tag:theconversation.com,2011:/us/topics/parlamento-europeo-70696/articlesParlamento Europeo – The Conversation2023-01-05T18:31:32Ztag:theconversation.com,2011:article/1972692023-01-05T18:31:32Z2023-01-05T18:31:32ZAlgo huele a podrido en el Parlamento Europeo<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/503194/original/file-20230105-16-tq3232.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C1298%2C6240%2C2849&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">
</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-photo/european-flags-flap-wind-outside-eu-1913452870">Shutterstock / Alexandros Michailidis</a></span></figcaption></figure><p>El <a href="https://www.bbc.com/news/world-europe-63941509">escándalo de presuntas corruptelas y compra de favores que asola al Parlamento Europeo</a> ha colocado a esta institución, una de las claves de bóveda del equilibrio institucional de la Unión Europea y expresión máxima del principio democrático, en una delicadísima situación sin precedentes. La sospecha de que <a href="https://www.france24.com/es/europa/20221216-qatargate-corrupcion-parlamento-europeo-qatar-marruecos">los gobiernos de Qatar y Marruecos han sobornado a miembros del Parlamento Europeo</a> –empezando por su carismática vicepresidenta, <a href="https://www.bbc.com/news/world-europe-63921002">Eva Kaili</a>, europarlamentaria griega adscrita a grupo de los socialdemócratas–, se hizo pública en el contexto de unas investigaciones llevadas a cabo por la policía belga.</p>
<p>En efecto, la policía se incautó de un total de un millón y medio de euros guardados en bolsas en la casa del supuesto líder de la trama corrupta, el antiguo europarlamentario socialista <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Pier_Antonio_Panzeri">Pier Antonio Panzeri</a>, así como que en la vivienda de la ya exvicepresidenta Eva Kaili, <a href="https://www.europarl.europa.eu/news/es/press-room/20221213IPR64610/eva-kaili-cesada-como-vicepresidenta-del-parlamento-europeo">destituida el pasado 13 de diciembre por el Parlamento Europeo</a>. Igualmente, la policía implica a su padre y a su pareja y asistente parlamentario Francesco Giorgi, y la trama parece extenderse a decenas de parlamentarios, siendo el foco de atención de la policía la ONG Fight Impunity, fundada hace tres años por Panzeri, que ocultaba, tras su declarado objetivo de luchar contra la impunidad frente a las violaciones de Derechos Humanos, otras finalidades menos filantrópicas.</p>
<h2>Consecuencias para la Unión Europea</h2>
<p>Hasta aquí los hechos, aunque las noticias no dejan de sucederse y aún estamos lejos de conocer el verdadero alcance de esta supuesta trama. Y estos hechos han provocado un verdadero terremoto en la Unión Europea cuyo epicentro se sitúa en su núcleo de legitimidad democrática, generando un desconcierto generalizado ante el que se ha de responder con serenidad y firmeza, ya que son diversos los frentes que se abren y que merecen nuestra atención.</p>
<p>En primer lugar, el Parlamento Europeo queda herido de consideración; de la reacción del propio Parlamento y del resto de las instituciones dependerá que la herida cicatrice adecuadamente. Porque, en efecto, el prestigio de una institución crucial en el edificio jurídico y político de la unión está en juego. Cierto es que tradicionalmente el Parlamento ha sido maltratado por la política partidista, convertido en cementerio de elefantes o postergado en la jerarquía de intereses de los partidos nacionales. Tampoco la ciudadanía ha terminado de ser consciente del grado de importancia que hoy posee, algo a lo quizás no es ajena la propia institución, incapaz de hacer valer su peso político ante una ciudadanía que ha acudido con frialdad a las citas electorales europeas, siendo así que, salvo un ligero repunte en los últimos años, <a href="https://www.europarl.europa.eu/election-results-2019/es/participacion/">el nivel de participación en los comicios europeos ha venido disminuyendo paulatinamente</a> desde las primeras elecciones que tuvieron lugar en 1979.</p>
<h2>El Parlamento de Europa</h2>
<p>Pero lo cierto es que si ha habido una institución que ha ido ganando poder y peso en el juego político de la Unión Europea a lo largo de los años ha sido el Parlamento. Tras el <a href="https://www.europarl.europa.eu/about-parliament/es/powers-and-procedures/the-lisbon-treaty">Tratado de Lisboa</a>, su papel fundamental, codo a codo con el Consejo en el procedimiento legislativo ordinario, o en el procedimiento presupuestario, por mencionar dos ejemplos paradigmáticos, pone de manifiesto su relevancia en la toma de decisiones en el tablero europeo. La Unión, pese a sus deficiencias y déficits, ha devenido en el único sujeto de Derecho Internacional con un parlamento supranacional con relevantes funciones decisorias que es elegido directamente por los ciudadanos. Por todo ello, un Parlamento minado por la sospecha de corrupción generalizada, el tráfico de favores, y la injerencia de países extranjeros ajenos en buena medida a los valores preconizados por el <a href="https://www.europarl.europa.eu/factsheets/es/sheet/146/la-proteccion-de-los-valores-del-articulo-2-del-tratado-de-la-union-europea">artículo 2 del Tratado de la Unión Europea</a>, puede suponer, si no se actúa sensata y decididamente, una verdadera carga de profundidad en la línea de flotación de la legitimidad democrática de la Unión.</p>
<p>Es verdad que la corrupción es una vieja conocida de la Unión Europea. Desde <a href="https://multimedia.europarl.europa.eu/es/video/history-fall-of-the-santer-commission_V001-0004">la dimisión de la Comisión Santer en 1999</a> –el Grupo de Sabios que investigó las irregularidades exoneró al colegio de comisarios de actos corruptos, aunque censuró sus mecanismos de gestión y control– hasta hoy la Unión Europea no se ha librado de un fenómeno que no conoce fronteras. Pero es la primera vez que afecta de una manera sustancial al Parlamento, y, por añadidura, el hecho de que terceros Estados ejerzan su actividad lobista a cambio de sobornos ante la inacción del propio Parlamento –recordemos que ha sido la policía belga la que ha destapado el asunto– agrava aún más la situación. Que actores extranjeros ejerzan mecanismos de <em>soft power</em> y desplieguen redes de influencia para hacer valer sus intereses es una cosa. Que europarlamentarios reciban dinero a cambio a alabar la legislación laboral de Qatar, o defender el estatuto de autonomía de un Sahara bajo la soberanía de Marruecos es algo muy distinto.</p>
<h2>Transparencia y regulación</h2>
<p>La <a href="https://theconversation.com/los-lobbies-en-espana-grupos-de-presion-politica-con-muchas-lagunas-de-regulacion-190960">actividad lobista</a> es una realidad insoslayable en Bruselas, y ya supera cuantitativamente a la de Washington. <a href="https://www.europarl.europa.eu/at-your-service/files/transparency-and-ethics/lobby-groups/en-annual-report-on-the-operations-of-the-transparency-register-2021.pdf">Por cada uno de los 705 europarlamentarios hay 17 lobistas inscritos en Bruselas</a>. Pretender impedir esta actividad sería poner puertas al campo: la interacción entre sociedad civil y poder público no es de suyo indeseable, pero debe estar mejor regulada, y ser más transparente. La Unión posee desde 2011 un <a href="https://www.europarl.europa.eu/at-your-service/en/transparency/lobby-groups">registro voluntario de grupos de interés</a>, que ha venido siendo obligatorio solo para determinadas cuestiones, como la solicitud de una tarjeta para el acceso al Parlamento Europeo. En 2021 un <a href="https://eur-lex.europa.eu/legal-content/ES/TXT/HTML/?uri=CELEX:32021Q0611(01)&from=EN">acuerdo interinstitucional tripartito</a> entre Parlamento, Comisión y Consejo realiza importantes reformas sobre este registro, entre otras la de dotarlo de carácter obligatorio. En todo caso, aquellas actividades desempeñadas por autoridades de terceros países quedan excluidas del registro de transparencia.</p>
<p>Por eso tanto la presidenta de la Comisión como la del Parlamento se han comprometido a emprender un conjunto de reformas para mejorar la transparencia institucional, incluyendo un control estricto de los contactos de los diputados. Es una medida positiva, pero no suficiente. Se hace necesario un firme golpe de timón que muestre a las claras el compromiso con la limpieza de las instituciones europeas, solo así se podrán restañar las heridas infligidas por este turbio asunto.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/197269/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Antonio Díaz Narváez no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>El escándalo de corrupción en el Parlamento Europeo han provocado un verdadero terremoto en la Unión Europea cuyo epicentro se sitúa en su núcleo de legitimidad democrática.Antonio Díaz Narváez, Profesor Doctor Derecho Internacional Público, Universidad Pontificia Comillas, Universidad Pontificia ComillasLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1830062022-05-29T18:00:12Z2022-05-29T18:00:12ZCuando secretos de Estado y espionaje chocan contra los derechos fundamentales<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/464855/original/file-20220523-29403-kedgtu.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=13%2C605%2C2913%2C1439&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">
