo, Chile abrazó el centro político.Carmen Beatriz Fernández, Profesora de Comunicación Política en la UNAV, el IESA y Pforzheim, Universidad de NavarraLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1849962022-07-04T17:04:20Z2022-07-04T17:04:20ZVolver a la infancia con Gabriela Mistral<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/470616/original/file-20220623-50671-s4p8bq.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C5%2C1301%2C928&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Gabriela Mistral cuando niña, junto a su abuela paterna, Isabel Villanueva.</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Gabriela_Mistral_con_su_abuela_tomando_mate.jpg">Wikimedia Commons</a></span></figcaption></figure><p><a href="http://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-94085.html"><em>Tala</em></a>, publicado por primera vez en Buenos Aires por Editorial Sur en 1938, se considera un hito dentro de la labor literaria de la poeta chilena Gabriela Mistral, y es uno de sus trabajos más maduros, además de una de las obras más importantes de la poesía chilena e hispanoamericana.</p>
<figure class="align-left zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/470058/original/file-20220621-11-m6r3x5.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/470058/original/file-20220621-11-m6r3x5.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=237&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/470058/original/file-20220621-11-m6r3x5.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=730&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/470058/original/file-20220621-11-m6r3x5.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=730&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/470058/original/file-20220621-11-m6r3x5.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=730&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/470058/original/file-20220621-11-m6r3x5.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=918&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/470058/original/file-20220621-11-m6r3x5.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=918&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/470058/original/file-20220621-11-m6r3x5.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=918&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Gabriela Mistral sonriendo, hacia 1938.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Gabriela_Mistral_sonriendo_ca._1938_(cropped).jpg">Biblioteca Nacional de Chile / Wikimedia Commons</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Tras el modernismo, muchos poetas se aproximaron al lenguaje llano, incluso coloquial, para comunicar experiencias arquetípicas más amplias. En el caso que nos ocupa, la poesía de Mistral brota de las frustraciones del amor y la maternidad, de la infancia y la vida misma. La poeta utiliza metros y formas tradicionales y su vocabulario es una modalidad ennoblecida del habla corriente. Así consigue ensanchar el horizonte de la poesía hispanoamericana e introducir nuevos temas en el género, como la sensación de plenitud que tiene la mujer soltera. </p>
<p>La calidad de <a href="http://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-94082.html"><em>Desolación</em></a>, libro al que en ediciones posteriores fue añadiendo numerosos poemas, <em>Tala</em> y <a href="http://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-94084.html"><em>Lagar</em></a> hicieron que, en 1945, la Academia Sueca la galardonara finalmente con el Premio Nobel de Literatura, que recibió el 10 de diciembre de aquel año. </p>
<h2>El retorno a la infancia o la negación a ser olvidada</h2>
<p>Pero ¿qué es <a href="https://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/tala--1/html/"><em>Tala</em></a>?</p>
<p>El nombre con el que Gabriela Mistral titula el poemario –<em>tala</em>– obedece a una palabra utilizada en la <a href="https://www.culturaydeporte.gob.es/cultura/areas/archivos/mc/archivos/cdmh/biblioteca/catalogo/seccionespecial/teosofia.html">filosofía teosófica</a> –a la que la autora se acercó en muchos momentos– que significa lugar, superficie, terreno, suelo, llanura, fondo, estado o condición. </p>
<p>Ella lo aplica en un sentido figurado, como la naturaleza íntima, la parte esencial, la causa y el fondo de todas las cosas. La tala –según dicha filosofía– sería un estado del intelecto. Cuanto más se desciende en dicho estado, menos espiritual se vuelve la persona. Esto conecta con su formación cristiana que, aunque muy adaptada a su particular manera de entender la mística del alma, tiene en realidad mayor peso en el poemario que la teosofía.</p>
<p><em>Tala</em> se inicia con el recuerdo del fallecimiento de su madre y se desarrolla a través de diversos símbolos religiosos, filosóficos o conceptuales, lo que presenta una poesía de memorial personal. Incluye además pensamientos infantiles, canciones de cuna y poemas para niños. En el medio inserta sus reflexiones como adulta y su frustración ante la vida y el sentir de la misma. Es un paseo biográfico que recorre los acontecimientos que más impactaron su vida.</p>
<figure class="align-right zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/470617/original/file-20220623-51616-kizzxz.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/470617/original/file-20220623-51616-kizzxz.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=237&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/470617/original/file-20220623-51616-kizzxz.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=801&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/470617/original/file-20220623-51616-kizzxz.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=801&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/470617/original/file-20220623-51616-kizzxz.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=801&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/470617/original/file-20220623-51616-kizzxz.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=1006&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/470617/original/file-20220623-51616-kizzxz.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=1006&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/470617/original/file-20220623-51616-kizzxz.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=1006&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Petronila Alcayaga Rojas (1845 - 1929), madre de Gabriela Mistral, hacia 1900.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Petronila_Alcayaga_Rojas,_madre_de_Gabriela_Mistral,_ca_1900.jpg">Biblioteca Nacional de Chile / Wikimedia Commons</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p><em>A priori</em> no resulta fácil encontrar un hilo secuencial en <em>Tala</em>, pero la simbología lo estructura alrededor del recuerdo y figura de la madre, la soledad, el suicidio, la presencia de elementos teológicos… En el poema <a href="https://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/tala--1/html/ff25d1ee-82b1-11df-acc7-002185ce6064_8.html#I_11_"><em>Locas letanías</em></a>, la autora inventa una especial forma de oración donde suplica que todas las madres sean acogidas en el seno de Cristo. La simbología críptica aparece de forma continua ensartada en la sencillez de un aparente espontáneo verso.</p>
<p>El suicido aparece en el libro como homenaje a <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Jos%C3%A9_Asunci%C3%B3n_Silva">José Asunción Silva</a>, poeta colombiano que <a href="https://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/la-muerte-de-jose-asuncion-silva-1930/html/120a8ee4-7a45-11e1-b1fb-00163ebf5e63_2.html">se mató a los 30 años</a>. Este tipo de muerte será recurrente en la vida de Mistral, ya que su hijo-sobrino, YinYin, se suicidaría a los 18 años. Es un tema constante en su vida y su obra y, junto a la ausencia de su madre muerta, reflejan experiencias que permanecen. Las circunstancias turbulentas y desestabilizadoras dejan huella y sirven a la autora para dibujar un mundo poético como una suerte de reconocimiento resiliente hacia su propia historia. </p>
<p><a href="https://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/tala--1/html/ff25d1ee-82b1-11df-acc7-002185ce6064_10.html#I_78_"><em>Razón de este libro</em></a> es un apéndice en el que Gabriela Mistral explicó la estructura de <em>Tala</em>, aunque no es necesario. Para la lectura del poemario tan solo hay que dejarse llevar, como si estuviéramos en la corriente de un río, desde el momento en el que la madre la lanza a la vida, pasando por el recuerdo infantil de la ciudad de Elqui, la huella del país natal, las personas que encontró en el camino, sus circunstancias…</p>
<h2>Poética de la infancia</h2>
<p>Mistral desarrolló una poética que parte de la niñez y se aleja de la autocompasión del niño-poeta crepuscular y de la violencia subversiva de los futuristas. Se recrea más bien en la estela de la mitología romántica que asocia la infancia con la naturaleza y celebra la capacidad del niño de maravillarse ante lo desconocido. El regalo, la sorpresa, representan ese hallazgo ante la vida de forma íntima, un encuentro personal y en singular, una invocación <a href="http://www.bibliotecanacionaldigital.gob.cl/colecciones/BND/00/RC/RC0012883.pdf">al lugar de identidad y procedencia de la poeta</a>.</p>
<figure class="align-right zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/470618/original/file-20220623-52373-338eo6.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/470618/original/file-20220623-52373-338eo6.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=237&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/470618/original/file-20220623-52373-338eo6.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=993&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/470618/original/file-20220623-52373-338eo6.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=993&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/470618/original/file-20220623-52373-338eo6.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=993&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/470618/original/file-20220623-52373-338eo6.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=1247&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/470618/original/file-20220623-52373-338eo6.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=1247&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/470618/original/file-20220623-52373-338eo6.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=1247&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Gabriela Mistral con ocho años.</span>
</figcaption>
</figure>
<p>Gabriela Mistral no dedicó ningún desarrollo teórico a su idea de la infancia. En cambio, mostró su mayor valor jugando con conceptos y sentimientos transformados en madura poética. ¿Cómo logró esa particular forma de contar una vida? Quiso que surgiese por medio de la intersección de relatos infantiles fragmentarios, retratos de niños reales o alegóricos y aforismos metapoéticos. El arranque maternal no es sólo una etapa de la vida que suscita pesar y fascinación. También encarna una determinada actitud hacia el mundo e incluso un sistema de valores que acaba representando para ella el verdadero principio de creación literaria. </p>
<p>En oposición a la artificialidad y la anestesia del hombre moderno, la infancia representa el polo positivo dentro de la obra de Gabriela Mistral. Por su proximidad con patrones de la literatura juvenil, bien podría integrarse más y mejor en los planes de lectura curriculares. Sus versos, sin duda, pueden ser un telar único de aprendizaje para el alumnado.</p>
<blockquote>
<p>Hay países que yo recuerdo</p>
<p>como recuerdo mis infancias.</p>
<p>Son países de mar o río,</p>
<p>de pastales, de vegas y aguas.(…)</p>
<p>Quiero volver a tierras niñas;</p>
<p>llévenme a un blando país de aguas.</p>
<p>En grandes pastos envejezca</p>
<p>y haga al río fábula y fábula.</p>
<p>Tenga una fuente por mi madre</p>
<p>y en la siesta salga a buscarla,</p>
<p>y en jarras baje de una peña</p>
<p>un agua dulce, aguda y áspera. </p>
<p>(<em>Tala</em>, “<a href="https://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/tala--1/html/ff25d1ee-82b1-11df-acc7-002185ce6064_9.html#I_34_">Agua</a>”)</p>
</blockquote><img src="https://counter.theconversation.com/content/184996/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Rosa Amor del Olmo no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>En ‘Tala’, la poeta chilena Gabriela Mistral recorre partes de la infancia para retratar pensamientos infantiles y reflexiones adultas.Rosa Amor del Olmo, Prof. Dra. Grado Educación. Profesora de Lengua y Literatura, Lectoescritura, Adquisición del lenguaje. Neuropsicología, Universidad NebrijaLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1734692022-02-02T19:15:36Z2022-02-02T19:15:36ZLa proyección del arte islámico en la arquitectura de América del Sur<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/442697/original/file-20220126-25-1sp2zru.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C3%2C2560%2C1697&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Amanecer en el Palacio de Carlos V en Alhambra, Granada, Andalucía, España.</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Dawn_Charles_V_Palace_Alhambra_Granada_Andalusia_Spain.jpg">Jebulon / Wikimedia Commons</a></span></figcaption></figure><p>Durante todo el siglo XIX y las primeras décadas del XX la arquitectura y las artes gestadas en Europa y América abrazaron el llamado neoárabe, movimiento historicista que, a modo de <em>revival</em>, buscó recuperar la tradición artística islámica, especialmente la del periodo medieval.</p>
<p>El interés por la cultura del islam se desarrolló ya desde las etapas modernas, cuando eruditos, viajeros e historiadores se acercaron con curiosidad a las formas exóticas de las mezquitas, alminares, baños y palacios. Desde Europa occidental se intentó revivir el esplendor de los edificios erigidos en Arabia, Siria, Argelia y el Magreb, estudiando y dibujando las construcciones levantadas tras la muerte de Mahoma (622-632), con los primeros califas y las conquistas omeyas (661-750). </p>
<figure class="align-left zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/442273/original/file-20220124-17-4m5qhc.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/442273/original/file-20220124-17-4m5qhc.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=237&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/442273/original/file-20220124-17-4m5qhc.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=436&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/442273/original/file-20220124-17-4m5qhc.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=436&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/442273/original/file-20220124-17-4m5qhc.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=436&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/442273/original/file-20220124-17-4m5qhc.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=548&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/442273/original/file-20220124-17-4m5qhc.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=548&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/442273/original/file-20220124-17-4m5qhc.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=548&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Gran Mezquita de Damasco (Siria).</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://commons.wikimedia.org/wiki/File:%D8%A7%D9%84%D8%AC%D8%A7%D9%85%D8%B9_%D8%A7%D9%84%D8%A3%D9%85%D9%88%D9%8A_%D8%A7%D9%84%D9%83%D8%A8%D9%8A%D8%B1.jpg">Hala Chemical / Wikimedia Commons</a>, <a class="license" href="http://creativecommons.org/licenses/by-sa/4.0/">CC BY-SA</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Las campañas arqueológicas planificadas en dichos territorios por países como Alemania e Inglaterra generaron pioneros estudios y textos que intentaron dar a conocer al gran público edificios como <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Mezquita_de_los_Omeyas">la mezquita de los Omeyas o Gran Mezquita de Damasco</a> (Siria), <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Mezquita_Kutub%C3%ADa">la Kutubiya de Marrakech</a> (Marruecos), <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Mezquita_de_Ibn_Tulun">la de Ahmad ibn Ţūlūn</a> (El Cairo, Egipto) o <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/C%C3%BApula_de_la_Roca">la Cúpula de la Roca</a> de Jerusalén. </p>
<figure class="align-right zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/442689/original/file-20220126-19-1esytlr.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/442689/original/file-20220126-19-1esytlr.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=237&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/442689/original/file-20220126-19-1esytlr.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=351&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/442689/original/file-20220126-19-1esytlr.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=351&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/442689/original/file-20220126-19-1esytlr.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=351&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/442689/original/file-20220126-19-1esytlr.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=441&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/442689/original/file-20220126-19-1esytlr.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=441&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/442689/original/file-20220126-19-1esytlr.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=441&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">La Cúpula de la Roca (Jerusalén).</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Jerusalem-Felsendom-20-hinter_Kettendom-2010-gje.jpg">Gerd Eichmann / Wikimedia Commons</a>, <a class="license" href="http://creativecommons.org/licenses/by-sa/4.0/">CC BY-SA</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p>A través de dibujos de los conjuntos, sus planos y alzados, detalles de capiteles, yeserías, inscripciones o mediante grabados y cromolitografías los lectores europeos descubrieron la exuberante y rica decoración de atauriques, de inscripciones cúficas y mocárabes, aplicada sobre cúpulas, arcos de herradura, <em>mihrabs</em> o muros de <em>qibla</em>. </p>
<p>Un mundo lejano y desconocido para los europeos acabó por generar una corriente que impregnó a las demás artes. La literatura, la música, las producciones textiles y la pintura abrazaron el regreso de lo islámico atraídos por el supuesto exotismo de los otros, todo ello fundamentado en una visión eurocentrista no exenta de elementos mitificados. </p>
<h2>España, arte a mano</h2>
<p>Pero el arte islámico no estaba tan lejos de Europa. España era el país más cercano y de fácil acceso donde poder buscar los monumentos del pasado árabe. La mezquita de Córdoba, los fragmentarios restos que por entonces se conocían de Medina Azahara o los palacios nazaríes de la Alhambra de Granada parecían mostrar, entre los siglos XVII al XIX, una clara imagen de lo que suponía el arte islámico sin necesidad de viajar a Túnez o a Egipto. </p>
<p><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Louis_Meunier">Louis Meunier</a> elaboró, entre 1665 y 1668, algunos grabados donde mostraba visiones, un tanto irreales, pintorescas y desvirtuadas, <a href="https://www.mdpi.com/2071-1050/12/16/6556/htm">del Patio de los Leones de la Alhambra de Granada</a>, convertido en uno de los espacios referenciales para el movimiento neoárabe. </p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/442271/original/file-20220124-13-pf5vi9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/442271/original/file-20220124-13-pf5vi9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/442271/original/file-20220124-13-pf5vi9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=368&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/442271/original/file-20220124-13-pf5vi9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=368&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/442271/original/file-20220124-13-pf5vi9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=368&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/442271/original/file-20220124-13-pf5vi9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=463&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/442271/original/file-20220124-13-pf5vi9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=463&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/442271/original/file-20220124-13-pf5vi9.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=463&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Patio de los Leones de la Alhambra, según Louis Meunier.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="http://bdh.bne.es/bnesearch/detalle/bdh0000062856">Biblioteca Nacional de Madrid, inv. 19565.</a>, <a class="license" href="http://creativecommons.org/licenses/by/4.0/">CC BY</a></span>
</figcaption>
</figure>
<figure class="align-left zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/442270/original/file-20220124-23335-wit1ir.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/442270/original/file-20220124-23335-wit1ir.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=237&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/442270/original/file-20220124-23335-wit1ir.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=817&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/442270/original/file-20220124-23335-wit1ir.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=817&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/442270/original/file-20220124-23335-wit1ir.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=817&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/442270/original/file-20220124-23335-wit1ir.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=1026&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/442270/original/file-20220124-23335-wit1ir.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=1026&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/442270/original/file-20220124-23335-wit1ir.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=1026&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Decoración con epígrafes del salón de Comares de la Alhambra, según Diego Sánchez Sarabia.</span>
<span class="attribution"><span class="source">Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, RABASF, inv. MA-0496.</span>, <span class="license">Author provided</span></span>
</figcaption>
</figure>
<p>A partir de 1760 <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Diego_S%C3%A1nchez_Sarabia">Diego Sánchez Sarabia</a> realizó diversas cromolitografías que ofrecían visiones coloristas de, por ejemplo, <a href="https://eprints.ucm.es/id/eprint/34765/1/El_conocimiento_y_divulgacion_del_arte_h.pdf">los capiteles y epígrafes de la Alhambra</a>, y en 1878 <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Rafael_Contreras_y_Mu%C3%B1oz">Rafael Contreras</a> publicaba su obra <a href="http://www.bibliotecavirtualdeandalucia.es/catalogo/es/consulta/registro.do?id=100006"><em>Estudio descriptivo de los monumentos árabes de Granada, Sevilla y Córdoba</em></a>. </p>
<p>Autores franceses y españoles allanaron el camino para que vieran la luz obras eruditas de gran difusión y aceptación entre los intelectuales europeos.
