Ya ha llegado al Congreso de los Diputados español la polémica proposición de Ley sobre la amnistía por hechos vinculados al procés catalán. La normativa produce la extinción de la responsabilidad penal, administrativa y contable.
¿Es la declaración de la izquierda independentista vasca un discurso de perdón? ¿Qué elementos debería contener? ¿Qué importancia simbólica podría tener?
La Candidatura d'Unitat Popular (CUP, una organización independentista, ecologista, feminista y anticapitalista) ocupa un posición central en la serie de acontecimientos que se han sucedido en Cataluña en los últimos años y que se conocen con el nombre de “el Procés”.
El globalizado capitalismo financiero no tiene un contrapeso político que mantenga el equilibrio. Se ha roto el binomio poder económico-capitalismo industrial/poder político-Estado.
Corresponde al Estado español cumplir con la obligación de adoptar o fortalecer las medidas necesarias para garantizar los derechos fundamentales de todos los individuos que se encuentren en su territorio.
Ni todos los 155 y 116 juntos, ni la Ley de Seguridad Nacional resolverán la cuestión catalana ni devolverán a Cataluña de forma definitiva la paz y la convivencia social.
Una vez descartado el delito de rebelión, se condena a los acusados por un delito de sedición en concurso medial con uno de malversación. Una interpretación llena de matices.
Según el autor, la sentencia
establece un límite, fija un precedente y protege el sistema constitucional español. pero no afecta a los derechos fundamentales como libertad de opinión, manifestación, expresión o manifestación.
El éxito electoral del populismo en la era de la posverdad está impulsado por lo digital, en concreto, por las redes sociales. Las elecciones en Cataluña (21D) están marcadas por el líder influencer.