</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-vector/man-spy-suit-hat-casting-shadow-2145648187">Shutterstock / Macrovector</a></span></figcaption></figure><p>En todos los Estados democráticos de derecho se plantea desde siempre una compleja cuestión: delimitar las funciones, límites, controles y garantías en la actuación de los servicios de inteligencia. Es decir, se plantea el desafío de compatibilizar las exigencias de publicidad, transparencia, libertad de información y expresión con el <a href="https://gredos.usal.es/bitstream/handle/10366/144886/TG_Garc%C3%ADaNovoa_Secreto.pdf?sequence=1&isAllowed=y">secreto de Estado</a>. Y también la exigencia de mantener el estándar mínimo de ejercicio y tutela de los derechos fundamentales, pero sin que ello comporte debilitar las necesidades de seguridad. </p>
<p>La solución no es sencilla, ni unívoca. El reto es mayúsculo. Los avances hacia un equilibrio aceptable son escasos. La “<a href="https://rseap.webs.upv.es/Anales/99_00/A_257_La_razon_de_estado.pdf">razón de Estado</a>” pesa sobremanera, y suele imponerse a los derechos individuales. Así, la balanza suele decantarse a favor de la difusa categoría de seguridad nacional que exige sacrificios en libertades, derechos y garantías constitucionales. No olvidemos que hablamos del núcleo del poder, de la soberanía, del dominio, de los últimos recursos de las decisiones políticas domésticas e internacionales.</p>
<p>Aun así, con todas estas dificultades, debilidades e imperfecciones me siento afortunado por poder abordar estas cuestiones. Los súbditos de Estados autoritarios ni siquiera pueden pensar en estos problemas.</p>
<p>La categoría de <a href="http://www.phlaw.com/es/publicacion/541/el-estado-social-democratico-derecho-como-fenomeno-conceptual">Estado democrático de derecho</a> permite graduarla. Por tanto, en su seno caben diferentes estadios de desarrollo. Precisamente en este campo encontramos un excelente termómetro para medir la profundidad de la cultura democrática y de sometimiento de todos a las leyes. De controles materiales y reales, frente a controles aparentes o meramente formales. </p>
<h2>El control sobre el espionaje</h2>
<p>Indudablemente, en las últimas décadas se ha avanzado hacia <a href="https://www.boe.es/buscar/act.php?id=BOE-A-2002-8628">regulaciones más específicas</a>, posibilitando una mejora de los <a href="https://www.boe.es/buscar/doc.php?id=BOE-A-2013-3907">diferentes controles</a> sobre los <a href="https://ddd.uab.cat/pub/tfg/2015/133119/TFG_nlachicaprieto.pdf">servicios de inteligencia</a>. Se aprecia tanto en los controles internos (gubernamentales), como en los externos: parlamentario, judicial, defensor del pueblo o de otra clase de autoridades independientes. También del control ejercido por la opinión pública a través de los medios de comunicación y de las investigaciones académicas. </p>
<p>Sin embargo, el balance comienza a oscurecerse por varias razones. Los gobiernos de los países democráticos advierten que, en un mundo global, persiste la existencia de variopintas clases de enemigos, adversarios y competidores. No todos actúan sujetos a exigencias democráticas. Unos siguen siendo Estados, otros son corporaciones, grupos terroristas u organizaciones criminales transnacionales. Aquí reside la primera “excusa” de nuestros gobiernos para mantener, e incluso aumentar, la clasificación de informaciones y justificar actuaciones cuanto menos altamente dudosas con las exigencias constitucionales. </p>
<p>La segunda se apoya en la desenfrenada expansión de la categoría de <a href="https://www.dsn.gob.es/es/sistema-seguridad-nacional/qu%C3%A9-es-seguridad-nacional">seguridad nacional</a>, tan difusa como creciente y líquida. Esta expansión, anudada a la idea de riesgo, defensa preventiva y anticipación, posibilita a los Estados ampliar sus intervenciones, dentro y fuera de sus fronteras, casi sin limitación alguna.</p>
<p>Pero a las dos razones anteriores se añade una determinante: la obsolescencia de unos controles diseñados en y para la era analógica. En la actualidad, aquellos controles resultan abiertamente insuficientes y hasta anacrónicos. Esta idea se repite en los diferentes informes emitidos dentro del área mundial más sensibilizada y avanzada en la necesidad de caminar hacia la transición de todos los derechos humanos a la era digital. Me refiero especialmente a los precisos estudios del Parlamento de la UE.</p>
<p>Las denuncias de intromisiones ilimitadas, la vigilancia por defecto, se remontan a los ya superados tecnológicamente programas <a href="https://www.europarl.europa.eu/doceo/document/E-4-1998-1776_ES.html?redirect">ECHELON</a> o <a href="https://hipertextual.com/2013/06/que-es-prism-claves">PRISM</a>, donde se encendieron las alarmas de un nuevo autoritarismo digital. Pero el reciente informe de mayo de 2022 del Parlamento, apoyado a su vez en las Observaciones Preliminares formuladas este mismo febrero por el <a href="https://european-union.europa.eu/institutions-law-budget/institutions-and-bodies/institutions-and-bodies-profiles/edps_es">Supervisor Europeo de Protección de Datos</a> sobre el <em>spyware</em> moderno y en particular <a href="https://cso.computerworld.es/cibercrimen/pegasus-las-claves-del-software-israeli-que-ha-puesto-en-jaque-al-gobierno-de-espana">sobre el programa Pegasus</a>, resulta demoledor.</p>
<h2>Una definición poco precisa de “seguridad nacional”</h2>
<p>Estos informes reiteran que, en la mayoría de los Estados analizados, la definición tan nebulosa de “seguridad nacional” no satisface las exigencias mínimas de seguridad jurídica. Tampoco pueden garantizar una actuación de los gobiernos y de sus servicios completamente a resguardo de arbitrariedades. Incluso denuncian un insuficiente funcionamiento real de los controles, en particular el ejercido por el poder judicial, que sufre variados obstáculos. </p>
<p>Puede decirse que se trata de las ya clásicas preocupaciones en torno a los <a href="https://oriolfontdevila.net/es/arcana-imperii-investigacions-en-burocracia/"><em>arcani imperi</em></a> (término acuñado por para referirse a los secretos de Estado y del gobierno imperial). Ahora bien, la irrupción de programas como Pegasus comporta un extraordinario salto hacia delante. Porque su potencialidad de intromisión en los derechos fundamentales anudados a la privacidad puede comportar su total anulación tal como los conocemos hasta ahora. Pero, por si esto fuera poco, el citado virus informático igualmente alcanza al contenido esencial de otros derechos, libertades y garantías fundamentales. El estudio refiere las de expresión, información y hasta derechos procesales básicos relativos al derecho a un proceso debido. </p>
<p>El examen no puede dejarnos indiferentes. Muchos de nuestros gobiernos manejan programas que toman el control total de nuestros dispositivos de telecomunicaciones, lo hacen clandestinamente y dificultando seriamente la mera posibilidad, no ya de evitarlo, sino de hasta poder demostrarlo <em>a posteriori</em>. Tampoco queda suficientemente claro dónde se ubican físicamente esos datos y quiénes tienen acceso a toda la información capturada o manipulada ¿Qué juez puede controlar el alcance de esta clase de intromisión?</p>
<p>Tal vez su uso esté justificado muy excepcionalmente por amenazas graves e inminentes. Y tal vez satisfagan las exigencias legales pensadas para la era analógica. Pero lo cierto es que las herramientas de espionaje pertenecen ya a otra época, la era digital. Y el derecho vigente ha quedado obsoleto para desempeñar su función de garantía.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/183006/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>José Luis González Cussac no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>En ocasiones, la democracia choca con las labores que hacen los servicios de inteligencia de muchos países, que bajo el argumento de mantener la seguridad nacional, campan a sus anchas y no respetan derechos fundamentales.José Luis González Cussac, Catedrático de Derecho Penal, Universitat de ValènciaLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1782712022-03-02T16:02:21Z2022-03-02T16:02:21ZLa inesperada respuesta de la UE a la agresión de Rusia sobre Ucrania<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/449321/original/file-20220301-19-1k8gwld.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=26%2C26%2C5964%2C3961&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">El Presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, habló en directo desde Kiev ante el Parlamento Europeo sobre la situación en Ucrania el 1 de marzo de 2022.
