Las actuales baterías de litio que usan los patinetes requieren una serie de cuidados en aras de su seguridad. Mientras, la ciencia investiga tecnologías que eviten el sobrecalentamiento, somo los materiales de cambio de fase.
Las baterías de estado sólido son una tecnología clave para fabricar vehículos eléctricos de mayor autonomía, que resuelve además problemas de seguridad y coste, pero su implantación podría tardar décadas.
Los nuevos servicios de movilidad urbana deberían cumplir las normas de circulación, pagar multas si no lo hacen y estacionar de forma correcta en aparcamientos delimitados para ellos o de pago.
Los patinetes y bicicletas son claves para cambiar el modelo de transporte basado en el coche. Dotarles de visión artificial permite, además, evitar accidentes y otras situaciones peligrosas.
Para saber si los patinetes eléctricos contribuyen a reducir las emisiones provocadas por la movilidad urbana, debemos analizar el impacto ambiental durante todo su ciclo de vida.
Investigadora especializada en procesamiento de imagen y coordinara del Máster en Movilidad Urbana, Universitat Politècnica de Catalunya - BarcelonaTech