El Centro de Astrobiología (CAB) es un centro español de investigación en astrobiología, dependiente tanto del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA) como del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Tiene sedes en el campus del INTA, en Torrejón de Ardoz (Madrid) y en el Centro Europeo de Astronomía Espacial (ESAC).
Es el primer centro de investigación no estadounidense asociado al NASA Astrobiology Institute (NAI), dependiente de la NASA.
Departamentos:
Astrofísica: Estudia los procesos que fueron necesarios para la aparición y evolución de la vida en el Universo.
Evolución Molecular: Se dedica al estudio la evolución de la materia y energía en el Universo en relación al fenómeno de la vida.
Planetología y Habitabilidad: Sus actividades se desarrollan siguiendo principalmente tres líneas de investigación: la geología planetaria; los ambientes extremos como hábitats de interés astrobiológico, y las atmósferas planetarias.
Instrumentación Avanzada: Se encarga de desarrollar plataformas e instrumentos especiales en los laboratorios de Robótica e Instrumentación del centro.
La evolución es un hecho indiscutible. La vida que existe en la Tierra está en continuo cambio. Negarlo por falta de conocimiento no puede sino alimentar teorías que dificultan el avance científico y el progreso de la sociedad.
La Universidad ha sido y es un lugar esencial para la ampliación del conocimiento, la formación de ciudadanos integrales y de nuevas generaciones de intelectuales. Así ha sido su apasionante recorrido desde el siglo XII hasta hoy.
Aunque solo sea por egoísmo, hay que mirar de frente a India y colaborar para frenar allí la pandemia. Cada nueva infección supone una oportunidad para que surjan nuevas combinaciones de mutaciones que sean favorables al virus.
¿Se dejaría inmunizar con las vacunas de Janssen y AstraZeneca? Varios de los principales especialistas en epidemiología, inmunología, vacunología, virología y salud pública responden.
Si los virus mutan continuamente, ¿por qué es ahora cuando parece haber más variantes del SARS-CoV-2? Porque le estamos poniendo muchas trabas a su transmisión.
Marte ha proporcionado respuestas a algunos de los grandes enigmas de la ciencia, provocando un profundo impacto en la cultura e impulsando de modo decisivo el avance de la ciencia. Las próximas décadas serán cruciales para su exploración.
Esta molécula ha hecho acto de presencia en las conversaciones cotidianas fruto de las nuevas vacunas contra la COVID-19. Su historia, sin embargo, se remonta a los orígenes de la vida.
Por primera vez, los autores han demostrado de forma directa la presencia de microplásticos en la atmósfera a gran altitud. Estas partículas pueden viajar miles de kilómetros antes de depositarse.
La visión más extendida de los virus es la de meros agentes causantes de enfermedades. Pero los virus son mucho más que eso: han acompañado a la vida desde sus orígenes y han contribuido a moldearla.
¿Tiene o ha tenido Venus las condiciones adecuadas para permitir la existencia de vida? ¿Hasta qué punto podemos afirmar que podemos detectar vida en otros cuerpos del Sistema Solar? ¿Qué implicaciones tendría?
La exploración espacial es una de las grandes epopeyas de la Humanidad. En cualquier caso, el impacto económico por pérdida de satélites y por reentradas incontroladas está siempre presente.
La curva de COVID-19 está en pronunciado descenso. Tanto que podemos caer en la tentación de creer que el virus ya no se contagia. Hay razones para el optimismo, pero aún más para la prudencia.
El autor reflexiona sobre la necesidad de una respuesta global a la crisis del COVID-19 que, como otras enfermedades anteriores, hará de potente palanca histórica para cambiar profundamente los cimientos de la sociedad.
Un escenario probable de futuro es que, en el proceso de selección y mutación del nuevo coronavirus, acaben imponiéndose los mutantes menos agresivos. Y se reduzca su virulencia.
SpaceX planea lanzar 42 000 satélites a nuestra atmósfera en los próximos años, cuando el número actual es de solo 2 000. Los astrónomos serán los primeros en pagarlo.
La diversidad de exoplanetas nos plantea la posibilidad de una expansión interplanetaria ¿Es factible y conveniente? ¿Cómo afectaría a nuestra especie?
Doctora en Ciencias Físicas, Investigadora del Centro de Astrobiología especializada en Modelos Numéricos aplicados a las Ciencias Planetarias, Centro de Astrobiología (INTA-CSIC)