Para que los ciudadanos puedan seguir disfrutando de servicios públicos tan esenciales como la sanidad y la educación, el modelo de financiación autonómica debe ser, sobre todo, justo y solidario.
Comparar la carga impositiva entre comunidades permite ver las diferencias que forman parte del sistema autonómico, creado y avalado por la Constitución, y que son fruto de las decisiones de los propios gobiernos autonómicos.
En los países con amplia descentralización fiscal, y España es uno de los más avanzados en este sentido, resulta muy aconsejable que los ciudadanos sepan a qué administración pagan sus impuestos.