Entre 1802 y 1813 <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/James_Cavanah_Murphy">James Murphy Cavanah</a> firmó <a href="https://www.alhambra-patronato.es/ria/handle/10514/6007"><em>The arabian Antiquities of Spain</em></a> y, del mismo modo, a partir de 1834, <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Owen_Jones_(arquitecto)">Owen Jones</a> efectuó varios viajes de estudio a los palacios nazaríes, publicando después diversos textos que dieron a conocer sus detalles, planos, alzados y secciones.</p>
<p>Sin embargo, si existe una fecha fundamental para comprender el fenómeno neoárabe es el año 1850, cuando Owen Jones realizó en el Crystal Palace de Hyde Park de Londres una recreación, libre e imaginativa, del Patio de los Leones de la Alhambra granadina. </p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/442269/original/file-20220124-17-11kdry1.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/442269/original/file-20220124-17-11kdry1.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/442269/original/file-20220124-17-11kdry1.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=491&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/442269/original/file-20220124-17-11kdry1.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=491&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/442269/original/file-20220124-17-11kdry1.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=491&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/442269/original/file-20220124-17-11kdry1.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=617&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/442269/original/file-20220124-17-11kdry1.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=617&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/442269/original/file-20220124-17-11kdry1.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=617&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">The Alhambra Court at Crystal Palace (Londres), según Owen Jones.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://collections.vam.ac.uk/item/O1101697/the-alhambra-court-photograph-delamotte-philip-henry/">Philip Henry Delamotte / Victoria and Albert Museum, inv. 39315</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p>El éxito del evento dio al viejo espacio medieval una fama sin precedentes. Magnates, eruditos, familias adineradas y burgueses no se conformaron ya con grabados y dibujos: pronto quisieron poseer el arte islámico. El viaje a América de este fenómeno fue rápido.</p>
<h2>Viaje a Latinoamérica</h2>
<p>Como han estudiado los profesores Rafael López Guzmán y Rodrigo Gutiérrez Viñuales en su libro <em>Alhambras. Arquitectura neoárabe en Latinoamérica</em>, la recepción del modelo alhambrista en el Cono Sur y en América Central fue significativa, tomando los palacios nazaríes como fuente de inspiración para la construcción de nuevas mansiones y palacetes.</p>
<p>En todo caso el punto fundamental que han demostrado las investigaciones recientes es que, de entre todos los países americanos, Chile fue el más precoz en realizar una evocación del patio de los leones granadino. </p>
<p>En el año 1862 ya estaban construidos todos los cimientos y alzados del llamado Palacio de la Alhambra de Santiago, en la capital chilena, una mansión erigida por el arquitecto <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Manuel_Aldunate_y_Avaria">Manuel Aldunate Avaria</a>, <a href="https://idus.us.es/bitstream/handle/11441/107598/48_Mor%C3%A1is_Mor%C3%A1n.pdf?sequence=1&isAllowed=y">tras realizar su etapa de formación profesional en París bajo el sello de las <em>Beaux-Arts</em></a>.</p>
<figure class="align-right zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/442268/original/file-20220124-15-1yd6cx8.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/442268/original/file-20220124-15-1yd6cx8.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=237&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/442268/original/file-20220124-15-1yd6cx8.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=790&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/442268/original/file-20220124-15-1yd6cx8.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=790&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/442268/original/file-20220124-15-1yd6cx8.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=790&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/442268/original/file-20220124-15-1yd6cx8.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=993&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/442268/original/file-20220124-15-1yd6cx8.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=993&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/442268/original/file-20220124-15-1yd6cx8.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=993&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Palacio de la Alhambra (Santiago de Chile), según Manuel Aldunate.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Patio_de_Los_Leones.jpg">Cane.colores / Wikimedia Commons</a>, <a class="license" href="http://creativecommons.org/licenses/by-sa/4.0/">CC BY-SA</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Aunque pudiera pensarse inicialmente que Aldunate se inspiró en la fortaleza granadina, su referente estaba en la recreación neoárabe realizada en Londres por Owen Jones. </p>
<p>Con todo, Chile abrió la puerta a la recuperación de las formas del arte islámico y pronto otros países siguieron esta dinámica, cuando los arquitectos copiaron partes y motivos decorativos de la Alhambra en numerosos edificios americanos. </p>
<p>Finalmente debemos remarcar que el neoárabe no sólo se circunscribió a la fortaleza granadina. </p>
<p>El otro gran espacio del arte hispanomusulmán, <a href="https://revistas.usc.gal/index.php/quintana/article/view/4588">la mezquita de Córdoba</a>, sería la fuente de inspiración utilizada para construir la Sala de Manufacturas de la Exposición Colombina de Chicago (1893), obra del arquitecto <a href="https://aunamendi.eusko-ikaskuntza.eus/es/pavia-bermingham-joaquin/ar-123079/">Joaquín Pavía</a>. En Estados Unidos se utilizaron arcos de herradura siguiendo el modelo de las naves de la aljama y los polilobulados copiando la <em>macsura</em>, apeados en verdaderas columnas de mármol. </p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/442266/original/file-20220124-17-1vyij5b.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/442266/original/file-20220124-17-1vyij5b.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/442266/original/file-20220124-17-1vyij5b.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=478&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/442266/original/file-20220124-17-1vyij5b.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=478&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/442266/original/file-20220124-17-1vyij5b.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=478&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/442266/original/file-20220124-17-1vyij5b.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=601&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/442266/original/file-20220124-17-1vyij5b.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=601&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/442266/original/file-20220124-17-1vyij5b.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=601&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Sala de Manufacturas de la Exposición Colombina (Chicago), según Joaquín Pavía.</span>
<span class="attribution"><span class="source">Bancroft</span>, <span class="license">Author provided</span></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Durante todo el siglo XIX y principios del XX la reinterpretación del arte islámico dio lugar al renacer neoárabe característico de importantes edificios en Europa y América. En el caso chileno el fenómeno perdura hasta la actualidad, tal y como refleja la construcción de una mezquita en la ciudad de Coquimbo (Norte Chico). El gran alminar del llamado <a href="http://www.centromohammed6.cl/">Centro Mohammed VI para el Diálogo de las Civilizaciones</a> es una réplica a escala del existente en la mezquita Kutubiya de Marrakech (Marruecos) y fue levantado en el año 2007.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/173469/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Este trabajo se enmarca en el Proyecto de Investigación Fondecyt Regular 1170991 “Fundamentos histórico-artísticos del neoárabe y su recepción en Chile (1860-1930)”.</span></em></p>El interés por la cultura del islam durante los siglos XIX y XX hizo que el arte musulmán español influyese en el arte latinoamericano.José Alberto Moráis Morán, Profesor Titular de Universidad, Universidad de LeónLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1742642022-01-11T19:58:18Z2022-01-11T19:58:18ZViaje por la estrategia en redes sociales de la campaña presidencial chilena<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/439132/original/file-20211231-27-vswjwk.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=6%2C4%2C1431%2C1271&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Gabriel Boric (a la izquierda) con un meme de campaña en su camiseta, y José Antonio Kast (a la derecha) representando a Capitán América en TikTok.</span> <span class="attribution"><span class="source">gabrielboric/twitter y joseantoniokas/tiktok</span></span></figcaption></figure><p>En <a href="https://theconversation.com/cambio-en-chile-conducir-al-futuro-o-mirar-por-el-retrovisor-174051">el país más centrado políticamente de América Latina</a> hay nuevo presidente desde hace unas semanas. Gabriel Boric, con 35 años y <a href="https://www.servelelecciones.cl/">4,6 millones de votos</a>, será a partir del 11 de marzo próximo el presidente más joven y más votado de la historia de Chile.</p>
<p>Su rival, José Antonio Kast, obtuvo 3,6 millones de votos (una cantidad muy similar a la obtenida por Sebastián Piñera en 2017 para asumir su segunda presidencia), lo que demuestra que la clave de esta segunda vuelta presidencial –como denominan al balotaje en Chile– estuvo en el récord de participación. </p>
<p>Más que una elección polarizada, como presagiaban erróneamente algunos analistas, se trató de una elección altamente politizada. Prueba de ello fue que cuando ambos candidatos comenzaron su campaña de balotaje dejaron desesperadamente atrás sus ideas más radicales buscando ampliar sus bases hacia el centro político. </p>
<p>Quien tuvo mayor claridad en el diagnóstico fue el expresidente Ricardo Lagos (2000-2006), que dijo en una entrevista que las ideas radicales de izquierda de “quemar al país” llevaron a una parte del electorado a abrazar la extrema derecha con el fin de “poner orden a como dé lugar”. </p>
<p>Por eso, tras los resultados electorales se ha mantenido el foco en el centro político y las tradiciones republicanas pese a la agresiva campaña previa: Kast felicitó personalmente a Boric por el triunfo y Piñera hizo el tradicional <em>telefonazo</em>, emisión televisiva en directo consistente en un saludo del presidente en ejercicio al presidente electo y lo invita al día siguiente a La Moneda a gestionar el cambio de mando.</p>
<figure>
<iframe width="440" height="260" src="https://www.youtube.com/embed/AAjxiF6pweU?wmode=transparent&start=0" frameborder="0" allowfullscreen=""></iframe>
<figcaption><span class="caption">“Telefonazo” realizado por el presidente en ejercicio al presidente electo de Chile emitido en directo por la televisión chilena.</span></figcaption>
</figure>
<p>Sin embargo ¿cómo Chile pasó de tener presidentes de centroizquierda y centroderecha en los últimos 30 años a opciones presidenciales alejadas de esas posiciones? El mismo Lagos lo justifica como un cambio de época: de la industrial a la digital, con un <a href="https://player8.org/las-revueltas-chilenas-se-gestaron-en-twitter-y-el-gobierno-no-se-entero/">estallido social</a> y una pandemia de por medio.</p>
<h2>Directos, memes y TikTok</h2>
<p>Este cambio de era, con desarrollo de nuevas tecnologías, ha traído consigo un cambio en las conversaciones. Por eso, al igual que sucede en el resto del mundo, <a href="https://www.cnnchile.com/elecciones2021/memes-boric-tik-tok-kast-expertos-redes-sociales_20211210/">en Chile la comunicación digital y las redes sociales se han convertido en un elemento indispensable para las campañas políticas.</a></p>
<p>Eduardo Arriagada y Sebastián Valenzuela, académicos de la Universidad Católica de Chile, <a href="https://www.latercera.com/la-tercera-sabado/noticia/columna-de-eduardo-arriagada-y-sebastian-valenzuela-cuatro-claves-sobre-las-redes-sociales-en-segunda-vuelta/WE6CI2XJWZBX3LTGJLVGTIXILQ/">detectaron cuatro claves en las conversaciones en redes sociales</a> durante la segunda vuelta presidencial en Chile: relevancia de Twitter en el diálogo, importancia del contenido en vídeo, diversos canales para diversas audiencias y profesionalización en la inversión en anuncios.</p>
<p>Adicionalmente, desde el proyecto de investigación “Tendencias ciberperiodísticas: estado de la cuestión y análisis de contenidos”, que realizamos en la Facultad de Comunicaciones de UNIACC, detectamos tres aspectos clave:</p>
<ul>
<li><strong><em>Bad Boys</em> y el <a href="https://theconversation.com/ibai-llanos-en-el-show-de-truman-166066"><em>Social Media Live Streaming</em></a></strong>. <a href="https://www.tdx.cat/handle/10803/667525">Tal y como hemos analizado previamente</a>, el desarrollo de las redes sociales de vídeo en directo es una herramienta muy valiosa para la comunicación política. Esto fue aprovechado por Franco Parisi, candidato del Partido de la Gente, quien hizo una campaña sin pisar el país y realizando directos cada semana –llamados <em>Bad Boys</em>– desde Estados Unidos. Como obtuvo el tercer lugar en votos en la primera elección, Boric y Kast buscaron acercarse a su electorado, incluso el último participó en sus directos. </li>
</ul>
<figure>
<iframe width="440" height="260" src="https://www.youtube.com/embed/pSqGXzPtUc0?wmode=transparent&start=0" frameborder="0" allowfullscreen=""></iframe>
<figcaption><span class="caption">Entrevista a José Antonio Kast en el directo ‘Bad Boys’ emitido por el Partido de la Gente.</span></figcaption>
</figure>
<ul>
<li><p><strong>Boric y los memes de su comunidad.</strong> <a href="https://theconversation.com/diez-claves-para-combatir-la-desinformacion-en-la-campana-electoral-115996">La cultura del meme en política tiende a ridiculizar a los protagonistas de la agenda mediática</a>. Sin embargo, tras los resultados de la primera vuelta, los seguidores de Gabriel Boric fueron rápidos e imaginativos para crear distintos memes de apoyo al candidato con agrupaciones ficticias, parodias musicales y supuestos apoyos de famosos. </p>
<p>Así, <a href="https://www.eldesconcierto.cl/tipos-moviles/humor/2021/11/25/humor-chayanne-te-mira-furor-en-la-web-por-memes-y-videos-de-apoyo-a-gabriel-boric.html"><em>Disléxicos por Robic</em></a>, <a href="https://twitter.com/RodeRomi/status/1463320944332599296"><em>SomeBORIC to love</em></a> y el “apoyo” de Pedro Pascal fueron claves para las conversaciones sociales en el ciberespacio. Este último caso fue especialmente llamativo porque el actor chileno de Hollywood –protagonista de <em><a href="https://www.filmaffinity.com/es/film544948.html">The Mandalorian</a></em>– al ver el fotomontaje compartido en las redes se lo tomó con humor, <a href="https://twitter.com/gabrielboric/status/1463328380938510340?s=20">decidió publicarlo en sus perfiles</a> y hacer público su apoyo al candidato globalizando su impacto.</p></li>
<li><p><strong>Kast y sus apariciones en TikTok</strong>. El perfil del candidato del Frente Social Cristiano –ultraconservador, padre de nueve hijos y ferviente católico– no hacía pensar que su campaña contaría con una activa participación en TikTok creando distinto contenido y participando en los diversos <em>challenges</em> del momento. Kast hizo un esfuerzo por <a href="https://www.theclinic.cl/2021/10/27/tiktok-el-caballo-de-troya-de-j-a-kast-con-la-generacion-z/">conectar con la Generación Z</a>, y así <a href="https://www.tiktok.com/@joseantoniokast">su perfil actualmente acumula más de 490 mil seguidores</a> y supera los 5,6 millones de <em>likes</em> . </p></li>
</ul>
<h2>Contenido orgánico por encima del pagado</h2>
<p>José Flores, director de Planificación de la agencia La Fábrica Imaginaria, realizó un seguimiento estadístico al contenido publicado y a la inversión en anuncios en redes sociales de ambos candidatos durante sus campañas. De ello, <a href="https://player8.org/en-directo-playerbox-capitulo-7/">conversamos horas antes de las elecciones</a> y ya se podían ver una serie de características interesantes.</p>
<ol>
<li><p>En la última semana de campaña, <a href="https://www.facebook.com/ads/library/?active_status=all&ad_type=political_and_issue_ads&country=CL&view_all_page_id=881095048648989&sort_data%5Bdirection%5D=desc&sort_data%5Bmode%5D=relevancy_monthly_grouped&search_type=page&media_type=all">Kast realizó una inversión en Facebook Ads de 137,9 millones de pesos chilenos</a> (más de 140 000 euros) y <a href="https://www.facebook.com/ads/library/?active_status=all&ad_type=political_and_issue_ads&country=CL&view_all_page_id=177384889097855&sort_data%5Bdirection%5D=desc&sort_data%5Bmode%5D=relevancy_monthly_grouped&search_type=page&media_type=all">Boric de 35,8 millones</a> (cerca de 40 000 euros).</p></li>
<li><p>Mientras Gabriel Boric tuvo mejores resultados en Instagram, José Antonio Kast lo superó en Facebook en el periodo comprendido entre la campaña de balotaje y el anuncio del presidente electo (22 de noviembre y 20 de diciembre).</p></li>
<li><p>En el periodo señalado, ambos candidatos crecieron considerablemente sus interacciones aunque el alza de Boric fue superior: un 262,92 % de media en reacciones, comentarios y compartidos en Facebook; y un 219,14 % de media en me gustas y comentarios en Instagram.</p></li>
</ol>
<figure class="align-center ">
<img alt="Estadísticas Instagram Gabriel Boric" src="https://images.theconversation.com/files/439133/original/file-20211231-50239-1ck7arw.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/439133/original/file-20211231-50239-1ck7arw.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=304&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/439133/original/file-20211231-50239-1ck7arw.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=304&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/439133/original/file-20211231-50239-1ck7arw.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=304&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/439133/original/file-20211231-50239-1ck7arw.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=382&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/439133/original/file-20211231-50239-1ck7arw.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=382&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/439133/original/file-20211231-50239-1ck7arw.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=382&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px">
<figcaption>
<span class="caption">Estadísticas del perfil de Instagram de Gabriel Boric @gabrielboric durante la campaña presidencial.</span>
<span class="attribution"><span class="source">José Flores con datos de Metricool</span></span>
</figcaption>
</figure>
<p>“Las redes de Boric tuvieron un aumento gigantesco en sus principales métricas después del 21 de noviembre. Si bien Kast también tuvo un gran crecimiento, estos porcentajes no se comparan a los del presidente electo. También llama la atención que hubo una importante diferencia en cuanto a inversión publicitaria entre un candidato y otro, lo que demuestra que lo orgánico sigue siendo muy importante en cualquier estrategia de redes sociales”, explica Flores al respecto.</p>
<figure class="align-center ">
<img alt="Estadísticas Facebook José Antonio Kast" src="https://images.theconversation.com/files/439134/original/file-20211231-25-1gm7vuy.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/439134/original/file-20211231-25-1gm7vuy.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=305&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/439134/original/file-20211231-25-1gm7vuy.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=305&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/439134/original/file-20211231-25-1gm7vuy.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=305&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/439134/original/file-20211231-25-1gm7vuy.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=383&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/439134/original/file-20211231-25-1gm7vuy.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=383&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/439134/original/file-20211231-25-1gm7vuy.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=383&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px">
<figcaption>
<span class="caption">Estadísticas del perfil de Facebook de José Antonio Kast @joseantoniokast durante la campaña presidencial.</span>
<span class="attribution"><span class="source">José Flores con datos de Metricool</span></span>
</figcaption>
</figure>
<h2>Desinformación desde la propia política</h2>
<p>La relación entre <a href="https://observatoriocibermedios.upf.edu/fake-news-como-detectar-noticias-falsas-talleres-uniacc">las mal llamadas <em>fake news</em></a> y la política tiene larga data, incluso desde antes de que se le diera nombre al fenómeno. Sin embargo, el auge de la desinformación en entornos digitales durante procesos electorales es un fenómeno en constante crecimiento a nivel mundial.</p>
<p>Chile no ha sido la excepción, y si bien para la elección de 2017 se detectaron 80 casos de contenido falso replicado por 3,5 millones de usuarios en redes sociales según <a href="https://observatoriocibermedios.upf.edu/digital-news-report-chile-2018">el Digital News Report 2018</a>, para esta elección el volumen fue, seguro, mucho mayor.</p>
<p>De hecho, en periodo de “veda electoral”, cuando los candidatos habían terminado sus campañas y la ley chilena no permite hacer pública una preferencia electoral, abundaban en web y redes sociales <a href="https://twitter.com/cesarleivarubio/status/1471526216469463042?s=20">anuncios de “medios independientes” que atacaban a alguno de los candidatos</a>. </p>
<p>Así, nos encontramos con los casos típicos de desinformación en tiempos electorales: frases sacadas de contexto de los candidatos y frases sin fuente o falsamente atribuidas publicadas por un supuesto periodismo que muestra “aquello que los poderosos no quieren que veamos”.</p>
<p>Tal y como explica <a href="https://fundaciongabo.org/es/etica-periodistica/blogs/esto-no-lo-veras-en-los-medios-de-comunicacion">el experto Mario Tascón</a>, “los periodistas se siguen asombrando cuando ven algunos montajes agitados en público como pruebas casi de juzgado procedentes de redes sociales o medios sospechosos de actuar sin ética de ningún tipo”. No hay que olvidar que, según el último reporte Digital News Report, solo un 36 % de los chilenos confían en las noticias que reciben.</p>
<p>Sin embargo, en estas elecciones hubo casos preocupantes debido a que los casos de desinformación más sonados provenían directamente de personalidades públicas cercanas al candidato Kast. </p>
<p>El primero de ellos fue el caso del diputado electo por el Partido Republicano Gonzalo de la Carrera, quien <a href="https://twitter.com/Cooperativa/status/1472963001829535752?s=20">compartió una supuesta imagen de Gabriel Boric en violentas manifestaciones</a> durante el estallido social. Como Boric respondió mostrando la imagen original (correspondía a la inundación de su vivienda), De la Carrera simplemente reconoció que se trataba de una desinformación y que recibió “órdenes de publicar” del equipo de campaña de José Antonio Kast. Finalmente, el futuro parlamentario renunció a la colectividad.</p>
<p>El segundo correspondió a la mismísima portavoz de campaña de Kast, Magdalena Moncada, quien publicó una imagen de una estación de metro de Santiago vandalizada y vinculándolo a los seguidores de Gabriel Boric. Desde las autoridades del tren subterráneo negaron cualquier daño, mientras que <a href="https://twitter.com/T13/status/1471892541624705027?s=20">la imagen publicada por Moncada</a> en realidad era de las protestas de 2019.</p>
<p>Con estos antecedentes, desde el comando del candidato ganador explicaron hace unos días los detalles de <a href="https://www.elmercurio.com/blogs/2022/01/06/94591/como-ganamos-a-fake-news.aspx">la estrategia aplicada para combatir la desinformación durante la campaña</a>.</p>
<h2>Lecciones para la política</h2>
<p>Como en Chile hubo un total de cinco procesos electorales oficiales durante 2021, todos con resultados disímiles para los diferentes bloques políticos, se puede ver que tanto la ciudadanía como los candidatos tuvieron tiempo y experiencia para aprender de las lecciones a nivel de comunicación digital y redes sociales.</p>
<p>Es importante, además, poner en contexto la penetración de internet en el país lationamericano para entender la relevancia del medio. Según <a href="https://www.internetworldstats.com/south.htm#cl">estadísticas de la Internet World Stats</a>, un 92 % de la población chilena tuvo acceso a la red el último año (<a href="https://www.internetworldstats.com/europa.htm#es">en España el acceso fue de 91,9 % en el mismo periodo</a>); además según<a href="https://www.subtel.gob.cl/wp-content/uploads/2021/09/PPT_Series_JUNIO_2021_V0.pdf"> la Subsecretaría de Telecomunicaciones local</a>, Chile cuenta con cerca de 26 millones de accesos a internet (es decir, 131,2 por cada 100 habitantes).</p>
<p>Así, con todo lo sucedido, se destacan las siguientes lecciones:</p>
<ol>
<li><p><strong>El valor de los directos:</strong> mientras desde la prensa y los no votantes del candidato Franco Parisi asumían un fracaso en su campaña debido a que no pisó territorio chileno y a sus problemas legales por deudas en la manutención de sus hijos, su obtención del tercer lugar en la primera vuelta llevó los ojos hacia <em>Bad Boys</em> como una nueva manera de hacer política debido a que cada semana conversaba directamente con sus partidarios.</p></li>
<li><p><strong>Contenido generado por el usuario</strong>: los “memes por Boric”, en realidad, no fueron una gestión de su equipo político, sino que <a href="https://www.ciperchile.cl/2022/01/05/una-campana-territorial-historica-las-desconocidas-figuras-de-kast-y-boric-que-empujaron-la-votacion-record-de-83-millones-de-chilenos/">una construcción orgánica de sus adherentes que se viralizó rápidamente</a> y que consiguió cercanía con influyentes y celebridades . El candidato lo aprovechó y compartió las principales creatividades en el periodo de campaña.</p></li>
<li><p><strong>Verificación sobre desinformación:</strong> el aumento de los verificadores de datos –algunos con el respaldo de universidades– más las conversaciones de redes sociales y la acción de los medios de comunicación permitió rápidamente que los casos de desinformación más sonados se convirtieran en tema nacional por su nivel de falsedad. </p></li>
</ol>
<p>Si Chile ha sido continuamente destacado por la rapidez, la transparencia y la confianza de sus procesos electorales, también hay que destacar cómo las campañas políticas, a nivel de comunicación digital y de redes sociales, son una oportunidad para los candidatos para llegar a sus distintos grupos de votantes.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/174264/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Alexis Javier Apablaza Campos ha recibido fondos del Programa Becas Chile Doctorado en el Extranjero Comisión Nacional de Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo de Chile (ANID) en el período 2016-2019. También es investigador principal del proyecto de investigación “Tendencias ciberperiodísticas: estado de la cuestión y análisis de contenidos", DIP 01H-2021, de Universidad UNIACC.</span></em></p>Del funcionamiento de la comunicación digital de los candidatos a las presidenciales chilenas hemos aprendido el enorme valor de los directos, del contenido orgánico generado por el usuario por encima del pagado y la rápida condena pública a la desinformación.Alexis Apablaza-Campos, Profesor titular Facultad de Comunicaciones, Universidad de Artes, Ciencias y Comunicación UNIACCLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1698472022-01-10T19:13:20Z2022-01-10T19:13:20Z¿Cómo predecir la expansión de una especie invasora a través de su ADN?<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/432246/original/file-20211116-23-nhi0h5.JPG?ixlib=rb-1.1.0&rect=6%2C3%2C2038%2C1529&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Densas agregaciones de Pyura praeputilalis en la Bahía de Antofagasta, Chile. La barra coloreada en secciones blancas y rojas (10 centímetros cada) fue posicionada como escala.
