Cada idioma tiene una musicalidad característica que permite distinguir a sus hablantes nativos. Conocerla es muy útil para los aprendices de segundas lenguas.
Pese a ser transparente, el español presenta varios desafíos ortográficos para nativos y no nativos. ¿Cómo diferenciamos entre ola y hola? ¿Se escribe auyar o aullar? ¿Por qué se escribe jirafa y no girafa?
La diferencia entre ser y estar resulta obvia e intuitiva para los hablantes nativos; para los aprendices de español cuyas lenguas no tienen más que un verbo que engloba ambos conceptos es un desafío.
Enseñar español en un país extranjero puede ser una experiencia enriquecedora que amplía horizontes profesionales y personales. Hay diferentes vías para lograrlo.
¿Cómo se enseña español para un ámbito profesional específico? Los aprendices exigen cada vez mayor especialización. La enseñanza del español como lengua extranjera se moderniza.
De las 336 escuelas oficiales de idiomas que hay en España solo 68, alrededor del 20%, ofrecen cursos de español para extranjeros. Aumentar la oferta de español para extranjeros facilitaría la integración de los inmigrantes no hispanohablantes.
Director del Centro de Investigación Nebrija en Cognición (CINC) y Director de la International Chair in Cognitive Health (ICCH) en la Universidad Nebrija, Universidad Nebrija