Si ya es difícil hablar de la soledad en general, más complejo resulta hablar de la soledad femenina, ya que pocas mujeres escribieron sobre ello. Las visiones que conservamos son mayoritariamente testimonios masculinos.
Actuaciones preventivas individuales para evitar la soledad no deseada y el estrés prolongarían la vida con salud y ahorrarían gastos al sistema sanitario.
Mayores de entre 61 y 91 años y niños de primaria han aprendido juntos a disfrutar de la lectura y a crear puentes, muy necesarios, entre generaciones.
Los medios digitales han saturado a muchas personas durante la pandemia, pero para los jóvenes fueron una tabla de salvación que llenó su soledad. En algunos casos, se han convertido casi en su única forma de socializar.
No hay duda de que es imprescindible el aislamiento de personas infectadas por covid-19. Pero es discutible la respuesta que dimos al desgarro de quienes quedaron desconectados de sus seres queridos.
Estar solo, sin sentirse solo, es un placer. Por eso se habla de “soledad deseada” y disfrutada. Por el contrario, sentirse solo es una percepción personal asociada a sentimientos negativos y desagradables.
Noreena Hertz durante el Foro TELOS una ilustracion de Enrique Flores.
Telos / Enrique Flores
Internet y las redes sociales han introducido en nuestras vidas la posibilidad de disponer de estímulos infinitos e inmediatos que nos dispersan y nos distraen y nos llevan hacia una soledad ruidosa. Noreena Hertz analiza las dificultades por las que atraviesa el sistema democrático y la sensación de soledad que parece envolver al siglo XXI, en el Foro TELOS: Repensar el futuro.
Por asombroso que resulte, la elevada riqueza de nuestra flora intestinal se asocia a niveles bajos de soledad, a mayor sabiduría y a una tendencia acentuada a aprovechar el apoyo social disponible.
La radio es una buena compañera para las personas que viven solas, pero lo fue especialmente para los mayores de 65 años durante el confinamiento. Acompañamiento, apoyo emocional, entretenimiento y cercanía son las mayores virtudes de este medio para los mayores.
Existen grupos que son especialmente vulnerables a situaciones de crisis. Pero hay, también, una serie de dimensiones de personalidad, estilos cognitivos y estrategias de afrontamiento que son clave.
Iglesia de Nuestra Señora del Monte Carmelo en Roseto, Pensylvania, Estados Unidos.
Google Street View
Iker Badiola, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
En los 50, los habitantes del pueblo de Roseto (EE UU) apenas sufrían enfermedades vasculares. Su secreto no estaba en la alimentación ni en su genética, sino en su sentido de comunidad.
Busquemos lecciones positivas en la pandemia: la filosofía nos ayuda a salir del catastrofismo; la ética, a entender lo que deberíamos hacer y no hacemos. Resistirse al desprecio de la verdad y al avance de la soledad.
Aunque los niños y adolescentes suelen adaptarse a situaciones novedosas, el confinamiento ha perjudicado su bienestar emocional. Durante los meses de “encierro” los niños españoles lo pasaron peor que italianos y portugueses debido a unas medidas más restrictivas.
Desde el comienzo del confinamiento hasta hoy las familias han vivido en una montaña rusa de situaciones y emociones diferentes. Sin embargo, han aprendido de esta experiencia y hoy muchas relaciones familiares se han vuelto más sólidas.
La pandemia ha agravado muchos de los problemas de los mayores, como la soledad y la dependencia. Las nuevas tecnologías y la innovación social ofrecen una oportunidad para mejorar su calidad de vida.
Es tentador tomar un descanso de tantas precauciones.
Erin Clark/The Boston Globe via Getty Images
Coincidiendo con el Día Internacional de la Amistad, que se celebra cada 30 de julio, nos preguntamos si es posible vivir sin amigos. La respuesta, según los científicos, es que no. Sin embargo, hay que saber buscar a los amigos de calidad.
Edward Hopper (1952) Morning Sun. Columbus Museum of Arts. Ohio
Melania Moscoso Pérez, Centro de Ciencias Humanas y Sociales (CCHS - CSIC) and Txetxu Ausín, Centro de Ciencias Humanas y Sociales (CCHS - CSIC)
Es un mito que la soledad fomente la creación artística. La soledad no es fecunda. Es una pandemia peligrosa y raramente voluntaria que afecta desproporcionadamente a sectores vulnerables de la sociedad.
Un equipo de investigadores ha estudiado cómo viven niños y niñas el confinamiento. Muchos coinciden en que se encuentran solos sin sus amigos, echan de menos a los abuelos, a sus profesores y sueñan con moverse libremente en espacios abiertos.
Una de las caras más duras de esta pandemia está siendo la separación de abuelos y nietos. La soledad de los mayores, alejados de sus seres queridos, puede causarles graves problemas emocionales. Sin embargo, también puede suponer un momento para descansar y fortalecer la relación de familia.
Doctor en Psicología Clínica. Director del Máster en Gerontología y Atención Centrada en la Persona (Universidad Internacional de Valencia), Universidad Internacional de Valencia
Profesor de Investigación IFS-CSIC (GI TcP Etica, Epistemología y Sociedad). Historiador de las ideas morales y políticas, Instituto de Filosofía (IFS-CSIC)
Profesora del Departamento de Psicología Clínica y Psicobiología. Psicóloga y Supervisora en la Unidad de Terapia de Conducta, Universitat de Barcelona