Prefabricación, estandarización y construcción por módulos permiten acelerar y abaratar la edificación. Pero, además, hace falta que las administraciones públicas agilicen los trámites burocráticos.
Cada vez es más habitual escuchar hablar del biohormigón. Se trata de un hormigón “vivo” que incorpora bacterias capaces de activar mecanismos de autorreparación. Y eso lo hace prácticamente indestructible.
Ante las anunciadas reformas en los procedimientos urbanísticos, es esencial proteger nuestro patrimonio natural y cultural. Desde los colectivos implicados se trabaja para detener esta amenaza.
Tras el confinamiento, se prevén nuevas expectativas en compradores e inquilinos, que ahora buscarán más luz y más espacio y perderán el miedo a vivir lejos del centro de las ciudades.