La pedagogía social permite elaborar intervenciones en centros penitenciarios que palien los efectos de la privación de la libertad y las carencias socioemociales previas.
La Segunda Guerra Mundial fue causante de muchas de las jubilaciones anticipadas que se produjeron en la década de los ochenta en la Alemania del Oeste entre quienes habían sido heridos en la contienda.
El camino entre la prisión y la reinserción es largo y tortuoso. Cuando, además, está lleno de obstáculos como las adicciones o los problemas emocionales, se hace mucho más complicado. El papel del tutor voluntario es fundamental para salir a flote en estas circunstancias.
Profesor Contratado Doctor del Área de Griego de la Facultad de Filología y miembro del Instituto Universitario de Análisis y Aplicaciones Textuales (IATEXT), Universidad de Las Palmas de Gran Canaria