</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://multimedia.europarl.europa.eu/es/photo/extraordinary-plenary-session-on-situation-in-ukraine._20220301_EP-127109A_PB7_AH_0045">Philippe BUISSIN / European Union / EP</a></span></figcaption></figure><p>En la madrugada del 24 de febrero de 2022 se produjo la brutal agresión de Rusia sobre el estado soberano de Ucrania, un hecho gravísimo contrario al Derecho Internacional Público que viola de forma total el <a href="https://www.un.org/es/about-us/un-charter/chapter-1">artículo 2 de la Carta de las Naciones Unidas</a>. Esta invasión ha producido ya centenares de fallecidos, miles de heridos y centenares de miles de desplazados y refugiados, además de infinidad de daños materiales y del sufrimiento de la sociedad ucraniana.</p>
<p>¿Por qué Rusia, en la actualidad, amenaza y realiza un movimiento de tropas e invade Ucrania a través del uso de la fuerza completamente desproporcionado y con gran dureza? Rusia se siente amenazada, no por las consecuencias de posibles ataques de fuerzas militares, <a href="https://theconversation.com/como-deben-responder-la-ue-y-la-otan-al-ataque-de-rusia-177851">bien sean de la OTAN o de otros actores internacionales</a>, sino que se siente amenazada por Ucrania y los países de su vecindad, con la excepción de Bielorrusia, ya que estos se están transformando lentamente, pero cada vez más, en democracias aún sin consolidar, pero que tienden a parecerse a las europeas.</p>
<p>La auténtica preocupación no está en posibles despliegues de la OTAN en Ucrania o en los países vecinos. Se encuentra en que Ucrania, Georgia, Moldavia, e incluso Armenia y Azerbaiyán, se vayan acercando a un sistema democrático equivalente al existente en el resto de los países europeos, lo que supondrá, al mismo tiempo, unas relaciones más estrechas entre estos países y los estados europeos. Estas relaciones serán de carácter económico, social y también de libre circulación de mercancías, capitales y personas.</p>
<p>Tampoco le gusta a Rusia el acercamiento de los Balcanes a la Unión Europea, concretamente, el que se incorporen a la UE algunos de ellos como pueden ser, por ejemplo, Serbia y Montenegro, lo cual es probable que ocurra más pronto que tarde. E incluso que se resuelva el enfrentamiento entre Serbia y Kosovo. Asimismo, está apoyando, en gran medida, al Gobierno húngaro de Viktor Orban, con objeto de mantener una tensión añadida en el seno de la Unión Europea.</p>
<h2>El peligro de que los vecinos se acerquen a la democracia</h2>
<p>Es decir, el problema no es que Rusia se sienta amenazada militarmente. No hay ninguna razón para pensar que Ucrania u otros países vecinos, o los Balcanes, o desde luego ningún país europeo, amenace militarmente a Rusia. No está en ningún orden de ideas esta posibilidad, la auténtica amenaza que supone la Unión Europea es el hecho de que para un régimen autocrático como la Federación Rusia sus Estados vecinos se acerquen a la democracia. </p>
<p>Por eso Rusia quiere mantener el viejo sistema de la Guerra Fría de la política de bloques y las “áreas de influencia”, que ahora está fuera de lugar y, por lo tanto, cada Estado soberano puede adoptar el régimen político y la política exterior que considere oportunos.</p>
<h2>Contundente respuesta de la UE</h2>
<p>Posiblemente, las previsiones del Gobierno Ruso no se están logrando y la invasión se está retrasando más de lo que estaba previsto, y esto está poniendo nerviosas a las autoridades del Kremlin. Es lo que explica la alusión a la posibilidad de la utilización de los misiles nucleares de largo alcance, los cuales también se están instalando en Bielorrusia (a pesar de que este era un país neutral y no nuclear) <a href="https://www.efe.com/efe/espana/mundo/la-ue-considera-preocupante-que-bielorrusia-retire-su-neutralidad-nuclear/10001-4749896">gracias a un cambio en la Constitución bielorrusa en menos de 48 horas</a>.</p>
<p>En la planificación de la agresión, posiblemente no se ha tenido en cuenta ni la resistencia del ejercito ni del pueblo ucraniano, ni las decisiones y sanciones contundentes adoptadas por la Unión Europea, por unanimidad, en las cuales han participado los 27 países, incluso Hungría (quien se daba por hecho que iba a vetar estas sanciones). </p>
<h2>Lo que Putin no se esperaba</h2>
<p>Putin y su Gobierno tampoco tuvieron en cuenta que la Unión Europea estableciese sanciones drásticas, que nunca se habían adoptado hasta ahora, consistentes en las medidas económicas, cierre del espacio aéreo, la <a href="https://www.efe.com/efe/espana/economia/occidente-expulsa-a-bancos-rusos-del-sistema-financiero-global-swift/10003-4749258">exclusión parcial de Rusia del Código SWIFT</a> para transferencias internacionales, el cierre del espacio aéreo a las compañías rusas o la decisión de <a href="https://www.efe.com/efe/espana/mundo/borrell-propone-financiar-con-fondos-comunes-material-letal-en-apoyo-ucrania/10001-4749353">financiar mediante el Fondo Europeo de Apoyo a la Paz</a> con dos grandes bloques la compra de armamento militar y de armamento defensivo pacífico (como chalecos antibalas), aprobados el 28 de febrero.</p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/449323/original/file-20220301-21-1sa621c.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/449323/original/file-20220301-21-1sa621c.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/449323/original/file-20220301-21-1sa621c.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/449323/original/file-20220301-21-1sa621c.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/449323/original/file-20220301-21-1sa621c.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/449323/original/file-20220301-21-1sa621c.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/449323/original/file-20220301-21-1sa621c.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/449323/original/file-20220301-21-1sa621c.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
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<span class="caption">Josep Borrell, vicepresidente de la Comisión Europea y Alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, durante su intervención en el Parlamento Europeo el 1 de marzo de 2022.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://multimedia.europarl.europa.eu/es/photo/extraordinary-plenary-session-on-situation-in-ukraine_20220301_EP-127109A_AH1_EG_309">Alexis HAULOT / European Union / EP</a></span>
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<p>Quizás lo más importante es que estas medidas de apoyo a Ucrania, <a href="https://www.europarl.europa.eu/plenary/en/vod.html?mode=unit&vodLanguage=EN&vodId=4329c327-215b-6597-7f9a-d895a65e79b2&date=20220301#">como ha afirmado el Alto Representante, Josep Borrell</a>, ante el Parlamento Europeo el 1 de marzo, es que también son <a href="https://aleph.org.mx/que-es-hard-law-y-soft-law"><em>hard law</em></a>, y están incidiendo en el comportamiento de otros estados. De esta manera se está consolidando la posición de la Unión Europea como un actor internacional que hasta ahora no parecía tener tanto poder en este tipo de conflictos. Esperamos que la solución a través de la negociación de la agresión se produzca de manera inmediata y con la retirada de las tropas de todo el territorio ucraniano.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/178271/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Francisco Aldecoa Luzarraga no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>La respuesta que la UE ha tenido sobre la agresión de Rusia a Ucrania la consolida como un actor internacional de primer orden que hasta ahora no parecía tener tanto poder en este tipo de conflictos.Francisco Aldecoa Luzarraga, Presidente del Consejo Federal Español del Movimiento Europeo. Catedrático emérito, Universidad Complutense de MadridLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1429362020-08-25T19:36:34Z2020-08-25T19:36:34ZLa ciencia del clima que explicamos a los políticos europeos para cumplir con el Acuerdo de París<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/352334/original/file-20200811-15-6oi1pk.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=5%2C0%2C3489%2C2326&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">
</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-photo/remote-automated-weather-station-arctic-spitsbergen-227107381">Shutterstock / Incredible Arctic</a></span></figcaption></figure><p>El próximo informe del <a href="https://www.ipcc.ch/assessment-report/ar6/">IPCC</a>, cuya elaboración está en curso, se nutre de los <a href="https://www.wcrp-climate.org/wgcm-cmip/wgcm-cmip6">modelos de clima</a> de última generación: los modelos del sistema terrestre. Ellos nos permiten estudiar los efectos del cambio climático y van a ser clave para tomar decisiones que nos permitan cumplir con el <a href="https://ec.europa.eu/clima/policies/international/negotiations/paris_es">Acuerdo de París</a>. </p>
<p>De hecho, como parte del proyecto <a href="https://www.crescendoproject.eu/crescendo-is-supporting-policy-makers-on-routes-to-realizing-the-2015-paris-agreement/">CRESCENDO</a>, hemos explicado la información que proporcionan estos modelos durante varios encuentros entre <a href="https://brussels.whiterose.ac.uk/news/white-rose-brussels-crescendo-climate-change-event-a-success/">grupos de científicos y la Comisión de Medioambiente del Parlamento Europeo</a>. </p>
<p>Durante las reuniones, se plantearon <a href="https://www.crescendoproject.eu/wp-content/uploads/2017/03/Realizing_the_Paris_Agreement_A4_print-spanish_final.pdf">tres elementos clave</a>, basados en estas herramientas, para cumplir con el <a href="https://www.crescendoproject.eu/wp-content/uploads/2017/03/ALL-Presentations_CRESCENDO_1-5C-policy-event_vfinal-to-share2.pdf">Acuerdo de París</a>:</p>
