Actualmente, solo se reutilizan un 2,4 % de las aguas residuales tratadas en Europa, mientras que la CE asegura que hay potencial para multiplicar su volumen por seis. Conseguirlo permitiría satisfacer la demanda de agua de manera más sostenible.
Las reservas hídricas de los embalses se emplean para regar cultivos, suministrar agua potable y generar energía. Además, proporcionan servicios ecosistémicos y de ocio.
Profesora Titular de Universidad. Departamento de Economía Agraria, Estadística y Gestión de Empresa, ETSIAAB. Investigadora senior en el CEIGRAM, Universidad Politécnica de Madrid (UPM)