</span> <span class="attribution"><span class="source">Marc Rius</span></span></figcaption></figure><p>Las actividades humanas tienen amplios impactos sobre la biodiversidad global. Estos incluyen el transporte intencional o accidental de especies exóticas que pueden volverse invasoras, con enormes consecuencias para el medio ambiente y la economía. Estas especies impulsan cambios clave en los patrones de biodiversidad, pero nuestra capacidad para predecir sus expansiones futuras es aún muy limitada.</p>
<p>La globalización ha ayudado inadvertidamente a la propagación de muchos organismos no-nativos por todo el mundo, especialmente en los océanos. El destino de las especies introducidas a menudo depende de cómo de similares sean los hábitats colonizados a los de origen. Predecir y manejar estas especies es por lo tanto difícil.</p>
<h2>Un invasor marino agresivo</h2>
<p><a href="https://www.pnas.org/content/118/23/e2022169118">Nuestra investigación</a> muestra que las poblaciones de una especie marina australiana, la ascidia <em>Pyura praeputialis</em> que ha sido introducida en Chile, necesita un manejo muy cuidadoso. </p>
<p>Esta especie, conocida como “piure” en Chile, puede parecer inocua. Se asemeja a una roca, pero altera agresivamente los ecosistemas locales. Si se expandiera más allá de su punto de introducción, una bahía solitaria en Chile (la Bahía de Antofagasta), tendría el potencial de extenderse y alterar fundamentalmente las comunidades intermareales a lo largo de más de 3 500 kilómetros de costa.</p>
<p>Las especies invasoras como el piure al competir con especies nativas pueden alterar seriamente la estructura de la comunidad de organismos locales. También pueden impactar importantes actividades económicas costeras, como la acuicultura y la industria pesquera. </p>
<p>El piure alcanza la biomasa más alta jamás registrada en un animal intermareal (20 kilogramos por metro cuadrado). Esta especie monopoliza todo el espacio disponible donde vive, formando matrices tridimensionales y creciendo hasta medio metro de tamaño.</p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/429938/original/file-20211103-23-1xnvcyr.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/429938/original/file-20211103-23-1xnvcyr.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/429938/original/file-20211103-23-1xnvcyr.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=371&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/429938/original/file-20211103-23-1xnvcyr.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=371&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/429938/original/file-20211103-23-1xnvcyr.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=371&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/429938/original/file-20211103-23-1xnvcyr.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=467&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/429938/original/file-20211103-23-1xnvcyr.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=467&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/429938/original/file-20211103-23-1xnvcyr.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=467&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Uno de los co-autores del estudio sobre un denso manto de piure en la bahía de Antofagasta, Chile.</span>
<span class="attribution"><span class="source">Marc Rius</span></span>
</figcaption>
</figure>
<h2>Un enfoque genómico para predecir invasiones</h2>
<p>En este estudio usamos miles de marcadores genómicos para comparar cientos de individuos recolectados en Sudamérica y Australia. Estos marcadores mostraron que las poblaciones encontradas en Chile se originaron en la costa este de Australia. Posiblemente fueron transportadas a la Bahía de Antofagasta en los cascos de barcos comerciales de madera hace más de 100 años. </p>
<p>También encontramos que el piure está bien establecido en esa bahía y tiene un alto potencial de adaptación a futuros cambios medioambientales.</p>
<p>Para predecir la distribución de una especie los científicos modelan la probabilidad de que esta pueda sobrevivir en un lugar en función de las condiciones en las que se encuentra de forma natural. Nuestra investigación utilizó dichos modelos con los resultados de los análisis de ADN para producir un enfoque llamado “modelaje de la distribución de especies basado en la genómica”. </p>
<p>Dichos modelos tienen la ventaja de que al incorporar información del ADN pueden identificar de dónde provienen los genotipos introducidos con una precisión sin precedentes. La información genómica permite refinar los resultados de los modelos de distribución. </p>
<p>En nuestro estudio, los modelos basados en el ADN nos ayudaron a revelar el potencial de este agresivo invasor marino para extenderse a lo largo de miles de kilómetros de la costa de Sudamérica.</p>
<p>Nuestros resultados revelaron que actualmente se podría producir una invasión a gran escala si los procesos oceanográficos que mantienen las larvas planctónicas de piure dentro de la bahía cambiaran. Además, existe un riesgo considerable de que ejemplares adultos o juveniles aferrados a los cascos de los barcos usen esta ayuda involuntaria de los humanos para extenderse fuera de la Bahía de Antofagasta. </p>
<p>Si esto sucediera, el piure encontrará cientos de kilómetros de hábitat esperándolo, con consecuencias impredecibles para la biodiversidad marina intermareal y la pesca local.</p>
<figure class="align-center ">
<img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/438514/original/file-20211220-21-1sy7ut2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/438514/original/file-20211220-21-1sy7ut2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=316&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/438514/original/file-20211220-21-1sy7ut2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=316&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/438514/original/file-20211220-21-1sy7ut2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=316&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/438514/original/file-20211220-21-1sy7ut2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=397&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/438514/original/file-20211220-21-1sy7ut2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=397&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/438514/original/file-20211220-21-1sy7ut2.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=397&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px">
<figcaption>
<span class="caption"></span>
<span class="attribution"><span class="license">Author provided</span></span>
</figcaption>
</figure>
<h2>La invasión a gran escala es inminente</h2>
<p>El estudio de especies con distribuciones geográficas pequeñas nos brinda una oportunidad única para estudiar cómo algunas se expanden por el territorio. La población chilena de piure ha permanecido atrapada en la Bahía de Antofagasta desde su introducción inicial, contenida dentro de su cuerpo de agua relativamente cálido, que es entre 2 y 3 grados Celsius más cálido que las aguas circundantes.</p>
<p>Creemos que la expansión de esta población introducida podría ocurrir fácilmente si el cambio climático o las actividades humanas alteran las condiciones del mar dentro la bahía. Sugerimos que solo un ligero cambio en las corrientes, la temperatura del mar o las rutas de navegación pueden llevar a una expansión de la especie. Esto provocaría que se extendiera con rapidez a lo largo de una extensa costa, incluyendo el norte de Chile, Perú y gran parte de Ecuador.</p>
<figure class="align-center ">
<img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/438387/original/file-20211220-25-kuuggs.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/438387/original/file-20211220-25-kuuggs.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=314&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/438387/original/file-20211220-25-kuuggs.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=314&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/438387/original/file-20211220-25-kuuggs.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=314&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/438387/original/file-20211220-25-kuuggs.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=394&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/438387/original/file-20211220-25-kuuggs.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=394&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/438387/original/file-20211220-25-kuuggs.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=394&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px">
<figcaption>
<span class="caption"></span>
<span class="attribution"><span class="license">Author provided</span></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Nuestro trabajo muestra la importancia que puede tener combinar datos genómicos con el modelaje de hábitats para predecir cambios potenciales en la distribución de especies y sus impactos. Se recomienda un seguimiento continuado del piure en la región y, de manera más general, futuros estudios deberían considerar tanto la idoneidad del hábitat como los datos genómicos para evaluar de manera integral el potencial de propagación de las especies invasoras.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/169847/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Las personas firmantes no son asalariadas, ni consultoras, ni poseen acciones, ni reciben financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y han declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado anteriormente.</span></em></p>El piure alcanza la biomasa más alta jamás registrada en un animal intermareal y monopoliza todo el espacio disponible donde vive. La barra bicolor indica intervalos de 10 centímetros.Marc Rius, Investigador Científico, Centro de Estudios Avanzados de Blanes (CEAB-CSIC)Christopher David McQuaid, Distinguished Professor, Rhodes UniversityJamie Hudson, Postdoctoral Research Fellow, University of SouthamptonLuciano Beheregaray, Professor of Biodiversity Genomics, Flinders UniversityPeter Teske, Professor of Marine Genomics, University of JohannesburgLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1740512021-12-21T11:48:26Z2021-12-21T11:48:26ZCambio en Chile: ¿Conducir al futuro o mirar por el retrovisor?<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/438617/original/file-20211221-13-1wg4xjn.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=1%2C1%2C1020%2C680&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">El presidente de Chile Sebastián Piñera en el Palacio de La Moneda con el presidente electo Gabriel Boric.
</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://prensa.presidencia.cl/fotografia.aspx?id=183866">Presidencia de Chile</a></span></figcaption></figure><p>Cuando el dictador Augusto Pinochet convocó el referéndum que le sacaría del poder, Gabriel Boric tenía apenas dos añitos. El hoy mandatario electo es el presidente más joven de la historia de Chile y ha vivido prácticamente toda su vida en democracia. Ello representa un cambio generacional notable y se esperaría de él una mirada al futuro chileno que supere las cicatrices del pasado. </p>
<p>Sin embargo, la campaña estuvo llena de evocaciones a ese pasado sangrante. “!Comunistas!”, gritaron unos; “!Pinochetistas!”, respondieron los otros, en un país mayoritariamente de centro que no supo escapar de la polarización. </p>
<p>Además, <a href="https://www.servelelecciones.cl/">el resultado de la jornada de este domingo</a>, en el que el ultraderechista Kast obtuvo un 44,13 % y Boric un 55,87 %, es prácticamente idéntico al <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Plebiscito_nacional_de_Chile_de_1988">resultado del plebiscito de 1988</a> en el que Pinochet obtuvo un 44,01 % por el «sí» y la Concertación un 55,99 % por el «no». Las cifras son demasiado parecidas como para que luzca como casualidad. ¿Qué ha pasado en más de 30 años para que permanezcan idénticas las proporciones de los bloques ideológicos?</p>
<p>En 30 años, Chile dio un viraje extraordinario. De un 44 % de pobreza se pasó a un 8 %. La pobreza extrema pasó del 18 % al 1,5 %. Hubo un país en movimiento y desarrollo que abrazaba la democracia con fervor: obras viales, un sistema educativo masivo, un sistema sanitario de amplio alcance, infraestructuras, telecomunicaciones… Un Chile con crecimiento económico y globalmente integrado, en el que, pese a ello, o quizás por ello, ya en 2015 un 42 % de la población se declaraba “perdedores del desarrollo” (<a href="http://hdr.undp.org/sites/default/files/informe_2015.pdf">encuesta PNUD</a>). Algo faltaba en ese Chile boyante que hacía que la mayoría de los chilenos se inclinaran a favor de la igualdad cuando se les forzaba a elegir entre <a href="https://theconversation.com/cuales-son-las-causas-del-ultimo-seismo-en-la-politica-chilena-161108">libertad o igualdad</a></p>
<h2>Lo tibio puede aburrir en Chile</h2>
<p>En la primera vuelta se presentaron candidatos que abrazaron el centro político y su promesa de serenidad, como Yasna Provoste o Sebastian Sichel, pero lo tibio puede aburrir y resultar insatisfactorio en una sociedad demandante de cambio. Fueron los dos candidatos más extremistas, Kast por la derecha, con 29 %, y Boric por la izquierda, con 25 %, quienes pasaron a segunda vuelta. </p>
<p>Ninguno contaba con más del 14 % de base electoral, considerando que solo participaron el 47 % de los electores que podían votar. En Chile el voto fue compulsivo hasta 2010, pero desde que se hizo voluntario el promedio de participación ha sido del 47 %. En el balotaje el nivel de participación subió hasta el 55 %, indicador claro de la importancia que los electores concedían a esta elección.</p>
<figure class="align-right zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/438538/original/file-20211220-120394-1oy7x8h.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/438538/original/file-20211220-120394-1oy7x8h.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=237&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/438538/original/file-20211220-120394-1oy7x8h.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=657&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/438538/original/file-20211220-120394-1oy7x8h.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=657&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/438538/original/file-20211220-120394-1oy7x8h.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=657&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/438538/original/file-20211220-120394-1oy7x8h.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=826&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/438538/original/file-20211220-120394-1oy7x8h.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=826&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/438538/original/file-20211220-120394-1oy7x8h.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=826&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Cartel de campaña negra contra Patricio Alwin, en 1989 azuzando el miedo al comunismo.</span>
</figcaption>
</figure>
<p>Durante la campaña, Boric se esforzó en demostrar que no era tan comunista como afirmaban sus adversarios, y Kast que no era tan pinochetista como explicitaba Boric. Los dos candidatos trataron de orientarse al centro político, a sabiendas de que los votantes chilenos no son extremistas; sin embargo, al hacerlo, ambos veían por el retrovisor y evocaban los viejos demonios chilenos, recurrentes en cada contienda. </p>
<p>También salió a relucir la posibilidad de <a href="https://www.latercera.com/opinion/noticia/chilezuela/EK5NN3LUVNFWBDOU2I7AOJ4XJ4/">Chilezuela</a>, una amenaza instalada en todo el continente y que sale a la luz en cada proceso electoral. Los aliados de ambos candidatos fueron claves en ayudar a instalar las narrativas: Kast recibió el endoso del venezolano Leopoldo López, mientras que Boric era apoyado por los expresidentes Ricardo Lagos y Michelle Bachelet. </p>
<h2>Las posturas de centro son mayoritarias</h2>
<p>En Chile las posturas del centro ideológico son claramente mayoritarias. Es quizás el país más “centrado” de la subregión. Una medida de polarización social se basa en la dimensión ideológica del autoposicionamiento de los electores, cuando se les pide ubicarse a sí mismos en el <em>continuum</em> izquierda-derecha. El coeficiente de dispersión es un índice de polarización ideológica que relaciona la desviación estándar con la media para cada país. Cuanto más bajo es el número, más centrada estará esa sociedad en la dimensión ideológica izquierda-derecha:</p>
<figure class="align-center ">
<img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/438547/original/file-20211220-50538-1myeds5.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/438547/original/file-20211220-50538-1myeds5.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=249&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/438547/original/file-20211220-50538-1myeds5.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=249&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/438547/original/file-20211220-50538-1myeds5.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=249&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/438547/original/file-20211220-50538-1myeds5.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=313&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/438547/original/file-20211220-50538-1myeds5.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=313&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/438547/original/file-20211220-50538-1myeds5.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=313&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px">
<figcaption>
<span class="caption">Polarización Ideológica en países de Latinoamérica.</span>
</figcaption>
</figure>
<p>En plena campaña por las internas de su plataforma electoral, Boric invitaba a la académica británico-venezolana Carlota Pérez a una <a href="https://www.youtube.com/watch?v=dg6LxjUMtAc">cibertertulia</a> para conversar sobre tecnología e innovación: “El fondo del problema no es la redistribución, sino el incremento de la productividad. La mejor política social es la que incorpora la innovación tecnológica para elevar la productividad”, decía Pérez, mientras que Boric afirmaba que “buena parte de la política de izquierda está anclada en el siglo 20 y la lógica redistributiva, cuando hay que posicionarse en el siglo 21, desde la innovación”.</p>
<p>Hay signos positivos que hablan de la fortaleza institucional chilena. Apenas dos horas después del cierre de las mesas electorales ya se conocían los resultados, Kast reconoció rápidamente su derrota y el presidente Piñera llamó por teléfono en vivo a Boric para felicitarle. </p>
<figure>
<iframe width="440" height="260" src="https://www.youtube.com/embed/QF9_YhwOGuU?wmode=transparent&start=0" frameborder="0" allowfullscreen=""></iframe>
<figcaption><span class="caption">Presidente Piñera llama a Gabriel Boric tras triunfo en segunda vuelta.</span></figcaption>
</figure>
<h2>Brechas ideológicas y demográficas</h2>
<p>Sin embargo, la campaña ha sido erosiva y casi la mitad del país siente que Boric representa un peligro para Chile. Más allá de la dimensión ideológica hay también brechas demográficas: los jóvenes, las mujeres y los urbanitas votaron mayoritariamente por Boric, mientras que los mayores, los hombres y las zonas rurales lo hicieron por Kast. Boric ganó en ocho provincias, pero Kast lo hizo en cinco, y empataron en tres. Chile tiene enormes retos en su futuro inmediato. </p>
<p>La Asamblea Constituyente está por definir una nueva constitución, pródiga en derechos, en un país con enormes dificultades económicas en el horizonte post-pandemia. Se estima que 70 mil millones de dólares podrían haber salido del país desde las turbulentas protestas de 2019 y los mercados han reaccionado con temor ante la victoria de Boric. Abordar los retos adecuadamente implica mirar hacia adelante, olvidando los retrovisores anquilosados. Léase como se lea, la derecha tiene hoy casi la mitad del país, y eso es mucho más que el país pinochetista.</p>
