A Roland Barthes se le atribuyen muchos perfiles, pero no siempre se le considera un filósofo. Sin embargo, toda su obra sin duda alguna está impregnada de filosofía.
La comunicación es la capacidad de tender puentes para comprender lo diferente. La relación humano–perro desarrolla una comunicación propia y eficaz que enriquece al ser humano.
El putero no ha cambiado su perfil durante la pandemia. Ni siquiera su gramática cruel y sexista. Lo que sí ha modificado es su forma de acceder al sexo a cambio de dinero. El confinamiento ha hecho que se reinvente el negocio.