Aunque los científicos aún no saben dar una respuesta exacta a esta pregunta, cada vez conocen mejor los “ingredientes” de los que estamos hechos todos los seres vivos y cómo pueden formarse.
¿No sería maravilloso poder prolongar nuestro árbol genealógico hasta nuestros ancestros más remotos, es decir, hasta el propio origen de la vida? Los científicos cada vez acumulan más pistas.
En una pareja de meteoritos se ha encontrado ribosa, un componente del ARN. Los científicos que han realizado la investigación sugieren que podría ser una prueba más de la controvertida panspermia.