La inmunización de los españoles es un elemento clave para el crecimiento económico y por ello, todos los esfuerzos deben ir dirigidos a alcanzar los objetivos de vacunación fijados.
La oración es uno de los métodos empleados en Tanzania para controlar la propagación del nuevo coronavirus.
STRINGER/AFP vía Getty Images
El Gobierno de Tanzania anunció a principios de febrero que no tiene intención de comprar vacunas contra la covid-19. La epidemióloga Catherine Kyobutungi explica la postura de Tanzania y por qué es problemática.
¿Pueden las vacunas de ARN mensajero como las de Pfizer/BioNTech o Moderna modificar nuestro genoma causando daños desconocidos e irreparables? La respuesta es negativa y las razones no son pocas
Contamos con vacunas seguras y eficaces contra la covid-19 que serán aprobadas pronto. Sin embargo, estas campañas plantearán nuevos problemas comunicativos si no se tienen en cuenta ciertos aspectos.
Un porcentaje importante de personas puede rechazar o retrasar la aplicación de la vacuna COVID-19.
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EE. UU. y la UE prefieren no empezar las vacunaciones hasta que no se evalúen los resultados definitivos de los ensayos clínicos. Sin embargo, el país artífice del Brexit puede ahora seguir su propia regulación sin ataduras.
Disponemos de las herramientas legales para imponer el uso de estos fármacos de una u otra forma. Pero la vía más ética para conseguir su éxito es a través de la confianza de la población.
Como servicio al público, capaz de contribuir a la formación de audiencias críticas y bien informadas, el periodismo puede jugar un papel fundamental en el diálogo entre ciencia, política y sociedad para contrarrestar los efectos nocivos de la desinformación, las teorías de conspiración y los movimientos anticiencia y antivacunas.
Clint Eastwood en el papel de Hombre sin nombre para la Trilogía del dólar de Sergio Leone.
Wikimedia Commons
Negacionistas, antivacunas, “vendedores de humo” han existido siempre, por mucho que los científicos intentemos contrarrestar este “azote”. Pero durante la pandemia su presencia se ha disparado.
El estúpido sería aquel individuo que perjudica a otra persona (o grupo de personas) obteniendo además perjuicio para sí mismo. ¿Encajan en esa definición los negacionistas de la COVID-19?
Mientras centenares de científicos en todo el mundo se afanan por encontrar vacunas para la COVID-19, los movimientos antivacunas pueden poner en peligro su credibilidad.
Escolares en fila para ser vacunados en un centro de salud infantil en la ciudad de Nueva York en 1944.
Library of Congress / United States Office Of War Information
Los brotes de paperas se han convertido en algo frecuente en ambientes universitarios. Los motivos son variados, pero no eliminan la necesidad de vacunación.
Californians in June 2015 protest a bill that did away with personal belief exemptions for vaccinating children before they enter school.
Rich Pedroncelli/AP Photo
El 43% de los norteamericanos cree, erróneamente, que vacunarse contra la gripe provoca que uno contraiga esta enfermedad, a pesar de que diversos estudios científicos han demostrado lo contrario.
Jacobo Mendioroz, Departament de Salut de la Generalitat de Catalunya
Desde que comenzaron las campañas de vacunación hace unos 200 años, algunas personas han negado irracionalmente la utilidad de uno de los inventos que más vidas humanas ha salvado.
Científica del CSIC. Bioquímica de Sistemas de la división bacteriana. Comunicadora científica, Centro de Investigaciones Biológicas Margarita Salas (CIB - CSIC)
Medico Epidemiologo. Catedratico de Medicina Preventiva y Salud Publica. Facultad de Medicina i Ciencias de la Salud. Universidad de Barcelona., Universitat de Barcelona