<ul>
<li><p>Cero emisiones netas de CO<sub>2</sub> antes de 2050 y sostenidas varias décadas.</p></li>
<li><p>Un cambio rápido y duradero de energías fósiles a energías renovables. </p></li>
<li><p>Debemos disminuir la demanda energética global.</p></li>
</ul>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/352317/original/file-20200811-24-1tg0hqq.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/352317/original/file-20200811-24-1tg0hqq.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/352317/original/file-20200811-24-1tg0hqq.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/352317/original/file-20200811-24-1tg0hqq.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/352317/original/file-20200811-24-1tg0hqq.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/352317/original/file-20200811-24-1tg0hqq.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/352317/original/file-20200811-24-1tg0hqq.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/352317/original/file-20200811-24-1tg0hqq.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
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<span class="caption">Asistentes a una de las reuniones entre científicos y miembros del Parlamento Europeo y la CE.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://www.crescendoproject.eu/crescendo-is-supporting-policy-makers-on-routes-to-realizing-the-2015-paris-agreement/#more-998">Proyecto CRESCENDO</a></span>
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</figure>
<p>Estos modelos son el resultado de la evolución de los modelos de clima globales durante las últimas décadas. Reúnen el conocimiento interdisciplinar necesario para diagnosticar los impactos del cambio climático. Y, por tanto diseñar, medidas que mitiguen la situación de emergencia medioambiental global que vivimos.</p>
<h2>Evolución de los modelos de clima globales</h2>
<p>Los lectores de más edad recordarán aquellos programas del tiempo en los que aparecían líneas de presión y unas letras: <em>A</em>, de anticiclón y <em>B</em>, de borrasca. Los meteorólogos codificaban así las medidas de presión disponibles en modelos conceptuales que permitían elaborar un diagnóstico y un pronóstico del estado de la atmósfera. </p>
<p>Aunque en ocasiones todavía muestran esas líneas y letras, los programas del tiempo de hoy en día se basan, en su mayoría, en lo que se conoce como modelos de predicción numérica. Sus resultados se presentan junto con algunas imágenes de satélite.</p>
<p>Los métodos y herramientas utilizados en meteorología y climatología han evolucionado sustancialmente desde los 80. Se ha producido además una progresiva convergencia entre los modelos de predicción numérica del tiempo y los modelos de clima al basarse ambos en los mismos principios físicos. </p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/348212/original/file-20200718-31-10e2y99.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/348212/original/file-20200718-31-10e2y99.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/348212/original/file-20200718-31-10e2y99.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=300&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/348212/original/file-20200718-31-10e2y99.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=300&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/348212/original/file-20200718-31-10e2y99.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=300&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/348212/original/file-20200718-31-10e2y99.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=377&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/348212/original/file-20200718-31-10e2y99.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=377&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/348212/original/file-20200718-31-10e2y99.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=377&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
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<span class="caption">Evolución de los modelos de clima globales hacia los modelos del sistema terrestre.</span>
<span class="attribution"><span class="source">Ramiro Checa-García</span>, <span class="license">Author provided</span></span>
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<h1>Modelos de la atmósfera y del océano</h1>
<p>Nuestra percepción cotidiana del tiempo meteorológico se centra esencialmente en tres aspectos: temperatura, lluvia y nubosidad. Estos tres aspectos suceden y se miden en la capa de la atmósfera más cercana a la superficie terrestre, la troposfera. </p>
<p>Sin embargo, sabemos que estos factores no están condicionados solo por lo que sucede en las masas de aire de la troposfera. Involucran también a otros sistemas externos. Las estaciones, por ejemplo, vienen condicionadas por el cambio de la luz solar debido a los movimientos periódicos de la Tierra. </p>
<p>Otro caso paradigmático es el océano que, según nuestra percepción cotidiana, atempera o suaviza el tiempo en la costa respecto a las zonas de interior. La realidad es que el océano juega un papel clave en el clima (y el tiempo) y su variabilidad; los famosos fenómenos de El Niño y La Niña son el resultado de la interacción de la atmósfera con el océano.</p>
<p>Por estas razones, la primera etapa en la construcción de modelos de clima globales consistió en incluir tanto el sistema atmósfera como el sistema océano y sus capas de hielo (la criosfera). Este tipo de modelo de clima, denominado <em>modelo de clima acoplado global</em> ya se utilizaba en la década de los 80 y fue un elemento clave en el primer informe del IPCC de 1990. En él ya se documentaba y alertaba del cambio climático y varias de sus consecuencias, como el calentamiento global y la subida del nivel del mar.</p>
<h1>Describiendo la química atmosférica</h1>
<p>A principios de la década de 1980 varios científicos constataron que la industria y sus emisiones de <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/CFC">clorofluorocarbonos (CFC)</a> habían provocado un descenso notable de la cantidad de ozono en la estratosfera. El conocido como agujero en la capa de ozono afectaba gravemente al Polo Sur.</p>
<p>Este descubrimiento fue clave para asimilar que nuestras acciones cambian el entorno en el que vivimos. En este caso, aunque las concentraciones de CFC en comparación con otros gases son muy bajas, su incidencia en la capa de ozono es dramática. </p>
<p>Este descubrimiento provocó la respuesta de la comunidad internacional a través del <a href="https://www.undp.org/content/undp/es/home/sustainable-development/environment-and-natural-capital/montreal-protocol.html">protocolo de Montreal</a>, que entró en vigor en 1989, una década después del descubrimiento científico.</p>
<p>El reconocimiento del fenómeno vino a ratificar la conveniencia de integrar en nuestros modelos de clima otros subsistemas del sistema terrestre. </p>
<p>En el caso concreto comentado, la atmósfera, además del vapor de agua y gases inertes, es químicamente activa. Al producirse en ella reacciones de diferente naturaleza, es deseable incluir una modelización de estos procesos químicos. Esto ha dado lugar a lo que se conoce como modelos climáticos con química interactiva. Así, el modelo de clima clásico permite determinar el transporte de las sustancias emitidas. Y la parte de química interactiva permite evaluar las reacciones químicas. </p>
<p>Estos modelos permiten estimar, por ejemplo, la evolución del agujero de ozono, las reacciones de las sustancias emitidas en erupciones volcánicas o el papel de las emisiones antropogénicas. Pero además permiten evaluar <a href="https://acp.copernicus.org/preprints/acp-2019-1207/">efectos secundarios en la atmósfera y el clima</a>, ya que las sustancias derivadas de las reacciones químicas pueden interaccionar con otros subsistemas. </p>
<p>Por ejemplo, la presencia de partículas atmosféricas es necesaria para la formación de las nubes. Las emisiones de dichas partículas y su producción en la atmósfera por la emisión de determinados gases conllevan la alteración antropogénica de los sistemas nubosos.</p>
<h1>Cambios en la superficie terrestre</h1>
<p>Si también incluimos los cambios en la superficie (deforestación y cambios en el uso del terreno) tenemos un modelo que integra <a href="https://agupubs.onlinelibrary.wiley.com/doi/full/10.1029/2003GB002199">otro elemento del sistema terrestre</a>. </p>
<p>Los cambios en la cobertura vegetal modifican la humedad del suelo, así como su interacción con la radiación. Además, como la mayoría de nuestras actividades tienen lugar en la biosfera, es interesante modelizar cómo se ve afectada por cambios en la atmósfera.</p>
<p>En un sentido similar, se están incluyendo modelos de ecosistemas marinos en los modelos de océano y se está estudiando su interacción con el resto de elementos. </p>
<p>Se ha descubierto, por ejemplo, que el transporte en la atmósfera de partículas minerales emitidas en el Sahara está fertilizando tanto <a href="https://agupubs.onlinelibrary.wiley.com/doi/epdf/10.1002/2013GB004802">los ecosistemas marinos del Atlántico</a> <a href="https://iopscience.iop.org/article/10.1088/1748-9326/1/1/014005/meta">como la Amazonia</a>. Estos nuevos elementos incorporados a los modelos pueden ayudar a la cuantificación de estos procesos.</p>
<h1>Modelos del sistema terrestre</h1>
<p>Los modelos actuales de clima que incorporan todos estos subsistemas se denominan modelos del sistema terrestre. Permiten describir con creciente detalle los diferentes ciclos que existen en la naturaleza y que la actividad humana está cambiando, como el ciclo hidrológico, al ciclo del carbono y el del nitrógeno. </p>
