La pandemia, la guerra en Ucrania y ahora los ataques terroristas en el Mar Rojo han puesto a prueba las cadenas de suministro globales: ¿cómo podemos hacerlas menos vulnerables?
Mejorar la sostenibilidad del sector pasa por aumentar la cuota del ferrocarril, la electrificación de las flotas, la planificación territorial y la apuesta por el consumo de proximidad.
El canal de Suez (1869) se construyó para permitir la comunicación marítima directa entre el Mediterráneo y los mercados asiáticos, donde las grandes potencias europeas tenían importantes inversiones.