<p>El nuevo presidente debe hoy llegar a acuerdos fundamentales con su contraparte en aras de lograr estabilidad económica y convivencia social. <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Carlota_P%C3%A9rez">Carlota Pérez</a> también aleccionaba al hoy presidente: “La izquierda tiene dos tipos de militantes: los que odian a los ricos y los que aman a la humanidad. Los primeros son muy peligrosos como compañeros de ruta”. Y suelen también estar obsesionados por el retrovisor. Confiemos en que el nuevo Gobierno que escoja Boric sea parte del segundo grupo.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/174051/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Carmen Beatriz Fernández no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>Los bloques ideológicos en Chile han mostrado ser los mismos que hace más de 30 años, cuando Pinochet perdió el referéndum. El nuevo presidente debe hoy llegar a acuerdos fundamentales con su contraparte en aras de lograr estabilidad económica y convivencia social.Carmen Beatriz Fernández, Profesora de Comunicación Política en la UNAV, el IESA y Pforzheim, Universidad de NavarraLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1677152021-10-24T19:08:57Z2021-10-24T19:08:57ZPlantaciones comerciales: ¿la mejor inversión para mitigar el cambio climático?<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/421876/original/file-20210917-19-ezfiwf.JPG?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C0%2C4000%2C3000&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Monocultivo forestal comercial en Chile central.</span> <span class="attribution"><span class="source">Juli G. Pausas</span>, <span class="license">Author provided</span></span></figcaption></figure><p>En los últimos tiempos, y ante la urgente necesidad de limitar el calentamiento global debido al aumento de las concentraciones de gases de efecto invernadero en la atmósfera (en particular el dióxido de carbono o CO₂), surgen las voces a favor de masificar los monocultivos forestales comerciales. Sin embargo, a pesar de que la plantación de árboles para la captación de CO₂ tiene mucho sentido como una solución simple y con beneficios económicos, los efectos colaterales de estos monocultivos no siempre han sido considerados en todas sus dimensiones. Discutiremos esta medida de mitigación del cambio climático, enfatizando el caso de Chile, donde las plantaciones forestales constituyen uno de los ejes de crecimiento económico del país.</p>
<h2>No sólo se trata de plantar y cosechar</h2>
<p>Recientemente se ha propuesto que, para que los monocultivos forestales sean efectivos en la mitigación del cambio climático, <a href="https://www.nature.com/articles/s41467-021-24084-x">no sólo basta con cultivar árboles</a>. También es necesario masificar el uso de energía obtenida de la biomasa forestal y de ciertos biomateriales derivados de las plantaciones, por ejemplo, sustituyendo el hormigón por madera aserrada o reemplazando las fibras textiles sintéticas por otras derivadas de la pulpa de la madera (e.g., viscosa). Por lo tanto, para que los monocultivos forestales sean una herramienta eficaz para mitigar el cambio climático se requiere el desarrollo de nuevas tecnologías y su implementación mediante cambios en la estructura de negocios orientados al desarrollo de una bioeconomía circular. Si tales avances tecnológicos, económicos y sociales no son posibles a la velocidad esperada, el objetivo de estos monocultivos podría no alcanzarse en el tiempo previsto (120 años). En este sentido es importante destacar que los monocultivos forestales tardan años en ser acumuladores netos de carbono, y por lo tanto monocultivos con tasas de rotación cortas (como los empleados para la producción de celulosa) no son efectivos para mitigar el cambio climático.</p>
<h2>Usar un clavo para sacar otro</h2>
<p>Los monocultivos forestales fueron una estrategia de emergencia para el control de la erosión de suelos altamente degradados difundida en distintos países del mundo a partir de los años 70. Sin embargo, las prácticas industriales asociadas (tala rasa y red de caminos) <a href="https://www.sciencedirect.com/science/article/abs/pii/S034181622100518X?casa_token=SF_Z3Iqx7hkAAAAA:80sc3FWC5KyPriUL2b50ZgeB823J0THOUr7rmSIftjxRJ6nDQ9sUk7VBAIpDDlcFTSDI19MEm58">aumentaron la erosión en muchos casos</a>, con importantes impactos negativos sobre la biodiversidad y el funcionamiento de los ecosistemas. </p>
<p>Las densas plantaciones masivas de árboles con un fin industrial <a href="https://www.mdpi.com/1999-4907/10/6/473/htm">alteran el ciclo hidrológico local</a>, ya que las especies empleadas mantienen altas tasas de crecimiento mediante un uso no conservativo del agua. Además, el manejo mecanizado de las plantaciones industriales modifica las propiedades físicas del suelo, lo que <a href="https://www.mdpi.com/2073-4441/12/1/302">disminuye su capacidad de almacenar agua</a>, incrementa la escorrentía superficial (por lo tanto también la erosión) y <a href="https://www.nature.com/articles/s41598-020-64453-y">modifica las comunidades de invertebrados</a> y microorganismos del suelo. Finalmente, en un mundo cada vez más cálido, el aumento artificial de la biomasa forestal propiciará incendios cada vez más severos y extensos, particularmente en regiones densamente pobladas, donde las chispas capaces de iniciar un fuego son frecuentes. Existen <a href="https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S1462901117307694?casa_token=eLzpFtrqWdQAAAAA:B2bYLeZSv9HFCBfbOq0QgQ7fYYs3ntj2SgEQk1N9mFHKB7h3RF0j4pLBa-yhESgA3ii0xS7c8FA">evidencias recientes al respecto</a>, como los megaincendos que en 2017 se propagaron a través de más de 280 mil hectáreas de monocultivos forestales de Chile central dejando a su paso 11 víctimas mortales, o los grandes incendios que ese mismo año cercenaron la vida a decenas de personas en una carretera inmersa en un mar de plantaciones en Portugal. Paradójicamente, las emisiones por la quema repentina del carbono de los monocultivos no son compensadas por las tasas de almacenamiento de los árboles plantados. Por ejemplo, los incendios de 2017 en Chile emitieron casi tanto CO₂ a la atmósfera como el emitido durante todo el año anterior, siendo <a href="https://www.cr2.cl/incendios/">la quema de los monocultivos forestales responsable de más del 75 % de dichas emisiones</a>.</p>
<p>El uso de monocultivos forestales con fines comerciales constituye una estrategia de mitigación del cambio climático miope frente a otras crisis ambientales actuales, como es la <a href="https://ipbes.net/global-assessment">extinción masiva de la biodiversidad</a>. Existe clara evidencia de que las plantaciones forestales albergan menos diversidad biológica que muchas comunidades naturales vecinas. Además, tienen un papel central en el proceso denominado homogeneización biológica, donde comunidades diversas de especies nativas llegan a ser dominadas por unas pocas especies, normalmente exóticas. Este empobrecimiento de la biodiversidad afecta sobre todo a los elementos tróficos que más directamente benefician a las personas y que sustentan directamente el sistema ecológico, como son los productores primarios (<a href="https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S235198941630155X">plantas</a>) y organismos detritívoros (por ejemplo, la <a href="https://www.nature.com/articles/s41598-020-64453-y">fauna edáfica</a>). Además, <a href="https://www.nature.com/articles/35012241">las comunidades biológicamente empobrecidas tienen un menor valor</a> en términos de los servicios ecosistémicos no tangibles, como una menor resiliencia a las perturbaciones o mayor susceptibilidad a las invasiones de especies exógenas.</p>
<h2>Hacia estrategias de mitigación sustentables</h2>
<p><a href="https://onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1111/gcb.15498">Entre la comunidad científica existe un consenso generalizado</a> sobre la necesidad de un marco regulatorio y políticas ambientales que garanticen la protección de los ecosistemas naturales que conservan la biodiversidad y el carbono en la biomasa y en los suelos, así como estrategias eficaces de restauración de los ecosistemas para aumentar la captura de carbono y llegar a mitigar el cambio climático mejorando los medios de vida de las personas. En este sentido, es preciso considerar que <a href="https://www.nature.com/articles/d41586-019-01026-8">existen múltiples evidencias científicas</a> de que la restauración y conservación de <a href="https://www.rutadelosparques.org/el-inmenso-poder-de-los-bosques-del-sur-estudio-detecta-que-almacenan-tres-veces-mas-carbono-por-hectarea-que-la-amazonia/">muchas formaciones vegetacionales naturales producen un mejor balance entre fijación y emisión de carbono</a>, sin afectar negativamente sobre las contribuciones de los ecosistemas a las personas. Y <a href="https://www.science.org/doi/10.1126/science.aaz0388#:%7E:text=76%20state%20that%20the%20restoration,existing%20tropical%20forest%20by%202050.">no sólo se trata de bosques</a>: los ecosistemas no dominados por árboles (como la estepa patagónica, las sabanas tropicales o los pastizales alpinos) almacenan la mayor parte del carbono en el suelo, siendo en algunos casos este almacenamiento de carbono mayor que el que se acumula en la biomasa de los bosques tropicales. </p>
<p>Para que el impacto integral de los monocultivos forestales comerciales sea positivo, se deben eliminar los impactos negativos no explícitos de estas plantaciones y detener la degradación de ecosistemas naturales prístinos (sean arbóreos o no). Sólo bajo estas premisas los gestores podrían considerar el uso de monocultivos forestales como una opción, entre otras, para mitigar el cambio climático.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/167715/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Susana Paula recibe fondos de Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo - Gobierno de Chile</span></em></p><p class="fine-print"><em><span>Álvaro G. Gutiérrez recibe fondos de Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo - Gobierno de Chile</span></em></p><p class="fine-print"><em><span>Cecilia Smith Ramírez recibe fondos de Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo - Gobierno de Chile. </span></em></p><p class="fine-print"><em><span>Juan Armesto recibe fondos de Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo- Gobierno de Chile</span></em></p>Los monocultivos forestales tardan muchos años en ser almacenes netos de carbono y tienen impactos negativos sobre el suelo, la biodiversidad, el ciclo hidrológico y los ecosistemas.Susana Paula, Ecología vegetal, Universidad Austral de ChileÁlvaro G. Gutiérrez, Profesor Asistente. Departamento Ciencias Ambientales y Recursos Naturales Renovables, Universidad de ChileCecilia Smith Ramírez, Investigadora del Laboratorio de Comunidades y Restauración Ecológica, Universidad de Los LagosJuan Armesto, Investigador en Ecología, Universidad Católica de ChileLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1568322021-03-14T19:28:07Z2021-03-14T19:28:07ZAciertos y errores de la vacunación contra la covid-19 en América Latina<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/389302/original/file-20210312-23-4k7dnl.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C0%2C4858%2C3238&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Campaña de vacunación en Copiapó, Chile.</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-photo/vaccine-against-covid19-city-chile-2021-1922394368">Shutterstock / Israel Chavez Rojas</a></span></figcaption></figure><p>La campaña de vacunación ha destapado deficiencias organizativas de gran calado en algunos países, mientras que ha encumbrado la eficiente labor de otros. Nos hallamos ante una difícil empresa que algunos países han sabido resolver, y en América Latina también existen enormes contrastes. </p>
<p>Mientras algunos países han estado marcados por el cuestionamiento a las autoridades sanitarias y la desorganización de sus gobernantes, uno en especial se ha convertido en ejemplo internacional por su buen hacer. Vamos a hablar de tres ejemplos, dos en los extremos y uno en el centro en términos de eficiencia de la gestión: Brasil, Perú y Chile.</p>
<iframe src="https://ourworldindata.org/coronavirus-data-explorer?zoomToSelection=true&time=earliest..latest&country=EuropeanUnion~BRA~CHL~PER&region=World&vaccinationsMetric=true&interval=total&hideControls=true&perCapita=true&smoothing=0&pickerMetric=population&pickerSort=desc" loading="lazy" style="width: 100%; height: 600px; border: 0px none;" width="100%" height="400"></iframe>
<h2>Brasil: al borde del abismo</h2>
<p>No es la única, sino más bien una de muchas variables. Sin embargo, Brasil ha demostrado que la capacidad y responsabilidad de los gobiernos es una clave de análisis en la lucha contra la pandemia. </p>
<p>Brasil goza de un sistema de salud bastante robusto entre el resto de los países del continente, pero su gobierno ha puesto en duda sistemáticamente a las autoridades sanitarias y sus recomendaciones sobre la pandemia, poniendo en riesgo a la mayoría de la población. </p>
<p>Un <a href="https://blogs.bmj.com/bmj/2021/03/05/covid-19-in-brazil-the-government-has-failed-to-prevent-the-spread-of-covid-19/">estudio reciente</a> de la Universidad de São Paulo ha investigado discursos públicos, legislación y medidas del gobierno de Bolsonaro para analizar su estrategia en pos de intentar promover la inmunidad de rebaño. </p>
<p>Dicho estudio halló que el cuestionamiento continuo de la pandemia por parte de Bolsonaro ha puesto repetidamente en riesgo a su población. Esto ha sido promovido por su apoyo a medidas ineficaces como la hidroxicloroquina, su negativa al confinamiento o a cualquier tipo de medida anticovid, y su incesante bloqueo a aquellos organismos municipales o regionales que las apoyaban.</p>
<p>Estas cuestiones previas, unidas a la lentitud en la negociación de las vacunas, han hecho que su campaña de vacunación no avance a un gran ritmo y haya sido tachada de desorganizada y caótica. A 11 de marzo solo se habían administrado <a href="https://ourworldindata.org/covid-vaccinations">5,05 dosis por cada 100 personas </a>. </p>
<p>Las medidas que el gobierno ha decidido implementar, unidas a la lentitud en la vacunación, cultivan un clima perfecto para el surgimiento de variantes. Además, mientras los médicos se quejan de falta de medios, Bolsonaro se ha centrado en <a href="https://www.nytimes.com/2021/03/06/world/americas/brazil-covid-bolsonaro-nasal-spray.html">un nuevo medicamento israelí</a> en fases todavía muy preliminares de estudio.</p>
<h2>Perú: marcado por el escándalo</h2>
<p>Perú ha tenido varias dificultades para negociar por las vacunas. Además de su falta de recursos y pujanza en comparación con otras naciones como Brasil y Argentina, el país andino ha sufrido cierta inestabilidad política que no ha ayudado a mejorar su posición en el momento de las negociaciones. </p>
<p>Sin embargo, se sobrepuso y aseguró acuerdos de vacunas que implicaban la inmunización de gran parte de su población. Se consiguió acoger algunos estudios de ensayos iniciales de las vacunas, se llegó a un acuerdo con la china Sinopharm para que la suya fuera la principal, e incluso con Pfizer (cuyas primeras dosis llegaron la pasada semana) y AstraZeneca, cuyas dosis no están previstas hasta septiembre. </p>
<p>El principal problema de Perú es que, desde que comenzó la campaña de vacunación, esta ha estado marcada por el escándalo. El bautizado como <a href="https://edition.cnn.com/2021/02/16/americas/peru-sinopharm-secret-vaccines-intl/index.html">“Vacunagate”</a> saltó a la primera plana poco después de haber empezado dicha campaña. 487 altos cargos, entre ellos el antiguo presidente Martín Vizcarra y algunos funcionarios del actual gobierno (y sus familiares y amigos) han sido acusados de vacunarse injusta y secretamente antes de tiempo mientras el país estaba sumido en la pandemia. </p>
<p>Para más inri, el presidente ha advertido que hay estafadores ofreciendo inocular <a href="https://www.elperiodico.com/es/internacional/20210305/presidente-peru-afirma-hay-estafadores-11559141">vacunas falsificadas</a> aprovechándose del sufrimiento de la nación. Este tipo de escándalos no han ayudado en absoluto al país, han causado descrédito en la vacunación y el cuestionamiento de unas instituciones que, al contrario, deberían haber mostrado ejemplaridad y justicia ante el sufrimiento de la población a causa de la pandemia y sus estragos.</p>
<h2>Chile: un ejemplo para el mundo</h2>
<p>Multitud de medios y organismos han alabado la campaña chilena como ejemplo de eficacia y eficiencia. A 11 de marzo el país había administrado <a href="https://ourworldindata.org/covid-vaccinations">32,09 dosis por cada 100 habitantes</a>, cifra que convierte a Chile en uno de los líderes de la vacunación mundial. </p>
<p>Chile ha pasado de ser criticado por su inacción con las altas tasas de infección y <a href="https://elpais.com/sociedad/2020-06-21/chile-casi-duplica-los-muertos-por-coronavirus-al-considerar-tambien-los-casos-sospechosos.html">su falta de credibilidad </a> a ser alabado por su concepción logística y buen hacer en la campaña de vacunación. </p>
<p>¿Cómo lo ha hecho? Un artículo en <a href="https://www.economist.com/the-americas/2021/03/06/vaccination-is-going-well-in-chile-why-not-its-neighbours"><em>The Economist</em></a> aludía a dos razones principales para este éxito. La primera era la falta de acuerdo, planificación y colectividad de los países latinoamericanos. Mientras la unión africana ha comprado vacunas al por mayor, en América Latina cada país se ha ocupado de negociar por su cuenta, lo que ha destapado grandes desigualdades. </p>
<p>Chile acogió ensayos iniciales de algunas vacunas y supo negociar muy bien y de forma temprana. La segunda razón que esgrime el diario es que el programa de inmunización chileno posee una base de datos digital actualizada. </p>
<p>Cabe añadir a estas razones que no solo Chile negoció de forma temprana y hábil, sino que también se aseguró vacunas de más de tres farmacéuticas, e intenta ahora hacerse también con la Sputnik V. Además, Chile fue el país de América Latina que más temprano inició su campaña de vacunación, el 24 de diciembre. </p>
<p>En Europa nos quejamos mucho últimamente de la lentitud de nuestras campañas de vacunación y tendemos a achacarlo a la decisión de adquirir las vacunas de modo unificado. Mirando a América Latina, vemos un ejemplo de lo que hubiera podido ocurrir en Europa de no elegir una estrategia unificada.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/156832/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Las autoras participan en el proyecto BIFISO, PIE CSIC-COVID-19-027, financiado por el CSIC, para la lucha contra la COVID-19 en el marco de la PTI Salud Global.</span></em></p><p class="fine-print"><em><span>Diana Ortega Martín no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>Analizar la campaña de vacunación en América Latina y las dificultades y aciertos de sus distintos países puede servirnos para aprender cómo podemos mejorar nuestra campaña propia.Diana Ortega Martín, contratada predoctoral, Instituto de Filosofía (IFS-CSIC)Matilde Cañelles López, Investigadora Científica. Ciencia, Tecnología y Sociedad, Instituto de Filosofía (IFS-CSIC)Licensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1554082021-02-27T19:40:05Z2021-02-27T19:40:05ZDijimos que nada sería como antes: una campaña de vacunación (casi) global<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/386137/original/file-20210224-19-10d5fe1.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=7%2C7%2C5168%2C3437&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">shutterstock</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-photo/doctor-virus-protective-suit-use-syringes-1903046350">Shutterstock / APHITHANA</a></span></figcaption></figure><p>Probablemente esta sea la campaña de vacunación masiva más grande de todos los tiempos. Las alianzas internacionales se activan, los calendarios se ponen en marcha, las redes de salud pública se movilizan. Y aunque las <a href="https://www.hrw.org/news/2021/02/11/covid-19-vaccine-producers-have-human-rights-responsibilities">cifras</a> son desproporcionadamente alentadoras en los países de la OCDE, aún quedan por zanjar los grandes problemas de inequidades globales. Las grietas de un sistema global integrado, aparentemente armonioso, ponen en evidencia que esta es también una de las pruebas más duras a la moralidad contemporánea.</p>
<p>Por una parte, las personas inmigrantes “indocumentadas”, muchas vulneradas y expuestas desde antes a problemas de salud, están en un puesto muy sensible de la cadena. Las <a href="https://www.brusselstimes.com/opinion/154180/the-right-to-a-covid-19-vaccine-must-be-made-universal/">barreras institucionales</a> pueden dificultar su acceso a las vacunas, sobe todo si la inoculación está condicionada a la presentación del pasaporte u otro documento de identidad. Esto acentúa su exposición y la de sus familias, y entorpece la estrategia de contención del coronavirus. Requerir la presentación de un documento de identificación puede actuar como un disuasivo para participar en un sistema que está vigilado por el estado, lo que repite así el círculo de la exclusión.</p>
<p>Por otra parte, esta inequidad a nivel micro refleja otras a nivel macro. A día de hoy, <a href="https://www.who.int/director-general/speeches/detail/who-director-general-s-opening-remarks-at-the-media-briefing-on-covid-19-5-february-2021">130 países</a> no han recibido una sola dosis de vacuna: las naciones de economía avanzada han acaparado el abastecimiento casi completamente y, al mismo tiempo, han intensificado el <a href="https://elpais.com/sociedad/2021-01-28/bruselas-se-reserva-el-derecho-a-bloquear-la-salida-de-vacunas-de-la-ue.html"><em>lobby</em></a> para seguir siendo prioritarias.</p>