<p>Hoy también sabemos que una fracción importante del CO₂ que emitimos es absorbido en la superficie del mar. El océano participa activamente en el ciclo del carbono, salvándonos, hasta el momento, de mayores impactos en la atmósfera.</p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/348156/original/file-20200717-17-1138lgp.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="Modelos del sistema terrestre" src="https://images.theconversation.com/files/348156/original/file-20200717-17-1138lgp.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/348156/original/file-20200717-17-1138lgp.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=516&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/348156/original/file-20200717-17-1138lgp.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=516&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/348156/original/file-20200717-17-1138lgp.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=516&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/348156/original/file-20200717-17-1138lgp.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=649&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/348156/original/file-20200717-17-1138lgp.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=649&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/348156/original/file-20200717-17-1138lgp.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=649&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
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<span class="caption">Esquema con los procesos principales incluidos en los modelos del sistema terrestre actuales.</span>
<span class="attribution"><span class="license">Author provided</span></span>
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<p>En el contexto de los modelos del sistema Tierra es posible evaluar alteraciones químicas y ambientales derivadas del cambio climático: en la biosfera, en los océanos o en la estratosfera. Esta es una de las razones que explican hoy día su uso para evaluar escenarios futuros y su impacto en los objetivos del acuerdo de París. </p>
<h2>La importancia de los modelos del sistema terrestre</h2>
<p>La conclusión principal del carácter antropogénico del cambio climático actual no ha variado desde el primer informe del IPCC. Pero la mejora sustancial en los modelos ha permitido establecer diagnósticos detallados de sus causas, discernir sus consecuencias y pronosticar los escenarios futuros. </p>
<p>Los modelos del sistema terrestre nos informarán en los próximos años de los cambios sociales necesarios para mitigar fenómenos como la acidificación oceánica y su impacto en los ecosistemas marinos, el papel negativo del cambio climático en el rendimiento de los cultivos, el cambio en los patrones de precipitación y su alteración en cuanto a los recursos hídricos disponibles y la mayor probabilidad de episodios extremos en varias regiones del planeta, entre otros muchos.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/142936/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Ramiro Checa-Garcia no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>Durante varios encuentros entre científicos y la Comisión de Medioambiente del Parlamento Europeo, hemos explicado la importancia de los modelos del sistema terrestre para mitigar el cambio climático.Ramiro Checa-Garcia, Chercheur au CNRS, Institut Pierre-Simon Laplace, Laboratoire des Sciences du Climat et de l'Environnement., Sorbonne UniversitéLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1187152019-07-01T20:08:12Z2019-07-01T20:08:12ZEl pinchazo de los partidos antieuropeos<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/282079/original/file-20190701-105176-pshmi4.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=2%2C1%2C995%2C664&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">
</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-photo/brussels-belgium-february-6-2017-empty-572905141"> Cineberg / Shutterstock</a></span></figcaption></figure><p>Tras 40 años de elecciones democráticas al Parlamento Europeo, más de 400 millones de personas fueron llamadas a las urnas en mayo de 2019 para elegir su composición. Esta cámara aprobará la nueva Comisión y será quien ayude a dirigir los designios de la Unión Europea el próximo quinquenio.</p>
<p><a href="https://resultados-elecciones.eu/participacion/">Con una participación de las más altas en este siglo XXI (50,95%)</a>, nunca antes en la historia democrática de Europa se había dado una Cámara tan fragmentada y diversa, incluyendo actores totalmente contrarios a la misma.</p>
<p>Sin embargo, en la última década, las opiniones sobre la pertenencia o no a la Unión, así como sobre proceso de integración y unificación son <a href="https://openaccess.leidenuniv.nl/bitstream/handle/1887/62876/Resistance%20against%20European%20Integration%20-%20Final%20Version.pdf?sequence=1">dispares en los diferentes países y entre los diferentes grupos sociales</a>.</p>
<p>Las sucesivas ampliaciones del club comunitario y los problemas económicos de los Estados miembros han provocado que la UE sea vista, en ocasiones, como un mero garante de estabilidad económica.</p>
<p>Ante esta situación, diferentes voces han surgido oponiéndose a la estructura de la Unión Europea. <a href="http://www.institutdelors.eu/wp-content/uploads/2018/01/euroscepticismoreurophobia-bertoncini-koenig-ne-jdi-nov14.pdf">Estas difieren mucho dependiendo de dónde vengan y del objetivo final</a>.</p>
<p>Por ello, desde que se empezara a acuñar, el término euroescepticismo ha inducido al error, tanto en medios de comunicación como en círculos académicos, cuando se utiliza para hablar del sentimiento de desafección y lejanía de las instituciones europeas, debido a su carácter heterogéneo y complejo. </p>
<h2>Un concepto que induce a error</h2>
<p>Así, ha sido <a href="https://www.cidob.org/publicaciones/serie_de_publicacion/notes_internacionals/n1_118_euroescepticismo_tres_en_uno/euroescepticismo_tres_en_uno">definido como</a> la idea de oposición cualificada o contingente a la Unión Europea. Pero también como la incorporación de una contundente y no cualificada oposición al proceso de integración europea. Estos discursos, a día de hoy, poseen una gran incidencia en la agenda política, <a href="https://www.dw.com/es/brexit-el-euroescepticismo-cambia-de-estrategia/a-47898100">con mayor relevancia desde el referéndum del Brexit</a>. Desde entonces han ido surgiendo propuestas como el Frexit (Francia) o el Italexit (Italia).</p>
<p>De cara a los comicios de 2019, <a href="https://europeelects.eu/2019/05/21/a-right-wing-surge-a-glimpse-into-the-new-eu-parliament/">diferentes encuestas</a> predecían un crecimiento de los partidos euroescépticos. Cabía la posibilidad de que coparan <a href="https://www.elconfidencial.com/mundo/europa/2019-02-24/elecciones-europeas-populistas-extrema-derecha_1838382/">más de un tercio del total de la cámara</a> y, en consecuencia, se encendieron todas las alarmas.</p>
<p>Sin embargo, los resultados electorales, una vez que el recuento es definitivo, han arrojado otra imagen matizada. </p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/281228/original/file-20190625-81741-1y9wd8z.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/281228/original/file-20190625-81741-1y9wd8z.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/281228/original/file-20190625-81741-1y9wd8z.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=308&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/281228/original/file-20190625-81741-1y9wd8z.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=308&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/281228/original/file-20190625-81741-1y9wd8z.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=308&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/281228/original/file-20190625-81741-1y9wd8z.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=387&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/281228/original/file-20190625-81741-1y9wd8z.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=387&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/281228/original/file-20190625-81741-1y9wd8z.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=387&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption">Distribución del Parlamento Europeo tras las elecciones de mayo.</span>
<span class="attribution"><span class="source">Parlamento Europeo</span></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Tomando en consideración cada grupo político como si fueran partidos políticos, entre 2014 y 2019 ha tenido lugar un aumento de la heterogeneidad. En este quinquenio se ha pasado de 5,6 a 6,6 partidos parlamentarios efectivos. Es decir, hay un nuevo actor con peso significativo en el Parlamento. Una parte del crecimiento lo explica la evolución de los actores euroescépticos.</p>
<p>Los dos principales grupos políticos comunitarios son los <a href="https://www.eppgroup.eu/es/">Populares Europeos</a> (PPE) y los <a href="https://www.socialistsanddemocrats.eu/es">Socialdemócratas</a> (S&D), que no podrán reeditar la tradicional mayoría parlamentaria, al disponer de 335 eurodiputados de los 376 necesarios. De esta forma, se abre la posibilidad de entrada del <a href="https://www.reneweuropegroup.eu">grupo liberal</a> (antes ALDE, hoy Renew Europe) –con quien sumarían 443 miembros- o la entrada de <a href="https://www.greens-efa.eu/en/">los Verdes</a> –una mayoría de 410-.</p>
