Jara Pérez Jiménez, Instituto de Ciencia y Tecnología de Alimentos y Nutrición (ICTAN - CSIC)
Algunos alimentos, como el huevo, han pasado de villanos a héroes (o al revés) en las recomendaciones nutricionales. ¿Por qué? Multiples factores, siempre basados en la evidencia, explican estos cambios de criterio.
En estos días, la población infantil y juvenil vuelve a colegios e institutos. Mejorar y mantener su salud en los centros educativos a través de una alimentación sana y sostenible es uno de los retos actuales en Europa; un desafío mucho más complejo de lo que puede parecer.
Es “carne rosa”, ni roja ni blanca. Así se refieren ganaderos y científicos a la carne de cordero. La pierna tiene entre 64-68 mg/100g de colesterol, similar al muslo de pollo y menor que el huevo.
El reciente informe emitido por el comité científico de Nutri-Score intenta subsanar algunos de los defectos que achacaban muchos expertos a este sistema de clasificación, pero se queda corto.
María Puy Portillo, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea; Helen Carr-Ugarte, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea; Iker Gomez Garcia, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea; Iñaki Milton Laskibar, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea; Irene Besné Eseverri, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea; Ivan Gomez Lopez, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea; Jenifer Trepiana Arin, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea; Laura Isabel Arellano García, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea; Maitane González Arceo, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea et Saioa Gómez Zorita, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
A la hora de llenar el carrito de la compra, ¿somos capaces de elegir los alimentos más beneficiosos desde el punto de vista nutricional? ¿Qué no nos puede faltar y qué es mejor que se quede en los estantes del supermercado?
La desecación, el envasado al vacio y la adición de ácidos retrasan la putrefacción de alimentos frescos como frutas y verduras y siguen siendo saludables.
María Puy Portillo, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea; Helen Carr-Ugarte, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea; Iker Gomez Garcia, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea; Iñaki Milton Laskibar, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea; Irene Besné Eseverri, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea; Ivan Gomez Lopez, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea; Jenifer Trepiana Arin, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea; Laura Isabel Arellano García, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea; Maitane González Arceo, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea et Saioa Gómez Zorita, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
Tan importante como qué alimentos consumimos es el modo de cocinarlos. No es lo mismo freír, que cocer o que cocinar al vapor. Y tampoco hay que menospreciar los cambios que se producen al congelar y descongelar comida.
Habitualmente, la maduración artificial de la fruta es idéntica a la que ocurriría en la planta, por lo que no tiene implicaciones negativas para la salud. Sin embargo, hay otros procedimientos polémicos.
La dieta está estrechamente relacionada con la microbiota y esta con la salud humana. Ya sabemos que la dieta mediterránea es beneficiosa pero también influye la forma en la que preparamos los alimentos.
Comparando con criterios objetivos las propiedades nutricionales y la sostenibilidad de las dietas recomendadas en Europa y la dieta norteamericana se llega a la conclusión clara de que EE UU debe mirar a Europa para aprender a alimentarse mejor.
Siete días después de nacer, un pollito destinado al consumo humano pesará más de cuatro veces su peso inicial. De su engorde depende la rentabilidad de la industria.
La mayoría de los problemas digestivos suelen estar relacionados con alteraciones en la digestión de los alimentos. Sin embargo, son trastornos fáciles de evitar si seguimos algunos consejos.
La ortorexia se relaciona con la obsesión por ‘comer sano’, no siempre en base a la evidencia científica. Entre sus posibles consecuencias se encuentran los cambios drásticos en la dieta y la restricción de grupos de alimentos.
Comentar que lleva una dieta vegana en una reunión familiar puede ser incomodo debido a la cantidad de dudas que genera esta alimentación. Sin embargo, es compatible con una dieta equilibrada.
El desayuno tiene efectos saludables en general, entre otras cosas porque ayuda a prevenir la ganancia de peso a largo plazo, tanto en niños como en adultos. Ahora bien, desayunar no siempre mejora la atención, memoria y rendimiento cognitivo. ¿De qué depende?
La sal es el gran riesgo ignorado en nuestras mesas. Disminuir su consumo reduciría el impacto de las enfermedades más importantes en los países occidentales. Un dato: 4,1 millones de muertes al año se deben a la ingesta excesiva de sal.
Cuando comemos en restaurantes tendemos a elegir platos menos saludables que los que elaboraríamos en casa. ¿Aumenta el riesgo de desarrollar exceso de peso? ¿Cómo podemos evitarlo?
Profesora Titular de Nutrición y Bromatología - Directora del proyecto BADALI, web de Nutrición. Instituto de Bioingeniería, Universidad Miguel Hernández
Catedrática de Nutrición. Centro de Investigación Biomédica en Red de la Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición (CIBERobn), Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
Profesor en la Universidad del País Vasco. Investigador del grupo Nutrición y Obesidad del Centro de Investigación Biomédica en Red de la Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición (CiberObn) y del Instituto de Investigación Sanitaria Bioaraba, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
Profesora en la Universidad del País Vasco. Investigadora del grupo Nutrición y Obesidad del Centro de Investigación Biomédica en Red de la Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición (CiberObn) y del Instituto de Investigación Sanitaria Bioaraba, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
Estudiante predoctoral, Grupo Nutrición y Obesidad, Universidad del País Vasco/Euskal Herriko Univertsitatea, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
PhD. Student at University of Basque Country (UPV/EHU) & Institute of Food Science Research (CIAL) (CSIC-UAM), Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
Investigadora predoctoral del Grupo Nutrición y Obesidad del Centro de Investigación Biomédica en Red de la Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición (CiberObn), Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea