El autor reflexiona sobre la necesidad de una respuesta global a la crisis del COVID-19 que, como otras enfermedades anteriores, hará de potente palanca histórica para cambiar profundamente los cimientos de la sociedad.
Esta industria cultural factura en dos dígitos desde hace años en España, que es uno de los mercados más importantes del mundo. Innovación, emprendimiento, tecnología y cultura son componentes clave en este sector.
Las humanidades digitales abren nuevas posibilidades de trabajo con herramientas tecnológicas que permiten a los humanistas pensar en términos de datos o cuantificación. Esta labor práctica inaugura asimismo miradas críticas que pueden colaborar con una mejor comprensión del pasado y del presente mediado por la tecnología.
Las Humanidades digitales se forman en el diálogo entre las disciplinas de las humanidades, las ciencias sociales, los medios digitales y la computación. Prometen nuevas formas de acceder, estudiar y divulgar el pasado, la lengua y la cultura humana. Pero el desarrollo del campo implica variados retos en contextos de brechas digitales profundas como es el caso de América Latina.
Los avances en inteligencia artificial llegan hasta tal extremo que las máquinas son capaces de crear obras por sí solas. ¿Debe el ordenamiento proteger dichas obras? ¿A quién pertenece su titularidad: a la máquina, a la persona detrás de la máquina o a nadie? La regulación de esta cuestión requiere de normas jurídicas flexibles.
¿Cómo educar e investigar en la IV Revolución Industrial? ¿Deben tener prioridad las ciencias duras (ciencias, tecnología, ingenierías y matemáticas, STEM) sobre las ciencias blandas, sociales y humanísticas? Este artículo repasa el coste y el impacto de una supuesta neutralidad ética y aboga por un nuevo contrato social que integre unas y otras.
“Me resulta muy complicado discernir lo virtual y lo real”, reconoce Mónica Nepote, cuya labor consiste en promover la literatura electrónica, nuevos formatos y soportes para el libro. Le preocupan los sesgos que introducen los algoritmos y la inteligencia artificial y subraya la necesidad de que los pensadores y los artistas se zambullan en el aprendizaje de las herramientas tecnológicas para que el progreso nos conduzca hacia un mundo más humano.
Santiago Muñoz Machado se ha marcado como objetivo como director de la Real Academia Española que la institución “lidere la transformación o el afianzamiento del español, con 570 millones de hablantes, como una lengua de ciencia y tecnología”.
El modelo de negocio dominante en la industria digital no prefigura un futuro tecnológico emancipador. La dietética digital plantea una desconexión parcial y temporal, necesaria para reprogramarnos y reconectarnos.
Es el siguiente estadio para operadoras y empresas del sector tecnológico y la base de la red llamada a unificar y dar coherencia a la IV Revolución Industrial.
El ‘big data’ es una herramienta muy potente para los investigadores, pero deben considerar los aspectos éticos de su utilización y su responsabilidad en la protección de los datos.
La emprendedora colombiana, pionera del audiolibro en español, protagoniza la portada de la resvista TELOS 111. Juliana Rueda quiere disfrutar la oportunidad de construir un futuro en el que las máquinas hablen como lo hacemos los humanos.
El buen comunicador es aquel que sabe cómo transmitir sus mensajes. Ser efectivo requiere entrenamiento. La voz es la herramienta más importante de comunicación del ser humano.