<p>En cuanto a los partidos euroescépticos, en el Parlamento saliente estos se encontraban principalmente en varios grupos concretos. Por un lado, la Europa de la Libertad y la Democracia Directa (<a href="http://www.efddgroup.eu">EFDD</a>). Por el otro, los Conservadores y Reformistas Europeos (<a href="https://www.ecrgroup.eu">CRE</a>).</p>
<p>También encontramos de estos partidos en la Alianza de Izquierda (<a href="https://www.guengl.eu">GUE/NGL</a>), aunque con posiciones más matizadas. Y, finalmente, la Europa de las Naciones y la Libertad (<a href="https://www.enf.eu">ENF</a>) donde se hallaba el grueso de estos partidos.</p>
<p>Sin embargo, no todos los partidos en estos grupos son euroescépticos. Pero sí que existen en su interior actores de gran relevancia para la consolidación de dichos discursos. En la legislatura anterior entre los cuatro grupos sumaban en torno a 200 representantes, y en la actualidad han aumentado en 21.</p>
<h2>Los Euro-contrarios</h2>
<p>Así, las dos principales corrientes contrarias al proyecto comunitario en el actual parlamento se corresponden con Identidad y Democracia (ID), <a href="http://euroefe.euractiv.es/1311_actualidad/6186047_le-pen-presenta-el-nuevo-grupo-identidad-y-democracia-en-el-parlamento-europeo.html">tras la conversión del ENF en ésta</a>, y el EFDD.</p>
<p>En el caso del primero, ha sido el quinto grupo parlamentario, con 73 representantes. Está integrado por las principales formaciones euroescépticas de tendencia conservadoras. Entre las fuerzas representadas se encuentran el FPÖ de Austria o Vlaars Belang de Bélgica, entre otros.</p>
<p>En este grupo también se encuentran los miembros más conocidos (y activos) del club euroesceptico como la Lega italiana, la Alternativa por Alemania y el partido francés de Marine Le Pen, ahora llamado Reagrupación Nacional.</p>
<p>En cuanto al EFDD, el italiano Movimiento 5 Estrellas y el británico Brexit Party son los únicos integrantes, aunque suman el 6% de la representación. Frente a las otras dos familias más heterogéneas, estas dos han cerrado filas sobre el discurso contrario al proyecto de la Unión. </p>
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<a href="https://images.theconversation.com/files/281233/original/file-20190625-81733-c2iwah.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/281233/original/file-20190625-81733-c2iwah.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/281233/original/file-20190625-81733-c2iwah.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=608&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/281233/original/file-20190625-81733-c2iwah.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=608&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/281233/original/file-20190625-81733-c2iwah.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=608&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/281233/original/file-20190625-81733-c2iwah.png?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=764&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/281233/original/file-20190625-81733-c2iwah.png?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=764&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/281233/original/file-20190625-81733-c2iwah.png?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=764&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
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<span class="caption">Partidos de corte euroescéptico con presencia en el PE.</span>
<span class="attribution"><span class="source">Elaboración propia</span></span>
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</figure>
<p>¿Y qué ha pasado en España? ¿Cuál ha sido el aporte español a la ola euroescéptica? Las encuestas <a href="https://elpais.com/internacional/2019/05/09/actualidad/1557392925_688230.html">predecían</a> que VOX -en favor de la recuperación de la soberanía nacional- obtendría 4 o 5 diputados.</p>
<p>No obstante, el apoyo se quedó en el 6% del voto y 3 representantes de un total de <a href="https://resultados.eleccioneslocaleseuropeas19.es/#/es/eu/resultados/total">54</a>. Como actor nuevo en el escenario comunitario, se desconocía en qué grupo parlamentario quedaría integrado. La decisión final ha sido su integración en el CRE, junto a los conservadores británicos o el Ley y Justicia polaco.</p>
<p>Con todo esto, puede decirse que, a pesar de la subida de los partidos de corte euroescéptico, estos no han conseguido el número suficiente de escaños para lograr controlar ni siquiera un tercio de la cámara.</p>
<p>Con 171 representantes de los 751 que conforman el Parlamento Europeo, su consiguiente influencia se verá mermada en las políticas de la UE durante el próximo quinquenio. Importantes y presentes sí, pero dispersos y con limitada capacidad de acción.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/118715/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Jonatan García Rabadán es miembro de diferentes asociaciones de carácter académico,regionales (AVSP,..), nacionales (AECPA, FES...) como internacionales (ISSR, ECPR,..)</span></em></p><p class="fine-print"><em><span>Sergio Pérez Castaños no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>A pesar de la subida de los partidos de corte euroescéptico, no han conseguido en las elecciones de mayo de 2019 el número suficiente para lograr controlar siquiera un tercio del Parlamento Europeo.Sergio Pérez Castaños, Profesor e investigador en Ciencia Política, Universidad de BurgosJonatan García Rabadán, Profesor Ayudante doctor. Dpto. Sociología y Trabajo, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko UnibertsitateaLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1174262019-05-22T20:05:33Z2019-05-22T20:05:33ZElecciones europeas: guía para electores debutantes<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/275716/original/file-20190521-23848-n9lv72.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C0%2C3994%2C2592&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">
</span> <span class="attribution"><span class="source">EPA</span></span></figcaption></figure><p>Las elecciones al Parlamento Europeo no son muy diferentes al críquet. En ambos casos, los partidos pueden durar varios días y puede ser bastante difícil entender sus reglas. Las elecciones europeas de este año se celebran entre el 23 y el 26 de mayo y los países votan en días diferentes.</p>
<p>No es de extrañar que tan solo unas pocas personas se tomen la molestia de votar en estas elecciones, ya sea porque consideran que todo el proceso es demasiado complicado o porque lo encuentran aburrido (algunas personas sienten lo mismo con el críquet).</p>
<p>Pero la votación de este año está resultando ser más interesante de lo acostumbrado. La oleada populista en toda Europa se está haciendo notar en Bruselas, al mismo tiempo que los partidos euroescépticos intentan causar problemas desde dentro. El fracaso de Reino Unido a la hora de conseguir un acuerdo sobre el Brexit le ha dejado en la extraña posición de tener que presentar candidatos, pese a que se preveía su salida del bloque.</p>
<p>Partidos de todo el espectro político han puesto en marcha iniciativas para animar a 400 millones de ciudadanos de la UE a registrarse y votar. El Parlamento Europeo (PE) lanzó la campaña “<a href="https://www.estavezvoto.eu/">Esta vez voto</a>” con ese mismo objetivo, así como una <a href="https://www.howtovote.eu/">aplicación</a> con información sobre el registro y la votación en todos los Estados miembros.</p>
<p>Le explicamos cómo funciona el voto y por qué estas elecciones son tan importantes.</p>
<h2>Lo básico</h2>
<p>Los ciudadanos de la UE votan para ocupar los 751 escaños del Parlamento Europeo. Aunque, en el improbable caso de que se llegue a un <a href="https://theconversation.com/es/search?utf8=%E2%9C%93&q=brexit">acuerdo sobre el Brexit</a> y el Reino Unido se retire en el último minuto, se votará para cubrir 705 escaños.</p>
<p>Los ciudadanos de la UE votan a los candidatos o partidos de su país de origen o residencia, siempre y cuando estén registrados. Las personas que viven en el extranjero pueden utilizar las embajadas, los consulados o los colegios de su país para votar a un candidato que se presenta en su país de origen. La edad mínima es de 18 años, excepto en Austria y Malta (donde es de 16) y Grecia (donde es de 17). El voto es obligatorio en Bélgica, Bulgaria, Chipre, Grecia y Luxemburgo, aunque no siempre se aplica esta norma.</p>
<p>A cada Estado miembro se le asigna un número determinado de escaños en el Parlamento Europeo según el tamaño de su población (los indicadores económicos o el tamaño del territorio no importan en este caso). Por ejemplo, Francia actualmente cuenta con 74 escaños, Malta y Luxemburgo con seis eurodiputados cada uno y el Reino Unido con 73.</p>
<p>Los procesos electorales varían considerablemente de un país a otro, pero todos incluyen algún sistema de representación proporcional. Por ejemplo, <a href="https://www.european-elections.eu/how-to-vote/ireland">Irlanda</a> tiene tres circunscripciones (Dublín, y las zonas Noroeste y Sur) y los votantes clasifican a cuantos candidatos deseen por orden de elección.</p>
<p>Francia solía dividir a sus candidatos en ocho circunscripciones, pero ahora han sido disueltas. En su lugar, este año los votantes eligen a partir de una sola lista electoral, lo que significa que no votan a candidatos individuales, sino a un partido. Bulgaria también tiene una circunscripción electoral única, pero los votantes pueden indicar sus preferencias con respecto a los candidatos dentro de la lista del partido que elijan. Los ciudadanos <a href="https://www.valimised.ee/en">estonios</a> y los residentes permanentes pueden votar por vía electrónica.</p>
<h2>¿Cómo se organiza el Parlamento después de la votación?</h2>
