Descubierto un conjunto de arte prehistórico único en la Cova de la Vila de La Febró, en Tarragona, con representaciones de animales, ídolos y símbolos abstractos. Es uno de los conjuntos más importantes de Cataluña, que se suma a la colección de arte rupestre del arco mediterráneo, patrimonio de la humanidad.
Las guerras y los genocidios parecen escapar a la lógica humana. Los estudios antropológicos sugieren que todo empezó con la expansión demográfica favorecida por la agricultura, la ganadería y el sedentarismo.
Un estudio de abalorios de cáscara de huevo de avestruz, un hallazgo común en las excavaciones arqueológicas, muestra una panorámica cultural cambiante de las traiciones de las comunidades cazadoras-recolectoras y las pastorales.