El entrenamiento de un sistema de inteligencia artificial debería hacerse en entornos de laboratorio y, en consecuencia, sobre un volumen de población concreto y con trabajadores cualificados.
El buen comunicador es aquel que sabe cómo transmitir sus mensajes. Ser efectivo requiere entrenamiento. La voz es la herramienta más importante de comunicación del ser humano.
Los asistentes virtuales y altavoces inteligentes nos espían. Un batallón de lingüistas nos escucha, aunque no durante las 24 horas del día. El asunto no es más peligroso que permitir a muchas aplicaciones acceder a nuestra agenda o nuestra cámara del móvil.