<h2>Acceso universal</h2>
<p>Académicos del mundo de la bioética –junto a <a href="https://www.doctorswithoutborders.org/what-we-do/news-stories/news/join-msf-demanding-peoples-vaccine-covid-19">Médicos sin Fronteras</a>, <a href="https://www.oxfamamerica.org/explore/stories/peoples-vaccine-fastest-way-to-end-the-covid-19-pandemic/">Oxfam</a> y <a href="https://phr.org/issues/covid-19-pandemic/arm-in-arm/">Médicos por los Derechos Humanos</a>– han enviado una carta dirigida al Presidente Joseph Biden para que Estados Unidos responda por lo que le cabe en el respeto por los derechos humanos en cuanto a accesibilidad global a las vacunas. Se pide también que evite el monopolio de la manufactura de vacunas y, asimismo, tenga una participación más activa en la promoción del acceso universal y en garantizar la distribución y despacho equitativos de vacunas hacia el extranjero. </p>
<p>Cabe recordar que las vacunas no se han desarrollado en base al presupuesto de países por separado, sino gracias a un <a href="https://www.jacobinmag.com/2021/01/capitalist-competition-covid-19-vaccine-rollout">esfuerzo global</a>. Además de la industria farmacéutica, han contribuido universidades, centros de investigación, personas del mundo científico, la Organización Mundial de la Salud e incluso los civiles que sirvieron como voluntarios durante los experimentos. No hay justificación moral para que el derecho a la vacuna no sea universal. </p>
<p>Si bien podríamos imaginar que estas barreras son sólo un caso hipotético, consta que el gobierno de Chile recientemente ha <a href="https://www.dw.com/es/chile-expulsa-a-migrantes-venezolanos-y-colombianos/a-56524195">deportado en masa</a> a personas de origen venezolano, afectadas por una crisis humanitaria, en lo que ha denominado “proceso de expulsión”. Este proceso se acompañó de toda una <a href="https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-56026300">puesta en escena mediática</a> que evoca antiguas prácticas deshumanizantes propias de zonas de exterminio. Además, junto a unos planes por endurecer la actual política migratoria, la administración del Presidente Sebastián Piñera ha establecido que los extranjeros “indocumentados” en ese país deben autodenunciarse ante las autoridades si quieren tener acceso a la vacuna.</p>
<h2>Derecho internacional humanitario</h2>
<p>Por otro lado, el Comité Internacional de la Cruz Roja y UNICEF han emitido un <a href="https://www.icrc.org/en/document/statement-robert-mardini-icrc-director-general-calls-ceasefire-vaccinate-people-against">llamado al cese al fuego</a> para que en las, no pocas, zonas en conflicto armado llegue también un plan de inmunización organizado por <a href="https://www.gavi.org/covax-facility">COVAX</a> (una iniciativa llevada a cabo por la OMS y CEPI) y, así, dar cumplimiento al derecho internacional humanitario, tanto en las zonas controladas por los estados, como aquéllas sin control geopolítico específico. </p>
<p>El <a href="http://global.chinadaily.com.cn/a/202102/18/WS602dec38a31024ad0baa966d.html">gobierno de China</a> se ha sumado últimamente a la petición de anteponer la salud de las personas a los intereses políticos, y “que la solidaridad reemplace la división”. Aún en el sentido más utilitarista, debiese considerarse que la desprotección de estos habitantes puede incidir en movimientos migratorios que alteren la salud pública en el lugar de llegada. Áreas que incluyen Sudán, República Democrática del Congo, Yemen y Afganistán tienen ahora mismo múltiples líneas de control, o están en riesgo de tenerlas, vulnerando a unos 60 millones de personas.</p>
<p>Quizás no debería sorprendernos que un cierto orgullo nacionalista por el control de la epidemia, orquestado por las estadísticas que se televisan a diario, parece ir de la mano de una competición por el dominio de la sociedad global capitalista. No hace falta ir muy lejos para ver actuar estas dinámicas en el día a día a nivel micro y macro, aún si en este caso se trata apenas de una vacuna de emergencia.</p>
<p>¿Recuerda cuando en abril del año pasado dijimos que, después de la pandemia de covid-19, nada volvería a ser como antes? Bueno, eso aún está por verse.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/155408/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Ricardo Ayala recibe fondos del Consejo Federal de Investigación Científica 'Research Foundation Flanders' (FWO), Bélgica. </span></em></p>Las vacunas contra la covid-19 ya están aquí, pero no llegarán a la misma velocidad para todos.Ricardo Ayala, Investigador Post-doctoral en Ética Social, Ghent UniversityLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1552802021-02-14T09:37:05Z2021-02-14T09:37:05ZCómo Chile se convirtió en un improbable ganador en la carrera de la vacuna covid-19<p>A primera vista podría parecer que la carrera por adquirir las vacunas contra la covid-19 la han ganado las naciones industrializadas más poderosas del mundo. Pero al lado del Reino Unido, Canadá, Estados Unidos y la Unión Europea, hay otro país que también <a href="https://www.theguardian.com/world/2021/jan/29/canada-and-uk-among-countries-with-most-vaccine-doses-ordered-per-person">ha asegurado</a> un alto número de dosis relativo a su población.</p>
<p>Chile ha ordenado, hasta la fecha, cerca de <a href="https://launchandscalefaster.org/COVID-19#Interactive%20tables%20and%20charts%20-%20COVID-19%20Vaccine%20Advance%20Market%20Commitments">90 millones de dosis</a>, suficientes para vacunar dos veces a su población de <a href="https://www.worldometers.info/world-population/chile-population/">19,2 millones de habitantes</a>, para lo cual ha firmado acuerdos con los laboratorios Pfizer, AstraZeneca, Sinovac y Johnson and Johnson, así también como <a href="https://theconversation.com/margarita-del-val-solo-gozaremos-de-paz-y-salud-si-garantizamos-un-reparto-equitativo-de-las-vacunas-155176">el programa global</a> Covax. </p>
<p>¿Cómo este pequeño país, con poco peso internacional, ha logrado situarse al lado de las naciones más ricas del mundo en asegurar suficientes dosis de vacunas para inmunizar a su población? Los recursos económicos ciertamente han sido un factor importante, pero no de la misma manera que para los otros países que lideran la carrera de las vacunas.</p>
<h2>Maniobra económica</h2>
<p>Chile es una de las economías de más rápido crecimiento de América Latina en las últimas décadas. Es miembro de la <a href="https://www.oecd.org/chile/">Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE)</a>, que reúne a las naciones con los niveles más altos de ingresos y desarrollo humano. Sin embargo, la desigualdad de ingresos en Chile es más alta que en cualquier otro país de la OCDE y <a href="https://www.oecd.org/economy/chile-should-use-upturn-to-address-low-productivity-and-high-inequality.htm#:%7E:text=Chile's%20income%20inequality%20gap%20is,that%20of%20the%20poorest%2010%25.">un 65% </a> más alta que el promedio de la OCDE.</p>
<p>Debido a esto, Chile ha estado inmersa en una <a href="https://www.theguardian.com/world/2019/oct/30/pinochet-economic-model-current-crisis-chile">crisis sociopolítica</a> desde fines de 2019. Protestas masivas y violentos disturbios dieron origen al malestar social más grave desde el fin de la dictadura de Pinochet. Como consecuencia, el <a href="https://www.cooperativa.cl/noticias/pais/presidente-pinera/aprobacion-del-presidente-pinera-se-desploma-hasta-un-7-segun-criteria/2020-12-10/100923.html">nivel de aprobación</a> del presidente Sebastián Piñera ha caído al nivel más bajo registrado para un mandatario desde el retorno a la democracia en 1990. </p>
<p>En junio del año pasado, un brusco aumento en los casos de covid-19 provocó <a href="https://www.theguardian.com/global-development/2020/jun/14/chiles-health-minister-quits-over-government-response-to-covid-19">fuertes críticas</a> a la capacidad del gobierno para manejar la pandemia, sumando más problemas para el presidente. En respuesta, Piñera parece haber entendido que la única forma de mejorar su popularidad antes de que termine su presidencia a fines de este año es asegurando la mayor cantidad de vacunas posible para sus ciudadanos.</p>
<figure class="align-center ">
<img alt="A metro station is set on fire during rioting in the Chilean capital Santiago in 2019." src="https://images.theconversation.com/files/383384/original/file-20210209-13-vyy9kg.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/383384/original/file-20210209-13-vyy9kg.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/383384/original/file-20210209-13-vyy9kg.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/383384/original/file-20210209-13-vyy9kg.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/383384/original/file-20210209-13-vyy9kg.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/383384/original/file-20210209-13-vyy9kg.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/383384/original/file-20210209-13-vyy9kg.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px">
<figcaption>
<span class="caption">Las protestas contra la desigualdad y el gobierno de Piñera comenzaron tras la subida del precio del metro.</span>
<span class="attribution"><span class="source">EPA-EFE</span></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Esta estrategia ha significado incluso contradecir sus <a href="https://www.ft.com/content/980ec442-ee91-11e9-ad1e-4367d8281195">previos esfuerzos</a> por mostrar al país como un ejemplo de estabilidad y buena gestión económica. Con el propósito de lograr mejores acuerdos con las empresas farmacéuticas, Piñera no ha tenido problemas en argumentar lo contrario. </p>
<p>El estatus de Chile como país de altos ingresos, según el Banco Mundial, ha sido un <a href="https://www.biobiochile.cl/biobiotv/programas/expreso-bio-bio/2020/12/17/coronavirus-como-se-realizaron-las-negociaciones-de-las-vacunas-para-chile.shtml">punto de fricción</a> particular al negociar pedidos con los fabricantes de vacunas, especialmente AstraZeneca. </p>
<p>Para no pagar un precio alto, el gobierno ha tenido que demostrar que, debido a la pandemia y la crisis sociopolítica, la posición económica de Chile es peor que la de las economías más avanzadas del mundo, por lo que merece pagar menos por las vacunas. Esta reformulación de Chile como un país que enfrenta dificultades económicas claramente parece haber funcionado.</p>
<p>En un orden internacional caracterizado por cálculos de suma cero e interés propio, Piñera y el gobierno chileno han estado siguiendo las reglas del juego para aumentar sus propias posibilidades de supervivencia. </p>
<h2>Diversificación</h2>
<p>El gobierno chileno no solo ha tenido éxito alegando falta de fondos. Ha construido una cartera de vacunas muy diversa, compuesta de diferentes tipos en distintas etapas de desarrollos para cubrir riesgos. </p>
<p>Aunque otros gobiernos también lo han hecho, Chile <a href="https://www.latercera.com/la-tercera-domingo/noticia/vacunas-las-negociaciones-reservadas-de-chile/SSEG4BRZJZB4FCWYOZSJ4JNMWY/">adoptó esta estrategia desde muy temprano</a>. Pasó rápidamente a las negociaciones con muchas compañías farmacéuticas, incluidas empresas pioneras como AstraZeneca y Pfizer, pero también con Johnson & Johnson, que estaba más atrasada en el desarrollo. Le ayudó, sin duda, la tradición de un modelo económico <a href="https://link.springer.com/chapter/10.1057/9780230234239_6">altamente abierto al comercio</a>: los negociadores comerciales chilenos tienen fuertes habilidades, una amplia gama de contactos internacionales y están acostumbrados a enfrentar entornos inciertos.</p>
<p>Es justo decir que, en su estrategia de diversificación, Chile fue mucho más allá que la mayoría de las economías avanzadas, poniendo sus esperanzas en la vacuna CoronaVac, desarrollada por la empresa china Sinovac (ha pedido 60 millones de dosis). </p>
<p>Por el contrario, la mayoría de los países europeos ha elegido solo vacunas occidentales, a pesar de la ventaja comparativa de la enorme <a href="https://abcnews.go.com/Health/wireStory/sinovac-aims-600-million-dose-capacity-covid-vaccine-74579314">capacidad de fabricación </a> de las empresas chinas y la <a href="https://www.bbc.co.uk/news/world-asia-china-55212787">facilidad de transporte</a> de sus vacunas. </p>
<h2>Ensayos clínicos a cambio de dosis</h2>
<p>La elección de participar en los ensayos clínicos de las vacunas covid-19 también fortaleció la posición negociadora de Chile. <a href="https://www.gob.cl/en/news/1500-volunteers-will-participate-oxfordastrazeneca-clinical-trials-chile/">AstraZeneca</a>, <a href="https://www.uchile.cl/noticias/169088/u-de-chile-iniciara-reclutamiento-de-voluntarios-para-vacunas">Johnson & Johnson</a>, <a href="https://www.gob.cl/en/news/government-meets-sinovac-first-covid-19-vaccine-clinical-trial-chile/">Sinovac</a> y <a href="https://www.emol.com/noticias/Nacional/2021/01/25/1010041/Avances-CanSino-Temuco-vacuna-china.html">CanSino</a> realizaron ensayos de fase 3 en el país.</p>
<p>Chile tiene una <a href="https://gh.bmj.com/content/5/5/e002287">estricta protección regulatoria</a> para los participantes de ensayos clínicos, pero esto no disuadió a los laboratorios de realizar investigaciones allí. En este sentido, fue clave la internacionalización de las universidades chilenas, algunas de las cuales ya habían forjado vínculos estrechos con estas compañías farmacéuticas antes de la pandemia.</p>
<p>La Pontificia Universidad Católica de Chile, por ejemplo, ya había establecido <a href="https://www.uc.cl/en/news/autoridades-de-la-uc-reciben-a-representantes-de-sinovac-en-su-visita-a-chile/">vínculos</a> con Sinovac para desarrollar vacunas contra virus respiratorios antes de que golpeara el COVID-19. Por lo tanto, no fue difícil convencer al gobierno chileno de que proporcionara fondos para realizar la prueba de CoronaVac en el país. A cambio, Sinovac prometió acceso temprano a las dosis y un mejor precio.</p>
<p>El ambicioso objetivo del gobierno chileno es vacunar al 80% de su población para junio de 2021. A pesar de haber asegurado el doble de las dosis necesarias, ahora está negociando acuerdos adicionales en caso de que esos contratos fracasen.</p>
<p>El proceso de vacunación masiva avanza <a href="https://twitter.com/MaxCRoser/status/1359276195930660865?s=20">exitosamente</a>. En pocos días ya se ha vacunado a <a href="https://ourworldindata.org/covid-vaccinations">más de un millón de personas</a>. El sistema de salud chileno tiene una experiencia significativa en programas de inmunización masiva y se han establecido <a href="https://www.dw.com/es/covid-19-la-exitosa-estrategia-de-chile-para-avanzar-con-la-vacunaci%C3%B3n/a-56503608">diversos centros de vacunación</a> en todo el país para cumplir con este objetivo.</p>
<p>Por ahora, la estrategia del gobierno de colocar a Chile entre los primeros países en asegurar las dosis de vacunas parece haber dado sus frutos. Sin embargo, es demasiado pronto para predecir si tendrá un efecto positivo en Piñera y la popularidad del gobierno.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/155280/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Veronica Diaz-Cerda no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>Chile ha defendido con firmeza la reducción de precios, ha llegado a acuerdos con múltiples proveedores y se ha sometido a relevantes ensayos clínicos a cambio de dosis.Veronica Diaz-Cerda, Teaching Associate in International Relations, Aston UniversityLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1524272020-12-28T18:33:23Z2020-12-28T18:33:23ZLa Antártida: la última frontera para la pandemia<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/376708/original/file-20201228-15-1f3uusp.JPG?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C0%2C3876%2C2584&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Paisaje antártico</span> <span class="attribution"><span class="source">Andrés Barbosa</span>, <span class="license">Author provided</span></span></figcaption></figure><p>La actual pandemia de COVID-19 originada en Wuhan, China, a finales de 2019 se ha extendido a lo largo de los últimos meses por todo el planeta causando un gran número de infectados y de muertes tal y como indica la Organización Mundial de la Salud. </p>
<p>Hasta finales del mes de diciembre el continente antártico era el único territorio al cuál el coronavirus causante de la enfermedad no había llegado. </p>
<p>Por el momento el único brote se ha localizado en la <a href="http://www.inach.cl/inach/?page_id=12696">base chilena General Bernardo O’Higgins</a>, situada en el norte de la península antártica, donde <a href="http://www.inach.cl/inach/?p=29757">36 personas dieron positivo a la presencia de COVID-19</a> y fueron rápidamente evacuadas a la ciudad chilena de Punta Arenas. </p>
<figure class="align-right zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/376676/original/file-20201228-49872-119qm9b.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C0%2C798%2C499&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/376676/original/file-20201228-49872-119qm9b.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C0%2C798%2C499&q=45&auto=format&w=237&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/376676/original/file-20201228-49872-119qm9b.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=375&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/376676/original/file-20201228-49872-119qm9b.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=375&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/376676/original/file-20201228-49872-119qm9b.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=375&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/376676/original/file-20201228-49872-119qm9b.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=471&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/376676/original/file-20201228-49872-119qm9b.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=471&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/376676/original/file-20201228-49872-119qm9b.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=471&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Base antártica chilena General Bernardo O’Higgins.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="http://www.inach.cl/inach/?page_id=12696">INACH</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Son varias las razones que explican la llegada tardía del virus a la Antártida. En primer lugar su aislamiento del resto de masas continentales con un mínimo de unos 1 000 kilómetros entre Sudamérica y la península antártica, y un máximo de 3 950 kilómetros entre Sudáfrica y la región antártica más cercana. </p>
<p>En segundo lugar, el hecho de que en una extensión de 14 millones de kilómetros cuadrados (unas 28 veces la superficie de España) aparte de la existencia de bases científicas no existan asentamientos humanos y de que el máximo de presencia humana sea tan solo de unas <a href="https://www.comnap.aq/antarctic-information/">5 000 personas</a> en dichas bases y unos <a href="https://iaato.org/information-resources/data-statistics/">55 000 turistas</a> durante el verano austral, lo que hace difícil que pueda haber una expansión masiva del virus en todo el continente a partir de un único brote. </p>
<p>La expansión del virus a nivel global a finales de febrero de 2020 también ha contribuido a esta llegada tardía ya que en esas fechas finaliza la campaña de verano de investigación y de cruceros turísticos por la región, lo que conlleva una reducción drástica de los movimientos de personas y por tanto del riesgo de introducción del virus en el continente. No obstante, a principios de marzo se detectó un brote en un crucero turístico ya en latitudes antárticas que, sin llegar a desembarcar, volvió hacia Sudamérica inmediatamente. </p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/376672/original/file-20201228-17-1hvcddu.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/376672/original/file-20201228-17-1hvcddu.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/376672/original/file-20201228-17-1hvcddu.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/376672/original/file-20201228-17-1hvcddu.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/376672/original/file-20201228-17-1hvcddu.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/376672/original/file-20201228-17-1hvcddu.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/376672/original/file-20201228-17-1hvcddu.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/376672/original/file-20201228-17-1hvcddu.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Base Antártica Española Juan Carlos I y buque polar español Sarmiento de Gamboa.</span>
