¿Podrá la inteligencia artificial acabar con la invasión de bulos? Un equipo de científicos de la Universidad de Jaén y la Universidad de Alicante detecta noticias falsas de forma automática.
La felicidad humana se puede medir científicamente y hay varias aplicaciones de teléfono móvil avaladas por expertos que permiten hacerlo con garantía. ¿Quiere ponerse a prueba?
Jugar es sano. Si se gestiona adecuadamente, ayuda a mejorar habilidades y promueve el cambio comportamental en positivo. El objetivo: conectar su fortaleza con la vida activa y saludable.
Los cambios en las condiciones de servicio de la aplicación que entran en vigor el 15 de mayo ofrecen una oportunidad para reflexionar sobre la ciudadanía digital.
Los autores desarrollan una aplicación basada en la terapia de reminiscencia, que usa estímulos como imágenes o sonidos para favorecer el recuerdo y mejorar el bienestar de las personas mayores.
En un contexto en el que debemos aprender a convivir con las novedades tecnológicas, ¿por qué no aprovecharlas para aumentar la actividad física de los más pequeños? La propuesta es dejar atrás la concepción de los juegos interactivos como algo pasivo.
A pesar de que podrían resultar de ayuda en el control de la actual y de futuras crisis sanitarias, las soluciones tecnológicas para abordar cuestiones de salud no están lo suficientemente desarrolladas.
Las fotos, publicaciones y parámetros de salud que recopilan y almacenan nuestros teléfonos dicen mucho de nosotros. Guardar tanta información personal en estos dispositivos puede ser útil, pero conlleva riesgos.
El pasado verano comenzó a escucharse su nombre: “Among us”. El juego que salió al mercado en 2018 está arrasando de manera vertiginosa y solo en dispositivos móviles ya lleva más de 86 millones de descargas. La clave del éxito: su sencillez y su capacidad para unir generaciones dándole al botón.
Por mucho que estudiemos la aplicación, no logramos conocer factores como el destino de los datos, qué se hace con ellos o durante cuánto tiempo se almacenan.
FaceApp no permite estimar de forma fiable cómo será una persona en la vejez, ni tampoco es capaz de crear imágenes variadas de hombres y mujeres. Sus modificaciones se basan en estereotipos.
La tecnología puede ayudarnos a combatir los nuevos brotes de coronavirus. El programa piloto español Radar Covid prueba un sistema basado en ‘bluetooth’ en las Islas Canarias.
Aunque las ‘apps’ de rastreo, como la que ya se está probando en España, pueden ayudar a detectar posibles brotes, tienen algunos puntos flacos y, como toda tecnología, pueden fallar.
La participación de la ciudadanía y la precisión de la localización son dos factores importantes que limitan la implantación de tecnologías para monitorizar a la población con datos móviles.
Skype, Zoom o WhatsApp: todas las aplicaciones de videollamada tienen vulnerabilidades. El usuario debe tener en cuenta diferentes factores para elegir la más adecuada según sus necesidades.
Las aplicaciones de aprendizaje de idiomas han puesto en la punta de nuestros dedos un método barato y fácil de familiarizarnos con idiomas extranjeros. Pero no ofrecen un aprendizaje más especializado, contextualizado o profundo.
Los entrenadores deben seleccionar cuidadosamente las ‘apps’ que van a utilizar para organizar sus entrenamientos y asegurarse de que han sido validadas científicamente.
Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en España. Gracias a las nuevas tecnologías es posible vigilar a los pacientes desde incluso antes de que presenten síntomas.