En medio del bombardeo de información sobre el conflicto palestino-israelí, el cómic se erige como medio al que acudir para adentrarnos en las raíces y en la actualidad del conflicto.
Mar Gijón Mendigutía, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
Las causas de la crisis no manan de la religión, sino de la colonización de Palestina llevada a cabo por el movimiento sionista, apoyado por Gran Bretaña y Estados Unidos, que culminó en mayo de 1948 con la creación del Estado de Israel.
Los ataques de Hamás sobre Israel, y la posterior respuesta israelí sobre la franja de Gaza, han desestabilizado el mercado petrolero. La evolución del conflicto marcará los precios en los próximos meses.
Hamás ha lanzado un ataque en clave interna y externa. ¿Y ahora qué? ¿Hacia dónde se dirige el conflicto? Es poco probable que los estados árabes se embarquen en la escalada bélica e Israel también se pensará mucho una ofensiva terrestre para no poner en peligro a sus soldados.
Los combatientes palestinos que lanzaron ataques mortales contra Israel el 7 de octubre no son marionetas iraníes, pero están haciendo el trabajo que Irán quiere que se haga.
Los israelíes considerarán de vital importancia recuperar la capacidad de disuasión militar de su país frente a Hamás, lo que puede hacer necesaria una toma militar de Gaza.
Las raíces del conflicto palestino-israelí se hunden en sucesos que acontecieron varios siglos atrás. Pero un episodio histórico concreto influyó de manera decisiva: el engaño de los británicos a árabes y judíos durante la Primera Guerra Mundial
La oposición social al intento de reforma judicial del actual gobierno israelí pone en tela de juicio el futuro de su primer ministro, Benjamín Netanyahu, quien ya ha destituido a su ministro de Defensa por no apoyarlo.
Las últimas elecciones en Israel han colocado en el poder al gobierno más radical que se recuerda. El sionismo se convierte en una amenaza para Palestina de una manera más encarnizada que nunca.
Los responsables de aquello, el ejército israelí, quedaron impunes tras matar a miles de personas. La comunidad internacional nunca levantó la voz. Solo el impacto de aquellas atrocidades en la opinión pública internacional y las críticas suscitadas preocuparon a las autoridades de Israel.
La mala gestión de la crisis, unida a la falta de transparencia posterior provocaron una fricción en las relaciones entre Alemania e Israel. Solo con la conmemoración del 50 aniversario ha habido un acercamiento.
La cuestión palestina-israelí ha sido relegada a un segundo plano en la agenda internacional. Hace años que se constató ineficaz el tradicional ‘proceso de paz’. ¿Es posible un verdadero proceso de resolución pacífica?
El ‘software’ malicioso Pegasus puede atacar a cualquier persona y está diseñado para no ser detectado. Infecta un móvil a través de ‘phishing’ o de vulnerabilidades de aplicaciones que tenemos instaladas. Sin embargo, solo se emplea con objetivos de perfil alto. En principio los ciudadanos de a pie no tenemos que preocuparnos por ser espiados, aunque sí por la salud de la democracia.
Tanto los arsenales rusos como los estadounidenses cuentan con miles de armas nucleares, situadas en diversos lugares de sus propios países y, en el caso de Estados Unidos, también en Europa.
La evolución de la situación dependerá del grado de violencia que Israel esté dispuesto a infligir a Hamás, así como del aguante de Hamás ante los ataques aéreos y de artillería israelíes.
Las luchas internas en la política palestina han contribuido a crear tensiones, mientras los graves enfrentamientos entre árabes y judíos en ciudades mixtas de Israel se recrudecen.