Annick Laruelle, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
El derecho a sufragio en las elecciones municipales, regionales, nacionales y europeas de los inmigrantes y emigrantes en los países de la Unión Europea no es igual para todos. Varía dependiendo del territorio y del vínculo del votante con el país de residencia.
La cuarta economía de la UE se salva, por ahora, del riesgo del populismo antieuropeo. El objetivo declarado por el Primer Ministro Conte es un gobierno que lleve a cabo unas políticas expansivas, impulsando inversiones públicas y privadas.
A pesar de la subida de los partidos de corte euroescéptico, no han conseguido en las elecciones de mayo de 2019 el número suficiente para lograr controlar siquiera un tercio del Parlamento Europeo.
El político italiano ha entendido la relevancia de las redes sociales y se sirve de ellas para comunicarse con sus votantes, pero también para hacer política.
Las elecciones europeas celebradas en el Reino Unido ejemplifican ese aparente divorcio que a veces se produce entre las decisiones que se toman en Bruselas y lo que la ciudadanía espera.
No veremos a los moderadores de los debates confrontar a los políticos con sus propios datos erróneos. Un hecho que haría que los que participan en los debates empezaran a respetar su compromiso con la confianza de los votantes.
El desenlace en lo que va de siglo es desalentador. Ahora no existe una lucha por formar parte de esto; incluso uno de los motores, Reino Unido, lleva años queriendo dejar el proyecto, pero se presenta a las elecciones europeas.
La institución tiene ya importantes atribuciones que la opinión pública de los Estados miembros deberían conocer mejor para evaluarla, ya que tiene incidencia en muchos ámbitos de la vida de los ciudadanos europeos.
Un estudio académico asegura que participar en un Erasmus favorece las opiniones positivas sobre la UE y refuerza la existencia de una esfera pública común.
Según dónde vivamos y si está o no muy poblada nuestra provincia… el valor de nuestro voto a la hora de elegir a los diputados del Congreso depende del código postal.
Populismo y nacionalismo son dos conceptos que hoy van unidos. Propuestas aislacionistas, euroescepticismo y una definición de nación frente al “enemigo” son tres de sus principales ingredientes.
Mientras en Podemos y Ciudadanos han anunciado cabezas de cartel que conocen bien la UE, en PP y PSOE el reto es saber combinar veteranos y noveles de alta calidad.
Doctorando en el programa “América Latína y la Unión Europea en el contexto internacional”. Instituto Universitario de Investigación en Estudios Latinoamericanos (IELAT)., Universidad de Alcalá
Profesor Titular de Universidad. Investigador del Instituto Universitario para el Análisis Económico y Social (IAES) y de la Cátedra de Responsabilidad Social Corporativa. Decano de la Facultad de Ciencias Económicas, Empresariales y Turismo, Universidad de Alcalá