<p>Una vez elegidos, los eurodiputados se organizan en grupos transnacionales que reflejan su afiliación política. El Parlamento saliente tiene <a href="http://www.europarl.europa.eu/about-parliament/es/organisation-and-rules/organisation/political-groups">ocho grupos</a>, como la Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas y la Europa de las Naciones y de las Libertades. Este último reúne a la Agrupación Nacional francesa, la Liga Norte italiana y otros partidos de extrema derecha. </p>
<p>El grupo más numeroso es el Partido Popular Europeo, que cuenta con 216 eurodiputados. En él se encuentran la Unión Cristiano Demócrata (CDU) de Angela Merkel y la Unión Cívica Húngara (Fidesz) de Viktor Orbán, aunque este último ha sido suspendido por el grupo hasta nuevo aviso. También hay 21 eurodiputados que no pertenecen a ningún grupo.</p>
<p>El partido con mayor número de escaños designa al presidente de la Comisión Europea, cargo que actualmente ocupa el ex primer ministro de Luxemburgo Jean-Claude Juncker. El presidente es como un director de orquesta: establece el tempo y se asegura de que la orquesta toque de forma armoniosa, pero no puede elegir el repertorio por sí solo. En el Parlamento Europeo, ningún grupo político tiene la mayoría de los escaños, por lo que tienen que ponerse en contacto con otros grupos y trabajar juntos para aprobar la legislación.</p>
<h2>¿Por qué existe un Parlamento Europeo?</h2>
<p>La idea de que debería haber una asamblea parlamentaria que representara a los ciudadanos de los Estados miembros se remonta a 1952, cuando se creó la Comunidad Europea del Carbón y del Acero (precursora de la Comunidad Europea). Por aquel entonces, los 142 miembros eran parlamentarios nacionales nombrados por sus respectivos gobiernos. Estos desempeñaban un papel marginal, mientras los Estados miembros tomaban las “verdaderas” decisiones.</p>
<p>Las primeras elecciones directas al Parlamento tuvieron lugar en 1979 y, con el tiempo, el organismo ha desarrollado una gran fuerza política. Junto con el Consejo Europeo (que representa a los Estados miembros), el Parlamento ahora es el responsable de preparar y adoptar el presupuesto de la UE, que asciende a <a href="http://europa.eu/rapid/press-release_IP-18-6381_en.htm">165.800 millones de euros</a> en 2019.</p>
<p>El Parlamento legisla sobre todo tipo de cuestiones importantes, desde normas alimentarias hasta derechos LGBT. Por ejemplo, en marzo, 560 de los 751 eurodiputados votaron a favor de una nueva ley que prohíbe los <a href="http://www.europarl.europa.eu/news/es/press-room/20190321IPR32111/los-plasticos-de-un-solo-uso-prohibidos-a-partir-de-2021">plásticos de un solo uso</a>, como platos y cubiertos de pícnic, para 2021.</p>
<h2>¿Por qué hay una participación tan baja?</h2>
<p>A pesar del importante papel que desempeña el Parlamento, la participación electoral ha descendido del 62% en 1979 al 43% en 2014. En algunos países, la participación es increíblemente baja. Así, solo el <a href="http://www.europarl.europa.eu/elections2014-results/es/country-results-uk-2014.html">13% de los votantes eslovacos</a> acudió a las urnas en las últimas elecciones.</p>
<p>En algunos de los nuevos Estados miembros, la percepción de que votar no supone ninguna diferencia, unida a la desconfianza en los políticos y en la política en general, <a href="https://commonslibrary.parliament.uk/parliament-and-elections/elections-elections/whats-behind-falling-turnout-part-i/">impide que la gente participe</a>.</p>
<p>Los medios de comunicación europeos tampoco tratan mucho el trabajo que realiza el Parlamento, por lo que no se le presta atención. Rara vez se vuelve viral y, cuando lo hace, suele ser por las razones equivocadas.</p>
<p>Todo esto da la impresión de que el Parlamento no es una organización que deba tomarse en serio. Pero el Parlamento Europeo es, en muchos sentidos, el rostro humano de la Unión Europea. Está formado por personas de diferentes países, que aportan historias y experiencias diferentes: personas como el eurodiputado polaco <a href="http://www.europarl.europa.eu/meps/es/124881/MAREK_PLURA/home">Marek Plura</a>, defensor de las políticas que promueven una sociedad más inclusiva para las personas con discapacidad (padece una enfermedad degenerativa).</p>
<p>Sin embargo, aún se puede mejorar en lo que respecta al <a href="http://www.europarl.europa.eu/elections2014-results/es/gender-balance.html">equilibrio de género</a> y a la diversidad étnica en el Parlamento. Las mujeres solo representan el 37% de los 751 escaños y menos de 20 eurodiputados no se consideran blancos (no hay estadísticas oficiales al respecto porque varios Estados están en contra de la recopilación de datos sobre la etnicidad). </p>
<h2>¿Por qué debería votar la gente?</h2>
<p>Pese a los bajos niveles de participación en las elecciones europeas, cabe destacar que el <a href="http://www.europarl.europa.eu/news/en/press-room/20180614IPR05809/european-parliament-the-most-trusted-eu-institution">50% de los europeos</a> afirma confiar en la institución, mientras que solo el 34% piensa lo mismo de los órganos de gobierno nacionales.</p>
<p>Por lo general, el 68% de los ciudadanos europeos cree que su país se ha beneficiado de la adhesión a la UE. Les gusta la idea de viajar fácilmente a otros países y se han encariñado del euro. No en vano, Marine Le Pen, en Francia, y Matteo Salvini, en Italia, cambiaron su discurso sobre la moneda única después de enfrentarse a esa evidencia. </p>
<p>En lo que respecta a Rumania, España y Polonia, la pertenencia a la UE a menudo se considera como una especie de antídoto contra los <a href="https://www.ecfr.eu/specials/what_europeans_really_want_five_myths_debunked">excesos de los gobiernos nacionales</a>.</p>
<p>También es frecuente que el Parlamento Europeo encabece las iniciativas en cuestiones que son realmente importantes para los ciudadanos europeos, como la protección del medio ambiente, la transparencia y la protección de datos.</p>
<p>Las recientes protestas en Francia y en otros países han demostrado que las instituciones de la UE no han abordado adecuadamente algunas de las preocupaciones más importantes de sus ciudadanos. Muchas de estas preocupaciones tienen menos que ver con los asuntos nacionales, como la inmigración y los partidos políticos, y más con la esperanza de conseguir un futuro más prometedor, justo y feliz. Como organismo transnacional, el Parlamento Europeo desempeña un papel único para abordar estas grandes cuestiones y comunicárselas al público.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/117426/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Tatiana Coutto no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>¿Quiénes tienen derecho a voto en Europa? ¿qué se vota? ¿para qué se vota? Todo lo que necesita saber sobre las elecciones europeas.Tatiana Coutto, Teaching Fellow, Department of Politics and International Studies, University of WarwickLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.tag:theconversation.com,2011:article/1167602019-05-14T20:00:39Z2019-05-14T20:00:39Z¿Para qué sirve el Parlamento Europeo?<figure><img src="https://images.theconversation.com/files/274059/original/file-20190513-183077-1uaz57q.jpg?ixlib=rb-1.1.0&rect=0%2C0%2C4992%2C3323&q=45&auto=format&w=496&fit=clip" /><figcaption><span class="caption">Sede del Parlamento Europeo en Estrasburgo, Francia.</span> <span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-photo/strasbourg-25-december-2012-burning-sunset-1390403870"> Ankor Light / Shutterstock</a></span></figcaption></figure><p>El 26 de mayo votaremos a los miembros del <a href="http://europarl.europa.eu/portal/es">Parlamento Europeo</a>. Una institución que sigue siendo una gran desconocida para muchos ciudadanos. De entrada, es pertinente recordar que el PE no es exactamente comparable a los parlamentos nacionales, de ahí que sus insuficiencias estructurales deban ser contextualizadas en la peculiar arquitectura institucional de la Unión Europea, que no es un Estado. </p>
<p>Entre sus principales límites cabe recordar los siguientes: </p>
<ol>
<li><p>El PE no tiene poder constituyente en la reforma de los Tratados y tampoco el monopolio legislativo (que comparte y no en todo con el Consejo). </p></li>
<li><p>Carece de iniciativa legislativa (es monopolio de la <a href="https://europa.eu/european-union/about-eu/institutions-bodies/european-commission_es">Comisión</a>). </p></li>
<li><p>Aunque es cámara colegisladora, se le escapan áreas intergubernamentales clave. </p></li>
<li><p>No hace realidad la máxima <em><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/No_taxation_without_representation">No taxation without representation</a></em> (No hay tributación sin representación) al carecer de competencias fiscales de relieve. </p></li>
<li><p>No funciona en su seno la dialéctica mayoría de gobierno/ minoría de oposición, puesto que no hay un verdadero Ejecutivo supranacional europeo, sino una suerte de “gran coalición” fáctica del “bloque central” (populares, socialistas y liberales) que actúa con criterios fundamentalmente tecnocráticos, lo que está favoreciendo la contestación populista frontal. </p></li>
<li><p>Su representatividad es defectuosa, tanto porque no existe el pueblo europeo, como porque tampoco representa a los pueblos europeos como tales. En el PE los eurodiputados no se agrupan por países, sino por afinidades ideológicas; es decir, representa a los “ciudadanos” europeos, pero sin mecanismos paneuropeos para hacer real tal dimensión (no existen listas electorales transnacionales).</p></li>
<li><p>Su labor pasa prácticamente inadvertida para las opiniones públicas europeas, un legado de la vieja inercia comunitaria elitista y opaca.</p></li>
