Los “humanos” anatómicamente modernos se cruzaron con los denisovanos en su travesía tras salir de África. Este hecho hizo que, muy probablemente, poseamos en nuestro material genético restos tanto de neandertales como de denisovanos.
En una carta dirigida al botánico Joseph Dalton, Charles Darwin confesó su crimen: había encontrado una explicación a la evolución de las especies que resquebrajaba los cimientos de la religión.
Durante la evolución, grupos filogenéticamente tan distantes como los ornitorrincos y miles de peces perdieron el estómago. Cabe plantear dos hipótesis genético-nutricionales para explicarlo.
Los microbios son tan diminutos que los humanos no pueden verlos sin un equipo especial. Pero el descubrimiento de 20 nuevas especies ayudará a los científicos a trazar el árbol evolutivo de la vida.
Es asombroso comprobar lo fácil que le resulta parir a las hembras de mamíferos. ¿Por qué el parto humano es entonces tan doloroso? Fundamentalmente por dos razones evolutivas: nos pusimos de pie y nos creció la cabeza.
El 8 de enero se cumplió el 200 aniversario del nacimiento de Alfred Russel Wallace, quien contribuyó de forma trascendental a la ciencia natural y fue un ejemplo de perseverancia y compromiso social.
Habiendo miles de productos de diferente naturaleza y categoría para regalar en Navidad, el bombardeo publicitario se centra masivamente en la industria del perfume. Y puede tener una explicación científica.
Es vital conocer a fondo cómo evolucionan las bacterias para evitar que desarrollen resistencias a los antibióticos, un problema sanitario de primera magnitud.
Desde la biología, quizás podríamos reproducirnos con cualquier persona disponible sin necesidad de enamorarnos (y del riesgo de sufrir). ¿Por qué entonces nuestra evolución ha creado el amor?
Los mamíferos conquistamos el planeta gracias al desarrollo de dientes especializados, leche y pelo. También gracias a un meteorito que provocó una extinción masiva y dejó nichos libres para conquistar.
Cuando contraemos la gripe, el sida o la covid-19 no nos infecta una sola variante o subvariante, sino muchas. Y encima, no paran de cambiar y evolucionar. ¿Pueden los científicos aventurar y adelantarse a esos cambios?
Posiblemente ni las embarazadas ni la mayoría de sus ginecólogos sepan que las técnicas de diagnóstico prenatal son posibles, en última instancia, gracias a la herencia de nuestros antepasados reptilianos.
Svante pääbo, Premio Nobel de Medicina, se sacó de la nada toda una especialidad científica, a caballo entre la paleontología y la genética, que se beneficia de los avances en los dos campos. No cabe dudar de que ha realizado una proeza.
En todas las culturas, razas y momentos históricos las mujeres viven más que los hombres. ¿Por qué? Pasa también en otras especies y, en general, tiene que ver con las estrategias reproductivas de ambos sexos.
Muchos europeos y asiáticos tienen entre un 1% y un 4% de ADN neandertal. Con una población mundial actual de unos 8.000 millones de personas, nunca ha habido más ADN neandertal en la Tierra.
La hipótesis de si Darwin leyó el trabajo del fraile agustino es atractiva porque hubiera acelerado el desarrollo de la biología moderna. Por desgracia, no hay ninguna evidencia de que así fuera.
Los seres humanos almacenan, especialmente las mujeres, mucha más grasa que los demás simios. Una vez almacenada esa grasa, es tremendamente difícil deshacerse de ella.
Si pudiéramos dar marcha atrás en el tiempo, y todo volviera a empezar, ¿el mundo estaría poblado por las mismas especies? ¿Está todo determinado, o el azar juega un papel fundamental?
Profesor vinculado "ad honorem". Grupo de investigación 'Ciencia, Vida y Sociedad'. Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Instituto de Filosofía (IFS-CSIC)