Óscar González-Recio, Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria (INIA - CSIC); Fernando Estellés Barber, Universitat Politècnica de València, and Pablo Manzano, BC3 - Basque Centre for Climate Change
Aunque gran parte del metano emitido por la ganadería procede de los eructos de las vacas, ovejas y otros rumiantes, reducir el consumo de carne de manera general no tiene por qué contribuir a disminuir las emisiones.
El metano generado por los animales domésticos ha sustituido, al menos parcialmente, al producido por los herbívoros silvestres. ¿Podemos considerar entonces sus emisiones como propias de los ecosistemas naturales?
Hace unos meses se detectaron los primeros casos de esta enfermedad vírica en España, que afecta principalmente a los ciervos y al ganado bovino y para la que aún no hay vacuna autorizada.
La huella hídrica de la producción de alimentos de origen animal representa un tercio del consumo hídrico total de la agricultura. Algunas estrategias, como elegir el alimento para ganado con menor impacto, contribuyen a reducirla.
Desde 1968 no se registraba en España ningún caso de las modalidades de viruela que afectan a cabras y ovejas. Urge tomar medidas para que el virus no se extienda y haga estragos en el sector ganadero.
La grasa láctea tiene algunos ácidos grasos beneficiosos para la salud. Es posible aumentar su proporción, y reducir la de otros menos deseables, modificando la alimentación de vacas, ovejas y cabras.
Con sus largas pestañas y orejas en forma de plátano, las llamas suelen ser las favoritas en los zoológicos, ferias y bodas. Esta relación estrecha con la raza humana empieza hace 7.000 años en Perú.
El abandono de los cultivos y la intensificación agraria están provocando una disminución de la diversidad de las razas de ganado, relevante para los ecosistemas agrarios y la alimentación.