<span class="attribution"><span class="source">Andrés Barbosa</span>, <span class="license">Author provided</span></span>
</figcaption>
</figure>
<h2>Situación delicada</h2>
<p>Evitar la llegada del virus a la Antártida ha sido y sigue siendo la principal preocupación de los programas nacionales de investigación antártica por varias razones. Por un lado la protección de la salud de las personas que participan en las expediciones científicas y por otro los efectos que pudiera haber sobre la fauna antártica. </p>
<p>Las bases científicas en general tienen unas capacidades logísticas limitadas y cuentan solo con atención médica muy básica, de forma que la aparición de un brote de COVID-19 que derive en síntomas graves podría comprometer seriamente la vida de los afectados. A ello se unen las dificultades que supone una evacuación debido a la distancia, las condiciones meteorológicas y las infraestructuras existentes. </p>
<p>El <a href="https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0048969720368832">riesgo de expansión del virus en la Antártida es realmente plausible</a> ya que sus condiciones climáticas parecen permitir su viabilidad. Además, el modo de vida en la Antártida en lugares cerrados y poco espaciosos como son las bases y los buques de investigación o turísticos puede favorecer un rápido contagio de todas las personas que viven en esas condiciones. </p>
<p>La reducción del riesgo de introducción del virus en la Antártida pasa por la aplicación de estrictas normas de cuarentena durante dos semanas y la realización de test diagnósticos de detección del virus, como PCRs, de manera que los participantes en las campañas antárticas estén libres de la infección. </p>
<p>Por otra parte, durante esta campaña se han limitado los contactos entre bases y barcos de diferentes países generando burbujas en cada uno de ellos para eliminar el riesgo de dispersión del virus en caso de un brote.</p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/376674/original/file-20201228-23-1kbo886.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/376674/original/file-20201228-23-1kbo886.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/376674/original/file-20201228-23-1kbo886.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/376674/original/file-20201228-23-1kbo886.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/376674/original/file-20201228-23-1kbo886.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/376674/original/file-20201228-23-1kbo886.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/376674/original/file-20201228-23-1kbo886.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/376674/original/file-20201228-23-1kbo886.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Focas cangrejeras descansando en un témpano de hielo.</span>
<span class="attribution"><span class="source">Andrés Barbosa</span>, <span class="license">Author provided</span></span>
</figcaption>
</figure>
<h2>Riesgo para pingüinos, focas o ballenas</h2>
<p>Con la información actual la COVID-19 se considera una zoonosis, es decir, una enfermedad que ha pasado de una especie animal a los humanos. No es descartable por tanto que pudiera darse la situación contraria en la que el virus pudiera pasar de los humanos a otras especies animales de nuevo. Hasta el momento se han registrado varios contagios de mascotas, <a href="https://www.nature.com/articles/s41586-020-2334-5">perros</a> o <a href="https://onlinelibrary.wiley.com/doi/full/10.1111/tbed.13659">gatos</a>, de <a href="https://www.efe.com/efe/espana/sociedad/un-tigre-de-nueva-york-tiene-el-coronavirus-segun-zoologico-bronx/10004-4214284">animales de zoológicos</a> y de visones de granja. Por tanto una de las preocupaciones con la llegada del virus a la Antártida es cómo podría afectar a las especies nativas como los pingüinos, focas o ballenas. La información sobre la susceptibilidad de estas especies al virus por el momento es inexistente, por lo que cualquier valoración del riesgo tiene que basarse en estudios indirectos. </p>
<p>Algunos estudios mediante infecciones experimentales indican que <a href="https://www.tandfonline.com/doi/full/10.1080/01652176.2020.1766725">algunas aves como las gallinas de corral o los patos y mamíferos como los cerdos</a> muestran un desarrollo muy pobre de la enfermedad. Otros estudios han estimado el <a href="https://www.pnas.org/content/117/36/22311">riesgo de infección en diferentes especies de vertebrados a partir de la estructura del receptor ACE2</a> que es la puerta de entrada del virus a las células y por tanto la vía de infección y propagación del virus. En este estudio tan solo están representadas dos especies de aves antárticas, el pingüino de Adelia y el pingüino Emperador, mostrando un riesgo muy bajo de afinidad al virus. A partir de los resultados se puede estimar que tanto pingüinos como otras especies de aves marinas presentes en la Antártida muestran un riesgo bajo de ser infectados por la COVID-19. Del mismo modo, las especies de focas presentes en el estudio afines a las especies presentes en la Antártida también muestran un bajo riesgo. </p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/376673/original/file-20201228-50514-19ux3vb.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/376673/original/file-20201228-50514-19ux3vb.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/376673/original/file-20201228-50514-19ux3vb.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/376673/original/file-20201228-50514-19ux3vb.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/376673/original/file-20201228-50514-19ux3vb.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/376673/original/file-20201228-50514-19ux3vb.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/376673/original/file-20201228-50514-19ux3vb.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/376673/original/file-20201228-50514-19ux3vb.JPG?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Colonia de pingüino barbijo.</span>
<span class="attribution"><span class="source">Andrés Barbosa</span>, <span class="license">Author provided</span></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Sin embargo, existen otras especies que muestran un alto nivel de afinidad al virus y por tanto un mayor riesgo de infección, como son los cetáceos, incluyendo especies antárticas como la ballena minke, la orca o el cachalote. </p>
<p>No obstante los resultados de este estudio también indican una baja probabilidad de infección en especies como los murciélagos que, como se ha visto, podrían ser el origen del virus, por lo que, mientras que no se tengan resultados mas directos, es necesario mantener el principio de precaución y considerar que existe un cierto riesgo de infección en la fauna de vertebrados antárticos. </p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/376707/original/file-20201228-23-1um1a1w.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/376707/original/file-20201228-23-1um1a1w.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/376707/original/file-20201228-23-1um1a1w.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=429&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/376707/original/file-20201228-23-1um1a1w.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=429&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/376707/original/file-20201228-23-1um1a1w.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=429&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/376707/original/file-20201228-23-1um1a1w.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=539&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/376707/original/file-20201228-23-1um1a1w.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=539&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/376707/original/file-20201228-23-1um1a1w.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=539&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Ballena jorobada.</span>
<span class="attribution"><span class="source">Andrés Barbosa</span>, <span class="license">Author provided</span></span>
</figcaption>
</figure>
<h2>Grupos de riesgo</h2>
<p>¿Quiénes serían los grupos de personas con mayor riesgo de transmitir la enfermedad? En primer lugar los investigadores que trabajan directamente con los animales serían el grupo de mas riesgo, dado el contacto estrecho con ellos. </p>
<p>Siguiendo las normas establecidas por el <a href="https://www.ats.aq/s/faflo.html">Comité de Protección Ambiental del Tratado Antártico</a>, el acuerdo internacional que rige la actividad en la Antártida, ningún otro grupo de personas puede estar a menos de 5 metros de distancia de la fauna antártica, por lo que el riesgo de transmisión en ese caso sería muy bajo, aunque se deberían evitar los encuentros accidentales con los animales. </p>
<p>Existe un tercer grupo de personas presentes en la Antártida, los turistas, que igualmente no pueden acercarse a la fauna y, por tanto, presentan un riesgo bajo de transmisión del virus siempre que se cumplan las normas. </p>
<p>En cualquier caso, y para evitar al máximo la posibilidad de un contagio a la fauna, <a href="https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0048969720368832">se han dado pautas de comportamiento</a>, como reducir al mínimo necesario el manejo de animales, y de equipamiento, como la utilización de guantes, mascarillas, manteniendo una estricta desinfección de los materiales utilizados en el trabajo de campo. Por otra parte, también se recomienda no dejar equipamiento personal en las cercanías de las agrupaciones animales para evitar que estos puedan acercarse y eventualmente tener contacto con el material.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/152427/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Andrés Barbosa recibe fondos de la Agencia Estatal de Investigación. </span></em></p>El SARS-CoV-2 ha llegado a la Antártida, el único continente que permanecía libre de coronavirus. Si no se extreman las precauciones podría ponerse en peligro la vida de ballenas, focas y pingüinos.Andrés Barbosa, Investigador Científico, ecología, evolución y conservación, Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN-CSIC)Licensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1498512020-11-26T20:23:46Z2020-11-26T20:23:46ZLos Gobiernos de América Latina crean controversia sobre el uso de la mascarilla<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/371609/original/file-20201126-17-ns9c9x.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C8%2C5991%2C3979&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Gente con y sin mascarilla por una avenida de México DF en junio de 2020.</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-photo/mexico-city-july-28-2020-people-1793020975">Shutterstock / Eve Orea</a></span></figcaption></figure><p>En los últimos meses, la mascarilla o cubrebocas se volvió una fuente de controversias. La confrontación pública apareció entre los que promovían el uso obligatorio y aquellos que defendieron la libertad de decidir.</p>
<p>Antes de la pandemia, las mascarillas se usaban en el ambiente médico casi exclusivamente. A partir de abril de 2020, la <a href="https://apps.who.int/iris/bitstream/handle/10665/332657/WHO-2019-nCov-IPC_Masks-2020.4-spa.pdf">Organización Mundial de la Salud</a> recomendó su uso entre la población. Sobre todo en el transporte público, los comercios y los espacios muy poblados.</p>
<p>Diversos estudios han probado que la mascarilla disminuye la transmisión del virus. Otros investigadores señalan que además debe realizarse <a href="https://theconversation.com/covid-19-la-ventilacion-en-centros-educativos-una-asignatura-pendiente-145417">una buena ventilación</a>.</p>
<p><a href="https://theconversation.com/covid-19-por-que-latinoamerica-es-la-region-con-mas-muertes-en-el-mundo-148229">América Latina es la región del mundo con mas muertes por covid-19</a>. Los países más afectados han sido Brasil, Chile, Colombia, Ecuador y Perú. </p>
<p>La investigación <a href="https://doi.org/10.1016/j.hlpt.2020.08.014"><em>Respuestas al covid-19 en cinco países de Latinoamérica</em></a> encontró que los Gobiernos deberían aplicar mejores estrategias sanitarias, apoyos económicos y estrategias de comunicación.</p>
<p>Inspirada por este estudio, analizaré las estrategias de comunicación realizadas en la región. En particular, exploraré <a href="https://apublicos.hypotheses.org/110">las narrativas en torno al uso del cubrebocas</a>.</p>
<h2>México</h2>
<p>En marzo se decretó la suspensión de clases presenciales y el cierre de algunas actividades económicas. Hace unos días, <a href="https://www.efe.com/efe/usa/mexico/lopez-obrador-dice-que-no-se-sabe-a-ciencia-cierta-si-sirve-el-cubrebocas/50000100-4385027">el presidente López Obrador dijo que no usaba la mascarilla o cubrebocas</a> porque su médico le había indicado que no era necesario si guardaba la distancia.</p>
<p><div data-react-class="Tweet" data-react-props="{"tweetId":"1323767161127657473"}"></div></p>
<hr>
<h2>Brasil</h2>
<p><a href="https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-52708003">Las medidas en Brasil no fueron obligatorias</a>, incluso se levantaron antes de que el país llegara a un momento crítico en cuanto al número de casos y la saturación de la atención hospitalaria. </p>
<p>En julio, el presidente Bolsonaro <a href="https://latinus.us/2020/07/04/bolsonaro-veta-uso-obligatorio-cubrebocas-brasil/">vetó el uso obligatorio de la mascarilla</a>. </p>
<figure>
<iframe width="440" height="260" src="https://www.youtube.com/embed/KkSXQ2l0crc?wmode=transparent&start=0" frameborder="0" allowfullscreen=""></iframe>
</figure>
<hr>
<h2>Chile</h2>
<p>A diferencia de otros países de la región, <a href="https://chile.as.com/chile/2020/11/02/actualidad/1604322602_507579.html">Chile cerró sus fronteras</a> al mundo desde la segunda semana de marzo. El 17 de abril el Gobierno chileno decretó el <a href="https://www.minsal.cl/comienza-uso-obligatorio-de-mascarilla-en-lugares-publicos-cerrados/">uso obligatorio del cubrebocas</a> en lugares cerrados y en el transporte público. El presidente Sebastián Piñera también usó la mascarilla, especialmente cuando se trató de eventos públicos.</p>
<p><div data-react-class="Tweet" data-react-props="{"tweetId":"1274812257508220928"}"></div></p>
<hr>
<h2>Colombia</h2>
<p>Las autoridades han promovido la responsabilidad de los ciudadanos. El presidente Duque llamó a utilizar gel, mascarilla y evitar las aglomeraciones.</p>
<p><div data-react-class="Tweet" data-react-props="{"tweetId":"1321606809535369216"}"></div></p>
<hr>
<h2>Ecuador</h2>
<p>Las medidas anunciadas por el Gobierno fueron duras, ya que para lograr el aislamiento se promovió la <a href="https://www.elcomercio.com/actualidad/lenin-moreno-acciones-covid19-quito.html">aplicación de multas y el uso de la fuerza</a>. En algunas ciudades se impusieron <a href="https://www.primicias.ec/noticias/politica/palabras-lenin-moreno-informe-nacion/">sanciones de hasta 100 dólares</a> por no utilizar el cubrebocas. </p>
<p>El presidente Lenin Moreno se presentó en diversos eventos públicos, como el <a href="https://www.elcomercio.com/actualidad/informe-nacion-asamblea-lenin-moreno.html">informe de gobierno</a>, sin llevar mascarilla.</p>
<p><div data-react-class="Tweet" data-react-props="{"tweetId":"1277761132695085057"}"></div></p>
<hr>
<h2>Perú</h2>
<p>Este país fue uno de los primeros de la región en aplicar medidas de contención social para evitar la transmisión del virus, pero a partir del mes de mayo empezó a <a href="https://www.infobae.com/america/agencias/2020/10/31/actualiza-1-peru-supera-los-900000-casos-coronavirus-restringen-halloween-y-cierran-temporalmente-cementerios/">levantar las medidas</a> para frenar la caída de la economía. </p>
<p>La postura del <a href="https://elpais.com/internacional/2020-11-10/el-congreso-de-peru-destituye-al-presidente-martin-vizcarra.html">expresidente de Perú Martín Vizcarra</a> fue en favor del uso de mascarillas en eventos públicos. Incluso, durante octubre se lanzó una iniciativa para promover <a href="https://andina.pe/agencia/noticia-buena-iniciativa-lanzan-campana-para-promover-uso-mascarillas-reutilizables-818538.aspx">las mascarillas reutilizables</a>.</p>
<p><div data-react-class="Tweet" data-react-props="{"tweetId":"1293380368679219204"}"></div></p>
<hr>
<h2>¿Qué opinan los ciudadanos?</h2>
<p>Con la información disponible, considero que hay dos encuadres sobre el uso de la mascarilla. Por un lado, está la elección individual de los ciudadanos para garantizar la salud. Por otro lado, está la decisión gubernamental acompañada de incentivos para lograr su cumplimiento.</p>
<p>Ambos revelan la tensión existente entre las libertades y la fragilidad del Gobierno en la región. Una salida posible es la apertura del debate sobre el uso del cubrebocas. Especialmente porque la decisión estará presente durante los próximos años o al menos hasta que la vacuna haya llegado a la mayoría de la población.</p>
<p>Si bien no es una solución mágica, ayudaría a mejorar los argumentos sobre las ventajas del uso de la mascarilla en los espacios públicos y promovería la legitimidad de la decisión. Además, se evitaría la aparición de abusos de autoridad en contra de los ciudadanos.</p>
<p>En este sentido, internet podría facilitar la comunicación entre la ciudadanía y las autoridades sanitarias. Además, las plataformas digitales serían herramientas que podrían popularizar la discusión.</p>
<p>La mayoría de los Gobiernos tienen páginas web que podrían ser aprovechadas para el debate. O bien se podrían utilizar las plataformas sociales como Facebook, Twitter o YouTube. </p>
<p>Ambas alternativas presentan ventajas y desventajas. Sin embargo, las redes sociales aparecen como la opción más viable, ya que el <a href="https://datareportal.com/reports/digital-2020-global-digital-overview">80 % de la población en la región</a> usa estas formas de comunicación. </p>
<h2>La comunicación de los Gobiernos</h2>
<p>En resumen, el uso de la mascarilla es solo una muestra del actual estado de discusión de los asuntos públicos. Este caso nos permite reflexionar sobre los esquemas de comunicación entre el Gobierno y los ciudadanos. Al respecto, la consideración más importante que se nos plantea es cómo las instituciones y los ciudadanos están conviviendo con los ecosistemas de comunicación digital.</p>
<p>Más que nunca, es posible renovar las prácticas comunicativas del Gobierno en América Latina. Esta situación permitirá también repensar los <a href="https://apublicos.hypotheses.org/33">enfoques de investigación</a>. Además, nos lleva a cuestionar la comunicación del Gobierno y <a href="https://apublicos.hypotheses.org/82">la generación de valor para los ciudadanos</a>. En especial, porque las nuevas normas de convivencia generarán diversas necesidades de información. </p>
<p>Entre las exigencias proyectadas se encuentra un mayor interés y una imperante necesidad de interacción con el público. Estos cambios invitarán a la profesionalización comunicativa de las organizaciones públicas y la tendencia a migrar hacia plataformas gubernamentales integradas.</p>
<p>Sin duda, la covid-19 visibilizó la transformación del brazo comunicativo del Gobierno. De la misma manera, evidenció la democratización de los sistemas comunicativos. Ahora en la región conviven actores tradicionales y digitales de distintos orígenes.</p>
<p>Finalmente, surge otra pregunta: ¿cómo cambiarán las plataformas sociales a partir de la interacción con los Gobiernos de la región? </p>
<p>Durante las elecciones en Estados Unidos vimos un ejemplo de cómo <a href="https://www.reuters.com/article/us-usa-election-socialmedia/twitter-facebook-suspend-some-accounts-as-u-s-election-misinformation-spreads-online-idUSKBN27J2S4">las plataformas enfrentan nuevos retos ante la demanda de los actores políticos</a>. En adelante, quedará la interrogante abierta para América Latina. Solo con el tiempo seremos capaces de conocer los efectos.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/149851/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Osiris S González-Galván recibe fondos del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología de México (Conacyt).</span></em></p>La mascarilla es actualmente fuente de controversias. En este artículo se analizan las narrativas oficiales promovidas por los Gobiernos de México, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador y Perú.Osiris S González-Galván, Investigadora postdoctoral en Comunicación Pública, Université LavalLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1482852020-10-16T17:51:30Z2020-10-16T17:51:30ZLa gripe desapareció del hemisferio sur en invierno: ¿pasará lo mismo en el norte?<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/363944/original/file-20201016-17-1bxk4jr.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C0%2C4724%2C3139&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Una persona el nevado Huaytapallana (Huancayo, Perú).
