Las redes sociales contribuyen al desarrollo adolescente, aunque también comportan riesgos, como las agresiones online. Prevenirlas pasa por enseñar a los jóvenes a utilizar las redes sociales, afirman las autoras en este artículo original de Revista Telos.
Las familias son el referente fundamental para jóvenes y adolescentes en cuanto a cómo usar de manera sana las redes sociales e internet. Pero muchas carecen de las herramientas o conocimientos.
Procedentes de Japón y nacidos con el nuevo milenio, los emojis son ya parte de la conversación de millones de personas, no sólo en el ámbito digital. Pero las nuevas generaciones los usan menos.
De entre todos los emojis disponibles, ¿cuál elegir?
Marco Verch Professional Photographer
Los emojis despiertan curiosidad porque son cada día más empleados tanto entre amigos como en otro tipo de intercambios. Lo que observamos al ver los más utilizados es que, al final, usamos un puñado de todos los disponibles con un significado más o menos consensuado.
Acostumbrados a las relaciones líquidas y distantes que ofrece internet, los estudiantes pueden llegar a preferirlas al contacto físico. Desde el aula se puede ayudar a promover la comunicación en persona.
El medio digital parece favorecer cierta desconexión moral entre los jóvenes a la hora de percibir y defenderse de agresiones de sus parejas. Las chicas suelen estar más alerta a estos ataques.
Muchos jóvenes tienen miedo a perderse contenidos relevantes que ven sus amigos. Con la eclosión de las plataformas de vídeo el crecimiento de las obras audiovisuales ha sido exponencial.
“Hablar” por Whatsapp da libertad y requiere poco compromiso. Es una conversación permanente, líquida, muy distinta a la presencial, en la que la atención y la disponibilidad son imprescindibles.
Los cambios en las condiciones de servicio de la aplicación que entran en vigor el 15 de mayo ofrecen una oportunidad para reflexionar sobre la ciudadanía digital.
Es más fácil para el emisor, puede ser una pesadilla para el receptor, pero se confirma la tendencia al alza. La comunicación no textual ratifica una evolución hacia la comunicación más emocional.
Las plataformas virtuales no son un sustituto de la comunicación interpersonal cara a cara. Por el contrario, si no las utilizamos correctamente, pueden contribuir a aumentar las dificultades para relacionarnos con los demás.
La manipulación en la difusión de información o la utilización de datos y argumentos tendenciosos ha alcanzado grandes dimensiones durante la pandemia. Aquí le ofrecemos algunos consejos para discernir entre una noticia fiable y una falsa.
El reto de nuestra era digital y del (buen) uso que podemos hacer de los dispositivos electrónicos es no quedar atrapados en la compulsión y la repetición de lo mismo.
Organizaciones internacionales detectaron a mediados de junio más de 6 000 noticias falsas desde el inicio de la pandemia. En España, los bulos pasaron de un 32,5 % un mes antes de la crisis a un 67,5 % un mes después. Muy pocos autores han sido identificados.
Es importante no confundir que nuestra pareja nos geolocalice a través del móvil o nos pida todas las contraseñas de nuestras redes sociales con una muestra de amor. Se trata de una forma de acoso y control entre parejas jóvenes y adolescentes que suele ser el preámbulo de problemas de relación más graves aún.
Investigadores de la Universidad de Navarra y del Centro Nacional de Supercomputación publican hoy la investigación más exhaustiva hasta la fecha en torno a los bulos sobre la pandemia de coronavirus.
Jordi Cabot, UOC - Universitat Oberta de Catalunya
Los bots pueden ser la primera línea de choque contra una pandemia y ayudar a evitar el riesgo de colapso del sistema sanitario. Deben reunir una serie de características para cumplir con esta función.
La proliferación de noticias falsas constituye un desafío capaz de debilitar los pilares de la salud pública. Los ciudadanos tienen herramientas para combatir las intoxicaciones informativas. ¿Pero saben cómo usarlas?
Profesora del Departamento de Psicología Evolutiva y de la Educación, Facultad de Educación de Bilbao, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea