Aplicamos los criterios de la teoría de juegos para valorar el riesgo real de un Armaguedón nuclear dirigido por Putin. Los resultados no son tranquilizadores.
El activista bielorruso encarcelado Ales Bialiatski, la organización rusa de derechos humanos Memorial y el Centro de Libertades Civiles de Ucrania comparten el premio.
La guerra en Ucrania está lejos de acabar. El país recupera zonas y también la autoestima. Rusia no descarta apretar el botón nuclear si se siente profundamente amenazada.
La subida de 0,75 puntos del tipo de interés por parte del Banco Central Europeo es una subida brusca, pero puede servir para sobrellevar la recesión y contener la inflación desbocada.
Hay pocas ganas en ambos lados de llegar a una solución negociada. Pero en esta guerra de desgaste, el tiempo y el peso de la geografía y la población están del lado del agresor. Rusia puede sobrevivir a sus oponentes y a Occidente. Y la amenaza nuclear lo eclipsa todo.
Después de 5 000 muertos civiles y más de 300 niños, ¿existe alguna posibilidad de que Ucrania salga victoriosa de esta guerra? ¿Qué objetivo final tiene Putin? ¿Llegará a conseguirlo?
Para que atrocidades como las de Bucha (Ucrania) no vuelvan a ocurrir, es importante que los responsables rindan cuentas por crímenes de guerra. ¿Es necesario un tribunal especial para juzgar a Putin?
Ambas naciones quieren adherirse a la OTAN en un momento muy tenso para la organizacion. Suecia y Finlandia, que se sienten en peligro, pueden aportar unas fuerzas armadas muy bien entrenadas.
La manipulación política y las técnicas de propaganda desempeñan un papel muy importante en la percepción de la guerra en Ucrania entre la sociedad rusa.
El 9 de mayo de este año no ha sido el ‘día de la victoria’, ya que el mandatario ruso tiene poco de qué presumir tras 74 días de agresión contra Ucrania.
Los actos que Vladimir Putin está cometiendo contra Ucrania podrían ser perfectamente juzgados por la Corte Penal Internacional y estos son los argumentos legales.
La masacre de Katyń, en la que perecieron unos 22.000 ciudadanos polacos, fue uno de los crímenes más brutales cometidos durante la Segunda Guerra Mundial por la Unión Soviética. No son pocos los paralelismos entre aquel horror y el que vive ahora Ucrania.
Associate Professor of Instruction in the School of Interdisciplinary Global Studies, Affiliate Professor at the Institute for Russian, European, and Eurasian Studies, University of South Florida