Las emociones positivas (felicidad, gratitud, satisfacción, alegría) son un claro indicador de una vida larga y saludable. Pero la felicidad es más duradera y esencial que la alegría, que proviene de fuera de nosotros mismos.
El Observatorio de Intangibles y Calidad de Vida 2023 destaca mejoras en la calidad de vida de los españoles ligadas a la digitalización. Sin embargo, advierte sobre una nueva brecha digital que favorece a los más capacitados tecnológicamente, a la vez que desafía la inclusión y profundiza el individualismo.
La felicidad de los ciudadanos cada vez está más condicionada por el equilibrio entre las dimensiones de la sostenibilidad: económica, social y medioambiental.
¿Acaso sabemos qué puede hacernos felices o desdichados? En el Día Mundial de la Felicidad recordamos las aportaciones filosóficas de Rousseau, Kant y Russell, que nos hablan de una conquista personal.