Dado el elevado número de infecciones y hospitalizaciones producidos por los virus de las gripe entre menores de cinco años, cuesta entender que la tasa de vacunación sea todavía tan baja en ese grupo de población.
Nuevo desarrollo en materiales para acabar con los virus y bacterias, responsables de gripes y resfriados, que se propagan por los conductos de la calefacción y el aire acondicionado.
La obligatoriedad de las mascarillas en los centros sanitarios españoles reabre el debate sobre su eficacia. Sin embargo, su capacidad para reducir las posibilidades de contraer una infección respiratoria está fuera de toda duda.
Estamos justo en el momento del incremento de la curva de infecciones de gripe, que este año ha coincidido con la Navidad y el aumento de los contactos sociales. El Ministerio de Sanidad acaba de establecer como obligatorio el uso de mascarillas en hospitales y centros de salud.
La gripe debilita parcialmente nuestro sistema inmune, causando daños en el tracto respiratorio que algunas bacterias aprovechan para hacer también de las suyas.
Superar infecciones adiestra al sistema inmune para enfrentarse no solo a otras enfermedades infecciosas, sino también al cáncer. Un experimento lo ha puesto a prueba con ratones a los que se inoculó el virus de la gripe.
Durante los meses fríos del invierno, es habitual encadenar infecciones, generalmente respiratorias, una tras otra y es inevitable hacernos la pregunta de si tendremos un sistema inmunitario potente o si, por el contrario, tanta infección es consecuencia de su mal funcionamiento.
Los datos disponibles indican que este año no hay mayor número de infecciones respiratorias, ni más graves, ni tampoco provocan mayor mortalidad. Lo que sí ha cambiado es la actitud de la población, que busca atención sanitaria con más frecuencia que antes de la pandemia.
Vicente Soriano, UNIR - Universidad Internacional de La Rioja
Además del sida y la covid-19, en estos momentos hay brotes epidémicos de otras seis infecciones humanas: gripe, VRS, polio, Ébola, viruela del mono y cólera.
Los casos de enfermedad estreptocócica invasiva del grupo A (iGAS) entre niños menores de 10 años de edad han aumentado desde septiembre en Francia, Irlanda, los Países Bajos, Suecia y el Reino Unido. En España se observa un número inusualmente elevado de casos graves. Las infecciones pueden progresar rápidamente, por lo que, ante la aparición de los síntomas iniciales, conviene solicitar atención médica inmediata.
Un nuevo modelo de vacuna ofrece resultados muy alentadores frente a las mutaciones del virus de la gripe, cuya capacidad camaleónica obliga a cambiar la composición de las inmunizaciones todos los inviernos.
No, la vitamina C no previene la gripe, ni siquiera reduce sus síntomas directos. Sin embargo, todo apunta a que este antioxidante sí reduce las secuelas por la inflamación derivada de la infección por el virus.
Cuando contraemos la gripe, el sida o la covid-19 no nos infecta una sola variante o subvariante, sino muchas. Y encima, no paran de cambiar y evolucionar. ¿Pueden los científicos aventurar y adelantarse a esos cambios?
Desde 2021, a la administración de la vacuna de la gripe se ha sumado la de la covid-19. En algunos rangos de edad, ambas se inyectan el mismo día y las dudas sobrevuelan las consultas: ¿Cuál me pongo? ¿Son compatibles? ¿Me pasará algo si me las inoculan a la vez?
Ahora que el cuarto invierno pandémico está a las puertas del hemisferio norte, ¿qué podemos esperar? La incertidumbre no se centra tanto en si tendremos un repunte de infecciones, que es muy probable, como en cuántos casos graves va a producir.
La proverbial capacidad de mutar del virus de la gripe obliga a diseñar vacunas nuevas todos los años, que además no brillan por su eficacia. Nuevos avances apuntan a que no muy tarde podría diseñarse la inmunización definitiva.
La covid-19 borró del mapa a otras enfermedades más habituales durante dos años. Ahora, preocupa que nuestro sistema inmune haya perdido práctica contra otros virus y seamos más vulnerables.
Algunos virus han pasado de desaparecer durante la pandemia a volverse (y volvernos) locos. ¿Es que la falta de exposición en pandemia nos ha vuelto susceptibles a nivel inmune? ¿O es una cuestión de atención y estamos sobredetectando?
Llega el momento de no bajar la guardia, de seguir echando la carne en el asador y de esperar que las altas coberturas vacunales logradas frente a la gripe en estos dos últimos años protejan a la gente más vulnerable.
Catedrático del área de Biología Celular. Investigador asociado del Centro Andaluz de Biología del Desarrollo. Investigador en metabolismo, envejecimiento y sistemas inmunológicos y antioxidantes., Universidad Pablo de Olavide
Científica del CSIC. Bioquímica de Sistemas de la división bacteriana. Comunicadora científica, Centro de Investigaciones Biológicas Margarita Salas (CIB - CSIC)