No es necesario elegir entre conseguir objetivos o un ambiente saludable: fomentar la competitividad entre los miembros del equipo no es sinónimo de éxito.
En la toma de decisiones empresariales influyen factores tan obvios como edad y experiencia a otros menos evidentes como si se hizo o no el servicio militar o dónde se obtuvo el título universitario.
En el cine, los actores de reparto son fundamentales para la trama, aunque los aplausos sean para el protagonista. Algo similar ocurre en las empresas entre subordinados (que desarrollan la estrategia) y alta dirección (que la diseña).
Un esquema retributivo dual, con una parte fija y una variable (vinculada a los beneficios y al valor de la empresa), optimiza el salario del alto directivo y permite un control más eficaz de su gestión.
Los contratos a los altos directivos suelen tener carácter individual y confidencial, y recogen con precisión términos como duración, salario, exclusividad, condiciones específicas y otras cláusulas.
Profesor asociado de la Facultad de Ciencias Economicas y Empresariales de la Universidad Pontificia Comillas / Director del Master in Talent Management de Advantere School of management, Universidad Pontificia Comillas