Es fácil desestimar el estalinismo como un sistema de gobierno llevado a cabo por un “monstruo”. Es más complejo entender de dónde surgió y por qué tuvo los apoyos que tuvo.
La región secesionista moldava de Transnistria, fronteriza con Ucrania y con una importante población prorrusa, podría formar parte de los planes de la Rusia Nueva ideada por Vladimir Putin.
Al igual que el imperio zarista y la Unión Soviética, la Rusia de Vladimir Putin se esfuerza por mantener la apariencia de independencia judicial a la hora de condenar a los opositores.