</ol>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/274070/original/file-20190513-183103-kfhjv9.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/274070/original/file-20190513-183103-kfhjv9.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/274070/original/file-20190513-183103-kfhjv9.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=1007&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/274070/original/file-20190513-183103-kfhjv9.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=1007&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/274070/original/file-20190513-183103-kfhjv9.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=1007&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/274070/original/file-20190513-183103-kfhjv9.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=1265&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/274070/original/file-20190513-183103-kfhjv9.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=1265&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/274070/original/file-20190513-183103-kfhjv9.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=1265&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
<figcaption>
<span class="caption"></span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://resultados-elecciones.eu/resultados-elecciones/2014-2019/parlamento-saliente/">Parlamento Europeo.</a></span>
</figcaption>
</figure>
<p>Sin embargo, el Parlamento Europeo: </p>
<ol>
<li><p>Es la institución más legítima de la UE al ser la única de elección popular directa. </p></li>
<li><p>Está “blindado” frente a los Gobiernos nacionales al no poder ser disuelto anticipadamente (las legislaturas son fijas, de cinco años). </p></li>
<li><p>Es completamente autónomo frente a los Gobiernos nacionales a la hora de dotarse de su propio reglamento y de fijar el orden del día (aunque no puede decidir sobre sus sedes: desde hace tiempo, una clara mayoría de los eurodiputados preferiría concentrar el PE en Bruselas, pero esta decisión sólo corresponde al Consejo Europeo por unanimidad y el veto francés está asegurado al respecto para mantener la sede de Estrasburgo). </p></li>
<li><p>No está dominado por la partitocracia, como suele ocurrir en los Parlamentos nacionales, pero no es inmune a las presiones de los lobbies. </p></li>
</ol>
<figure class="align-center ">
<img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/274064/original/file-20190513-183077-99y0fm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/274064/original/file-20190513-183077-99y0fm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/274064/original/file-20190513-183077-99y0fm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/274064/original/file-20190513-183077-99y0fm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=400&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/274064/original/file-20190513-183077-99y0fm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/274064/original/file-20190513-183077-99y0fm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/274064/original/file-20190513-183077-99y0fm.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=503&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px">
<figcaption>
<span class="caption">Sede del Parlamento Europeo en Bruselas, Bélgica.</span>
<span class="attribution"><a class="source" href="https://www.shutterstock.com/es/image-photo/brussels-belgium-august-5-2017-exterior-774228631">Ilolab /shutterstock</a></span>
</figcaption>
</figure>
<h2>Una institución reforzada</h2>
<p>De momento, estas ventajas siguen sin compensar las carencias señaladas, pero es cierto que la estrategia histórica de los europeístas de ir reforzando progresivamente al PE ha dado bastantes frutos. La paradoja es que el constante aumento de los poderes de esta institución ha ido en paralelo al permanente declive de la <a href="http://www.europarl.europa.eu/about-parliament/es/in-the-past/previous-elections">participación electoral</a>, cada vez más baja desde las primeras elecciones directas en 1979. </p>
<figure class="align-center zoomable">
<a href="https://images.theconversation.com/files/274067/original/file-20190513-183080-rmudpk.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=1000&fit=clip"><img alt="" src="https://images.theconversation.com/files/274067/original/file-20190513-183080-rmudpk.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&fit=clip" srcset="https://images.theconversation.com/files/274067/original/file-20190513-183080-rmudpk.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=600&h=391&fit=crop&dpr=1 600w, https://images.theconversation.com/files/274067/original/file-20190513-183080-rmudpk.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=600&h=391&fit=crop&dpr=2 1200w, https://images.theconversation.com/files/274067/original/file-20190513-183080-rmudpk.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=600&h=391&fit=crop&dpr=3 1800w, https://images.theconversation.com/files/274067/original/file-20190513-183080-rmudpk.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=45&auto=format&w=754&h=492&fit=crop&dpr=1 754w, https://images.theconversation.com/files/274067/original/file-20190513-183080-rmudpk.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=30&auto=format&w=754&h=492&fit=crop&dpr=2 1508w, https://images.theconversation.com/files/274067/original/file-20190513-183080-rmudpk.jpg?ixlib=rb-1.1.0&q=15&auto=format&w=754&h=492&fit=crop&dpr=3 2262w" sizes="(min-width: 1466px) 754px, (max-width: 599px) 100vw, (min-width: 600px) 600px, 237px"></a>
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<span class="attribution"><a class="source" href="https://resultados-elecciones.eu/participacion/">Parlamento Europeo</a></span>
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<span class="attribution"><a class="source" href="https://resultados-elecciones.eu/participacion/">Parlamento Europeo.</a></span>
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<p>Esto parecería indicar que la estrategia de las fuerzas europeístas debería modificarse: sin renunciar (todo lo contrario) a ir asimilando el PE a los Parlamentos nacionales, la clave está en ir configurando un verdadero Ejecutivo supranacional comunitario. Algo de momento inviable por el frontal rechazo de los Gobiernos nacionales a verse fiscalizados por un Gobierno europeo superior y, de hecho, federal. </p>
<p>Lo cierto es que el PE tiene ya importantes atribuciones que las opiniones públicas de los Estados miembros deberían conocer mejor para evaluar más ponderadamente tal institución que sí tiene incidencia en muchos ámbitos de la vida de los ciudadanos europeos (lo que, de divulgarse más, podría incrementar el interés participativo). </p>
<h2>Poderes de control</h2>
<p>Esta institución tiene poderes de control: otorga la investidura a la Comisión y puede censurarla (y derribarla), tiene poder presupuestario (con límites), nombra a diversos altos cargos comunitarios y colegisla en muchos asuntos que sí son relevantes para los ciudadanos. </p>
<p>En efecto, el PE se ocupa, por ejemplo, de la libre circulación (relacionada con las cuatro grandes libertades comunitarias: de bienes, <a href="http://www.europarl.europa.eu/factsheets/es/sheet/40/la-libertad-de-establecimiento-y-la-libre-prestacion-de-servicios">servicios</a>, <a href="http://www.europarl.europa.eu/factsheets/es/sheet/147/la-libre-circulacion-de-personas">personas</a> y <a href="http://www.europarl.europa.eu/factsheets/es/sheet/38/la-libre-circulacion-de-mercancias">mercancías</a>), mercado interior, investigación, medioambiente, consumo, redes transeuropeas, asuntos educativos y culturales, colaboración sanitaria y otros servicios.</p>
<p>En suma, el PE es una institución cada vez más relevante y, sin duda, es preciso seguir aumentando sus competencias, su representatividad y su transparencia. Las principales reformas pendientes que deberían debatirse tras las elecciones de finales de mayo serían las siguientes: </p>
<ul>
<li><p>El PE debería ser cámara colegisladora en todos los ámbitos, sin exclusiones intergubernamentales, funcionar prácticamente siempre de acuerdo con el principio de mayoría (es decir, de hecho sin vetos ni unanimidades). </p></li>
<li><p>Debería contar con una sola sede en Bruselas frente al irracional y costoso modelo actual (que incluye Estrasburgo y Luxemburgo para la secretaría del PE) y, sobre todo, decidir en última instancia sobre un auténtico Ejecutivo europeo. </p></li>
</ul>
<p>Todo ello requeriría politizar mucho más las dinámicas de la Unión Europea: reforzar los europartidos hoy virtuales, dar paso a listas electorales transnacionales, involucrar más a los Parlamentos nacionales, mejorar la comunicación de su labor y, sobre todo, conectar con los ciudadanos con mecanismos participativos, hoy embrionarios. </p>
<p>Sólo reforzando la legitimidad y el debate pluralista del PE esta institución podrá aspirar a ser motor del tan necesario impulso europeísta frente a los desafíos de las fuerzas euroescépticas y eurófobas, en <a href="https://theconversation.com/la-batalla-por-el-voto-populista-114210">inquietante ascenso</a>.</p><img src="https://counter.theconversation.com/content/116760/count.gif" alt="The Conversation" width="1" height="1" />
<p class="fine-print"><em><span>Cesáreo Rodríguez-Aguilera de Prat no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.</span></em></p>La institución tiene ya importantes atribuciones que la opinión pública de los Estados miembros deberían conocer mejor para evaluarla, ya que tiene incidencia en muchos ámbitos de la vida de los ciudadanos europeos.Cesáreo Rodríguez-Aguilera de Prat, Catedrático de Ciencia Política, Universitat de BarcelonaLicensed as Creative Commons – attribution, no derivatives.