Los trámites administrativos posteriores a la muerte de una persona pueden convertirse en algo muy complejo si no se tienen en cuenta algunos detalles. También lo son si la persona no ha dejado hecho su testamento.
Hace años que el día de difuntos (destinado a honrar a los muertos) se convirtió en Halloween, una divertida fiesta de disfraces en la que ni se menciona la muerte. Paradójicamente, esta sigue siendo un tema tabú que nos aterra abordar.
Enfermero en Osakidetza- Servicio vasco de salud. Profesor asociado a la Facultad de Medicina y Enfermería, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea