Los delitos impactan negativamente la vida de las víctimas y su entorno. Las víctimas han ganado visibilidad en políticas criminales, aunque enfrentan contradicciones en su tratamiento. La compasión es clave para una justicia efectiva, y España ha avanzado con leyes y redes de apoyo integral para víctimas.
Las mujeres prostituidas no ejercen la prostitución, la padecen. Por eso son víctimas. Por tanto, el Proyecto de Ley Orgánica de garantía integral de la libertad sexual aprobado en el Congreso de los Diputados de España no garantiza la libertad sexual ni otros muchos derechos.
El informe ‘Colectivos vulnerables en el sistema de asilo’ en España señala la infancia, las personas LGTBI+ y las víctimas de trata como los grupos más necesitados de protección.