</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-photo/walking-through-snowy-huaytapallana-between-lagunas-1680607270">Shutterstock / Milton Rodriguez</a></span></figcaption></figure><p>Existe una seria preocupación sobre cómo será el solapamiento del SARS-CoV-2 con otros patógenos respiratorios frecuentes en los meses de invierno. No podemos descartar una situación de <em>tormenta perfecta</em> en la que el coronavirus coincida con otros virus que causan gripe, bronquiolitis y neumonías, responsables de hospitalizaciones y muertes en sectores de la población más vulnerable. </p>
<p>Se ha sugerido que el riesgo de muerte en personas infectadas por gripe y SARS-CoV-2 de forma simultánea es superior que en aquellas que solo estaban infectadas por el coronavirus. Sobre todo, en mayores de 70 años.</p>
<p>No sabemos qué va a pasar, pero nos podemos fijar en qué ha ocurrido en el hemisferio sur durante junio, julio y agosto de este año, los meses que constituyen la época de gripe en esa parte del planeta. </p>
<p>Los datos son bastante contundentes: <a href="https://www.cdc.gov/mmwr/volumes/69/wr/mm6937a6.htm">la gripe y otras infecciones virales respiratorias prácticamente han desaparecido del hemisferio sur</a>.</p>
<figure class="align-center ">
<img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/363937/original/file-20201016-15-7e0fnl.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/363937/original/file-20201016-15-7e0fnl.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=432&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/363937/original/file-20201016-15-7e0fnl.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=432&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/363937/original/file-20201016-15-7e0fnl.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=432&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/363937/original/file-20201016-15-7e0fnl.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=543&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/363937/original/file-20201016-15-7e0fnl.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=543&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/363937/original/file-20201016-15-7e0fnl.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=543&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px">
<figcaption>
<span class="caption"></span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://www.who.int/influenza/surveillance_monitoring/updates/2020_10_12_surveillance_update_378.pdf?ua=1">OMS</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Miremos los datos de admisiones a las unidades pediátricas de cuidados intensivos <a href="https://adc.bmj.com/content/early/2020/10/06/archdischild-2020-320469">en varios países latinoamericanos</a>, de niños con problemas respiratorios por infecciones por gripe o virus respiratorio sincitial. <a href="https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC7508037/">Estos demuestran que</a>, durante la pandemia de COVID-19, se han reducido entre un 78 % y un 92 % las admisiones a las UCI debidas a estos virus.</p>
<p>En Australia también se ha descrito una reducción superior al 98 % en la detección de gripe y de otros virus respiratorios <a href="https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC7543326/">en niños</a>, a pesar de haber mantenido las escuelas abiertas. También en Nueva Zelanda ha <em>desaparecido</em> la gripe: se ha reducido en más de un 99 %. </p>
<figure class="align-center ">
<img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/363938/original/file-20201016-15-1qjn7v0.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/363938/original/file-20201016-15-1qjn7v0.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=621&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/363938/original/file-20201016-15-1qjn7v0.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=621&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/363938/original/file-20201016-15-1qjn7v0.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=621&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/363938/original/file-20201016-15-1qjn7v0.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=780&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/363938/original/file-20201016-15-1qjn7v0.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=780&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/363938/original/file-20201016-15-1qjn7v0.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=780&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px">
<figcaption>
<span class="caption">Comparación de la detección del virus respiratorio sincitial (1a) y del virus de la gripe (1b) en niños, en el área metropolitana de Australia del Oeste en el final del invierno de 2020 (líneas rojas y azul) y la media de los últimos años (2012-2019, línea negra).</span>
</figcaption>
</figure>
<p>Lo mismo ha ocurrido en Chile: a diferencia de años anteriores, durante el invierno de 2020 solo se ha detectado el coronavirus SARS-CoV-2. </p>
<figure class="align-center ">
<img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/363939/original/file-20201016-13-1t1k0fc.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/363939/original/file-20201016-13-1t1k0fc.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=451&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/363939/original/file-20201016-13-1t1k0fc.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=451&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/363939/original/file-20201016-13-1t1k0fc.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=451&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/363939/original/file-20201016-13-1t1k0fc.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=566&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/363939/original/file-20201016-13-1t1k0fc.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=566&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/363939/original/file-20201016-13-1t1k0fc.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=566&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px">
<figcaption>
<span class="caption">Casos de gripe en 2018, 2019 y 2020.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://www.minsal.cl/wp-content/uploads/2020/09/Informe-Influenza-SE-1-38-MINSAL.pdf">Ministerio de Salud, Chile</a></span>
</figcaption>
</figure>
<figure class="align-center ">
<img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/363940/original/file-20201016-13-w2dk7l.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/363940/original/file-20201016-13-w2dk7l.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=448&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/363940/original/file-20201016-13-w2dk7l.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=448&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/363940/original/file-20201016-13-w2dk7l.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=448&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/363940/original/file-20201016-13-w2dk7l.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=563&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/363940/original/file-20201016-13-w2dk7l.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=563&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/363940/original/file-20201016-13-w2dk7l.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=563&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px">
<figcaption>
<span class="caption">Casos de virus respiratorios (gripe, parainfluenza, respiratorio sincitial, adenovirus, neumovirus y SARS-CoV-2)</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://www.minsal.cl/wp-content/uploads/2020/09/Informe-Influenza-SE-1-38-MINSAL.pdf">Ministerio de Salud, Chile</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p>No se pueden descartar otras causas, como una disminución en la capacidad diagnóstica o una interferencia entre ambos virus. Sin embargo, muy probablemente las medidas de confinamiento, el uso de mascarillas, la higiene y la distancia social, así como la disminución de viajes y una campaña de vacunación antigripal más intensa han contribuido a mitigar la circulación del virus de la gripe y a reducir su impacto. Tampoco sabemos porqué estas medidas han podido afectar a otros virus y, por el contario, el SARS-CoV-2 sigue en aumento. ¿Podría deberse a un papel más importante de los supercontagiadores en la epidemiología del coronavirus?</p>
<p>No sabemos cómo se va a comportar la gripe este invierno en el hemisferio norte, pero estos datos son motivo de esperanza y animan a continuar con las medidas de contención. Quizá en el futuro haya que añadir algunas de estas medidas para reducir el impacto de la gripe en las poblaciones más vulnerables, además de la vacunación, la única herramienta preventiva que tenemos hasta ahora.</p>
<hr>
<p><em>La <a href="https://microbioun.blogspot.com/2020/10/la-gripe-desaparece-en-el-hemisferio-sur.html">versión original</a> de este artículo fue publicada en el blog del autor, microBIO.</em></p>
<hr><img src="https://counter.theconversation.com/content/148285/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Ignacio López-Goñi no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>Los datos que llegan de los países que han superado su primer invierno pandémico son esperanzadores, pero no debemos bajar la guardia.Ignacio López-Goñi, Catedrático de Microbiología, Universidad de NavarraLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1361742020-04-17T14:41:46Z2020-04-17T14:41:46ZCoronavirus: América Latina y el Caribe deben aumentar de forma drástica las pruebas de COVID-19<p>Pertenecemos a los más de 250 miembros de la comunidad académica y de investigación en Demografía y Salud de la Población que han hecho una <a href="https://osf.io/wg3b2/">seria advertencia</a> a países en América Latina y el Caribe: es necesario incrementar la cobertura de pruebas COVID-19 en la región mientras haya tiempo. La experiencia de otros países debe ayudar a planear e implementar medidas pertinentes y asertivas para contener y mitigar la pandemia. Aún hay tiempo, pero poco. De no actuar, otros países pronto experimentarán la situación que aqueja a Ecuador, un país que se ha convertido en un <a href="https://www.nytimes.com/aponline/2020/04/02/world/americas/ap-virus-outbreak-ecuador.html">foco de la enfermedad</a>.</p>
<p>Mucha de la atención internacional está enfocada en la evolución de la pandemia en regiones de ingresos altos y medianos. Quizás esto de deba a que el virus se originó en China y luego se esparció al este asiásico, Europa y Norteamérica. Los países en estas regiones, por lo general, se han caracterizado por realizar grandes cantidades de pruebas, a diferencia de países en regiones del sur.</p>
<p>Una gran cantidad de pruebas es crucial, pues el número de casos reportados de COVID-19 en un país no puede ser mayor que la cantidad de pruebas realizadas. De hecho, esta cifra es nada más la punta del iceberg, pues una persona puede ser testeada varias veces o pueden haber problemas con los resultados de las pruebas.</p>
<h2>Pruebas y casos</h2>
<p>No debería sorprender que los países en América Latina y el Caribe que han realizado más pruebas per cápita, Chile, Panamá y Perú, estén entre los que reportan más casos de COVID-19. Poseen información envidiable para lidiar con la pandemia. Esto incluye aislar y tratar a personas contagiadas, asignar recursos a las áreas más necesitadas e interrumpir cadenas de contagio identificando nuevas posibles infecciones a tiempo.</p>
<p>Aún así, en la región se realizan un número muy bajo de pruebas. Países como Honduras, Brazil y México reportan unas de las menores tasas de pruebas COVID-19 a nivel mundial (de acuerdo a <a href="https://www.worldometers.info/coronavirus/#countries">la escasa información disponible</a>).</p>
<figure class="align-center ">
<img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/328376/original/file-20200416-192744-1tyhxcm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/328376/original/file-20200416-192744-1tyhxcm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/328376/original/file-20200416-192744-1tyhxcm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/328376/original/file-20200416-192744-1tyhxcm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/328376/original/file-20200416-192744-1tyhxcm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/328376/original/file-20200416-192744-1tyhxcm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/328376/original/file-20200416-192744-1tyhxcm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px">
<figcaption>
<span class="caption"></span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://unsplash.com/photos/-VSicyd4c4A">Unsplash/Martin Sanchez</a>, <a class="license" href="http://creativecommons.org/licenses/by/4.0/">CC BY</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Esto se suma a otras circunstancias que aumentan la vulnerabilidad de la región ante la pandemia. Muchos países cuentan con sistemas de salud precarios y una alta prevalencia de <a href="https://journals.sagepub.com/doi/10.1177/1753944709338084">enfermedades crónicas</a> como la <a href="https://clinmedjournals.org/articles/ijdcr/international-journal-of-diabetes-and-clinical-research-ijdcr-6-112.php?jid=ijdcr">diabetes</a> e <a href="https://www.sciencedirect.com/science/article/abs/pii/S1889183716300605?via%3Dihub">hipertensión arterial</a>. Estas, a su vez, aumentan el riesgo de fallecer por COVID-19. </p>
<p>Los altos niveles de informalidad en la economía y de desigualdad económica hacen que las medidas para restringir el movimiento de la población, los llamados confinamientos, sean difíciles de mantener por periodos prolongados. La situación se complica más, ya que los nietos <a href="https://repositorio.cepal.org/bitstream/handle/11362/12970/np80127154_es.pdf?sequence=1&isAllowed=y">suelen vivir bajo el mismo techo</a> que los abuelos, lo que aumenta el riesgo de contagio para la población mayor. Hay indicios, además, de que casos de violencia doméstica contra la mujer, comunes en la región, <a href="https://www.dw.com/es/am%C3%A9rica-latina-lucha-contra-la-violencia-de-g%C3%A9nero-en-tiempos-del-coronavirus/a-52971832">han aumentado</a> durante el periodo de contención.</p>
<p>Los países deben implementar campañas masivas de detección de casos desde un inicio. No es suficiente realizar pruebas o buscar síntomas en áreas fronterizas o aeropuertos, pues muchas personas infectadas <a href="https://www.bmj.com/content/369/bmj.m1375">no muestran síntomas de la enfermedad</a>.</p>
<p>Países como Guatemala se han negado a realizar campañas de pruebas a gran escala a pesar de contar con solo <a href="https://www.prensalibre.com/guatemala/politica/coronavirus-cobra-la-tercera-victima-mortal-y-70-casos-en-guatemala-ultima-hora/">56 ventiladores para todo el país</a>. El gobierno mexicano también <a href="https://heraldodemexico.com.mx/pais/coronavirus-mexico-pruebas-masivas-covid-19-hugo-lopez-gatell-donde-hacerse-hospitales-laboratorio/">ha cuestionado</a> la necesidad de implementar medidas rigurosas e incrementar la cobertura de pruebas COVID-19.</p>
<p>Subestimar el número real de casos puede generar un sentimiento de seguridad infundado, sobre todo si las autoridades usan estas cifras para evidenciar un manejo efectivo de la situación. En vista de las condiciones actuales de la región, un número bajo de casos puede también reflejar la falta de políticas para monitorear y contener la enfermedad.</p>
<h2>La importancia de los tests</h2>
<p>Expertos han atribuido <a href="https://science.sciencemag.org/content/367/6484/1287">el éxito inicial al contener la pandemia</a> en Singapur y Corea del Sur a la expansión masiva de pruebas para detectar infecciones y a las medidas drásticas de distanciamiento social. El aislamiento de casos infectados ayudó a salvar vidas al interrumpir cadenas de contagio.</p>
<p>Estos dos países realizaron más de 7 000 pruebas por millón de habitantes. En América Latina y el Caribe, el promedio actual ronda las 680 pruebas por millón de acuerdo a nuestras estimaciones basadas en reportes oficiales de cada país. A inicios de abril, Bolivia realizaba menos de <a href="https://www.boliviasegura.gob.bo/">100 pruebas por millón</a>.</p>
<p>Toda estrategia para contener la pandemia debe considerar una expansión radical en la cobertura de pruebas COVID-19. Esto permitirá salvar vidas al identificar y tratar casos, interrumpir las cadenas de contagio y prevenir que la enfermedad vuelva en un futuro. Esta estrategia es costosa, sin contar con las dificultades de acceder a los reactivos y equipo necesarios <a href="https://www.miamiherald.com/news/nation-world/world/americas/haiti/article241701676.html">en tiempos de crisis</a>. Latinoamérica y el Caribe es una región diversa y con recursos limitados. Acciones pertinentes a cada contexto pueden traer grandes beneficios a largo plazo para la sociedad y economía de la región.</p>
<p>Sin una estrategia agresiva de detección de casos de COVID-19, los gobiernos carecerán de la información necesaria para mitigar las consecuencias sociales y económicas de la pandemia. Una campaña de pruebas efectiva y generalizada puede reducir la necesidad de implementar medidas estrictas de distanciamiento social en el futuro, las cuales serán cada vez más difíciles de acatar para la ciudadanía y de implementar por parte de los gobiernos.</p>
<hr>
<p><em>Artículo traducido gracias a la colaboración con <a href="https://www.fundacionlilly.com/">Fundación Lilly</a></em>.</p>
<hr><img src="https://counter.theconversation.com/content/136174/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Las personas firmantes no son asalariadas, ni consultoras, ni poseen acciones, ni reciben financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y han declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado anteriormente.</span></em></p>Aún hay tiempo, pero poco. De no actuar, otros países pronto experimentarán la situación que aqueja a Ecuador.Diego Alburez-Gutierrez, Research Scientist - Research Area Chair (Aging and Generational Processes), Max Planck Institute for Demographic ResearchJosé Manuel Aburto, Postdoctoral research associate, University of Southern DenmarkMarília R. Nepomuceno, Research Scientist, Max Planck Institute for Demographic ResearchLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1343042020-03-30T19:43:27Z2020-03-30T19:43:27Z500 años de la Patagonia: nada que festejar<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/323944/original/file-20200330-146666-1fj8lpe.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=7%2C2136%2C2611%2C836&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Detalle de _Americae sive qvartae orbis partis nova et exactissima descriptio_, por Diego Gutiérrez y
Hieronymus Cock.
</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.loc.gov/item/map49000970/">Lessing J. Rosenwald Collection (Library of Congress)</a></span></figcaption></figure><p>El 31 de marzo de 2020 se cumplen quinientos años de la llegada de Fernando de Magallanes a una bahía a la que bautizó <a href="https://tools.wmflabs.org/geohack/geohack.php?pagename=Puerto_San_Juli%C3%A1n&params=49_18_S_67_43_W_region:AR_type:city">“San Julián”</a>, donde sus naves pasaron <a href="https://www.google.com/maps/d/viewer?mid=1q6ByHRBQSrJ0H8VKwSahFVDEOMA&ll=-49.63752382857205%2C-66.28051457812501&z=7">cinco meses de invernada</a>. Tras la estadía, la expedición continuó hasta dar la <a href="https://www.rutaelcano.com">primera vuelta al mundo</a> de la historia. También identificó un paso marítimo entre los océanos Atlántico y Pacifico, al que llamaron <a href="https://goo.gl/maps/jG5yzboqhWYiZ6Xx5">“Estrecho de Magallanes”</a>, por el que transitaron miles de barcos hasta la inauguración del Canal de Panamá en 1914.</p>
<p>El primer encuentro (o desencuentro) entre europeos e indígenas ocurrió cerca de esa bahía, según <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Antonio_Pigafetta">Antonio Pigafetta</a>, quien describió a los <a href="https://archive.org/details/LosTehuelchesUnPaseoEtnohistoricoDoc/mode/2up">tehuelches</a> como <a href="https://archive.org/details/primerviajeentor00piga/page/52/mode/2up">gigantes</a>. Inspirado en <a href="https://archive.org/details/bub_gb_QvrXSUZ4v58C/mode/2up">una antigua novela de caballería</a>, Magallanes los bautizó como “patagones”, término que daría nombre a la región.</p>
<p>Las fantasías sobre seres monstruosos y el deseo de hallar riquezas ocultas estimularon la imaginación europea. Cautivados por el misterio de los gigantes, los sucesivos cronistas multiplicaron representaciones distorsionadas y prejuiciosas sobre los tehuelche, mapuche, williche, kawésqar, yagan, selk'nam y haush, entre otros pueblos originarios. A las tomas de posesión de los territorios que los europeos creían “descubrir” seguía el reemplazo de topónimos (por otros de la liturgia cristiana), y luego <a href="https://www.youtube.com/watch?v=CZBt6RnHF4M">persecuciones, violaciones y asesinatos en nombre de la “civilización”</a>.</p>
<h2>Independencia, avance militar e incorporación</h2>
<p>Durante la época colonial (entre los siglos XVI y XIX) se firmaron <a href="https://www.iwgia.org/es/recursos/publicaciones/317-libros/2872-pacta-sunt-servanda-capitulaciones-convenios-y-tratados-con-indgenas-en-pampa-y-patagonia-argentina-1742-1878.html">varios tratados entre la Corona española y diversas parcialidades indígenas</a> para negociar con ellas alianzas y posibles modos de expansión estatal. La firma de tratados continuó tras la independencia hasta que, a fines del siglo XIX, el Estado argentino dejó de cumplirlos y optó por la <a href="http://iidypca.homestead.com/Pr_cticas_Genocidas_y_Violencia_Estatal_en_perspectiva_transdisciplinar..pdf">violencia directa</a>. </p>
<p>El objetivo del <a href="http://ulisesdelaorden.com/tierra-adentro/">avance militar sobre los territorios indígenas</a> –referido como “Conquista del desierto” (1879–1885) en Argentina y “Pacificación de la Araucanía” en Chile (1861–1883)– era extender la frontera productiva e incorporar tierras fértiles para la explotación agrícola-ganadera. La concentración de tierras y capitales mediante las inversiones motivadas desde Gran Bretaña resultaron en emporios latifundistas que explotaban la mano de obra indígena. </p>
<p>Algunos fueron tomados como peones en estancias, otros fueron trasladados al norte para cosechar algodón, vid o caña de azúcar, o construir las vías del ferrocarril. Sufrieron traslados forzados, confinamientos en <a href="https://www.endepa.org.ar/en-argentina-hubo-campos-de-concentracion-para-indigenas/">campos de concentración</a> y el despojo de sus hijos (instancia conocida como “reparto”), que desestructuraron su organización social y política. En la zona austral se crearon “reservas” <a href="http://plarci.org/index.php/RAHAYL/article/view/230">vigiladas por el Estado y la iglesia</a>. </p>
<p>En <a href="https://tools.wmflabs.org/geohack/geohack.php?pagename=Tierra_del_Fuego&params=54_S_70_W_region:CL_type:isle_scale:5000000">Tierra del Fuego</a>, salesianos y anglicanos concentraron en misiones a <a href="https://www.academia.edu/38928797/GENOCIDIO_SELKNAM_2019_-_Miguel_Pantoja">quienes sobrevivieron a la Fiebre del oro</a>, para redimirlos de su estado “salvaje” y tenerlos trabajando a su servicio.</p>
<h2>Trauma e invisibilización</h2>
<p>El trauma generado por la violencia llevó a muchos a ocultar sus orígenes e <a href="https://books.openedition.org/eunrn/231?lang=es">interrumpir la transmisión intergeneracional de memorias</a>, conocimientos, cosmología, lengua, etc. Como no hablaban el idioma de sus ancestros, no se consideraba a las nuevas generaciones como indígenas sino como <a href="https://www.academia.edu/42256964/Reflexiones_sobre_la_ideologi_a_de_blanqueamiento_en_los_pai_ses_del_Plata_desde_una_investigacio_n_colaborativa">“descendientes”</a>. </p>
