Las posturas de algunos grupos de agricultores que ven en las medidas para fomentar la sostenibilidad un obstáculo chocan con las de los ecologistas que abogan por evitar la degradación ambiental de los cultivos.
La digestión del ganado, el estiércol y el uso de fertilizantes químicos y abono son fuentes de gases de efecto invernadero. Tanto desde la UE como a nivel nacional en España se promueven medidas para disminuirlos.
La influencia de las condiciones climáticas en las cosechas, la heterogeneidad de las explotaciones y su dependencia de la industria y los distribuidores convierten a los agricultores en el eslabón más débil de la cadena alimentaria.
De este a oeste, el campo europeo se ha incendiado de protestas. Un sector productivo y modernizado, pero que ha ido perdiendo peso económico, pide medidas que garanticen sus beneficios y lo protejan de la competencia de terceros.
La UE celebra el Día de Europa y son muchos los logros alcanzados: desde el mercado único hasta la incorporación del euro (aunque no en todos los países de la Unión). Tiene por delante superar la crisis de la covid-19 y seguir avanzando en su integración económica y monetaria.
En un reciente estudio, los autores demuestran que prácticas como la generación de paisajes heterogéneos con cultivos en mosaico favorecen tanto a las plantaciones como a las especies que habitan en el ecosistema agrario.
Desde el desmoronamiento de la URSS, Ucrania y Rusia se han convertido en grandes exportadores. El principal destino de su trigo no es Europa sino los países de África y Asia.
El ganado en extensivo pasa una parte importante del año alimentándose en zonas arboladas. Los terrenos pastados tienen una enorme capacidad para secuestrar carbono. Pero la Política Agraria Común no contempla fondos para al pastoreo en terrenos forestales.
Expertos especializados en biodiversidad y servicios ecosistémicos han formado grupos de trabajo para colaborar en el desarrollo de los planes estratégicos de la política agraria común.
Los instrumentos de la PAC no son eficientes para abordar los problemas ambientales y de cambio climático, ni sus mecanismos de pagos la forma más justa de apoyar la renta de los agricultores.
Los planes estratégicos nacionales son la principal innovación de la nueva PAC. Con ellos, la UE dota a los Estados de un instrumento que les permite hacer su propio diagnóstico del sector.
El presidente de España, Pedro Sánchez, ha presentado el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, que canalizará los fondos europeos destinados a superar la crisis. Contará en los 3 próximos años con 72 000 millones de euros.
El fondo europeo de recuperación busca reactivar las economías europeas tras la pandemia. Pero una mala gestión de estos recursos podría aumentar las desigualdades entre el norte y el sur.
A diferencia de 2008, las instituciones europeas ahora son conscientes de su papel y proponen programas sociales inéditos, planteando impuestos europeos, herramienta básica para la armonización fiscal.
Dpto. Estructura Económica y Economía del Desarrollo. Coordinadora del Grupo de Estudio de las Transformaciones de la Economía Mundial (GETEM), Universidad Autónoma de Madrid
Profesora Titular de Nutrición y Bromatología - Directora del proyecto BADALI, web de Nutrición. Instituto de Bioingeniería, Universidad Miguel Hernández