El entorno virtual en el que se mueven los adolescentes nos obliga a buscar métodos más modernos y a contar con ellos para diseñar la asignatura de educación sexual.
La ley española permite que se enseñe educación sexual pero no establece cuándo ni por parte de quién; en otros países europeos tampoco hay consenso sobre la mejor manera de hacerlo.
¿Puede estar la pornografía promoviendo el refuerzo de estereotipos sexistas y la percepción de que la violencia, especialmente hacia las mujeres, es algo aceptable?
Durante la adolescencia, desarrollamos nuestra moral autónoma. El entorno virtual en el que socializan los jóvenes hace más difícil este aprendizaje, tanto para ellos como para profesorado y familias.
Mientras en los dos últimos años muchas personas han visto cómo su vida sexual se deterioraba, también son muchas las que aseguran que sus relaciones íntimas han mejorado considerablemente como consecuencia de la pandemia.
El sexo puede generar un gasto de energía de aproximadamente 100 kilocalorías y frecuencias cardíacas medias entre 90 y 130 latidos por minuto. Aunque puede variar según la posición o duración.
El virus del papiloma humano no es solamente causante del cáncer de cuello de útero. También desencadena otras lesiones cancerígenas en el ano, pene, vagina y vulva, tanto en hombres como en mujeres.
Durante la niñez surgen las primeras dudas sobre sexualidad. Ante tales preguntas, los jóvenes buscarán respuestas. ¿Quién debe dárselas: la escuela o la familia?
Los músculos del suelo pélvico son responsables directos de la cantidad e intensidad de sensaciones que siente una mujer durante las relaciones sexuales y de la intensidad del agarre o presión que siente su pareja durante la penetración.
Enseñar educación sexual a los hijos debe hacerse desde una perspectiva positiva, poniendo de manifiesto que la sexualidad es también algo que forma parte de la plenitud vital y la felicidad, pero no desde una idea que asocie la sexualidad a los riesgos, pues ello restará credibilidad.
Profesora Titular de Universidad en el Departamento de Psicología Clínica y Experimental. Área de conocimiento Personalidad, Evaluación y Tratamiento Psicológicos, Universidad de Huelva