La composición nutricional de pescados como el bonito y la sardina, que pueden ser capturados con un bajo impacto ambiental, ha demostrado tener beneficios, por ejemplo, para reducir el síndrome metabólico.
2023 nos ha traído varios avances en el tratamiento y conocimiento científico de la obesidad, un mal con tintes de pandemia que está asociado a una larga lista de patologías.
Según un muevo estudio, la modalidad de ayuno conocida como restricción de la ventana de ingestas podría tener efectos antiinflamatorios, lo cual ayudaría a tratar enfermedades como la obesidad, la diabetes tipo 2 y la depresión.
Obsesionado con su peso, el poeta inglés Lord Byron siguió un régimen popular en la época: ingerir grandes cantidades de vinagre. Esta moda llevó a varias personas a la tumba, y a Byron le agravó el trastorno alimenticio que padecía.
Lo que comemos hace proliferar ciertas bacterias intestinales y reduce la presencia de otras. Esta “firma microbiana” puede usarse como referencia para prevenir y tratar enfermedades a través de la alimentación.
Un reciente estudio indica que comer crustáceos, insectos y champiñones puede ayudar a hacer mejor la digestión Se debe a que estos alimentos contienen cantidades importantes de quitina, que actúa como fibra alimentaria.
Ni la dieta del pomelo, ni la de la manzana, la del arroz o la de los cacahuetes. Ninguna es recomendable desde el punto de vista nutricional y pueden causar desde anemia o desnutrición a cambios de humor exacerbados.
La dieta OMAD, cuyos supuestos beneficios son anecdóticos, es muy popular entre muchos famosos, como Bruce Springsteen o Chris Martin, el cantante de Coldplay.
Consumir alcohol solo aporta calorías vacías que repercuten en nuestro equilibrio calórico, incrementando la ingesta total de energía. Y suele asociarse a una dieta de peor calidad.
El ayuno del Ramadán es una de las formas más antiguas de ayuno intermitente. ¿Es bueno para la salud física? ¿Y para la salud mental? ¿Implica una nutrición deficitaria temporal?
Incorporando ciertos ingredientes como quinoa y chía es efectivamente posible elaborar galletas ayuden a combatir la obesidad y las enfermedades vinculadas a ella.
Popularizado por la actriz Ethel Barrymore en los años 20, el régimen de adelgazamiento que se basa en el consumo del cítrico puede ser nocivo para la salud.
Los niveles altos de triglicéridos no siempre indican el riesgo de sufrir ciertas enfermedades. Hay casos en que la biología del paciente le juega una mala pasada y le alerta sin necesidad. Una mutación genética tiene la culpa.
Está fuera de discusión que aumentar la proporción de alimentos vegetales en la dieta mejora nuestra salud y la del planeta, pero siempre que estos sean de calidad.
Además de seguir una dieta saludable, los futbolistas tienen que hacer frente a las altas temperaturas cataríes con alimentos que favorezcan la hidratación; sobre todo, frutas y verduras.
Siobhan Glavey, RCSI University of Medicine and Health Sciences
Sabemos que para reducir el riesgo de contraer cáncer debemos dejar de fumar, mantenernos en forma, y dormir lo suficiente. Pero ¿y si gran parte de lo que causa el cáncer ya ocurrió en nuestros primeros años de vida?
Profesora Titular de Nutrición y Bromatología - Directora del proyecto BADALI, web de Nutrición. Instituto de Bioingeniería, Universidad Miguel Hernández
Catedrática de Nutrición. Centro de Investigación Biomédica en Red de la Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición (CIBERobn), Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
Profesor en la Universidad del País Vasco. Investigador del grupo Nutrición y Obesidad del Centro de Investigación Biomédica en Red de la Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición (CiberObn) y del Instituto de Investigación Sanitaria Bioaraba, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
Profesora Contratada Doctora del Departamento de Enfermería y Fisioterapia. Directora del Experto Universitario en Vegetarianismo y Planificación dietética en alimentación vegetariana, Universitat de les Illes Balears