<p>Sirviéndose de políticas eugenésicas, los estudios científicos en auge en los años 1930 estudiaron a los supuestos “últimos indios puros” (según ideologías raciales) y anunciaron la inminente “extinción” de los pueblos originarios patagónicos. Cerrando el círculo, las políticas asimilacionistas posteriores incentivaron desplazamientos desde zonas rurales hacia las urbanas, donde pasaron a ser una parte indiferenciada e invisibilizada de los sectores más humildes. </p>
<h2>Debates sobre las conmemoraciones</h2>
<p>Sin embargo, los debates sobre la conmemoración del quinto centenario de lo que Edmundo O’Gorman llamó <a href="https://cursosluispatinoffyl.files.wordpress.com/2014/01/la-invencion-de-amc3a9rica-o_gorman.pdf">“La invención de América”</a> trajeron vientos de cambio. Señalando que no había “nada que festejar”, activistas indígenas y sus aliados denunciaron las atrocidades cometidas por los conquistadores y las consecuencias del <a href="https://ri.conicet.gov.ar/bitstream/handle/11336/52773/L-0587-120-143.pdf?sequence=5&isAllowed=y/">genocidio</a>, que continúan hasta hoy. </p>
<p>La presión indígena para que los Estados reconocieran el sangriento legado de la conquista y el colonialismo impulsó la ampliación de los marcos jurídicos nacionales y locales que reconocen su preexistencia a los Estados, y la implementación de políticas de reconocimiento, reparación y resguardo de derechos. </p>
<p>Tanto Argentina como Chile han ratificado el <a href="https://www.ilo.org/wcmsp5/groups/public/---americas/---ro-lima/documents/publication/wcms_345065.pdf">Convenio 169 de la OIT (1989)</a>, y adherido a la <a href="https://www.un.org/development/desa/indigenouspeoples/wp-content/uploads/sites/19/2018/11/UNDRIP_S_web.pdf">Declaración de la ONU sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas (2007)</a>, aunque su implementación generalmente falla.</p>
<h2>Reemergencia y recuperación de la memoria</h2>
<p>Ya sea con o sin reconocimiento estatal, <a href="https://conosurconversaciones.wordpress.com/volumen-3-numero-1/">los procesos de reemergencia y resurgimiento indígena</a> cobran fuerza en toda América. Refutando los discursos sobre la extinción <a href="http://www.bnm.me.gov.ar/giga1/documentos/EL005238.pdf">tehuelche y selk'nam</a> y la extranjería <a href="https://latinta.com.ar/2017/08/mapuches-indios-chilenos-pueblos-preexistentes">mapuche en Argentina y en Chile</a>, familias, comunidades y organizaciones originarias vinculan pasado y presente a través de la restauración de <a href="https://gemasmemoria.com/">memorias fragmentadas, dolorosas, humilladas, silenciadas</a>, en diálogo con investigaciones comprometidas y, en ocasiones, <a href="https://apporigenes.blogspot.com">con ayuda de innovaciones tecnológicas</a>. </p>
<figure>
<iframe width="440" height="260" src="https://www.youtube.com/embed/IJ5dTSethGA?wmode=transparent&start=0" frameborder="0" allowfullscreen=""></iframe>
<figcaption><span class="caption">¿De dónde son los mapuches? (Al Jazeera Español)</span></figcaption>
</figure>
<p>Los pueblos indígenas luchan hoy contra el <a href="https://www.darioaranda.com.ar/2019/09/el-extractivismo-que-viene/">neoextractivismo</a> –que impacta directamente en sus territorios, cuerpos y espíritus–, cuestionan <a href="https://www.researchgate.net/publication/339164947_Los_tehuelches_ante_el_deseo_patrimonializador">iniciativas patrimonializadoras</a> que se apropian de su pasado y conocimientos, y continúan exigiendo que se garantice el <a href="https://www.ilo.org/dyn/normlex/en/f?p=1000:12100:0::NO::P12100_INSTRUMENT_ID,P12100_LANG_CODE:312314,es:NO#A">derecho a la consulta previa, libre e informada (y al consentimiento)</a> en temas que les atañen. </p>
<p>El reconocimiento de la soberanía indígena y sus derechos territoriales ha colocado a algunas comunidades a la vanguardia de la protección de la biodiversidad, aunque esto también los ha convertido en <a href="https://elpais.com/sociedad/2019/12/08/actualidad/1575819094_093427.html">blanco de ataques</a>.</p>
<p>En respuesta a la historia hegemónica y a los <a href="http://vcentenario.es/">festejos oficiales</a> en torno al aniversario de la expedición de 1520, las voces indígenas manifiestan <a href="https://youtu.be/KgI6OcPGTBA">la gran tristeza</a> que les aflige. <a href="http://www.turningtide.com/columbus.htm">Tal como ocurrió con el quinto centenario del primer viaje de Colón</a>, los derramamientos de sangre, los despojos a los que abrió paso la llegada de Magallanes y la continuidad de la <a href="https://www.decolonialtranslation.com/espanol/quijano-colonialidad-del-poder.pdf">colonialidad</a> en estos quinientos años no son motivo de celebración.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/134304/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Geraldine Lublin has received research funding from the British Academy, the Leverhulme Trust and the EPSRC through its CHERISH-DE Digital Economy Research Centre.</span></em></p><p class="fine-print"><em><span>Mariela Eva Rodriguez has received funding from The British Academy, the Leverhulme Trust and the EPSRC through its CHERISH-DE Digital Economy Research Centre.</span></em></p>El 31 de marzo de 1520 Magallanes llegó a la Patagonia, en una escala de la que fue la primera vuelta al mundo. 500 años después, los indígenas de la región luchan por recuperar sus derechos y su historia.Geraldine Lublin, Senior Lecturer in Hispanic Studies, Swansea UniversityMariela Eva Rodriguez, Adjunct Professor and Researcher - Investigadora y Profesora Adjunta (UBA-CONICET), Universidad de Buenos AiresLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1270452019-11-14T20:49:36Z2019-11-14T20:49:36Z¿Qué está ocurriendo en Sudamérica?<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/301811/original/file-20191114-26202-7dmqkp.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C0%2C4394%2C2523&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">La policía utiliza un cañón de agua contra los manifestantes durante una reciente protesta antigubernamental en Santiago de Chile. En varios países de América del Sur se han producido disturbios sociales en los últimos meses.</span> <span class="attribution"><span class="source"> (AP Photo/Esteban Felix)</span></span></figcaption></figure><p>La noticia de que el presidente de Bolivia, Evo Morales, <a href="https://www.cnn.com/2019/11/10/americas/bolivia-new-election-audit/index.html">dimitió en medio de un escándalo de fraude electoral</a> pone de relieve una lamentable realidad sobre América del Sur. Si bien es cierto que el continente ha hecho importantes progresos económicos en los últimos años, sigue viéndose afectado por frecuentes disturbios políticos y civiles.</p>
<p>Con más de 425 millones de habitantes, los países de América del Sur se encuentran, a nivel mundial, entre los mayores productores y exportadores de <a href="https://www.statista.com/chart/19127/biggest-producers-of-beef/">carne de vacuno</a> <a href="https://www.worldatlas.com/articles/world-leaders-in-soya-soybean-production-by-country.html">y soja</a> (Brasil), <a href="https://www.opec.org/opec_web/en/about_us/171.htm">petróleo</a> (Venezuela), <a href="http://www.ico.org/trade_statistics.asp">café</a> (Colombia), <a href="https://oec.world/en/profile/hs92/2204/">vino</a> (Argentina y Chile), <a href="https://www.statista.com/statistics/264626/copper-production-by-country/">cobre</a> (Chile y Perú) y <a href="https://www.theoilandgasyear.com/market/bolivia/">gas natural</a> (Bolivia). </p>
<p>Pero América del Sur también se caracteriza desde hace mucho tiempo por su <a href="https://www.washingtonpost.com/world/the_americas/why-political-turmoil-is-erupting-across-latin-america/2019/10/10/a459cc96-eab9-11e9-a329-7378fbfa1b63_story.html">inestabilidad política</a> y sus tensiones en materia de políticas públicas. </p>
<p>Durante el siglo pasado, en varios países de América del Sur se produjeron golpes de Estado, dictaduras militares y levantamientos sociales. Los últimos meses han demostrado que los disturbios no son cosa del pasado.</p>
<h2>Ola de manifestaciones</h2>
<p>Además de Venezuela, donde las <a href="https://theconversation.com/5-reasons-why-trumps-venezuela-embargo-wont-end-the-maduro-regime-121538">crisis política y económica</a> han dado lugar a un desastre humanitario conocido en todo el mundo, recientemente han estallado turbulencias en otras regiones del continente.</p>
<p>En Paraguay se han desatado protestas multitudinarias contra el presidente Mario Abdo. Los paraguayos están molestos por <a href="https://www.economist.com/the-americas/2019/08/22/a-secret-hydropower-deal-with-brazil-causes-a-political-crisis-in-paraguay">un acuerdo firmado con Brasil en relación con la central hidroeléctrica de Itaipú</a>, que la ciudadanía considera contrario a sus intereses. </p>
<p>Con un nivel de desaprobación del Gobierno que se sitúa en el 69%, la oposición ha iniciado un <a href="https://www.reuters.com/article/us-paraguay-president/paraguayan-presidents-popularity-plummets-amid-brazil-linked-political-crisis-idUSKCN1V421O">proceso de destitución contra Abdo y su vicepresidente que está a punto de concluir</a>. El proceso de destitución tiene lugar apenas siete años después de que el <a href="https://www.theguardian.com/world/2012/jun/22/paraguay-fernando-lugo-ousted">expresidente Fernando Lugo también fuera destituido</a> en 2012 en medio de un conflicto por unas tierras que ocasionó la muerte de 17 personas. </p>
<p>En Perú, el presidente Martín Vizcarra <a href="https://globalnews.ca/news/5972760/peru-president-dissolves-congress-corruption/">ha disuelto el Congreso</a> en un intento de forzar unas nuevas elecciones parlamentarias. Sus actos han desencadenado <a href="https://www.youtube.com/watch?v=Im5LX4Nc0sg">varias manifestaciones</a> en todo el país, entre ellas una que <a href="https://www.cnbc.com/2019/10/11/reuters-america-update-2-mmgs-las-bambas-copper-mine-faces-production-halt-amid-protests.html">bloqueó el acceso a una mina de cobre y dio lugar al cese de la producción</a>. </p>
<p>Vizcarra ocupó el cargo de vicepresidente hasta el año pasado, después de que el <a href="https://www.cbc.ca/news/world/peru-kuczynski-resign-1.4587182">anterior presidente, Pedro Pablo Kuczynski, dimitiera</a> por su posible relación con un escándalo de soborno en el que se vio envuelta la empresa constructora brasileña Odebrecht. Otro presidente peruano, Alan García, <a href="https://www.bbc.com/news/world-latin-america-47965867">se suicidó el pasado mes de abril</a> cuando la policía llegó a su casa para detenerlo por su implicación en el mismo caso.</p>
<h2>Impugnación de resultados electorales</h2>
<p>En Bolivia también ha tenido lugar una <a href="https://www.theguardian.com/world/2019/oct/28/bolivian-election-protests-santa-cruz-block-roads-la-paz">oleada masiva de manifestaciones</a>. La oposición <a href="https://www.dw.com/en/bolivia-opposition-leader-calls-for-new-election-amid-unrest/a-51100841">no aceptó los resultados de las recientes elecciones</a>, que dieron la victoria a Morales en la primera vuelta de la votación para su cuarto mandato. </p>
<figure class="align-right zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/301110/original/file-20191111-194637-31ckza.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/301110/original/file-20191111-194637-31ckza.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=237&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/301110/original/file-20191111-194637-31ckza.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=368&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/301110/original/file-20191111-194637-31ckza.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=368&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/301110/original/file-20191111-194637-31ckza.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=368&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/301110/original/file-20191111-194637-31ckza.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=462&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/301110/original/file-20191111-194637-31ckza.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=462&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/301110/original/file-20191111-194637-31ckza.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=462&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Evo Morales asiste a una conferencia de prensa en La Paz (Bolivia), el 10 de noviembre de 2019. Morales pide que se convoquen nuevas elecciones presidenciales y se revise el sistema electoral.</span>
<span class="attribution"><span class="source">(AP Photo/Juan Karita)</span></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Morales, que lideraba el país desde 2006, aceptó que la Organización de los Estados Americanos (OEA) llevara a cabo <a href="https://www.reuters.com/article/us-bolivia-election/bolivia-split-as-opposition-calls-for-morales-to-step-down-rejects-audit-idUSKBN1XB4SA">una auditoría de las elecciones</a>, en la que se concluyó que no se podían dar por válidos los resultados de octubre debido a “graves irregularidades”. Morales anunció que dimitía “por el bien del país”.</p>
<p>Desde las elecciones, se han cerrado las carreteras en todo el país y los disturbios diarios han sido moneda corriente. Santa Cruz, la provincia más rica de Bolivia, <a href="https://www.france24.com/en/20191029-dozens-injured-in-clashes-as-bolivia-s-election-standoff-enters-second-week">está siendo escenario de una huelga general</a>.</p>
<p>Jeanine Añez, ex-vicepresidenta del Senado, <a href="https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-50402038">asumió el mando del país</a> tras las renuncias de Morales, del vicepresidente y de la presidenta del Senado. Rusia, uno de los más cercanos aliados de Morales, <a href="https://eldeber.com.bo/156572_rusia-reconoce-al-gobierno-transitorio-de-jeanine-anez-en-bolivia">reconoció a Añez como jefe de Estado interina del país</a>, y el presidente Carlos Mesa, quién disputó las últimas elecciones contra el líder del MAS, <a href="https://eldeber.com.bo/156581_mesa-anuncia-que-cc-participara-en-las-nuevas-elecciones-y-pide-a-anez-definir-plazo">pide nuevas elecciones lo más rápido posible</a>. </p>
<p>En Ecuador el presidente Lenin Moreno retiró las subvenciones al combustible, vigentes desde la década de 1970, debido a un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). <a href="https://time.com/5705202/what-happens-next-in-ecuador/">Desde entonces, el precio del combustible se ha disparado</a>, <a href="https://www.aljazeera.com/news/2019/10/ecuador-unrest-led-mass-protests-191010193825529.html">lo que ha desencadenado protestas multitudinarias</a> que paralizaron varias regiones del país en octubre.</p>
<figure class="align-center ">
<img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/300885/original/file-20191108-194661-1ndlc29.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/300885/original/file-20191108-194661-1ndlc29.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=450&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/300885/original/file-20191108-194661-1ndlc29.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=450&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/300885/original/file-20191108-194661-1ndlc29.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=450&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/300885/original/file-20191108-194661-1ndlc29.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=565&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/300885/original/file-20191108-194661-1ndlc29.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=565&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/300885/original/file-20191108-194661-1ndlc29.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=565&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px">
<figcaption>
<span class="caption">Manifestantes antigubernamentales escalan la fachada de una residencia en busca de una mejor posición para enfrentarse a la policía en Quito (Ecuador), en octubre de 2019.</span>
<span class="attribution"><span class="source">(AP Photo/Dolores Ochoa)</span></span>
</figcaption>
</figure>
<p><a href="https://www.bbc.com/news/world-latin-america-50010190">Moreno ha acusado</a> a su predecesor, Rafael Correa, y al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, de estar detrás de estas manifestaciones, que continuaron <a href="https://www.theguardian.com/world/2019/oct/14/ecuador-protests-end-after-deal-struck-with-indigenous-leaders">incluso después de que se restablecieran los subsidios</a>. </p>
<p>Chile, el país de América del Sur con el <a href="http://hdr.undp.org/en/composite/HDI">índice de desarrollo humano más alto</a> y uno de los <a href="https://www.worldatlas.com/articles/the-richest-countries-in-south-america.html">productos interiores brutos per cápita más elevados de la región</a>, está afrontando la mayor oleada de agitación social conocida desde la redemocratización del país en 1990. <a href="https://www.washingtonpost.com/business/how-chile-went-from-an-economic-star-to-an-angry-mess/2019/10/29/9d575fe8-fa41-11e9-9e02-1d45cb3dfa8f_story.html">El detonante</a> fue el aumento de las tarifas del transporte público y la luz a principios de octubre. </p>
<h2>Educación y pensiones de jubilación</h2>
<p>Los problemas relacionados con la <a href="https://www.washingtonpost.com/world/the_americas/stunning-wealth-poor-services-behind-massive-chile-protests/2019/10/28/93e8e3e4-f93a-11e9-9e02-1d45cb3dfa8f_story.html">educación</a>, que en su mayor parte es privada y cara, y el <a href="https://www.washingtonpost.com/world/the_americas/stunning-wealth-poor-services-behind-massive-chile-protests/2019/10/28/93e8e3e4-f93a-11e9-9e02-1d45cb3dfa8f_story.html">régimen de pensiones</a> están avivando gran parte del malestar en Chile, en particular entre la juventud y las personas mayores. Las protestas han causado al menos 20 muertos y miles de heridos, en medio de acusaciones de <a href="https://www.theguardian.com/world/2019/oct/24/chile-protests-human-rights-un-investigation">violencia ejercida por el Estado</a>.</p>
<p>Afortunadamente, Brasil y Argentina, los países más grandes de América del Sur, no están experimentando revueltas de este tipo, a pesar de que ambos países celebraron recientemente elecciones que pusieron de relieve la profunda división del electorado.</p>
<figure class="align-right ">
<img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/301111/original/file-20191111-194669-1o0fytt.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=237&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/301111/original/file-20191111-194669-1o0fytt.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/301111/original/file-20191111-194669-1o0fytt.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/301111/original/file-20191111-194669-1o0fytt.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/301111/original/file-20191111-194669-1o0fytt.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/301111/original/file-20191111-194669-1o0fytt.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/301111/original/file-20191111-194669-1o0fytt.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px">
<figcaption>
<span class="caption">El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, sonríe en un acto celebrado en Brasilia (Brasil) en octubre de 2019.</span>
<span class="attribution"><span class="source">(AP Photo/Eraldo Peres)</span></span>
</figcaption>
</figure>
<p>En octubre de 2018 Brasil eligió al derechista <a href="https://www.cnn.com/2018/10/28/americas/brazil-election/index.html">Jair Bolsonaro</a>, antiguo capitán del ejército. El antiguo congresista venció al candidato de la izquierda, en la que fue la primera derrota del Partido de los Trabajadores desde 1998.</p>
<p>Al margen de la derrota y el desgaste causado por varios escándalos de corrupción, <a href="https://www.bbc.com/news/world-latin-america-46013408">los partidos de izquierda de Brasil</a> todavía ocupan un gran número de escaños en el Parlamento y de puestos de gobernador en los estados. </p>
<p>En Argentina, la reciente elección de <a href="https://www.dw.com/en/alberto-fernandez-wins-argentine-presidential-election/a-51011631">Alberto Fernández</a> ha devuelto al poder al partido de izquierda de la expresidenta Cristina F. de Kirchner, que se convirtió en vicepresidenta. Aun derrotado, el exlíder Mauricio Macri recibió un 41,7% de los votos, lo que muestra que, al igual que en Brasil, la oposición contra Fernández es fuerte. </p>
<h2>Posibles consecuencias</h2>
<p>El recrudecimiento de los disturbios en América del Sur presenta algunas similitudes entre los distintos países.</p>
<p>La mayoría de los disturbios comenzó por causas de menor importancia, como el aumento de las tarifas de los autobuses o el metro, pero están relacionados con problemas más amplios de política pública, como la corrupción, el acceso a la educación, la atención sanitaria o las pensiones. <a href="https://www.bloomberg.com/news/articles/2018-06-05/south-american-economies-dive-south-as-growth-outlook-dims">Los problemas económicos</a> han tenido una incidencia considerable en la insatisfacción generalizada. </p>
<p>Los sólidos indicadores económicos registrados en años anteriores en América del Sur <a href="https://www.reuters.com/article/us-latam-economics-recession-analysis/latin-america-lacks-ammunition-to-fight-global-economic-slowdown-idUSKCN1VA1YH">se han debilitado</a>. En muchos países se ha empezado a observar un bajo aumento del producto interior bruto y un alto nivel de desempleo. </p>
<p>Incluso Chile está viendo rebajadas sus perspectivas económicas. Con frecuencia se considera que el país constituye <a href="https://www.theglobeandmail.com/opinion/editorials/chiles-ascent-from-3rd-to-1st-world/article12298793/">la primera nación desarrollada de Latinoamérica</a>. Es algo pronto para decir si los recientes acontecimientos podrían cambiar esa situación. </p>
<p>Ya <a href="https://www.usnews.com/news/best-countries/articles/2019-10-24/protests-across-south-america-unleash-public-anger-at-elected-leaders">están empezando a establecerse comparaciones</a> entre los disturbios de América del Sur con la Primavera Árabe, la ola de manifestaciones a favor de la democracia que tuvieron lugar en el Norte de África y el Oriente Medio. </p>
<p><a href="https://www.theguardian.com/world/2018/dec/30/arab-spring-aftermath-syria-tunisia-egypt-yemen-libya">En 2010 y 2011</a> la Primavera Árabe impulsó la caída de los presidentes autocráticos de Egipto, Túnez y Libia, y generó una guerra civil en Yemen. </p>
<p>Aunque existen similitudes, los países de América del Sur son en gran medida democráticos, si bien es cierto que algunas de esas democracias adolecen de fragilidad. En las últimas elecciones celebradas en América del Sur, los electores han decidido su voto entre partidos de izquierda y de derecha.</p>
<p>Las próximas semanas determinarán cuál será la repercusión de estas reacciones colectivas. A pesar de la cantidad de riqueza natural que posee la región, la inestabilidad obedece normalmente a crisis económicas, que se traducen en protestas civiles masivas como las que estamos presenciando en estos momentos.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/127045/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Lenin Cavalcanti Guerra no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>En el último siglo, varios países sudamericanos se enfrentaron a golpes de estado, dictaduras militares y levantamientos sociales. A pesar de las mejoras económicas de los últimos años, el continente sigue padeciendo revueltas.Lenin Cavalcanti Guerra, Post-Doctoral Fellow, Johnson Shoyama Graduate School of Public Policy, University of SaskatchewanLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.