El beso es un acto simbólico que fortalece las relaciones humanas. Pero, a la vez, esta muestra de afecto causa una enfermedad infecciosa bastante común que no siempre resulta fácil diagnosticar.
La mayoría de las vacunas frente a la covid-19, que han evitado casi 20 millones de muertes, son de tipo ARN mensajero. Y parece que podrían protegernos frente a muchas más enfermedades mortales.
Existen varios virus (de la hepatitis B, de Epstein-Barr y del Papiloma Humano) que pueden desencadenar cáncer. Pero también bacterias, como E. coli, y hongos productores de toxinas con potencial cancerígeno.
Aunque ya se conocía la relación entre el virus de la mononucleosis y la esclerosis múltiple, un estudio ha aportado datos más contundentes. Pero, para afirmar que esta es la causa, falta algo más.