La idea de acoger a los extranjeros es fundamental para el cristianismo, el judaísmo y el islam. Hoy día, eso genera la responsabilidad de proteger a los refugiados de la violencia y la opresión.
Cuba es un país laico. Pero frente a una nueva Constitución que permitiría el matrimonio gay, las iglesias han salido con fuerza a oponerse, otra señal de cambio en la isla comunista.