‘El Principito’ puede ser un tesoro para el aula de Educación Primaria y convertirse en un recurso educativo único que ofrece al alumnado enseñanzas atemporales y valores fundamentales.
Los arquetipos literarios del héroe o la mala madre siguen estando presentes en la literatura actual. Entenderlos puede facilitar el acercamiento a los clásicos.
La dualidad de la asignatura, que debe fomentar la lectura y la comprensión en los estudiantes y al mismo tiempo transmitir el patrimonio literario en español, plantea un reto fundamental.
No siempre los clásicos plantean temas atractivos o cercanos para los jóvenes. Con la idea de mantener su placer en la lectura y de abrir sus horizontes culturales, proponemos un canon más flexible.
La naturaleza, el mundo de los niños, la vida en el campo, las desigualdades… los temas que tratan las novelas del autor vallisoletano siguen vigentes.
Que los clásicos literarios se hayan quedado muy alejados de la realidad de los jóvenes no los hace menos necesarios. Pero sí obliga a buscar nuevas maneras de acercarlos.
Enseñar literatura supone crear un hábito de lectura que debe afianzarse en los estudiantes, animándoles a leer todo tipo de libros, y no solo los clásicos.
Los autores de referencia en clase de literatura son mayoritariamente masculinos; tenemos el deber de recuperar las voces de mujeres que no recibieron la misma atención en el pasado.
Acercarnos a los testimonios literarios de una época desde planteamientos de género ayuda a conocer la sociedad y a revisar los movimientos ideológicos actuales con un pensamiento crítico.
Los estudiantes necesitan entender el papel de la literatura en su vida cotidiana, y depende de los docentes facilitarles una aproximación relevante, moderna y creativa.