La Química es seguramente la ciencia básica más desconocida por la sociedad. Sin embargo, los estudios sobre los medicamentos y sobre los materiales que forman parte fundamental de nuestro día a día se basan en procesos químicos.
Muchísimos dispositivos que tenemos en casa, en el trabajo, o simples aspectos de la vida cotidiana, se basan en procesos químicos. Pero siempre nos quedamos con la parte final de la historia y no pensamos en la inversión en ciencia básica, en este caso en toda la Química, que está detrás de cualquier actividad, ya sea natural o artificial.
Esta es la razón fundamental por la que quisimos dar visibilidad a la Química, especialmente entre quienes serán el futuro de la sociedad: los jóvenes.
Con el convencimiento de que los estudiantes están interesados en esta materia, nos propusimos demostrarlo.
La selección de alumnos
ESTALQUIM es el acrónimo de EStímulo para el TALento QUÍMico. Son siglas que representan los valores del programa:
Entusiasmo para entrenar la capacidad de experimentación
Sorpresa para desarrollar la creatividad, la química nunca deja indiferente
Trabajo cooperativo entre iguales con otros chicos y chicas con las mismas inquietudes
Aprendizaje activo y lúdico de una disciplina científica
Laboratorio donde se desarrolla el programa
Química, por supuesto, mucho talento químico por desarrollar
Universal, como el lenguaje químico, un programa de acceso gratuito
Inquietud de la gente joven y curiosa
Motivación por venir los sábados a la universidad
Con estas premisas, los 18 alumnos seleccionados están desarrollando el primer año del programa consistente en 13 talleres que se realizan en los laboratorios del Departamento de Química de la Universitat de les Illes Balears.
La selección de los participantes no fue fácil. Con casi 170 inscritos de las Islas Baleares para 18 plazas, fue un reto el confeccionar una prueba para un programa de Química a estudiantes que aún no se han iniciado en la materia. Nuestra prioridad era localizar a los estudiantes interesados en la química, y no solo a los de alto rendimiento, que ya han trabajado curricularmente en los centros educativos con esta disciplina. Por este motivo, el programa se centra en alumnos de segundo de la ESO.
Prueba de competencias
El resultado fue la elaboración de una prueba competencial con la intención de seleccionar a los más interesados en base a sus inquietudes e intereses.
Esta prueba nos ha servido para reflexionar. Algunas de las preguntas han mostrado que incluso en edades tempranas existen algunos conceptos y creencias erróneas que deben corregirse para poder tener una sociedad formada y crítica, sociedad que en general no ha estudiado Química.
Por ejemplo, es muy habitual asociar erróneamente un producto natural con algo positivo y un producto artificial con algo negativo; e incluso considerar un producto químico como venenoso sin tener en cuenta su concentración.
Lo cierto es que pequeñas concentraciones de muchos productos naturales pueden ser perjudiciales para la salud. También es muy habitual achacar a los químicos y, por extensión, a los productos químicos, propiedades y problemáticas no deseadas cuando no podemos olvidar que compuestos de enorme relevancia, como el agua, son productos químicos.
Se trata, por tanto, de asociaciones que probablemente estos chicos han oído o leído a través de los medios de comunicación. Esta circunstancia nos ha permitido plantear una profunda reflexión sobre la Química que queremos o debemos difundir en el siglo XXI.
Los talleres
Nuestros talleres abarcan desde aspectos muy básicos de la Química, como el trabajo con gases, con materiales de diferente densidad, entender las ideas de átomos y jugar con ellos para formar moléculas, hasta talleres más aplicados en los que extraemos aceites esenciales, hacemos un perfume, reciclamos aceite, conocemos cómo se hacían las fotografías y trabajamos con técnicas químicas aplicada a la cocina.
El programa termina con tres talleres dedicados a una Investigación de la Escena de un Crimen (al modo de la serie CSI), un escape room sobre la tabla periódica y un último taller en el que los alumnos serán los conductores e irá dirigido a sus familiares.
Todos los talleres están coordinados por tres profesores, combinando profesorado universitario y no universitario, con un denominador común: dinamismo y que los estudiantes sean los protagonistas.
En el segundo año, estos estudiantes, que ya cursarán tercero de la ESO, serán los encargados, siempre en coordinación con el profesor de Física y Química de su centro educativo y con un profesor de la UIB, de realizar una experiencia demostrativa a sus compañeros de clase y en su propio centro.
Aprender fuera de los centros educativos
Pensar que la educación y la formación son exclusivas de los centros de enseñanza es un error. Incumbe también a las familias, al profesorado y a la sociedad y abarca también actividades no curriculares.
Desde la Facultad de Ciencias de la UIB y de la Asociación de Químicos de las Islas Baleares, organizadores del programa ESTALQUIM, aportamos nuestro granito de arena con este ambicioso programa educativo.