Iker Badiola, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
En los 50, los habitantes del pueblo de Roseto (EE UU) apenas sufrían enfermedades vasculares. Su secreto no estaba en la alimentación ni en su genética, sino en su sentido de comunidad.
Solo se conocen las líneas generales del Plan de Recuperación presentado por el Gobierno de España, así que todavía no se puede cuantificar su impacto en el PIB, ni si permitirá alcanzar los 800 000 empleos prometidos.
Solidaridad y egoísmo son las dos caras de una misma moneda, como vemos en el desarrollo de la pandemia de COVID-19. Solo que la primera ha sido mejor baza evolutiva para nuestra supervivencia.
Profesor en el Departamento de Biología Celular e Histología. Universidad del Pía Vasco7Euskal Herriko Unibertsitatea., Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea